Como podéis ver esta semana está siendo un poco movidita (jeje) quiero decir que he decidido ponerme al día con todo lo que tenía pendiente de fanfiction. Una de las cosas que tenía pendiente era empezar con la traducción de esta historia. Este fic fue el primero que me leí de Klaus y Caroline, y la verdad es que es uno de mis favoritos. Espero que lo disfrutéis tanto como yo.
La historia no me pertenece al igual que los personajes, yo solo estoy haciendo la traducción.
PRÓLOGO
Para cualquier persona, la casa parecía que estaba reinada por el caos. Los platos estaban llenos de restos de comida en la gran mesa del comedor; juguetes, zapatos y bolsas estaban esparcidos; se escuchaba el sonido de los gritos y las risas de los niños mientras los adultos estaban sentados. Pero esa era la forma en la que se desarrollaba la cena mensual de la familia Mikaelson.
Este mes, era el turno de Finn y de su mujer Sage de ser los anfitriones, pero era el hermano mediano, Klaus y su vida lo que era el centro de atención en ese momento-. Ayanna me dijo hoy que no podía seguir trabajando para mí.
-No es una sorpresa teniendo en cuando la manera en la que su salud se ha deteriorado durante el último año, especialmente estos últimos meses –comentó Elijah desde su lugar al lado de su esposa Katherine.
Rebekah asintió de acuerdo con él-. Pobre, ha debido romper su corazón el tener que rendirse. Sé que nos ama y se siente responsable después de la muerte de Madre.
-¿Entonces, que piensas hacer? –preguntó Sage desde su lugar. Ella, como todos los demás, sabía que estas noticias habían causado una revuelta en la vida de su cuñado porque Ayanna no solo era una empleada de los negocios de la familia, sino que era parte de la familia.
-Voy a tener que contratar a una sustituta –respondió Klaus simplemente; no era como si tuviera otra opción después de todo. Sin embargo él apreciaba los consejos de su familia en estas situaciones, era por esa razón por la que había sacado el tema.
-No puedes contratar a una extraña para que los cuide –exclamó Rebekah-. Ayanna era una cosa; ¡era prácticamente de la familia! Estás hablando de contratar a una extraña.
-¿Qué sugieres que haga Bekah? –preguntó Klaus-. Son mis hijos y quiero hacer lo que es mejor para ellos. No solo tengo que asegurarme de mantenerlos, sino que también tengo que asegurarme de que son cuidados y desde la última vez que me revise, no puedo estar en dos sitios a la vez. Voy a necesitar ayuda.
-Déjanos ayudar; somos familia.
-No puedo depender de vosotros siempre. Soy un adulto y son mis hijos. El trabajo está siendo próspero y todos vosotros tenéis vuestras propias vidas. Finn y Sage tienen a sus tres hijos, pronto Katherine no tendrá la energía suficiente para vigilar a Daniel y menos para vigilar a mis dos hijos –discutió Klaus mientras miraba a su cuñada. Katherine tuvo dificultades en su primer embarazo, y el de ahora parecía que también. No quería causarle estrés, y sabía que Elijah ya estaba bastante preocupado por ellos dos.
-Estoy yo… y está Kol.
-No creo que tener a Kol como niñera de mis hijos sea la mejor idea, ¿no crees? –le preguntó Klaus, arqueó la ceja incrédulo por su sugerencia.
-Está bien, probablemente no es la mejor idea. Hablando del diablo –asintió Rebekah cuando Kol y el prometido de Rebekah, Stefan, volvieron.
-Cuando Stefan se sentó al lado de ella, notó las miradas de los rostros de todos y preguntó-. ¿De qué estáis hablando tan seriamente chicos?
-Niklaus necesita contratar a una chica –respondió Finn.
-¿Nik, no estarás tan desesperado ahora como para contratar a una prostituta, no? –preguntó Kol-. Da la casualidad de que conozco a algunas chicas que tienen unos estándares lo suficientemente bajos como para ir con el hermano menos guapo…
-Oh, cállate, estúpido. ¡Estamos hablando de que Nik necesita contratar a una niñera! –espetó Rebekah.
-Quizás puedo ayudaros –interrumpió Stefan intentando detener a los dos hermanos Mikaelson más jóvenes antes de que se mataran entre ellos.
-Habla, amigo.
-La novia de mi hermano Damon tiene una amiga que está buscando trabajo.
Klaus solo rodó los ojos y se mofó ante la sugerencia de Stefan-. Eso no es una solución; no estoy buscando a una chica desesperada por conseguir un trabajo, que no tenga ni idea de lo que está haciendo, para cuidar de mis hijos.
-Ahí está la cosa: es una niñera profesional.
-¿De quién estás hablando? ¿La conozco? –preguntó Rebekah mientras intentaba buscar en sus recuerdos a la persona de la que Stefan estaba hablando. Personalmente no le importaba mucho Elena, la novia del hermano de Stefan, pero ellos se veían con mucha frecuencia y algunos de sus amigos le eran familiares.
Stefan asintió-. Caroline Forbes.
Rebekah frunció el ceño-. ¿Pensé que era profesora?
-Estudió educación en la universidad, pero se licenció como niñera, una que está buscando a una familia desde que la familia para la que trabajaba desde hacía dos años se ha ido al extranjero –explicó Stefan-. Creo que serviría, Nik. Es inteligente, cariñosa, y realmente ama su trabajo; sin mencionar que es organizada. Y eso es por lo que la necesitas Nik; después de todo, necesitas a alguien que no sea la típica niñera. Tengo su número; puedo contactar con ella para poner las cosas en marcha.
Klaus meditó las palabras de Stefan. Confiaba en Stefan; sería el prometido de su hermana, pero se había convertido en uno de sus amigos más cercanos, y si él tenía tan buena opinión de esa mujer, entonces quizás debería al menos revisar sus títulos y entrevistarla. Para ver si sería una buena opción para él y para su familia-. Lo haré.
¿Qué os ha parecido? Espero que os haya gustado.
