capitulo 1
Chapter Text
-Severus, ¿deseabas hablar conmigo? ¿Acerca del señor Potter, supongo?- Albus Dumbledore dijo alentadoramente, ofreciéndole un pote con pastillas de limón.
-No, muchas gracias, director,- Snape replico, tratando de no dar vuelta los ojos frente al dulce que se le ofrecía. Realmente, incluso con magia, ¿Cómo al hombre todavía le quedaban dientes? Cualquiera que dudara del poder de la magia de Dumbledore solo tendría que comparar su poder con su dentadura. -Sí, es sobre Potter. Tú has solicitado- "ordenado" -Que determine unos substitutos apropiados para esos horribles Muggles que tu consideraste adecuados durante la década pasada.-
Albus suspiro. -Dudo que alguna vez sea capaz de perdonarme. Solo estoy contento que descubrieras la verdad del comportamiento abusivo que tenían hacía Harry y que lo convencieras de hablar.-
Snape se permitió una pequeña sonrisa. Por supuesto, no era como si hubiera sido solo por suerte por la completa malinterpretación de los hechos que hizo el muchacho, pero no iba a admitir eso.
-Claramente tú tienes una conexión especial con el muchacho,- continuo Dumbledore aprobadoramente.
Snape perdió su sonrisa. Lo último que quería era que alguien pensara que le importaba el mocoso. Este era el engendro de James Potter, ¡por Merlín! Y ya Minerva había contraído una salvaje e incorrecta noción acerca de su relación con el chico, llamando a Snape su "protector", era inconcebible. El ciertamente no quería que el Director cayera en la misma trampa e imaginara que sentía otra cosa que no fuera desprecio por el pequeño monstruo.
Después de todo, Harry Potter había sido la razón por la que Dumbledore había dado una velada amenaza de muerte contra de Severus y era en serio. Snape suprimió un escalofrió. El todavía podía sentir el poder de Albus agitándose alrededor de él mientras le daba la advertencia, seguramente la única advertencia que Snape iba a recibir del tema. Obviamente, su mejor estrategia era mantenerse lo más lejos posible del mocoso no fuera a hacer algo estúpido, de nuevo.
Snape forzó afuera el sentimiento de culpa que todavía lo acompañaba cuando le venía a la memoria el flacucho niño de cabello negro y grandes ojos verdes .No era como si hubiera querido golpear al chico– bueno, sí. De hecho lo había hecho, pero no había querido golpearlo tan fuerte – bueno, actualmente, en ese momento había querido… pero inmediatamente había lamentado su accionar. Ahora era torturado no solo por el hecho de que había perdido el control y había golpeado al niño, pero también por la memoria de que en ese momento, había querido hacerlo.
Durante todo el tiempo que se había dedicado a ser un Mortífago, se había consolado con el hecho de que no como muchos otros, como Lucius Malfoy o el mismo Voldemort, el nunca había disfrutado las torturas o el asesinato como los demás. Incluso después de que perdió la fe y huyo donde Dumbledore, se había sentido superior a los demás por no haber compartido sus perversos placeres. Cuando Dumbledore lo había salvado de Azkaban y lo había animado a espiar a su antiguo amo, el lo había hecho sabiendo que sus actividades futuras como Mortífago eran un medio para ayudar a la Orden del Fénix y eso le daba aun más fuerza para despreciar al Señor Tenebroso. ¿Cómo iba ahora a comparar su imagen con la de un hombre que había golpeado a un niño tan fuerte que lo había lanzado contra una pared?
Mejor no pensar mucho sobre aquello, y mucho mejor tratar de evitar al chico lo más posible.
-No existe ninguna conexión,- dijo firmemente, frunciendo el ceño a Dumbledore. -El chico confió en mí porque lo engañe. Como siempre, la ingenuidad Gryffindor no tuvo comparación contra la astucia de un Slytherin.-
-Si tú lo dices, mi querido muchacho,- el tono del Director dejaba claro que estaba siguiéndole la corriente al profesor.
Snape frunció el ceño con más fiereza, pero a Dumbledore los ojos le brillaron aun más. -Así como estaba diciendo,- Snape decidió que era mejor continuar con la tarea que había venido a entregar, en vez de sumergirse en un argumento que suponía no iba a ganar, -estoy aquí para discutir donde será puesto Potter.-
-¿Si?- lo incito Albus a continuar.
-Siguiendo una intensiva investigación en la psicología del muchacho, buenas prácticas para cuidados de niños, y el mejor tratamiento para niños víctimas de abuso - Dumbledore cerró sus ojos brevemente, el dolor en su rostro causando incluso a Snape un poco de culpa - he determinado que Potter se encontraría mejor con una mezcla de ambientes. Como nunca ha tenido un ambiente familiar normal, él requiere exposición a una típica vida familiar. Metiéndolo en el hábito de una familia, será capaz de observar una sana dinámica niño-padre al igual que aprender cómo se relacionan normalmente los hermanos entre ellos. Pese a que fue criado junto a su primo Muggle, está claro que la relación no fue para nada fraterna. Potter necesita aprender sobre la sana rivalidad que existe entre hermanos y la cercanía – que me han dicho – es posible entre ellos. Esto le servirá después en la vida, cuando él decida tener sus propios hijos, además de ayudarlo a interactuar con sus compañeros.-
-Eso suena bastante razonable, Severus. ¿Tienes candidatos potenciales para esta familia?-
-Potter ya se ha hecho amigo con el menor de los Weasley, y como ambos padres fueron miembros de la Orden durante la guerra, asumo que estarán felices de recibir al Niño-Que-Vivió. Lo que es mejor, con el tamaño de su camada, otro niño será apenas notado.- Fijándose que Dumbledore fruncía el ceño, Snape levanto una ceja desafiante. -Además, los siempre sufridos Weasley se beneficiarían con la mesada que tú les dabas a los Muggles. Y no tengo duda que pese a sus necesidades, ellos la usaran para cosas que realmente beneficiaran a Potter además de a los chicos Weasley, en vez de, como lo hicieron los Dursley, reservarlo para la pura ventaja de la ballena que tienen por hijo.-
Dumbledore asintió gentilmente. -Me gusta tu idea, Severus. He notado como Ron y Harry se han hecho amigos cercanos rápidamente, y creo que Ron se beneficiara de la presencia de Harry en su familia también. El es un objetivo muy tentador para los gemelos, no teniendo un gemelo propio que lo respalde, y mientras su hermanita se puede aliar con él, la posición de Ginny como La única mujer Weasley en siete generaciones la tiende a proteger de las bromas más fuertes de los gemelos opacando a Ron. Creo que tener un aliado de su misma edad será muy beneficioso para él.-
-Difícilmente considere el bienestar del chico Weasley como un factor importante en esta decisión-, Snape objeto enojadamente.
-Si, Severus, lo sé-, el tono de Dumbledore estaba cargado de reproche. -Es por eso que tengo que considerarlo. Harry difícilmente tiene experiencia con una armoniosa y útil experiencia familiar si su presencia impacta en forma negativa en los miembros de la familia, particularmente con el miembro con el que debería llevarse mejor.-
-Yo… no había considerado el tema desde esa perspectiva,- Snape admitió con reluctancia. -Quizás como mi experiencia es de hijo único no me fije bien en el detalle de las relaciones entre los hermanos Weasley.-
-No hay problema,- la bienhechora sonrisa de Dumbledore reapareció. -Después de todo, estamos de acuerdo en que será beneficioso para ambos muchachos, y creo también que Molly y Arthur van a estar de acuerdo con este arreglo. ¿Pero creo que mencionaste una mezcla de ambientes? ¿Quiere decir eso que no quieres que los Weasley sean nombrados los guardianes de Harry?-
Snape tirito al imaginar a cualquiera – incluido Potter – expuesto al sobre excitable clan Weasley. -En absoluto, Director. Me imagino a los Weasley como un lugar al que él pueda ir frecuentemente, pero, bajo ninguna circunstancia, sus guardianes. Aunque es importante que Harry experimente una normal vida familiar, es más imperativo que tenga un guardián con el cual pueda desarrollar una cercana relación y en el cual pueda confiar. Dada su historia, esto va a ser difícil. Le han dicho por años que no sirve para nada y de que es un anormal; necesitara unos guardianes que lo ayuden a sobreponerse a este condicionamiento. Tendrán que estar dedicados a asistirlo en esto dedicándose exclusivamente e a sus necesidades. Los libros dicen claramente que Potter puede no saber lo que necesita, mucho menos solicitarlo. Por esta razón, sus guardianes tienen que ser personas que le den la debida atención que merece y necesita. Los Weasley difícilmente pueden hacer eso.-
-Hmm. Veo tu punto de vista. Quizás una pareja joven -
Snape frunció el ceño. -Las parejas jóvenes se dedican a aparearse, Director. ¿Acaso no me exprese claramente? Potter necesita ser su única preocupación; no puedo permitir que sus guardianes se distraigan con sus propios mocosos. Además, Potter probablemente necesitara una mano firme – Snape se ruborizo con la mirada penetrante de Dumbledore. -No quise decir literalmente, Director,-protesto en su defensa. -Quiero decir que incluso bajo las mejores circunstancias Potter debe ser considerado un chico problema, y como tal necesitara que sus guardianes le establezcan una clara estructura en su vida con apropiadas consecuencias en caso de mala conducta.- Snape aclaro su garganta. No sabía cómo decir lo siguiente sin sonar demasiado sentimental. -También necesitaran proveer a Potter algo llamado 're afirmamiento positivo' que parece referirse a hartas cantidades de apoyo, animo, y reforzamiento. En corto, a-amor.-
Los ojos de Dumbledore brillaban con regocijo, pero solamente asintió. -¿Entonces crees que una pareja mayor, con más experiencia?-
-Eso sería lo ideal, pero debes ser cuidadoso de que hayan hecho un buen trabajo anteriormente en la crianza de sus hijos. Y por supuesto, el riesgo de nietos que requieran de su atención, también tiene que verse. Me han dicho que los nietos pueden ser incluso una distracción más grande que los hijos. Aunque también me preocupa que una pareja mayor no tenga la energía para lidiar con un niño de esta edad, y menos comprender las preocupaciones de un adolescente.-
-Hmm. Veo a que te refieres.-
-Quizás el aspecto más importante, aparte de la buena disposición para dedicarse enteramente al bienestar de Potter, es alguien que entienda por lo que el chico ha pasado. Puede ser difícil para aquellas personas que no han experimentado abuso comprender el comportamiento de los sobrevivientes de este. Dicho esto, ellos no deben sentir lástima por el muchacho o excusar el mal comportamiento por que en el pasado el fue castigado con demasiada severidad. Necesitaran mucha fuerza de carácter para enfrentarse a Potter cuando les ponga los ojitos de perro triste que este tipo criaturas manipuladoras emplea.-
Dumbledore parecía estar luchando contra la risa cuando pregunto educadamente, -¿Harry a tratado esta técnica contigo, Severus?-
-Por supuesto que no, Director,- respondió Snape. -De hecho, usted ha probado mi punto de que los guardianes de Potter necesitan tener experiencia en materias de abuso. Har…Potter ha sido entrenado, sin duda brutalmente, para aceptar cualquier tipo de tratamiento, sin importar cuán vicioso, como si lo mereciera. En su actual condición, es incapaz de evadir un castigo por muy injusto que sea, simplemente no puede hacerlo.- No pudo evitar recordar lo rápidamente que Harry había aceptado la supuesta paliza con el bastón que le propinaría Snape por tener mala caligrafía. Le dio un escalofrió; esa era una memoria muy cercana a sus castigos de infancia. Por alguna razón, esos recuerdos habían estado muy cerca a la superficie últimamente.
-Sin embargo,- continuo, dejando de lado los recuerdos inconfortables, -Con el tratamiento adecuado, y con el indudable animo y guía de los engendros Weasley, es de esperar que Potter alcance eventualmente el punto donde el superara ese tipo de chantaje emocional. Sus guardianes deberán tener suficiente fuerza de carácter para tratar ese tipo de manipulaciones y reforzar el castigo correspondiente a la ofensa que él cometa.-
-Espero que no estés sugiriendo que Harry merece un guardián demasiado estricto. Seguramente compasión y afecto deberían ser lo más importante –
-Director, proveerlo de dulces de limón y arrumacos cuando se comporta mal difícilmente llevara al desarrollo de un adulto sano,- dijo Snape impaciente. -Potter debe aprender lo que significa hacerse responsable de sus acciones de manera correcta, no ser golpeado salvajemente por algo que hizo su primo, pero tampoco se le puede eliminar todas las reglas por su estatus especial.
Y mientras conozco tu posición en el castigo corporal, déjame decirte que si sus potenciales guardianes desean el uso de apropiado castigo físico con el chico, esto difícilmente los deja fuera de consideración. Harry, quiero decir, Potter, ha sido brutalmente golpeado por supuesta mala conducta durante muchos años que quizás no reconozca nada más que un par de palmadas como un correcto castigo. Lo que es más, él debe aprender a discernir el castigo apropiado del inapropiado, eso será favorable a largo plazo. Además, necesita salir del habito de acurrucarse en forma de bola para proteger su órganos vitales a la primera señal de conflicto, o peor, obedientemente quedarse quieto para cualquier persona que desee lastimarlo.-
-¿Estas sugiriendo golpearlo para que aprenda a no quedarse quieto?- parpadeo Dumbledore.
-Estoy sugiriendo que los niños abusados muy seguido han sido condicionados para no escaparse del castigo. Sería mejor para Harry que aprenda a quejarse, discutir, protestar, huir, moverse, y gritar. Sospecho que cualquiera de los Weasley será capaz de enseñarle,- Snape agrego secamente. -Una vez que Potter aprenda que no debe quedarse quieto frente a alguien que desea golpearlo, y que se dé cuenta que unas palmadas no le romperán los huesos, el se volverá un estudiante mas adepto a la Protección Contra las Artes Oscuras. Sin tener en cuenta la actual ubicación del Que-No-Debe-Ser-Nombrado sabemos que volverá, Potter necesita aprender a defenderse, y ahora se asusta al nivel de catatonia a la mera mención de castigo físico. ¡Él solo se queda ahí, Albus! No estoy tratando de excusar mi propio comportamiento, pero él ni siquiera trato de evitar el golpe.-
Snape visiblemente controlo sus emociones. Aclarando su garganta, continúo más calmadamente. -Es por eso que el chico requiere un guardián que se comprometa completamente a su persona. Alguien debe ayudar al niño, em, mocoso, a retomar su autoestima. Sin eso, será presa fácil para El- Que-No-Debe-Ser-Nombrado, de una forma u otra,- agrego oscuramente.
-No debes recordarme lo seductivo que puede ser Voldemort para los heridos y no amados, Severus,- suspiro Dumbledore. -Le he fallado a mucha gente en mi larga vida, pero a nadie tan mal como a ti y a Harry.-
-Por favor, Albus, no más angustia auto condenatoria,- reclamo Snape. -Estamos hablando del mocoso de Potter, no de mí.-
-Mm.- Dumbledore apretó sus labios pensativamente.
-Ahora, como iba diciendo, el guardián ideal de Potter no solo debería ser de fuerte carácter para soportar los futuros chantajes emocionales, pero también ser fuerte de mente. Después de todo, en su día el padre del mocoso era capaz de engatusar a todo el personal de Hogwarts en lo que él les hiciera creer. Se rescato él y su banda de amigotes muchas veces de castigos merecidos. Es razonable de suponer que, una vez que se dé cuenta de que no será golpeado en sumisión, esta generación Potter probara tener tanta labia como su progenitor, aunque espero que jamás la ocupe para ayudar a un casi asesino.- Snape dijo mirando con enojo al viejo. -Recordaras que el anterior Potter se lanzo a esa tarea con mucha facilidad, algo que todavía no puedo comprender.-
El Director suspiro y tomo una pastilla de limón. -Como te lo he dicho muchas veces antes, Severus, no fueron las suplicas de James las que causaron que fuera tan indulgente con las acciones de Sirius en contra tuya. Si deseas culpar a alguien por esa decisión, entonces toda la responsabilidad recae en mí. Yo tome la decisión de no expulsar a Sirius en mi deseo de salvar a otra persona aparte de ti: Remus.-
Snape resoplo en desdén y el Director le dio una mirada de pena. -Sé que no estás de acuerdo, mi querido muchacho, pero Remus era inocente. Hasta este día, yo creo que Sirius en realidad no trato de asesinarte. Soy confidente en que su usual irresponsabilidad y falta de visión lo convencieron de que tú solo te asustarías terriblemente de la forma que tenía el lobo de Remus, así previniendo que los siguieras molestando y dándole la oportunidad de burlarse de tu miedo. Además, sin embargo, soy confidente que sin la intervención de James, tu habrías sido asesinado, y hasta tú debes admitir que eso es algo que Remus Lupin jamás habría deseado.-
-Quizás no mi muerte,- admitió Severus malhumorado. -Pero no es como si Lupin fuera mucho mejor que los otros tres.-
-Es como dices,- estuvo de acuerdo Dumbledore. -Pero cuando James intervino y te salvo, tuve que determinar si expulsar a Sirius valía la vida de Remus. Y sé que sientes que mi decisión de no expulsarlo es injusta, pero el hecho es que de haber expulsado a Sirius, Remus probablemente habría sido asesinado. Si solo hubiese sido una cuestión de si Sirius merecía ser expulsado por poner tu vida en peligro lo habría sacado de la escuela esa misma noche. Pero estaba consciente de que si expulsaba al heredero de la familia Black, sus padres pedirían una completa explicación. Ellos podrían no haber sido muy unidos con su hijo, aunque todavía no lo habían desheredado, pero seguramente no habrían aceptado la desgracia de la expulsión sin pelear. Y eso significaría que la situación de Remus habría salido a la luz. Los Black sin duda habrían demandado no solo su expulsión de Hogwarts pero también su procesamiento por atento de asesinato, y sabemos que ese hecho habría devastado a Sirius así que sus padres lo habrían hecho con mayor razón. Y sabiendo la postura del ministerio en el caso de los hombres lobo, la influencia de la familia Black en ese tiempo, y los miedos de un alza al poder de Voldemort, hubiera sido muy probable que Remus hubiera sido enjuiciado y luego ejecutado, y eso – especialmente cuando tú no habías sido lesionado –no estaba dispuesto a permitirlo.
Y fue terrible que pensaras que me preocupaba más por ellos que por ti, mi muchacho. Solo espero que mis acciones durante los últimos años te hayan demostrado cuanto te aprecio y lo mucho que me preocupo por ti.-
Snape refunfuño y miro hacia otro lado, pero en realidad le gustaba escuchar a Dumbledore anunciar sus sentimientos de esa manera. No era como si Snape fomentara esas declaraciones, pero si Dumbledore admitía como se sentía mientras se disculpaba (nuevamente) por uno de los pocos incidentes en que Severus no tenía la culpa, el joven no se iba a quejar. Incluso adultos sobrevivientes de abuso tenían problemas de autoestima.
-Suficiente de esta tontería sentimental,- dijo aireadamente, moviendo una mano. Decidió ignorar el brillo de los ojos de Dumbledore. -Nos estamos desviando del tema. Potter requerirá alguien que sea suficiente inteligente para evitar cualquier manipulación de parte del mocoso. Eso significa que debe ser alguien que no se vea afectado por sus protestas de necesidades urgentes o actos heroicos – lo que significa que su guardián no debe ser otro Gryffindor. ¿No estás de acuerdo?-
-Muy bien, Severus, tu ciertamente has proveído un excelente argumento,- respondió Dumbledore evasivo.
-Él además estará pasando bastante tiempo con una gran porción Gryffindor entre su Casa y los Weasley, ¡todos Gryffindor! Potter deberá tener exposición a la forma de pensar de las otras casas también.-
-Hmm. Comprendo tu lógica, Severus. ¿Entonces en quien estas pensando? ¿Una familia Hufflepuff quizás?-
-¡Albus! ¿No has oído nada de lo que he dicho? Hubieron bastante Hufflepuff idiotas que fueron lo suficiente estúpidos para creer en El-Que-No-Debe-Ser-Nombrado, luego demasiado leales para abandonarlo cuando era obvio que estaba loco. Primero que nada debes encontrar a alguien que no sea una amenaza para el chico. Debe ser alguien que haya peleado contra el Señor Oscuro.-
-La Guerra termino-
-¿Estás loco? ¿Quién sabe cuando el Señor Oscuro volverá a levantarse? E incluso si no vuelve durante la vida de Harry, ¿te has olvidado tan fácilmente de los Longbottom? incluso en ausencia del Que-No-Debe-Ser-Nombrado, el todavía tiene seguidores fieles y ¡el peligro contra Potter todavía está presente! No puedes ubicarlo con alguien que no haya probado donde realmente yacen sus lealtades.-
-Sí, veo tu punto…-
-¡Entonces también debes ver que ningún Hufflepuff tendrá la fuerza de carácter para soportar las primeras lagrimas de cocodrilo del chico! Ellos ahogaran al mocoso con abrazos y regalos y le perdonaran la mala conducta al recordar su triste pasado. ¡Y eso no lo permitiré!-
-Muy bien, Severus, si insistes tan fuerte el tema. Quizás un Ravenclaw sería mejor después de todo, Lily fue una excelente estudiante, ¿no fue así?-
-Albus, ¿te estás poniendo senil?- dijo Snape enojado. ¿Cómo se atrevía a insultar la memoria de Lily con algo tan estúpido? -Ella era la más brillante de nuestra clase, aunque nunca actuó como una arrogante sabelotodo. Ella sobresalía en Pociones y Encantamientos, y tenía a Minerva comiendo de la palma de su mano, a veces literalmente, con sus dotes en Transformación. ¿Cómo has podido olvidar sus logros?-
La sonrisa de Dumbledore tenía algo de travesura. -Por supuesto, por supuesto, mi muchacho. Gracias por recordármelo. ¿No crees que Harry también haya heredado algo de esa formidable inteligencia?-
Snape hizo una mueca desdeñosa. -Si me estas preguntando si la herencia de James Potter es lo suficientemente fuerte para sobreponerse a la de Lily Evans, no voy a dudar en decir que no. La noción de que la única herencia maternal de Harry, quiero decir, Potter, es solo el color de sus ojos es absurda. Tengo confianza en que la influencia de Lily va a sobrepasar la de ese idiota, y el chico, mocoso, se asemejara más a su madre, una vez que su propia personalidad comience a rebelarse.-
-Estoy un poco preocupado, entonces, Severus. Nosotros sabemos que los Ravenclaw, pese a su temible intelecto, tienden a ser bastamente influenciados por pensamientos lógicos. Si es que Harry es capaz de combinar el ingenio de Lily con la persuasión de James, me pregunto si es que habrá un Ravenclaw vivo que pueda soportar los argumentos de Harry.-
Snape frunció el ceño. El no había pensado en eso -Bueno, Director, tiene que haber alguien. No es como si pudiéramos buscar a un Slytherin. No había muchos Slytherin en la Orden durante la Guerra, y de los pocos que éramos, solo algunos sobrevivieron. Aparte de mi, solo puedo pensar en dos, y Giles esta en Australia mientras que a Jean no la consideraría para nada por, oh, no. No, no, no. ¡No mientras esté vivo!-
-Severus,- dijo Albus con calma, -Debes admitir que llenas el criterio, que tú mismo especificaste a la perfección.-
-¡Absolutamente no! ¡No voy a ser el guardián del mocoso! ¿Te has vuelto loco?-
-Bueno, si estas tan opuesto la idea - suspiro Dumbledore.
-¡Por supuesto! Y tú debes estar demente por el solo hecho de contemplar la idea. Especialmente después de las acciones de la otra noche, imaginas que Minerva o Poppy van a consentir en que sea nombrado guardián de Potter ¿guardián?-
-Bueno, Minerva parece creer -
-Ella estaba claramente alucinando. Y hace tiempo creo que la menopausia le hizo algo a la mente de Minerva,- gruño Snape, no muy complacido con la ridícula sugestión de Dumbledore, siquiera considerar la idea le hacía desear usar un hechizo "obliviate" para olvidar para siempre semejante estupidez.
-Muy bien,- dijo aireadamente el Director. -Entonces pensemos quien más podría ser apto. Obviamente debe ser importante para Harry que encontremos a alguien con el cual pueda formar una relación de afecto. Después de su deplorable tratamiento a manos de los Dursley, me pregunto cuán difícil podrá ser eso.-
Severus resoplo, altamente aliviado por haber disuadido al Director de su previa y altamente inapropiada línea de pensamiento. -Yo no me preocuparía demasiado, Albus. Después de todo, el chico ya ha demostrado que puede acercarse a mí.- Demasiado tarde, no había alcanzado a ver la trampa.
-¡No! ¡Espera! yo -
-Bien, bien, mi muchacho. Parece que seguimos volviendo al mismo sitio, no importa cual camino tomemos,- Albus sonrió. -Parece estar destinado para ti -
-NO.- Snape se puso de pie, mirando salvajemente por una ruta de escape. -¡Esto es una locura! ¡Yo soy completamente inapropiado!-
-¿Por qué?- lo interrumpió Dumbledore cordialmente. El viejo mago ignoro completamente la desesperada movida de cabeza y el paseo frenético de Snape. -Tú ciertamente eres capaz de darle a Harry la atención que requiere. No tienes compromisos familiares ni planeas tenerlos. Además ya has hecho una extensiva investigación en el cuidado de un niño con este tipo de problemas. Y por sobre todo comprendes muy bien lo que es ser víctima de abuso. Incluso estas mejor ubicado para comprender los peligros que Harry enfrenta, y enfrentara, de poderes oscuros. Tú tienes suficiente fuerza de carácter para soportar cualquier manipulación, y tu intelecto claramente lo dejara sin argumentos cuando quiera polemizar, o cuando saque a relucir esas cualidades Gryffindor que tanto desprecias. Estoy seguro también que podrás poner un buen marco de referencias en castigos y obligaciones, y mientras sospecho que vas a necesitar trabajar un poco en demostrar tu afecto y una abertura emocional, imagino que Harry será capaz de ayudarte en ese aspecto.-
-Director, yo no-
-Y el hecho de que este aquí en Hogwarts lo hace todavía más conveniente, de esa manera podrás proveer a Harry de apoyo durante el año escolar. Por supuesto, las protecciones mágicas aquí lo mantendrán seguro, incluso sin el escudo de sangre que había donde los Dursley… sí, Severus, creo que esta es la mejor opción. Después de todo, cualquier cosa que suceda, se que tu jamás atacaras al chico.- el "de nuevo" no fue dicho, al igual que la amenaza de lo que sucedería si la fe de Dumbledore estuviera equivocada.
Snape trago con dificultad. El Director no estaba tan "loco" como le gustaba hacer creer, ni era tan despistado. Era obvio, muy, muy obvio, que sus protestas iban a ser ignoradas, y continuar discutiendo claramente llevaría a otra demostración del poder de Dumbledore. ¿Estaba preparado para seguir luchando? Cuando al final, ¿igual perdería? bueno, con toda honestidad, ¿quería hacerlo?
-No puedo. Incluso si quisiera, no puedo. Si El-Que-No-Debe-Ser-Nombrado regresara y se entera que Potter esta a mi cargo, esperará que se lo entregue de inmediato. Y si no lo hago, sabrá que ya no le sirvo. Y ya no podre ser mas tu espía.-
-Cierto,- dijo Dumbledore insípidamente, todavía sonriendo.
-No soy una buena persona, Albus,- Snape discutió con la desesperación marcada en el rostro. -No puedo creer que soy la mejor opción en todo el mundo mágico para lidiar con un niño emocionalmente frágil por haber sido abusado.-
-Molly Weasley lo sera, estoy seguro, ella sera capaz de abrazar y acurrucar a Harry todo lo que desee. Y te sorprenderás al saber. Que de hecho, estoy contando con eso.-
A esas palabras, Snape supo que su destino estaba sellado. Toda la conversación había sido una farsa, una forma de Dumbledore para hacerlo acceder, más o menos, a lo que el mismo Dumbledore haría que sucediera pasara lo que pasara. En su momento pensó que le explicaría al viejo lo que era necesario, pero el injuriante vejete solo asentía y sonreía mientras observaba como Snape se enterraba más y mas. ¿Cómo no se dio cuenta? Él, de todas las personas, ¡debería haber vislumbrado la manipulación de Dumbledore desde el principio! ¿Cómo podía llamarse Slytherin después de que lo habían manipulado de esta forma? Debería reemplazar a Sprout como Jefa de Hufflepuff.
-Bien, bien, mi querido muchacho, no seas tan duro contigo mismo,- lo tranquilizo Dumbledore, demostrándole esa increíble habilidad de leer la mente del más poderoso Occlumens de Hogwarts. -Sabes que tienes un punto débil cuando se refiere a Lily. Ahora vuelve a tus habitaciones y enfádate sobre la indignidad de todo esto, pero asegúrate de conseguir el consentimiento de los Weasley. Te sugiero que le des la noticia a Harry este fin de semana, se que está un poco preocupado por el asunto.-
Snape estaba haciendo una creíble expresión de un basilisco, pero infortunadamente Dumbledore parecía inmune, quizás por la extensa exposición a Fawkes. Gentilmente condujo al joven, sin habla hacia la puerta, con un puñado de pastillas de limón. Lo último que vio Snape cuando le cerraba la puerta, fue a Dumbledore eligiendo un pastelillo de la bandeja con un aire de misión cumplida.
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