Hola les traigo una pequeña idea que vagaba en mi mente…. Tal vez lo continue…. Tal vez
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Aokiji era un almirante serio y a la vez curioso, le gustaba muchas cosas de su trabajo, como ejercer poder en post de una justicia verdadera, su justicia, pero habían cosas que en verdad no apreciaba y el llamado de un Tenryubito era una de ellas, sabían como eran y no le agradaba.
Soltó un gran suspiro al bajar de su bicicleta, era una labor que prefería dejárselo a Akainu o Kizaru, pero la situación lo aclamaba a el, además que estaba por esos lugares en búsqueda de cierta mujer que estaba rondando la gran línea, arqueo la ceja con sorpresa detrás de esos lentes.
Miro la isla, estaba seguro que el clima de ella era uno tropical, la había visitado con anterioridad, frunció el ceño al notar algo irregular que provocaba el clima anormal, ¿fruta del diablo? Se cuestiono un poco confundido por esa revelación, la nieve ya estaba acumulada en algunas partes y la blancura era ya un característico de ese lugar.
Sabaody era un archipiélago caluroso y a pesar de ser una de las ultimas islas para cruzar al nuevo mundo, era relativamente calmada, a excepción de algunos negocios del cual era característico, divagando en sus pensamientos se centro en el pueblo cercano donde los Tenryubitos estaban apilados junto a otros marines, separándolos del resto de la gente que estaba ya oculta en su casa o mirando curiosos, aunque el frio se les notaba.
-¡Mata al monstruo!-grito la mujer con demanda apuntando en algún lugar del pueblo…muchos de los ciudadanos yacían abrazándose en un intento de mantener su calor, dio un ligero asentamiento de cabeza para pasar junto a los nobles, quienes gruñían distintas cosas, había cadáveres a su paso, algunos esclavos y hombres habían sido usados para descargar su ira.
Se paro en seco al notar a un niño junto al cadáver de una mujer anciana, su mirada era seria pero noto las heridas en sus brazos y pies, deduciendo un poco lo que en realidad paso –Chico –llamo el almirante con seriedad.
Muchos de los pueblerinos se habían apartado del niño, evitando un poco el rencor de los nobles, al parecer la anciana no tuvo la suerte, cayendo victima de una diversión insana de la cual el archipiélago a veces era victima…el niño lo miro y Aokiji por primera vez en años, desde que comió la fruta del diablo, sintió frio.
El chico era muy pequeño, pero esos ojos profundos y turquesa le hicieron tener una sensación de escalofríos que recorrieron su columna vertebral, tenia manchas rojas de la sangre ya sea de el o de la victima –¿También me quieres llevar? ¿O quitar la vida? –su voz no era nada infantil, al contrario la madurez en sus palabras le hicieron reaccionar al almirante, quien frunció el ceño un poco.
-Solo eh venido por un llamado chico –dijo finalmente para alzar su mano congelada, pero el chico giro de nuevo al cuerpo de la anciana, sin molestarse en pedir clemencia, como si la muerte fuera lo único que pudiera recibir -¿Cuál es tu nombre niño? –pregunto un poco curioso, la nieve empezaba a abundar y el frio empeoro conforme nada se digo.
-Hitsugaya Toushiro –en un susurro dijo el niño a duras penas escuchado por el mayor, ante el ventarrón helado y el hielo que empezaba a extenderse de los pies del niño, negó con la cabeza para dar un suspiro.
-Esto no me gusta niño –dijo finalmente, pero el niño lo volvió a mirar y esos ojos se clavaron duramente en su ser, sorprendiéndolo por completo, ya que revelaron algo que solo entendió antes de querer tomar su vida…a veces puede haber esperanza en las personas mas pequeñas –Que chico tan problemático-dijo como ultimo cuando el viento se precipito en ambos envolviéndolos, cegando por completo a los curiosos y los nobles, quienes no supieron que paso realmente.
-Creo que no fue necesario mi interrupción-ahí Sabaody alguien escondido vio la escena completa, estaba a punto de entrar para defender al niño, cuando noto la mirada del almirante -tal vez no todo esta perdido –susurro con una sonrisa imperceptible para desaparecer, tal vez la marina no estaba del todo cegada a su tonta justicia, el futuro se estaba volviendo interesante–Nos vemos luego pequeño Shiro-kun-
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Garp no le gustaba esa parte de la Gran línea, por algo nunca ascendió a Almirante, pero siempre hay sus excepciones cuando de un amigo se trata, y este era el caso.–Estaba seguro que era una isla con un clima mas cálido –gruño al abrazarse y acercarse a un punto alejado entre los arboles del bosque que lucían blancos.
-Garp-san-la voz de Aokiji salió de entre la oscuridad entre la blancura, el hombre mayor lo miro algo curioso, pero luego castañeo un poco los dientes para dar otros pasos hundiéndose un poco en la nieve, el viento soplaba suavemente.
-No espere que me llamaras –estornudo ruidosamente para que su nariz terminara en una gota que escurría con lentitud-¿qué es lo que ha pasado? –se abrazo tratando que la calidez de su cuerpo no se fugara…pero sus ojos se abrieron al notar una pequeña figura al lado de la alta.
Garp había visto niños con un pasado complicado, pero este en realidad era mas intrigante, no mostraba ningún gesto de dolor a las heridas que tenia tratadas, solo ahí mirando al horizonte donde lo único que resaltaba era una alta katana ¿por qué traía un arma así? Miro interrogante al almirante, quien solo suspiro.
-No me gusta hacer este tipo de cosas, pero no pude simplemente hacerlo –dijo con seriedad el almirante, para explicar la situación un poco.
-Eso es raro en ti, Aokiji –llamo Garp para caminar un poco sorprendido de la elección del almirante, intrigado del porque no obedeció una orden -según recuerdo fuiste llamado por ellos- miro al adulto alto–¿Que hiciste? –cuestiono ya con seriedad en su rostro, Kuzan solo dio un largo suspiro.
-Yo no fui…Es el chico –dijo el almirante, Garp amplio sus ojos ante la acusación –no se si sea una habilidad de fruta del diablo-aclaro pues esta fue la primer sospecha, pero el niño no contesto nada durante todo ese tiempo.
El anciano se agacho hacia el niño-Soy Monkey D. Garp-sonrió ampliamente para presentarse, este no dijo nada…pero sus ojos se posaron en el adulto, como analizándolo, esos ojos no titubearon ni un poco, como si estuviera acostumbrado a tratar con gente fuerte-y esa katana se ve fuerte-apunto al arma que sobresalía detrás de el.
-El es Toushiro Hitsugaya –presento Kuzan al notar que el niño estaba analizando profundamente al vicealmirante –conmigo también hizo lo mismo, tomara un tiempo para que tome confianza –explico, el tuvo sus problemas…pero al ver que no murió en sus manos, el chico no tuvo opción mas que ir con el…se notaba débil, pero no se quejo en todo el camino.
A pesar que el vicealmirante parecía ajeno y distraído, tenia sus momentos que sorprendía pues su percepción era muy aguda, entendiendo la situación–Bien chico…será mejor que vengas conmigo, antes que Aokiji se meta en problemas –sonrió.
-Gracias –dijo el almirante un poco dudoso de esa decisión, pero sintió que algo estaría mal si agregaba a este niño a su lista de muerte por parte de los almirantes.
-No hay problema , pero después necesitare los detalles–dijo Garp despreocupadamente –Vamos Shiro-kun –ofreció su mano al niño.
-Toushiro –corrigió el joven, hablando por primera vez con Garp, quien sonrió.
-Claro –dijo simplemente para ignóralo –te llevare a casa –Hitsugaya miro al otro adulto, quien solo miraba al anciano presente.
Aokiji se agacho al niño –se que serás un buen niño, así que por favor trata de no congelar al viejo vicealmirante y no apuntes esa arma a cualquiera–con severidad pidió, sus ojos ocultos detrás de sus lentes denotaban su seriedad, tenia una ligera duda en su corazón…pero quería tener fe, tal vez eso fue lo que sintió su viejo amigo, aquel que dio su vida para proteger el fruto de una cierta isla que desapareció.
Toushiro miro al anciano, luego la mano tomándola, Garp la sintió helada–Luffy será feliz de tenerte, aunque esa arma no se si sea buena para ti –quiso tomar la katana pero el chico la aparto de su mano, suspiro para darle una sonrisa cálida.
-Es lo único que tomamos de su casa –inquirió el almirante al ver como era receloso de que alguien lo tocara, mirando a Garp quien acepto, no quería causarle mas problemas de los que ya hizo, dejando que el niño conservara lo único que trajo consigo de su hogar, Garp entendió suspirando y siguiendo su camino, con un silencioso compañero.
Kuzan continuo mirándolos hasta que se perdió entre lo azul del amplio mar, con todas las dudas que se acumulaban en su cabeza, pero esos fríos ojos revelaron algo al momento que lo iba a matar…justicia pura y dolor profundo, como si hubiera recorrido una larga vida.
-¿Me estoy volviendo viejo?-cuestiono al cielo –crees que esto también tiene que ver contigo Saúl – coloco sus manos en el bolsillo hablando con nadie en particular, negó con la cabeza para enfrentar a los nobles mundiales, tendría que dar una explicación y tal vez enterrar algunos cuerpos, esta justicia no era lo suyo…pero en su posición era lo único que podría hacer, tal vez no fue casualidad que el haya sido llamado en lugar de los otros dos.
Pero se detuvo en seco al entrar al bosque –No esperaba ver aquí a una leyenda viviente –Kuzan no miro nada en particular –El niño es conocido tuyo –cuestiono.
-Solo es un pequeño interesante –la voz dijo saliendo de la oscuridad y revelar al segundo al mando de aquella tripulación legendaria que conquisto la gran línea-me alegro que lo hayas dejado conservar su katana-
-¿esa arma? –cuestiono el almirante interesado –no se a que te refieres con eso, pero es algo que no le podía quitar al chico…-suspiro.
-Tantas cosas le han sido arrebatadas a tan corta edad –el anciano continuo –Rari-san era muy cuidadosa con el –
-¿La anciana? –cuestiono Kuzan al nombre extraño, un ligero asentamiento de cabeza –ahora Garp-san se hará cargo de el…espero que no te moleste –
-No –suspiro –aunque es una lastima, me sentiré mas solo sin el mocoso-
-No se ve del tipo que entretiene a la gente –el alto hombre comento aun sin encarar al otro -¿qué tipo de vida tuvo? –cuestiono
-¿Qué tipo de vida imaginas? –se encogió de hombros –un niño como el con una habilidad misteriosa, no tiene muchas opciones…siempre siendo rechazado, maltratado –
-Un niño cuya infancia fue dura al parecer –bostezo el almirante –espero haber tomado una decisión correcta-
-Lo descubriremos en un futuro –se encogió de hombros, viendo como el almirante lo pasaba de largo -¿es acaso que no me detendrás?-cuestiono mas por curiosidad que por amenaza.
-No me interesa la vida de piratas retirados, además tengo demasiadas cosas que hacer –susurro al dar un bostezo y estirar las manos para colocarlas en la nuca, haciendo sonreír al viejo Silver–Ahora a mi trabajo –desapareciendo después entre los arbustos.
-Bien pequeño Shiro, espero verte en un futuro –susurro para mirar de donde el almirante había regresado, dio un suspiro al recordar que tendría que enterrar a la anciana…de la cual fue amigo, no había llegado a tiempo cuando noto que la temperatura bajo repentinamente, ¿por qué había dejado a la anciana ir de compras ese día? Se cuestiono, recordando lo recelosa que era de sacar al niño de su hogar.
Miro al cielo un poco preocupado por el futuro del niño, aunque sabia que estaba en buenas manos, recordando lo que Roger le digo en el pasado, quien era el que tenia su descendencia –El destino puede ser muy divertido a veces – susurro a nadie en especial, ya se había acostumbrado al extraño jovencito, quien a pesar de su edad era alguien muy maduro, forjado por el trato del resto del pueblo y la protección que su abuela le dio, lo consideraba su nieto…solo un poco.
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Garp estornudo de nuevo ante el helado aire, lo primero que noto era que el chico a pesar de ser muy pequeño miraba con ausencia su anterior hogar -¿Extrañas tu casa? –cuestiono al recargarse en el barco, pero ningún tipo de respuesta fue emitida –Sabes no pensé que Aokiji hiciera esto –
-…Yo pensé que moriría –el niño contesto, el anciano aun se desconcertaba de lo poco infantil que se escuchaba, recordando las palabras con Aokiji –El tenia intenciones de matarme, pero algo lo detuvo –continuo.
-Puede que vio en ti algo que ni tu mismo sabes –sonrió rápidamente, un viento helado se coló de nuevo haciéndolo soltar un poco su nariz.
-Debería limpiar su nariz, un adulto no debe verse como usted –el niño frunció el ceño en regaño, sorprendiendo al vicealmirante, por otra reacción que le hizo sonreír.
-Vamos niño soy Garp, esto es lo de menos –estornudo fuertemente haciendo que el chico rodara sus ojos y se dirigiera dentro de la nave, dejando al señor mirándole la espalda, tal vez no estaba tan solo, pensó.
Tuvo sus problemas en un inicio, pues el chico tenia pesadillas todas las noches, casi al punto de congelar por completo el camarote donde dormían, varias veces lo despertó en un afán de no morir congelado…siempre se disculpaba y notaba en su mirada el miedo que tenia de salirse de control, además que no dejaba de abrazar esa extraña espada, noto algo diferente en esa arma, como si reaccionara con su poder creciente, si era una fruta del diablo ¿cuál seria?.
El vicealmirante tuvo que admitir que el chico tenia bien controlado su temperamento, el cual estaba ligado a sus habilidades –Ray-san-contesto una vez que pregunto sobre quien le había enseñado a controlarlo.
-El que era tuyo-se recargo en la mesa, el niño había tomado las labores de la cocina para sorpresa del anciano repentinamente, al parecer ya estaba mejorando sus heridas, las trataba el solo…su independencia le sobrecogía completamente a un hombre despreocupado como el.
Toushiro lo miro por un momento, pero no dijo nada mas, enfocándose en su labor auto proclamada, dándole un caldo caliente al anciano que paso toda la noche de nuevo entre el frio, las pesadillas eran mas vividas y la imagen de su abuela no lo abandonaba por completo –Alguien que nos visitaba –secretamente contesto.
El anciano lo noto pero no pregunto mas, tal vez el chico con el tiempo le diría mas cosas, pero no lo presionaría, según entendió su familia era muy chica y según entendió la gente lo miraba con cierta desconfianza, tal vez por su carácter, dándole un sorbo al caldo -¡Esta muy rico!-grito para seguir comiendo.
El chico solo lo miro y se encogió de hombros, el hombre comía demasiado y con poco cuidado, pero al menos reconocía la labor hecha por el niño, quien esperaba se llevara bien con su nieto…del cual platico durante todo el camino.
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Villa Fuscia era una isla alegada de la gran línea, ahí los piratas llegaban de paso cuando partían a sus aventuras, se quedaban o simplemente hacían su vida ahí, la gente era alegre como era costumbre incluso con los desconocidos.
Ahí albergaban por el momento a los piratas del pelirrojo, Shanks, en el bar donde se encontraba se topo con un pequeño niño muy curioso y alegre que todos los días iba a pedirle ser parte de su tripulación, hasta que un día lo noto acompañado de otro mas pequeño, pero este era mas serio y frio, impresionando por completo por su pequeña complexión de la cual destacaba una espada colgada en su espalda.
El bullicio de ese bar se asilencio cuando los niños entraron, la temperatura descendió repentinamente -¡Mira Shiro-kun, este es un verdadero pirata!-Luffy dijo con animo arrastrando consigo al mas pequeño, lo había tomado de una de sus mangas, y por la cara de fastidio…fue repentinamente.
El peli blanco miro al capitán y luego suspiro –Lamento si este idiota ha sido una molestia –se inclino ante la sorpresa de todos –y yo no tengo nada que ver con tus estúpidos sueños –se cruzo de brazos fulminando a Luffy, quien solo frunció el ceño.
-¡Hey!-ofendido dijo el otro niño, pero fue golpeado en la nuca por el mas pequeño haciéndolo agacharse.
-Debes respetar a tus mayores Monkey-san –regaño para sorpresa de todos, quienes esperaban otro tipo de reacción, aunque la temperatura no subió en lo mas mínimo.
-Es el niño –susurro Benn a su capitán, quien acento rápidamente, mientras los infantes sostenían una discusión, aunque la escena era curiosa pues el peli blanco regañaba al mayor con rapidez y fluidez, como si estuviera acostumbrado al ser el mas consiente de su entorno, como un adulto responsable.
-Este es el otro pequeño que nos platicaste – interrumpió Shanks el regaño, acercándose curioso aunque noto que la mirada turquesa no lo abandono, al contrario estaba alerta, se agacho para tomar ambas cabezas, aunque la blanca era mas fría.
-Si este es el pequeño Shiro-kun –grito Luffy ajeno por completo a la temperatura, como si estuviera acostumbrado, el otro rodo los ojos y palmeo su cara en un intento de no gritar.
-Solo soy mas joven que tu Monkey-san –se cruzo de brazos ajeno a la palma aun en su cabeza –y si me disculpa, ¿podría dejar de hacer eso?-apunto la mano que aun estaba encima.
-¡Vamos niño no seas tan formal!- sonrió el pelirrojo-ademas quiero ver esa espada tuya-casi la iba a tomar pero se alejo el niño desconcertándolo.
-No la toques-con indiferencia contesto el chiquillo al dar un paso hacia atrás, alejando dicha katana de la mano adulta.
-Vamos Shiro-kun-Luffy negó con la cabeza con una mirada seria…pero el niño no dijo nada mas, Shanks ambos estaban mirándose y el capitán se pregunto si en verdad era un infante porque no cedió en lo mas mínimo, pero la palmada del otro niño lo saco de su pelea, era ridículo desde el punto de vista de cualquiera…pero eran serios, pues esos ojos eran profundos y severos.
-Claro Monkey-san-rodo los ojos –Y Akagami-san lamento esto, pero esta katana es lo único que me queda de mi hogar –apunto al otro ofendido.
Shanks ahora si estaba mas curioso por el pasado del niño, era muy diferente a Luffy y al parecer venia de otro lado, tal vez luego indagaría, coloco la mano sobre la cabeza blanca con algo de tristeza, su mirada ahora era mas suave.
-¿Podría dejar de mirarme así? –cuestiono Hitsugaya con un golpe quitando la mano adulta.
El adulto solo sonrio ahora con mas calidez –creo que es muy diferente a ti Luffy- miro al otro.
-Si-Monkey comento al poner sus manos en las caderas con una sonrisa mas amplia –pasando por alto el frio te puedes acostumbrar-
-¿Qué quisiste decir con eso Monkey-san?-severo comento el niño, la tripulación se sorprendió de poder ver su respiración.
-Que a veces eres muy frio Shiro-kun –Luffy tomo por el cuello al niño saltando –porque no somos piratas, si Shanks nos acepta podemos ver el mundo-
-Seriamos un estorbo lo sabes…verdad –gruño Hitsugaya, Shanks observaba con tranquilidad la escena, todos estaban incomodos por la temperatura pero al parecer Luffy era totalmente ajeno en su inocencia infantil, tal vez el chico no se daba cuenta de esta habilidad …¿fruta del diablo?.
-¿Cuántos años tienes pequeño?-pidió después de varias discusiones entre ambos niños, por como se comportaba y daba sus argumentos tal vez solo era un enano, tomando de nuevo ese cabello blanco.
-Tengo 4 años –gruño casi en susurro, como si su edad no quisiera compartir, esto hizo que Shanks soltara una carcajada revolviendo el blanco cabello –Deje de hacer eso –ordeno fríamente.
-Vamos si eres un pequeño – Shanks no paro de juguetear con el cabello del infante, Luffy se reía a carcajadas y el resto de la tripulación hizo lo mismo, el ambiente era totalmente frio pero ya no le importaba, al parecer ya acostumbrados…aunque unos temblaban, Benn a diferencia de su capitán tomo nota sobre el cuidado del niño.
-Shanks-san debería dejar al niño en paz –Makino salía en defensa del pequeño –a el no le gusta que hagan eso –aconsejo.
-Pero si su cabello es suave –Akagami miro en puchero haciendo que el peliblanco rodara los ojos y chistara los dientes.
-Estoy rodeado de idiotas –susurro en un esfuerzo por zafarse de esa mano, pero era fuerte el agarre que termino siendo cargado por el pelirrojo.
-Eres tan ligero y pequeño–dijo al dar una voltereta, pero una patada lo hizo caer de espalda y aunque todos se sorprendieron por esta acción, el pelirrojo no abandono su sonrisa, al contrario estiro los cachetes del infante.
-En verdad eres molesto- Hitsugaya se quejo ahora tratando de quitar esas manos de sus cachetes, Luffy castañeaba fuertemente pero no dejaba de reír igual que el capitán a pesar del mal humor de la victima.
-¡Vamos Shiro-kun a poco no es sorprendente!-grito Luffy, abrazando al niño mas pequeño, por centímetros era mas grande…Shanks soltó al niño al ver la acción tosca de su enano compañero, los niños pueden ser entretenidos a pesar de ser frio como lo era el peli blanco, su mirada se mostro seria un poco, pero nada que los demás notaran…al menos no los mas pequeños, mas a la katana que ya portaba como si fuera parte de el.
-No lo es –se acomodo la ropa fastidiado –bueno Monkey-san si solo me hablabas para eso me retiro –gruño para dirigirse hacia la puerta –Solo trata de no hacer nada imprudente y esta a tiempo para la cena…no te esperare –ordeno para salir dejando a una tripulación curiosa.
-¿qué quiso decir con cena? –se acerco Shanks para palmear la cabeza de Luffy, este sonreía hacia la puerta.
-El se encarga de las labores del hogar mientras Makino esta aquí –se cruzo de brazos para encarar al mayor –Quiero ser un pirata-cambio de tema sorprendiendo a todos.
-Eso es demasiado para un niño –susurro uno regordete en el fondo junto a un pelirrubio que se mantuvo alejada de la situación, mientras su Capitán miraba al espacio.
-No es normal-Yasopp comento con un suspiro, Benn solo dio un largo suspiro, mientras Makino traía mas bebidas.
-¡Quiero ser un pirata!-volvió Luffy con su gesto ajeno a cualquier duda de los adultos, haciendo sonreír de nuevo al pelirrojo.
-Vamos –Shanks se sentó de nuevo dispuesto a seguir con esa fiesta, algo intrigado por el peliblanco y su actitud centrada, miro a Luffy quien ahora jugueteaba con Benn y Yasopp, entreteniéndose constantemente y divagando un poco en sus pensamientos.
-Es un niño interesante –Benn se acerco al notar que ahora Luffy seguía jugando con el resto, haciendo comentarios de cuando sea pirata en un futuro entre carcajadas del resto, Makino lo miraba entretenido y no comento nada.
-Garp-san lo trajo hace unos meses –explico la mujer desde la barra, mirando la escena del peli negro –lo trajo de Sabaody –sorprendió tanto a Shanks y Benn esta aclaración.
-Entonces es de esa isla –El pelirrojo frunció el ceño de manera oscura por primera vez en ese tiempo-tuvo que ver con lo que paso durante ese tiempo…donde el archipiélago se volvió blanco –cuestiono, la mujer solo sonrió tristemente.
-El no ha hablado respecto a ese incidente, pero Garp-san me confirmo que fue el culpable… no fue ningún almirante –Makino siguió la platica mientras serbia mas para Benn y el capitán.
-¿No es una fruta del diablo? –Benn encendía su cigarro, la mujer se encogió de hombros..
-No se lo que sea –dijo –pero es triste ese niño –
-¿Y la katana? –cuestiono de nuevo el pelirrojo, esa arma era difícil de encontrar solo la pudo observar de lejos pero la manera en que estaba hecha daba a denotar que era valiosa, ¿de donde la habría sacado?.
-La trajo consigo, es muy receloso de que nadie la toque, no se porque –Makino recordó la primera vez que lo vio, también se la quiso quitar porque se veía pesada, pero este solo se alejo –es un alivio que Luffy pudiera hacerlo abrirse un poco, aunque sigue siendo un denso-
-Luffy es un caso muy especial –Shanks dijo con orgullo.
-¡Shanks quiero unirme a tu tripulación! –el grito de Luffy los saco de su platica seria, para volver a su estado de animo habitual…palmeando la cabeza del pelinegro y uniéndose a la fiesta con el resto, Benn por su parte se quedo en silencio, platicando detalles con Makino, tal vez el niño era mas de lo que pensaban.
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El tiempo paso en ese tranquilo lugar, Shanks de vez en cuando pasaba a la casa de los niños después de cierto incidente con Toushiro, al encontrarlo en el mercado, por alguna razón termino ayudando a hacer la cena…sorprendiendo a la tripulación.
-Deberías darme ese secreto –Benn susurro una noche al pequeño peliblanco, quien arqueo la ceja con duda respecto a ese comentario –Olvídalo –revolvió el cabello del infante molesto por la acción.
Toushiro solo rodo los ojos ante la insistencia de tomar su cabeza, pues en general la tripulación hacia lo mismo que su capitán, aunque Benn era un poco mas serio.
El adulto miro la escena delante de el con algo de diversión, encendió su cigarrillo y noto algo en el rostro del chico por primera vez que lo conoció, pues algo de cansancio se reflejo –Chico ¿Estas bien? –cuestiono esa noche, el niño lo miro y asentó la cabeza sin decir mas e ir a ayudar a Shanks y Luffy, quienes terminaron tirando unas frutas de la bolsa.
Beckman miro la espalda infantil con preocupación, el chico era muy callado para su propio bien, tal vez esto lo tendría que compartir con Makino en el bar.
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Makino estaba algo preocupada por el estado del niño desde que Beckman le comento lo sucedido la noche anterior, ahora se notaba un poco las sombras debajo de sus ojos –¿Me puedo quedar si estas tan cansado?-toco la frente infantil, mientras Luffy miraba preocupado.
-Yo me quedare contigo –insistió el otro niño, pero fue negado por el peliblanco.
-Seria molesto tenerte alrededor por ahora –gruño Hitsugaya –además serias mas útil entreteniendo a Akagami-san, después de lo de ayer no los quiero cerca de las bolsas, ni de la cocina –rodo los ojos.
-Pero yo quería cocinar como lo haces tu-insistió Monkey con un puchero –tu eres mas pequeño y puedes hacerlo, ¿por qué yo no? –
-Eres un peligro en la cocina –dijo simplemente.
-Puedo cerrar el bar por hoy –Makino pensó un rato mientras ambos infantes intercambiaban una discusión sobre el incidente de esa noche, se agacho para tocar de nuevo la frente y la suya, estaba fría.
-No puedes hacerlo –quito la mano de la mujer con un largo suspiro –se que hacer, además Akagami-san seria peor que un dolor de cabeza si cierras el bar por mi –rodo los ojos, no imaginando tener otra vez en su hogar a ese molesto pelirrojo y a los mas allegados de la tripulación le cansaban mas que un dolor de cabeza.
Makino sonrió –si sabes lo que haces esta bien –suspiro en derrota, en ese aspecto era muy demandante el niño, manteniendo su independencia y no pidiendo ayuda en las cosas que en realidad estaba pasando, tal vez pasaría a decirle al doctor que venga a visitarlo.
Toushiro miro como la mujer se iba junto a un Luffy que saco su lengua en enojo por la discusión, cerro la puerta dispuesto a ponerse a hacer sus labores…pero se detuvo –Maestro –una voz lo llamo con preocupación, cuando todo se volvió negro.
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Sombras negras se abalanzaban hacia el, hombres y mujeres de apariencia extraña con túnicas oscuras le llamaban, lo buscaban…pero ¿por qué? - ¿Quiénes son ellos? –se cuestiono, mientras el hielo se extendía de su pequeña figura.
-Capitán Hitsugaya –gritaban las voces –Maestro –todo se volvió azul mientras la gente lo rodeaba, diferentes rostros que sabia que conocía, pero por alguna razón no sabia sus nombres, los había visto antes….pero dolía…dolía su corazón conforme cada rostro aparecía ¿por qué?
-¿Quién eres? ¿qué soy? –miro de nuevo esos rostros que eran lastimosos, agobiantes y llenos de nostalgia, sus lagrimas corrían y su cabeza dolía…cuando todo hizo un estruendo y el azul se extendió, congelando todo a su paso.
Un gran dragón apareció frente…mientras las demás figuras desaparecían –He mantenido en marguen su poder mi maestro, durante este tiempo ha estado creciendo y lo ha suprimido con éxito, pero su cuerpo no lo soportara tanto –explico el dragón ante la mirada inquietante del ser.
-¿Quién eres tu? –cuestiono pero su corazón en el fondo sabia que lo conocía, a pesar de lo monstruoso y hermoso que se veía, no le temía…pero quería saber, ¿por qué el era diferente a los demás? ¿qué era en realidad ese regalo de su abuela?
-Usted sabe quien soy –el dragón contesto para darle una ultima mirada –disfrute esta nueva oportunidad amo, eh tardado tanto en despertar y lograr pasar a este lado por completo–la figura desaparecía siendo absorbida en la katana –No lo olvide, están vigilándolo –
-Shiro –una voz angustiada se escucho detrás de el, el niño solo miro la espada por un rato, cuando unas manos calidad lo tomaron sorprendiéndolo, cuando abrió los ojos noto el rostro de un Shanks preocupado -¡Maldición Shiro, no vuelvas a hacer esto!-gruño para cargarlo.
El peliblanco lo miro en silencio, su cabeza dolía pero era soportable, su corazón se apretó constantemente ante la idea que perdió algo grande y no poder recordarlo, tenia miedo de saber que era en realidad …si era un humano como los demas, como Luffy, Shanks, Makino todos ellos..se aferro a esa camisa que estaba cerca de el, mirando al adulto que estaba asustado.
Ojos turquesa se mostraron titubeantes…mientras sus lagrimas corrian con suavidad en ese rostro, tenia miedo de si mismo, de descubrir lo que podía ser si dejaba salir todo su potencial, de matar a todos una noche de pesadillas, pero la calidez de un abrazo lo sacaron de su estupor, sorprendiéndolo, relajándolo.
-Todo estará bien –escucho los susurros del mayor calmándolo un poco, mas al sentirse protegido por ese hombre molesto, sintió el calor del pecho, adormeciéndolo de nuevo, tal vez descansaría otro rato –estoy aquí…todo estará bien, estas a salvo –todo se volvió negro y no supo mas de si, confiando en la seguridad de ese capitán.
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Shanks había ido a toda prisa al hogar de los niños, cuando sintió un creciente frio y las nubes se habían escondido en el cielo, esa sensación provenía de alguien en especial y con su Haki de observación noto la anomalía, escucho de Makino que el chico no se encontraba muy bien, y antes de salir corriendo ordeno que no lo siguieran, aunque Luffy tuvo que ser retenido por Benn, ante su insistencia.
La casa se veía bien por fuera, pero al asomarse por la ventanas estas tenían escarcha, rompiendo la puerta para entrar…viendo al niño tirado en el suelo, lo trato de despertar pero la fiebre era fuerte –¡Shiro! –sus manos se congelaban conforme mas mantenía al infante, pero el no era débil…no era un hombre cualquiera-¡Maldición Shiro, no vuelvas a hacer esto!-dijo en frustración aun tratándolo de despertar.
Fue cuando repentinamente esos ojos turquesa lo miraron, Shanks noto el miedo en sus ojos, como cualquier niño ante algo que no comprende, se aferro a su camisa en un intento de mitigar aquello que lo agobiaba, tan chico y con esa mirada…revelando en verdad su edad, su infancia, hizo lo único que se le vino a la mente, apretándolo contra su pecho.
Susurro unas palabras para calmarlo, con la esperanza de estabilizarlo…lográndolo para su sorpresa…pues quedo profundamente dormido, pero a diferencia de antes ahora con una serenidad, su rostro inconsciente dejaba ver sus rasgos infantiles…sintiéndose aliviado de que tuviera gestos inocentes aun.
Lo llevo de nuevo dentro de la recamara, el frio estaba cediendo continuamente, fue cuando noto la katana junto a su cama, tenia curiosidad e iba a tomarla pero algo lo detuvo, frunció el ceño… -Creo que es solo tuya –sonrió al mirar al niño tranquilo y acariciar su cabeza, tantas dudas que crecían conforme ese día termino ¿qué pasara si el niño pierde el control? Se pregunto…dudando un poco de la decisión de cierto viejo en traerlo aquí…tal vez esperaba que tuviera una infancia normal.
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Shanks estaba emocionado –Miren el pequeño Shiro ha venid a verme–cargo al niño que iba llegando después de varios días convaleciente por su fiebre, que lo tomo por sorpresa, Luffy carcajeaba.
-Te dije Shiro-kun que Shanks estaría feliz de verte –Luffy miraba con agrado como el niño era enviado a volar una y otra vez, por un adulto divertido….el clima bajo repentinamente, pero ya no importaba.
-Vamos Capitán…no quiero resfriarme –se burlo Yasopp emocionado, codeando a otro de sus compañeros.
-Es cierto…se va recuperando como para que se enferme de nuevo –Benn suspiro con una sonrisa aun manteniéndola en su rostro, pues el susodicho caía a la patada en el rostro por parte del niño que se fastidio.
-No te emociones demasiado Akagami-san –gruño esto ultimo el infante, mirando a dagas al hombre mayor que no se inmuto.
-Pero es que es emocionante que vengas a verte, tu siempre tan frio-palmeo la cabeza el capitán –eras un niño muy mono –se agacho ahora para agarrar los cachetes, sintiendo una brisa que ya no importo.
-¡Ves Shiro-kun todo esta bien!–Luffy saltaba emocionado, el niño no dijo nada mas…solo gruñendo "molestos idiotas" desde lo mas bajo, empezándose a preguntar si fue buena idea el presentarse ahí.
A partir de ese entonces todos los días al menos una vez iba a visitar con Luffy el bar, antes de ir de compras o arrastras al primero a que lo ayudara algunas veces, recordando los regaños de los adultos para que no cargara con un peso excesivo y no se esforzara.
Una tarde Benn Beckman acompaño al niño al notar que su capitán no estaba del todo dispuesto, pues ya estaba algo bebido y empezaba a cargar a Toushiro, la ultima vez que lo hizo congelo casi por completo a su capitán dejando solo la cabeza intacta, asuntándolos por la gravedad del asunto, aunque Luffy soltó una carcajada al igual que Shanks, el ambiente se aligero.
Así que era mejor sacarlo del lugar antes de que empezara a hacer algo imprudente que terminaría de nuevo con su capitán resfriado todo un día, se lo merecía tenia que admitirlo…pero aun recordaba las quejas de su líder durante su convalecencia, además que no pudo beber.
-Gracias Beckman-san –dijo el pequeño al dejar las bolsas sobre la mesa dispuesto a continuar con su labor.
-No deberías esforzarte demasiado en esto –continuo al sacar algunas cosas y dejarlas a un lado, el chico sabia donde exactamente estaban las cosas, este se había acercado con un banco…era una pequeña criatura aun y hacia todo lo posible para ayudar.
-Lo se-rodo los ojos el peliblanco niño –pero no es como si alguien mas lo hiciera, además no es una molestia –
-¿quién te enseño a ser tan responsable? –cuestionó Benn al ver como el chico fregaba unas verduras, el se había sentado…el ambiente era cómodo.
-Mi abuela siempre me dijo que no siempre seria ayudado, que tendría que aprender a hacer las cosas por mi mismo…al menos desde que recuerdo –continuo casual, Benn arqueo la ceja ante la respuesta…a pesar de la densidad algo había cambiado en el niño, tal vez se sentía mas en confianza.
-¿Tu abuela?-sonrió el mayor –debe ser una señora muy trabajadora –
-Debió ser –corrigió el niño en pasado, un silencio incomodo se instalo en ambos.
-¿Quieres hablar de esto? –cuestiono el segundo al mando.
-No es algo de lo que se deban preocupar, mi pasado es mío –regreso a su densidad –pero ella era una persona muy buena conmigo, a pesar de todo lo que era cargar conmigo –el niño se detuvo –además de Ray-san –
-¿Ray-san? –Beckman reconocía ese nombre, pero era demasiada casualidad…tal vez era otra persona, pero recordando que viene de Sabaody…¿seria cierto?, arqueo su ceja, tal vez el le enseño a tener algo de control a ese poder desmedido.
Un silencio calmado se instalo mientras Benn miraba como se movía el niño, tan casual y a gusto como un adulto a cargo de un hogar, le causaba algo de risa ver a un pequeño ser de un lado a otro arrastrando el banco hacia donde fuera -¿Por qué me miras así? –el niño lo saco de sus pensamientos.
-Es solo que tengo curiosidad de todo lo que haces –se levanto el mayor –te dejare solo, al parecer seré un estorbo si me quedo aquí-
-Esta bien, supongo…además Akagami-san estaba muy tomado, creo que seria lo mejor que fueras a evitar que hiciera algo absurdo-se encogió de hombros.
-Mi capitán le agradas sabes –continuo Benn.
-El no me desagrada –el niño no lo encaro, el mayor solo cerro la puerta analizando lo dicho, tal vez luego lo discutiría con su líder.
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Esa semana había sido complicada para el pobre de Toushiro, al menos eso noto Benn al ver lo fastidiado de los ojos del siempre maduro niño –No te preocupes demasiado –tomo la palabra al ver que la temperatura descendió rápidamente, pues no solo Luffy había comida una fruta del diablo, si no que casi se saca un ojo por demostrar que era valiente.
Se masajeo el puente de la nariz, el niño se veía amenazante con la katana en la espalda, todos se habían acostumbrado a verlo por ahí con esa larga arma, pero ahora Benn colocaba su mano en la cabeza en un intento de no congelar todo a su alrededor…aunque Luffy estaba ajeno a la preocupación, aun reclamando su lugar en el barco.
-En serio no deja de sorprenderme ese niño –Hitsugaya suspiro tratando de no enojarse.
-¡Tu también eres un niño! –grito Luffy al ser estirado del cachete por Shanks, al descubrir que tipo de habilidad tenia el capitán opto por ver que tanto se estiraba.
-Pero yo no trate de sacarme un ojo ni mucho menos comer cosas que no son mías –respiro profundo tratando de no alzar la voz, pasando su mano en la cara, Benn sonreía al notar la pelea interna del chico, su mano se sacudió aun mas en su cabeza, a diferencia de su capitán la de el no era tan molesta al parecer.
-No te preocupes, solo hay que tener en cuenta las debilidades de la fruta del diablo –Beckman apoyo –todo ira bien –se encogió de hombros.
-Bien al menos hay un adulto confiable aquí –se encogió de hombros el chico, toda la tripulación grito ofendida, inclusive Shanks que ahora estaba sentado con un Luffy furioso por ser el juguete del adulto –Bien me voy, esta noche hare estofado de carne –se giro.
-Solo ten cuidado Shiro-kun eh escuchado que hay unos maleantes que llegaron ayer –Makino advirtió ante el asentamiento de cabeza del chico peli blanco, retirándose dispuesto a hacer sus vueltas, no sin antes toparse con una gente que le daba mala espina.
-¡Hey mocoso! –grito uno de ellos –esa espada se ve costosa –lo rodearon pero quedaron en silencio al notar la mirada del niño, silencio y un frio corrió por sus cuerpos, tenia demasiadas cosas que hacer, solo esperaba que no se dirigieran al bar.
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-¡Maestro úseme! –la voz resonaba desde el fondo de su conciencia, esa voz que antes era solo en pesadillas, pero ahora era tan real, la conocía tan bien por alguna razón como si siempre estuviera ahí aun si no estaba soñando.
No tuvo mas remedio al ver la escena delante de el, Shanks había logrado librarse de un monstros marino, pero otro será demasiado…las palabras brotaron de su pequeña boca como un rio fluido y fuerte con palabras que se escuchaban extranjeras –Gobierna sobre los cielos helados –el cielo se oscureció y el frio apareció en villa Fuscia.
Ignoro el miedo que crecía en su interior conforme la energía broto de si mismo centrándose en la espada, pero no era tiempo de pensar en eso, pues la vida de esta gente estaba en peligro…no podía dejarlo pasar, no a ellos –Espada del hielo al vacío-de su espada esta laquitas de hielo aparecieron, apuntando certeramente a la bestia que iba a contraatacar a Shanks y Luffy, que estaban en el mar.
La bestia gruño al ser herida, desapareciendo en el mar para sorpresa de todos los presentes –Lo logre –susurro cansado por el peso de un poder que su cuerpo no estaba acostumbrado, cayendo inconsciente al momento…en aquel bosque, mientras la luz se asomaba en el cielo.
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Luffy había sido atrapado por la pandilla que humillo antes, el no quería perder su tiempo en cosas que no eran importantes, no quería arruinar el momento de paz que habían logrado obtener en ese tiempo, era un alivio que el otro niño se fue antes de que llegaran, pero Luffy presencio todo.
-Si ustedes no hacen algo…yo lo hare –grito frustrado el niño para salir corriendo Shanks le dijo que no importaba en realidad, pero este se fue corriendo, no esperaban que en verdad hiciera algo…era alguien que no media el grado de peligro o era el entrenamiento que según platico, su abuelo lo obligo.
La gota que derramo el vaso fue ver herido al pequeño en manos de los maleantes, su furia estaba siendo contenida para no hacerle daño al niño que fue raptado por el líder, no esperando que lo lanzara al mar…Shanks fue a salvarlo, pero la suerte no estaba de su lado cuando un rey del mar apareció, comiéndose la nave completa de los enemigos y de paso notar su presencia.
-Shanks –Luffy lloraba al mirarlo, este trato de calmarlo apretándolo a su pecho, era un rostro que no quería que el pequeño mirara…con su Haki logro espantarlo, pero a cambio su mano fue tomada…dolió, tenia que admitirlo, pero no suficiente como para ver a una promesa terminar así.
-Todo esta bien –dijo con alegría mostrando un rostro tranquilo, aún en el mar el niño se empezó a disculpar, pero pareciera cosa del destino cuando otra criatura emergió del mar tomándolo por sorpresa, apretó a Luffy aun sollozando.
Pero el cielo se torno negro repentinamente, el viento enfrió y sintió esa presencia, aquella que yacía en la espada miraría a su alrededor, pero la bestia iba a cargar a ellos, tendría que usar de nuevo esa técnica, pero cual fue su sorpresa…la bestia se sacudió con un grito de dolor que lastimo sus tímpanos.
-¿Hielo?-dijo finalmente al notar que era lo que se encajaba en la bestia antes de desaparecer, era demasiada burla que dos bestias hayan aparecido exactamente en ese lugar, suspiro tranquilo olvidando por un momento la duda de que seria, pero sabia quien era el culpable –Ves Luffy no nos fue tan mal –comento.
-Pero tu brazo –el niño miro horrorizado el hueco que tenia, este solo lo miro y se encogió de hombros.
-Un pequeño precio que tuve que pagar, pero valió la pena –dijo finalmente para tapar al niño y abrazarlo, cerro los ojos para buscar al otro pequeño, al parecer se había dado cuenta del problema en que Luffy se metió, pero luego de llegar a la orilla con facilidad a pesar de su miembro faltantes, frunció el ceño al mirar algún punto –Benn quédate con Luffy –este lo miro sorprendido –aquí espérenme –miro a Makino.
Benn entendió de inmediato mientras Shanks se apartaba de ellos, aunque cuando ya no estuvo a la vista corrió a uno acantilado no muy lejos de ahí, cuando llego suspiro en negación –en verdad te gusta esforzarte –se agacho para recoger la figura del niño que se aferraba a la katana ahora desenfundada, la miro y comprendió.
-Este lugar esta lleno de promesas –lo cargo con tranquilidad y coloco la espada a su costado, con el comentario de no quedársela el mismo, no era que temiera a un objeto inanimado, pero recordando lo salvaje que era cuando apareció, no quería llegar a ser un cubo de hielo por buena gente.
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Un año había terminado tan rápido, el fuerza roja partía imponente de aquella isla que le dio cobijo durante ese tiempo, pero la mirada de cierto capitán no se apartaba con severidad, recordando como le tomo aprecio a ambos niños, uno de los cuales le dejo su preciado sombrero, con la promesa de verse en un futuro.
-Fue una buena decisión Shanks, no deberías preocuparte demasiado –Benn era el mas calmado de ambos pero este solo sonrió un poco, acariciando el lugar donde alguna vez estuvo un brazo.
-Hicimos una promesa y se que lo cumplirán –sonrió recordando tanto a Luffy como Toushiro, el primero con la nueva era pirata, aunque el ultimo le preocupaba –Crees que Shiro se vuelva almirante –negó con la cabeza.
-Tu fuiste el que lo orillaste a tener un sueño –Benn sonrió para darle unas palmadas al pelirrojo –pero no te esperabas que decidiera ir tras los pasos de Garp –
-¡Como iba a saber que Aokiji lo salvo y que Garp lo acogió!-grito para los cielos en un puchero infantil –aunque espero que Luffy logre influenciarlo un poco, es demasiado maduro para su propio bien –suspiro en derrota.
-No lo creo…pero ten fe –Benn se burlo de su líder dándole palmadas en la espalda –además es algo inesperado por parte de la marina, había escuchado de Aokiji era diferente al resto de los almirantes, pero no espere que tanto-
-Lo se, pero aun así creo que será un futuro entretenido-sonrió para si mismo con calma, en su mente las imágenes de Luffy gritando que tendría una mejor tripulación y seria el rey de los piratas lo inspiraba –aunque le falto entusiasmo a Shiro en su promesa –a diferencia del otro solo comento que seria almirante en un futuro, para sorpresa de todos.
-Antes di que dijo algo al respecto a como lo acosaste estos últimos días –Suspiro Benn recordando como el niño opto por esconderse detrás de el, cuando Shanks estaba tan borracho que lo quería obligar a jugar como Luffy, el ultimo estaba bailando encima de la mesa al compas de los aplausos.
-Pero es que le falta emoción de un niño –bajo la boca desanimado, pero luego lo suplanto con una sonrisa-sus pesadillas no lo perseguían mucho en los últimos días –
Benn arqueo la ceja, su capitán era muy intuitivo en algunos aspectos, mas respecto a la katana –aun no comprendo porque el niño tienen esa habilidad monstruosa –encendió su cigarrillo recordando el día que su líder perdió el brazo.
-Yo tampoco y no se si lo sepamos en un futuro –se encogió de hombros, tenia un mal presentimiento respecto a eso, dio un ultimo suspiro para mirar el hueco donde su brazo había estado, ¿qué hubiera sucedido sin la intervención de Hitsugaya?, se pregunto con un ligero escalofríos -¡por qué un marine!-se quejo causando una carcajada de Benn, quien solo negó con la cabeza para seguir los preparativos…
XXXXX
Dadan gruño por lo bajo al ver a otro infante llegar con Makino, era un alivio que viniera con ella pues traía consigo de la mejor bebida de su bar, pero al otro –Tu que quieres aquí mocoso de mierda –gruño con su peor cara, era una bandida después de todo no una niñera.
El pequeño la miro, pero se quedo en shock por su gesto, era frio y esos ojos turquesa no eran tan fácil de olvidar –Mi nombre es Toushiro Hitsugaya –el pequeño comento severamente, a pesar de lo enano que pudiera ser, se denotaba el mando.
-No me importa quien seas…que haces aquí –se recupero de estupor inicial gruñendo por lo bajo, y golpeando con fuerza el suelo.
-Soy amigo de Monkey-san –se cruzo de brazos el niño, con la katana en la espalda se veía amenazador a pesar de su edad.
-¿quién demonios es ese Monkey-san?-fruncio el ceño.
-Es Luffy-kun –interrumpio la mujer –eh dejado la bebida en la esquina-sonrio suavemente, se agacho hacia el pequeño –en verdad quieres quedarte aquí –cuestiono ignorando a la señora.
-No quiero mas estorbos…suficiente tengo con los que trago Garp-cruzo los brazos con la boca torcida.
-Monkey oji-san no quiso traerme por el mismo –recordo el peliblanco la escena después de que Shanks se fue, al parecer no le gusto el sueño de Luffy trayéndolo a una parte desconocida, si no fuera por Makino tal vez tardaría mas en encontrarlo…aunque ya habían pasado 15 dias, miro a su alrededor -¿Y Monkey-san?-cuestiono de nuevo.
-El mocoso se salio detrás de Ace –informo ante la insistente mirada del infante –no se, tal vez murió –
Toshiro la miro un rato para luego mirar a Makino –creo que será buena idea que me quede Makino-san, esta mujer no es muy apta para el cuidado de Monkey-san-se inclino en agradecimiento.
-¡Que dijiste mocoso de mierda!-grito la mujer al dar un puñetazo, pero el niño solo se hizo a un lado para esquivarlo….sus ojos se ampliaron ante la incidencia y Makino solo sonrió.
-No debería hacer eso señora, se puede lastimar –suspiro el peli blanco –si me disculpan, creo que ire a buscar a Monkey-san…-tomo una pequeña bolsa consigo y salió por la puerta, no sin antes despedirse de la persona que la trajo.
-El es un niño fuera de lo común Dadan-san, vino por su propia cuenta cuando Garp-san no lo quiso traer con Luffy-kun –explico.
-¡Porque yo!-la señora se sentó en el suelo frustrada-primero trae a Ace, luego a su estúpido nieto y ahora otro niño que ni siquiera vino con el –Makino se rio finalmente para despedirse, quería ver a Luffy pero tal vez no seria buena la ocasión, dejándolo a cargo de Hitsugaya, podría cuidarse solo.
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El niño había sorprendido a Dadan al regresar a las pocas horas, no dijo madamas y solo se acomodo, por primera vez en mucho tiempo todos los bandido s sintieron frio, el niño tenia algunas heridas pero no se quejo.
-¡Despierta mocoso!-grito para entrar a ese cuarto y para sorpresa no estaba, frunció el ceño –lo mas seguro es que tuvo miedo y se fue –esperaba que eso sucediera, a las pocas horas el niño trajo consigo algo de comida, verduras y algo mas y empezó a cocinar.
No dijo nada…solo se dedico a lo suyo, comió un poco y dejo el resto para retirarse de nuevo hacia el bosque, lo siguientes días no apareció al igual que el resto de los mocosos, que no llegaron…ella no se preocupaba por ellos, solo diría que fue un accidente, ¿tal vez?
Una noche llego Ace y trajo consigo comida, no se molesto en hablar al contrario también se concentro en lo suyo –Mocosos molestos –ruño la mujer un pedazo de carne que le era dada por Ace.
Fue cuando Luffy entro a la casa, tenia la camisa roída y unas heridas, no dijo nada mas se acomodo y cayo dormido.
-Falta un niño …¿no?-unos de los bandidos comento casual, la señora encogió de hombros….ese día hizo mucho frio, entumeciendo la montaña por completo, luego el sol salió esa mañana como si nada hubiera pasado.
-¡Shiro-kun!-el grito del niño levanto a todos asustándolos, Dadan iba a ir a enfrentársele cuando vio al mas pequeño de todos. Tenia heridas tratadas pero su mirada era la misma que antes, su katana estaba en el mismo lugar a pesar de lo desastroso que se veía.
-Vaya…por fin apareces –con indiferencia comento.
-¿Cuándo llegaste?-los niños ignoraban a los adultos que iban entrando.
-Hace días –contesto escuetamente, mientras sacaba algunos cuchillos y traía un jabalí que estaba en la puerta.
-Harás estofado de jabalí –grito alegre el pelinegro, también se veía en mal estado pero no le importaba.
-Claro…lo atrape antes de llegar, este bosque es interesante-se encogió de hombros –por cierto ten…ponte esto en tus heridas –lanzo unas cosas a Luffy.
-Gracias Shiro-kun –grito el otro.
-Estúpidos mocosos dejen de hacer ruido –grito Dadan al dar unos pasos pesados a su dirección.
-Mira es la vieja de la montaña –comento casual Luffy haciéndola enojar, iba a dar un golpe pero el niño era quitado de su camino.
-Se llama Dadan-san Monkey-san –negó con la cabeza el peliblanco –es amiga de Monkey oji-san –
-Si lo se…el viejo me lanzo aquí –lloro un poco Luffy al recordar lo tedioso que fue el camino hace tiempo.
-Eso te pasa por retarlo –suspiro el peliblanco, mientras cortaba con maestría una verduras salvajes que encontró –la comida estará en un momento…si quieres ir a arreglarte o cambiar de ropa –ordeno.
-Siempre tan mandón –se quejo Luffy al dirigirse al cuarto -¡Ace!-grito en saludo.
-Quítate mocoso –lanzo a Luffy, la temperatura descendió y sintieron frio.
-Ya no estoy molesto…quiero ser tu amigo –Continuo Luffy ajeno a la temperatura aun en el suelo –Mira el es Shiro-kun es mi amigo también…y el puede hacer que todos tengan frio –presento al peliblanco quien solo lo fulmino con la mirada, todos lo miraron en shock mientras sus bocas se abrían por esa novedad.
-Es un monstruo –miro con indiferencia el de pecas, pero el chico no se molesto tan siquiera, se encogió de hombros y siguió con lo suyo.
-No le digas así Ace –grito Luffy enojado, pero luego recordó algunas cosas de Shanks y se cayo –El es mi amigo y quiero que tu también lo seas –hizo un puchero, el de pecas solo giro molesto y salió por la puerta, siendo seguido por Luffy.
Toushiro lo miro por un momento pero no hizo ningún comentario, esperando paciente que la comida terminara de hacerse ante la mirada de Dadan y el resto.
-Estos malditos mocosos me sacaran de quicio –gruño para pasar su mano sobre el cabello, al parecer no eran niños normales.
-será mejor que coman-el niño dijo finalmente a todo el mundo, Dadan le brillaron los ojos por primera vez que trajeron al bastardo de Ace.
-al menos es decente- pensó cuando se sentó y el chico se había retirado con unas porciones, lo más seguro es que le llevaba a Luffy, unas lágrimas corrían por sus mejillas al sentir el sabor…. Tal vez no estaba todo perdido.
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Ace le caía mal el niño de cabello blanco a diferencia de Luffy, este tenia una mirada de muerte fría ajena, además que su esencia era congelada, en todos esos meses que estuvieron solo el chico de cabello negro se había esforzado en tratar de hacerse su amigo.
Ahora Luffy estaba siendo golpeado para revelar la ubicación de Ace…solo sintieron un frio pasando por encima de ellos para revelar al mas pequeño de los niños haciéndole frente a los maleantes.
-Déjenlo-gravemente comento el infante ante la mirada incrédula del resto que empezaron a burlarse del tamaño del niño.
Ace miro a Sabo no concibiendo lo que observaban, en verdad que el chico estaba ahí…¿desde cuando? –Oy Ace…¿el niño estaba aquí todo este tiempo? –cuestiono intrigado el niño del gorro negro.
-No lo se…pensé que siempre se quedaba con Dadan –frunció el ceño, pero su discusión fue cortada cuando ambas bocas cayeron al suelo de sorpresa, mientras sus ojos salían por el shock.
Ahí tirado estaban dos de los hombres que tenían amarrado a Luffy, este solo se quedo mirando entre patadas mientras sus lagrimas corrían por su rostro-¡Dejen a Shiro-kun!-grito desesperado al notar que aun en esfuerzo era superado, siendo golpeado repetidamente, aunque algunos golpes si regreso, eran mas los que le atinaban.
-¡Estúpido mocoso!-gruño uno de los que fue golpeado, la espada del niño había caído de sus manos…era la que utilizo para darle en la cara, notaron como el pequeño a pesar de su estatura le hizo frente a los mas grandes, pero no logro alcanzar a bloquear a tiempo el ataque que le dio de lleno en el estomago, lanzándolo a un árbol cercano.
-¿Qué debemos hacer? –cuestiono Sabo al ver como el pequeño era golpeado, pero Ace miraba el rostro del niño…era dura y sin expresión, fue cuando noto algo …sus respiraciones eran notadas.
-¿Frio?-cuestiono un poco aturdido, fue cuando recordó las palabras de Luffy cuando los presento, no le había prestado atención antes por la falta de interés y el hecho que con solo verlo su mirada le hacia enojar, siempre serio y frio…esos ojos que le daban miedo, fue cuando algo broto en su interior tomando lo que traía en mano para lanzarse hacia los malhechores, Sabo lo entendió y siguió…los dos juntos yendo a la refriega.
Ace y Sabo golpearon con fuerza y habilidad a los adultos que dejaron de golpear al pequeño, este los miro con frialdad pero se levanto de inmediato tomando su katana enfundada que estaba en el suelo, Ace noto que a pesar de los golpes se veía decidido a continuar.
Ahí los tres niños se encargaron de liberar a Luffy, y a pesar de no medir las consecuencias se volvieron blanco de un pirata famoso que estaba estacionado en esa isla -¡Porque no dijiste nuestra ubicación!-grito enojado Ace al ver como era curado Luffy por Toushiro.
-Porque si les decía donde estaban no serian mis amigos –continuo mientras las lagrimas y mocos corrían por su cara.
-Y es eso importante para ti…-frunció el ceño Ace con los brazos cruzados, aun manteniendo su voz fuerte.
-Claro…yo quiero ser su amigo –grito Luffy, haciendo suspirar a Toushiro –ustedes quieren ser pirata como yo –trago grueso, ante la mirada exasperada del mayor.
-¡Y tu enano desde cuando estabas siguiéndonos!- grito Ace ahora al mas pequeño, quien solo arqueo la ceja y siguió con lo suyo-¡Te estoy hablando!-gruño para dar unos pasos dispuesto a poner en su lugar al infante.
-Ya basta Ace…creo que no es momento de regañarlos, hemos salido de esta pero ahora seremos presa del pirata –suspiro Sabo –El capitán Bluejam no nos dejara ir tan fácilmente después de que derrotamos a unos de sus secuaces-cruzo los brazos.
-Listo Monkey-san ya quedaron tus heridas –Toushiro se levanto dispuesto a partir hacia donde estaba la casa de Dadan.
-Y tu a donde vas –Ace se atravesó-ahora que sabes nuestro secreto también tendrás que guardarlo con nosotros –
-No me interesa su secreto ni mucho menos ser un pirata, solo estoy aquí por casualidad-Comento, tanto Sabo y Ace no le creyeron, solo Luffy sonrió calmadamente.
-Shiro-kun no seas tímido –añadió Luffy ignorando la mirada irritada del niño –el también quiere ser su amigo, pero como va a ser de la marina…piensa que no seria bueno para su futuro –explico despreocupadamente, Ace y Sabo se miraron en shock mientras Toushiro golpeo en la nuca al otro.
-¡Porque lo dices!-gruño en fastidio.
-¡Un futuro marine!-gritaron a la defensiva.
Toushiro rodo los ojos –no es como si pudiera hacer algo al respecto ahora, pero dejen decirle que si siguen con ese nivel los capturare muy rápido –sonrió de medio lado en tono de burla.
-Cuantos años tienes –ambos preguntaron al mismo tiempo.
-Voy a cumplir 6 –dijo con suficiencia.
-Eres mas chico que nosotros –grito Ace y Sabo golpeando en la cabeza al niño.
-Yo voy a ser rey de los piratas –añadió Luffy rápidamente –y el va a ser un almirante, es obvio que tenemos que estar juntos –explico como si fuera lo mas obvio.
-Eso no es cierto –gritaron en fastidio.
-Bien, bien hay que calmarnos –Toushiro interrumpió la conmoción.
-Es cierto…ahora que somos blanco de piratas debemos pensar con claridad –Sabo interrumpió lo que fuera a decir Ace, pero ya estaba discutiendo con Luffy respecto a lo llorón que era.
-Puedes quedarte con nosotros en la casa de Dadan, es el lugar mas seguro que tengo en mente –explico Toushiro sorprendiendo al mayor por su tenacidad y facilidad de resolución.
-Vaya de marine vas a ser un peligro –Sabo palmeo la cabeza-Aunque …Ace porque no corriste con nosotros cuando lo dijimos, ¿quieres morir o que? –recordó la batalla en donde el chico de pecas se quedo atrás.
-Cuando yo veo un enemigo no huyo de el-explico, golpeando fuertemente en la cabeza a Luffy por algo que dijo durante esa explicación.
-Yo creí que iba a morir –Luffy recordó los minutos u horas de tortura a manos de esos hombres.
-Cállate, por cuanto tiempo vas a estar así de llorón –Ace grito al niño que se callo de inmediato sorprendiéndolo.
-El es necio cuando se pone en algo –Toushiro interrumpió lo que seria una serie de reclamos –hizo lo mismo conmigo –se encogió de hombros.
-¡Que ustedes no tienen a nadie mas que molestar!...me fastidian –Ace se cruzo de brazos, Sabo rodo los ojos ante la reacción del chico.
-No-Toushiro comento fríamente.
-Yo tengo al abuelo, pero el no esta aquí, Shiro no quiere ser pirata…así que solo ustedes son con los que cuento –explico Luffy.
Ace los miro seriamente -¿Entonces si muero? –cuestiono.
-Problemático –secamente comento Toushiro, haciendo que Ace lo golpeara en la cabeza.
-Que severo –reclamo el niño de pecas para luego mirar a Luffy en espera de su respuesta, la cual no llego, Hitsugaya solo se tocaba el área afectada aun sorprendido por esa reacción brusca y que no pudiera esquivarla, lo tomo por sorpresa…la temperatura descendió un poco.
-Shiro-kun tiene un poder sorprendente, aunque solo lo demuestra cuando esta enojado –Luffy cambio el tema al ver que los otros temblaban, con un puchero.
-Vaya que interesante –comento Sabo –de aquí a que seas marine nos puedes ser de ayuda, además estamos entrenando para ser piratas…también puedes unirte –
-¡hey sabo!-Ace grito.
-Somos objetivos de unos piratas, así que todos estamos en esto, futuros piratas o marines ahora estamos involucrados-miro a Toushiro –Shiro ahora eres parte de nuestro equipo…-extendió su mano -¿tregua?-
Toushiro miro la mano, luego miro a Luffy y Ace,-Tregua- se encogió de hombros –no es como si tuviera algo que hacer…eh estado escondido durante estos meses vigilándolos –
-¿Cuánto has estado vigilándonos?-Ace tomo la cabeza del niño, apretándolo con fuerza.
-A Monkey-san desde que llegue –gruño Toushiro quitando la mano del mayor, golpeándolo en las rodillas…ahí ambos se ponían a pelear.
-Creo que será problemático –Sabo pensó que Toushiro seria de fiar, pero al verlo pelear con Ace en ese momento porque este le decía enano y Luffy agregándose solo por diversión miro al cielo, eso de ser mediado cansaría…pero sonrió, al menos era divertido.
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Sabo no sabia que esperar de esa reacción, miro al chico de pelo blanco contar su pasado ante la insistencia de no tener nada de secretos entre ellos –Fui robado varias veces como esclavo, salvado por Ray-san y luego vi morir a mi abuela frente a mis ojos por un Tenryubito- esa explicación le pego en la cara un día que encontró a su padre y tuvo que explicar.
-Soy un hijo de un noble –dijo con temor para mirar al peli blanco.
-Ah –fue simplemente lo que dijeron Ace y Luffy mientras se hurgaban la nariz, aunque Toushiro les pego en la nuca por lo impropio de su acción.
-¡Es lo único que van a decir!-grito demandante, luego miro a Toushiro –soy hijo de nobles, de alguna manera estamos relacionados con los Tenryubitos que son otra clase…mataron a tu abuela –continuo sorprendiéndolos.
-Tranquilo Sabo –ahora era Ace el que interrumpía, Toushiro no dijo nada…solo se congelo perdido en sus pensamientos.
La temperatura descendió pero miro al suelo – se que no tengo muchos buenos recuerdos de mis anteriores años de vida antes de llegar con Luffy o con ustedes, pero este tiempo es valioso –aun a pesar de la frialdad se sentía cálido, sin mirarlos a la cara sorprendido por sus palabras, aunque su abuela o Ray-san no se quedaban atrás.
-No seas tímido –Luffy comento sin tacto a la situación, siendo callado por Sabo y Ace que si leían en ambiente, en algún momento de esos meses les había comenzado a hablar por sus nombres de pila, ante la insistencia de los demás.
-No te juzgo, pero eres mi amigo…y no creo que eche a perder eso por tu estado –suspiro –pero si te vuelves un pirata y yo un marine, no creo que tenga piedad si sigues así de dudoso –se burlo.
-Eres un pequeño bribón –Sabo tenia un tic nervioso, pero suspiro aliviado –Gracias chicos –
-Bien entonces tenemos esto para celebrar –Ace saco una botella.
-¿Le robaste eso a Dadan-san?-comento Toushiro a ver lo que sacaba el mayor, este solo sonrió.
-Claro, aunque tu no debes tomar, aun eres mas chico que Luffy –regaño Ace para a el servirle solo un sorbito pequeño –solo poquito para hacer este juramento –
-¿Juramento? –Luffy inclino su cabeza, aunque Sabo solo rio.
-Cuando compartes una copa de sake con otras personas, se hacen hermanos…así que eso es lo que seremos a partir de ahora –Ace sonrió alegremente.
-¿Aunque sea un marine? –Toushiro frunció el ceño al notar que eran cuatro…aunque el suyo tenia muy poco.
-Claro, seremos hermanos aunque estés en la marina… no por eso nos darás clemencia –Ace interrumpió –pequeño hermanito –se burlo.
-¡Eres un maldito!-Toushiro congelaba el suelo y miraba a dagas al mayor.
-Serás Peque-Shiro –añadió Ace con una gran carcajada.
-Dejen de pelear…-Sabo se interpuso, sus peleas eran dramáticas de cierta manera, aunque siempre de alguna manera quedaban ya sea empatados o ganaba a duras penas Ace.
-Bien ahora todos para ser piratas en un futuro, y descubrir el futuro que deparara –Ace alzo una copa de sake incitante al resto.
-Para que no sean fácil de atrapar y se vuelvan mas fuertes que yo –Toushiro añadió.
-¿Mas fuerte que tu?-Ace dio un cabezazo al peli blanco que esquivo, para su enojo.
-Dejen de pelear –Sabo interrumpió.
-Para que yo sea el rey de los piratas –añadió Luffy inocente ignorando la pelea de los demás.
-Tu un niño llorón –Ace ahora estaba peleando con Luffy, quien también le regresaba los ataques verbales.
-Esto de ser el mayor es pesado –Sabo continuo.
-Tu no eres el mayor –Ace gruño.
-Basta…dejen de pelear y hay que terminar con esto –Toushiro alzo su copa –antes estuve solo ahora tendré hermanos, aunque sean piratas-sonrió tranquilamente.
-Por mis hermanos mayores…y el pequeño Shiro –Luffy continuo.
Los mayores y el otro lo miraron fijamente, pero optaron por no continuar la discusión, tal vez mas adelante lo corregirían, a partir de ese momento entrenaron juntos y se preparaban para hacerle frente a su futuro como piratas.
Aunque en la parte de robar Toushiro no formaba parte, el continuaba con sus lecturas dadas por Garp que eran enviadas por medio de Makino, que traía consigo ropa y demás, Sabo le ayudaba en cosas que no entendía, pasando así el tiempo, Sabo continuo feliz hasta ese día, donde su vida tuvo que regresar a los altos barrios y darse cuenta de lo que planeaban en realidad.
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Dragón había llegado a esa pueblo tras unos rumores, ahora encontraba a un niño noble suplicándole que salvara y detuviera lo que los nobles estaban haciendo –Inclusive han hecho que uno de sus niños piense mal de ellos –se sentía frustrado.
-Todos los preparativos están listos –una voz resonó llamando su atención, pero su sorpresa fue mas cuando el cielo ser partió tras una extraña luz y de el emergió un ser legendario, un dragón azul casi parecía de hielo.
-Ves lo mismo que yo Dragón-sama –comento una voz, este solo se quedo en silencio con su cara estoica pero sorpresa reflejada en sus ojos.
-"mi respiración"-pensó el extraño hombre mientras veía como el aire se podía ver con facilidad.
-Ese debe ser Shiro –el niño salió de su estupor –por favor haga algo para salvarlo, el no podrá solo…no con ese infierno ahí –suplico.
-¿Conoces a la persona responsable de este? –el niño acepto con facilidad –"si ese niño cae en manos de alguien que sepa su verdadero potencial será un peligro, un arma peligrosa"-
-El es uno de mis hermanitos –sollozo el niño –trate de salvarlos pero no soy mas que un simple niño –tragaba grueso –escuchara mi petición –suplico, el hombre adulto acepto.
-Hay que sacar a los civiles –ordeno entre las sombras mientras el niño era llevado a un lugar seguro, tal vez entre la nobleza no había nada perdido después de todo, miro hacia el punto donde el dragón había descendido en un choque frio, los témpanos se podían notar en lo alto de las paredes, un poco asustado de ese potencial.
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-Llévense al pequeño Shiro –Dadan grito con algo de fuerza al notar el estado del menor, quien estaba inconsciente con una fiebre alta ante el poder que mostro en un afán de extinguir todo a su alrededor, y salvar a Ace y Luffy.
-Yo me quedare –Ace se giro para encarar a los piratas, los tres niños estaban peleando entre el fuego, se sentía culpable de no ser mas fuerte para evitar que Toushiro evitara usar todo su poder…el dragón azul era frio pero cálido por alguna razón, era tanta su fuerza y afán por protegerlos y no dejar que se quemaran que congelo el propio fuego.
Dadan y el resto de los maleantes no tragaban eso, aun temblando por la escena, Luffy y Ace eran los únicos que no se asustaron al saber de lo que era capaz el mas pequeño de ellos –También te tienes que ir –
-No lo hare, cuando veo a mi enemigo no daré paso atrás –Dadan entendió esas palabras y se quedo con el, Luffy también se encontraba en estado pésimo y por sus ordenes fueron llevados a un lugar seguro, ahí ambos se quedaron a encarar al enemigo…ante la idea que su hermanito fuera llevado como un arma o Luffy morir a sus manos, no lo dejaría, no tan fácilmente.
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En un cierto barco un hombre miraba hacia la isla que dejaban –Dragón-sama –saludo una voz –su vista siempre esta puesta hacia ese punto…es interesante el saber que espera –
-El cambio vendrá de aquella parte estoy seguro –dijo con severidad.
-Por cierto Dragón-sama encontró al niño que menciono ese pequeño noble –cuestiono.
-Si-dijo simplemente –pero esta en buenas manos –dijo con una sonrisa recordando como lo había encontrado, no esperaba ver de nuevo a su pequeño retoño, las casualidades no existían después de todo.
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El silencio estaba instalado en la caballa mientras Luffy dormía y Toushiro seguía inocente con temperatura alta -¿Por qué no huiste? –cuestiono Dadan quien estaba en estado critico.
-No quería que dañaran lo que estaba detrás de mi, si huía irían a acabar con Luffy o Shiro, no podía dejarlos…no en sus estados-Ace comento para sorpresa de la señora, que recordó una platica con Garp –El pequeño Shiro no quería que nos hicieran daño, uso esa extraña habilidad y llamo al Dragón para congelar el fuego … no sabia que terminaría así-se encogió al recordar la escena.
-El sabia las consecuencias, a pesar de lo pequeño es muy inteligente …no como ustedes intento de piratas –Dadan comento aunque le dolía todo, Ace solo la miro con enojo pero luego sonrió.
-El será un gran marine…el hará la diferencia – Ace sonrió para mirar a ambos -creo que los dos me darán dolor de cabeza con sus peleas, uno el futuro rey de los piratas y el otro un almirante –
-Te tendrás que volver mas fuerte si quieres ser el mediado –Dadan se burlo.
-Si, Sabo y Yo seremos los mediadores –Ace continuo con una sonrisa…pero luego su mundo se volvió negro cuando se entero de la triste noticia, Sabo había partido, pero los nobles habían quemado su barco.
-Otra vez esos Tenryubitos –Iba a salir a golpearlos al recordar lo que le hicieron a Shiro y ahora a Sabo, si los encontraba los mataría si fuera necesario, a duras penas detenido por Dadan que lo hizo entrar en razón, en su estado no harían mucho.
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Shiro miraba al mar junto a sus otros hermanos –La muerte solo es el principio de un nuevo comienzo…una nueva vida –comento el pequeño ante la incredulidad de los demás.
-Lo dices como si ya hubieras estado muerto –Luffy hizo mala cara siendo golpeado por el mayor.
-No lo molestes Luffy –suspiro cansado Ace tomando la batuta de hermano mayor ante la falta de Sabo, los tres habían leído las ultimas palabras del pequeño que les había dejado antes de marchar.
-Seremos grandes piratas –Luffy sonrió algo triste.
-Claro –Toushiro suspiro cansado de añadirse el como extra, no quería ser un pirata…pero era fastidioso tener que aclararlo cada que salía el tema.
-A los 17 partiremos a nuestro destino –Ace aclaro, pero luego miro a Toushiro –creo que a ti será ante de esa edad…el viejo te quiere llevar antes –
-Dadan da miedo – Luffy recordó los golpes, tanto el como Luffy temblaron ante el recordatorio, el único que era inmune era Toushiro…siendo al parecer el favorito o menos rebelde, pero siempre saliendo a al defensa de ambos.
-Si llega a pasarse yo siempre puedo ser el mediador –aclaro Toushiro con una sonrisa serena.
-Pequeño rufián –Ace tomaba la cabeza con brusquedad, mientras mantenían su promesa… Los años pasaron, cosas se supieron y los hermanos fueron creciendo juntos, los recuerdo estaban frescos aun para cierto marino en algún punto de la gran línea.
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En la marina los rumores se habían extendido tan rápido como pólvora, un joven prodigio había emergido de lo mas bajo para crecer en menos de un año, ahora se encontraba en la gran línea y aunque muchos los subestimaba, al tiempo callaban, su fuerza era impresionante, destreza y manera en enfrentar a los piratas.
La leyenda del marine azul, cuya habilidad estaba en duda…pues no sabían el nombre de la fruta del diablo, a los 14 años tenia ya un titulo formal y fuerte, conocido por varios piratas….
-Creo que mi hermanito será un dolor en el culo –Cierto pirata en el nuevo mundo comentaba al escuchar las noticias, estaba un poco impresionado de los rumores que le llegaron referente a que tuviera cuidado con cierto niño peli blanco que estaba tras los piratas, justo y frio, con mirada que si no fuera por su mirada, pensarían que era un pequeño y bonito niño.
-Ese es tu hermano –la voz resonó en el barco.
-Si Pops, este es uno de ellos –miro el periódico, había atrapado a una banda peligrosa que estaba en las afueras de la Gran Línea, que sobornaba y acosaba a los ciudadanos de cierta isla.
-Que problemático hermanito –Marcos se acerco para ver la foto -¡pero si es un niño!-se sorprendió.
-¡Claro es seis años menor que yo –dijo con orgullo.
-En verdad no se si darte un golpe por confiado –suspiro otro de los capitanes de la gran flota de barba blanca, Ace puño de fuego ya había hecho fama en aquellos lugares, se había marchado hace tres años de la isla que lo vio crecer dejando a dos hermanos atrás.
Quería ver el rostro de cierto niño arrogante que le había vencido cuando era mas niño, tenia curiosidad de ver si cambio y se volvió menos frio –Ahora si te venceré –dijo orgulloso, los tres habían hecho promesas de ser mas fuertes….y el mas pequeño amenazo que si no lo hacían los encarcelaría sin pena, lo creía capaz, de eso estaba seguro.
Aunque una gota de sudor le escurrió cuando vio en el dilema en que se encontraba -¿Sucede algo? –cuestiono Marco.
-Tengo ganas de verlo, pero notando lo rápido que esta subiendo de puesto…me da miedo –comento con una sonrisa amplia.
-Es la primera vez que te veo nervioso Ace –Barba blanca comento un poco severo, el chico de echo se estaba rascando la nuca todos lo miraban.
-Bueno estaba acordándome que cuando era niño me fue difícil vencerlo cuando entrenábamos –sudor frio al recordar todas las peleas que tenían, aunque siempre le gusto burlarse de su estatus de menor.
-Vaya un pequeño reto –se burlo Marcos, Ace miro la foto de nuevo con cierto cariño.
-Aun sigue siendo un enano –se rio ampliamente, ahí todos siguieron discutiendo sobre la foto que salió, al poco tiempo otro cartel le hizo celebrar...no solo a el, si no también a cierto pelirrojo en algún punto del mar en el nuevo mundo, pero esa es otra historia.
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Espero que les haya gustado…. Hasta la próxima?
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