La vida es cruel,nacer sin un Quirk en donde el 80% de la población lo posee es simplemente mala suerte.

Corría por las calles sosteniendo contra su pecho varias hojas que amenazaban con caer en cualquier momento.Iba tarde por quedarse mirando a los héroes ,como siempre, se lamento internamente por su descuido.

Dobló en la esquina sintiendo un ligero alivio pues ya estaba cerca, su rostro golpeó contra el pecho de alguien y sostuvo las hojas contra sí mismo, él y su maldita torpeza.

Alzó la mirada y sus ojos verdes se encontraron con unos ojos violetas que le dieron escalofríos y sintió en su muñeca un cosquilleo. Se disculpó con una ligera sonrisa y continuo corriendo.

Entró a la escuela hecho un desastre, tenía las mejillas rojas por el esfuerzo y sentía que en cualquier momento se caería, jadeo cansado, se detuvo unos minutos antes de caminar más tranquilo al salón correspondiente, entró ante la atenta mirada de los niños y la mirada casi molesta de su compañera, él les saludó con ligero entusiasmo y camino hacia su escritorio dejando a la docente seguir con su clase.

Con sus 20 años y sin Quirk lo más genial que había conseguido era ser maestro para niños,aunque claro con ayuda de otra persona pues el director argumentó que para alguien sin Quirk le resultaría difícil controlar a los niños.

Suspiro agobiado y comenzó a mirar las hojas,por suerte ninguna sé había caído. Su vista viajó hacia su muñeca, cubierta con vendas, ahí estaba el nombre de su alma gemela.

Sacudió la cabeza en busca de alejar esos pensamientos, él mismo se había prometido no pensar en eso y su sueño frustrado de ser un héroe. Esos dos temas le habían traído tristeza y dolor a su vida. Miro a su compañera que hablaba muy animada acerca de los héroes y su deber. Su mirada se perdió en un punto indefinido entre las hojas,¿Como habría sido él como héroe? ¿Que particularidad tendría? Varias preguntas lo azotaron e inconscientemente comenzó a murmurar posibilidades. Salió de sus pensamientos al sentir un ligero jalón en su camisa, frente a él, una de sus alumnas lo miraba con ligera diversión.

-Sensei, otra vez esta murmurando cosas sin sentido? -inquirió las niña de cabello negro. Izuku se sonrojo apenado y dio una mirada rápida a la maestra y los demás niños, suspiro con alivio al menos sólo ella lo había notado.

-lo siento Nana- le sonrió y acarició la cabeza de la chiquilla.

La niña le devolvió la sonrisa antes de regresar a su asiento.

El peliverde miró a las clase entera, todos eso niños poseían un genial Quirk, pero definitivamente Shimura Nana destacaba. El día avanzó entre distintas actividades y sin duda le daba cierta alegría estar alentando a los niños a ser grandes héroes.

Incluso si él sólo era un fracasado Mukosei.

Resóplo un tanto cansado mientras guardaba sus cosas,su compañera Kendo se marchó avisando que iría a la sala de profesores. Tomó su mochila y se acercó a la niña que seguía en su pupitre, dibujando al parecer, se acercó a ella con gran curiosidad.

-Es hora de ir a casa Nana- comentó y la niña asintió sin mirarlo concentrándose totalmente en su trabajo. Izuku dio un vistazo al dibujo. Nana lo había dibujado con un traje verde y una capa blanca a su lado Shimura sostenía su mano. Un dibujo tan lindo que le provocó una sensación de decepción y tristeza profunda.

Él nunca sería un héroe.

-cuando este terminado se lo daré- aseguró ella, guardando sus cosas.

Ambos caminaron rumbo a la salida. Izuku miro a la madre de Nana y la saludo con una sonrisa. Shimura Nana borró la sonrisa que adornaba su rostro al toparse con unos ojos violetas. Sintió una sensación incómoda y se alteró un poco, aquella persona miraba directamente a su sensei. Dio una rápida mirada a su madre y a Izuku, que conservaban ajenos a todo.

-Nana,es hora de irnos- el suave toque en su hombro la sobresalto, ambos la miraban atentos, ella forzó una sonrisa y asintió hacia su madre.

-Adiós Izuku-sensei- se despidió con una sonrisa, dio una rápida mirada al lugar y comprobó que ese sujeto ya no estaba ahí.

Izuku caminaba hacia su departamento,por alguna razón sentía como si lo observaran. Apresuró el paso intentando no correr por el susto. Seguramente se estaba volviendo paranoico, pensó fugazmente en busca de tranquilizarse.

La soledad de su departamento lo tranquilizó un poco, dejó las llaves en la mesa y camino hasta el sofá dejando ahí su mochila.

Encendió el televisor y fue directo a cambiarse aunque tuviera que estar escuchando la palabra "héroe" a cada momento.

Salió de su departamento un tanto nervioso, saludo a sus vecinos con una sonrisa y se apresuró.

La floreria que había pertenecido a su madre era su segundo empleo. Sin embargo dado su torpeza y su nulo conocimiento en flores, el lugar había caído bajo las órdenes de Ibara Shiozaki, ella si era realmente buena eso. Entró ante el sonido de la campanilla, vio a Ibara guardar sus cosas, la saludo amablemente como de costumbre,ella le sonrió.

Ibara trabajaba en la mañana mientras él daba clases y en la tarde ella se iba. Una rutina muy aburrida para variar. Ella se marchó, el peliverde se acomodó en una silla y miró sin mucho interés una revista cortesía de Ibara, había sido un día aburrido en todo sentido.

La conocida campanilla resonó en el lugar, una sonrisa se instaló en sus labios y miró al recién llegado.

-Bienvenido- susurro antes de que su sonrisa se borrará y fuera sustituida por una mueca de confusión,nuevamente sentía un cosquilleo en su muñeca.

Se sintió nervioso cuando esos ojos violetas lo miraban fijamente.

Fijo su mirada en él,ese cabello gris azulado y los ojos violeta se le hacían conocidos.

-Se le ofrece algo?- pregunto confundido.

-Te gustaría ser un villano?-

Izuku se mantuvo en silencio, en busca de señales que indicaran que era una broma. Un incómodo silenciar lleno el lugar y su rostro reflejó una gran confusión.

-Eh?- fue lo único que atinó a decir.

-Lo que oíste- es que acaso hoy no era su día,esquivo la mirada penetrante. Quizá se habían equivocado de persona.

-Disculpe- murmuró inseguro- creo que se equivoca de persona.

-Tu eres Izuku, no? - asintió lentamente, y el sujeto volvió a hablar- entonces no hay ningún error.

- Yo. .. no tengo un Quirk- susurro con tristeza.Sin embargo sintió verdadero terror al notar que una sonrisa surco los labios de ese hombre, acaso esa era una buena noticia?

¿Que podrían querer de alguien como él?

Se concentró en todas las posibilidades.

Abrió los ojos como platos ¿y si querían usarlo como conejillo de indias? ¿o peor aún lo torturaban? Diversas preguntas lo invadieron y sin darse cuenta comenzó a murmurar como de costumbre.

-Vendrás conmigo- hablo por fin el villano,algo cansado del parloteo, vio como el chico pecoso se sobresaltaba y un ligero sonrojo se instalaba en su rostro.

El silencio volvió a reinar e Izuku se sintió ligeramente impaciente deseoso de que él se fuera y nunca volvería pero muy en el fondo se sentía tranquilo y eso lo asustó, estaba frente a un sujeto desconocido que probablemente fuera un villano y que podría matarlo si se seguía negando.

-Yo realmente no entiendo lo que quieres de mi- dijo en tono serio pero sin atreverse a mirarlo-soy un Mukosei-

El peliverde apretó lo labios mientras miraba hacia la calle, esa palabra lo molestaba de sobremanera. El villano bufo ante sus palabras, parecía cansado de todo.

-Eso no importa- murmuró mientras observaba el lugar sin mucho interés.

-Además- ignoró las palabras, alzó el rostro y lo miro directamente- yo no soy ni seré un villano.

Toda una vida deseando ser un héroe, para de momento le ofrezcan ser un villano, Gracias pero no gracias. Su sueño era salvar vidas no arrebatarlas y aunque era imposible ser héroe se mantenía en ese camino firmemente.

-querias ser un Héroe- Izuku se sobresalto al escuchar esa palabra y fruncio ligeramente el ceño- es por eso ¿no es así?

Se removió algo incómodo en su asiento luchando internamente por asentir ante la pregunta, acaso era muy obvio?

-ven conmigo- pidió nuevamente e hizo una mueca de molestia al verlo negar con la cabeza- sabes? No tienes elección

-Quien eres? - pregunto inseguro,ignorando la pregunta-¿que es lo que quieres de mi? -

-Soy Shinsou Hitoshi y por si no lo has notado soy tu alma gemela- reveló como si fuera lo más normal del mundo, Izuku lo miro con terror. Saltó de su asiento con un nudo en la garganta.

Ahora lo entendía.

No lo buscan para ser un villano,si no como fuente de poder.

En el Instituto le habían enseñado todo sobre las almas gemelas y su importancia en el Quirk de las parejas.

Forzó su memoria al máximo mientras sentía la necesidad de correr.

Podía escuchar la voz de su profesor repitiendose incesante.

El Quirk se fortalece sí se encuentra con su alma gemela.

En algunos casos el Quirk se complementa con el otro.

En caso de que uno de los dos no tenga Quirk, él otro perfecciona el suyo haciéndolo más poderoso.

Ahogo un grito cuando sintió un agarre en su muñeca, Shinsou estaba frente a él. Miró con terror como retiraba el vendaje que cubría su muñeca y él no podía hacer nada para evitarlo por ser presa del miedo.

Escucho un jadeo de sorpresa y sintió ganas de llorar. Su muñeca estaba cubierta por cicatrices y marcas de quemaduras. Apenas se podía leer el nombre de Shinsou.

Sintió un doloroso agarré en sus hombro y cerró los ojos esperando un golpe.

-¿Quien te hizo eso? -pregunto con voz inusualmente tranquila con un matiz de frialdad que provoco un escalofrío en él y se negó a responder- dímelo-

El pecoso lo empujó en busca de liberarse del violento agarre. Las lágrimas descendían por sus mejillas dificultando su vista.

Su mente era un caos, los sentimientos de tristeza e irá lo estaban mareando y lo único que venía a su mente era el rostro angustiado de su amigo de la infancia, Kacchan, aquel que le había hecho esas marcas.

-Dímelo-ordenó Shinsou un tanto más calmado, recibiendo la misma negación. Era obvio que no le iba responder,sin embargo tenía un haz bajo la manga.

Se sacudió el cabello y sin mucho interés se aclaró la garganta-Tienes buenos alumnos sería realmente malo si algo les pasara,no crees?-

El peliverde lo observó con sus ojos cristalinos llenos de miedo por lo dicho. Hitoshi sonrió victorioso lo tenia justo donde quería.

-Por esta vez podras ser un héroe verdadero- dijo en tono de burla- si me dices quien te hizo esas marcas no les pasara nada.

Hitoshi chasqueo la lengua al ver que su chico pecoso estaba paralizado. Bien su paciencia por fin se había terminado.

Dio media vuelta y camino directo a la puerta, tomó el pomo dispuesto a girarlo.

-Iré contigo- lo escucho gritar, volteo para encontrarse con ese lindo rostro cubierto de lágrimas-pero por favor no los lastimes-suplicó en un hilo de voz.

El ojivioleta sonrió arrogante, después le obligaría a decirle.

Extendió su mano y espero que la tomará, él menor la tomo inseguro, sabía que se arrepentiría tarde o temprano.

Pero, con el claro objetivo de salvar a sus alumnos no se permitió dudar,pensó con algo de positivismo que tal vez podria hacer cambiar de opinión a Shinsou.

-Que pasará con mis cosas? - pregunto mientras caminaba detrás de su alma gemela. Miro una vez más la floreria quizá nunca la volvería a ver.

El mayor se encogió de hombros restandole importancia.

-Alguien vendrá por ellas-

Se detuvieron frente a la calle, un auto negro se detuvo frente a ello y ambos entraron. Izuku mantuvo su distancia. Con su corazón latiendo al mil y sentía ansiedad.

Se sintió cansado y mareado,sus ojos se sentía pesados y cayó inconsciente.

Cuando abrió los ojos justo llegaban a su destino. Bajo detrás de Hitoshi. Entaron a un edificio de cinco pisos que daba la imagen de ser un lugar normal, no había personas transitando y las demás casas parecían estar vacías.

Se aferró al brazo de su destinada pareja.Cuando entraron todo se veía normal.

Fue llevado por otra persona a una habitación donde lo encerraron.

Hitoshi volvería en un rato.

La habitación era normal pero la sintió vacía, una celda vacía y fría.

Él no quería estar ahí por ninguna razón, rodeado de villanos que podrían lastimarlo.

Aunque ahora formará parte de ellos.

Hola!!

Estoy volviendo a escribir el fic :'v

La pareja principal es Shinsou x Izuku.

Habrá más como: Shouto x Katsuki, etc.

Una disculpa si hay faltas de ortografía.

Espero que les guste.

Bye,bye.