Hola... este es mi primer fic y espero que les guste, este es el primer capi y su continuacion dependerá de la acogida que tenga... Es con mucho cariño y pues... Aqui va...

En la ronda…

Aquella noche el cielo se había revelado contra el mundo en forma de lluvia, nubes oscuras impedían la maravillosa vista de las estrellas mientras que finas gotas que se confabulaban para crear un gran chorro caían por el castillo de Hogwarts de Magia y Hechicería. Draco Malfoy se encontraba haciendo su ronda nocturna por los pasillos del Colegio, labor que era obligado a realizar desde que el "inepto" de Dumbledore lo había nombrado prefecto.

Muy a su pesar la oportunidad de molestar a otros con su cargo tenia un costo: Las rondas nocturnas que debía realizar por el colegio, vigilando que ningún alumno travieso estuviera fuera de la cama después del toque de queda. Odiaba profundamente los miércoles, pues esos eran los días en que las rondas quedaban a su cargo, y odiaba con más desesperación a su compañero o en este caso compañera de rondas.

- Granger.- Pronuncio con asco al recordar la discusión que habían tenido durante el inicio de la ronda pasada.

(Flashback)

- No Malfoy, no puedes restarle puntos a Hufflelpuff solo porque ese niño chocó contigo por accidente.- Dijo Hermione irritada ante la escena que tenía en frente- Ya puedes irte Donahue- Habló con voz suave al pequeño de primero que la miraba entre asustado y agradecido- Ah, se me olvidaba cinco puntos para Hufflelpuff, que nunca debieron ser retirados- Dijo como finalizando la conversación con el pequeño mientras este hacia ademán de retirarse, pero fue interrumpido por una fuerte mano que se poso en su frágil hombro inmovilizándolo, en parte por la fuerza con la que era retenido y en parte (la mayor parte) por el miedo que el dueño de esa mano le inspiraba.

- Tú no te largas hasta que yo lo ordene… - Empezó un enfurecido Malfoy con voz siseante y amenazadora mientras apretaba con fuerza el hombro de Donahue- Además faltan no mas de treinta segundos para que el toque de queda empiece, y mi labor como prefecto es impedir que niños malcriados y desobedientes anden por los pasillos del colegio a estas horas- Dijo fingiendo "fidelidad y respeto" por las normas del colegio- Ahora, espero que en lo que queda de esos treinta segundos tú llegues a tu sala común, porque si no lo haces tu mediocre casa perderá cincuenta puntos- Finalizó Malfoy liberando a Donahue de su alcance y mirándolo con ferocidad- Y creeme cuando digo que tengo mis formas de enterarme de la hora a la que llegas a tu sal…

- ¡No te muevas de donde estas Donahue! – Dijo Hermione con una voz peligrosamente delicada…- Yo me encargaré de que NADIE te castigue por llegar después del toque a tu habitación, es mas, yo misma me encargaré de llevarte a tu sala co…

- Cincuenta puntos menos para Hufflelpuff- Malfoy había dicho esto con la tranquilidad de quien dice la hora- Ya terminaron los treinta segundos- Y sin mas se empezó a alejar del pasillo donde dejaba a un Donahue con los ojos humedecidos y a una Hermione imaginando mil recetas de venenos en las que podría utilizar a Malfoy como ingrediente principal… - Ah por cierto- Malfoy se había detenido al final del pasillo para dar la vuelta y agregar una cosa mas- Diez puntos menos para Gryffindor por haberme desautorizado delante de un alumno Granger- Siseo Malfoy dirigiéndose por primera vez a Hermione y jactándose de la cara que ella ponía mientras él se alejaba ahora si de aquel pasillo.

(Fin Flashback)

Aparentemente ese día el triunfador de la "Discusión" (en la cual apenas se habían dirigido la palabra) era él, pues fue quien se alejo dejando a su compañera en estado de Shock gracias a la imposibilidad que tenía de pensar una respuesta hacia Malfoy que no tuviera como resultado una condena en Azkaban por uso de maldiciones imperdonables. Pero no, Draco no había ganado esa "batalla" pues su Consiente, Paciente, inteligente y DETESTABLE compañera de rondas se las había ingeniado para comunicarle lo sucedido a una muy racional y estricta profesora McGonagall, que no dudó un solo segundo en reponer los puntos retirados injustamente por Malfoy, además de dejarle claro que si volvía a insultar a alguno de los alumnos llamándole "mediocre", inútil o cualquier otra de las palabras despectivas que solía utilizar para intimidar a los mas pequeños, tendría que limpiar los orinales de la enfermería SIN magia.

"No tolero el abuso de autoridad en este colegio señor Malfoy" había dicho la profesora McGonagall. "además su ilógica acción al quitarle puntos a otro prefecto" Malfoy la miraba, no, la asesinaba con los ojos mientras ella seguía reprendiéndole "espero no volver a recibir noticias de ese tipo que se refieran a su comportamiento". Draco se retiró rumbo a su sala común, para luego ser defendido por Snape, aunque sin éxito, pues la profesora McGonagall había alegado firmemente en defensa de Hermione y de Donahue, dejando en claro que Malfoy había actuado mal.

Lo que a Malfoy le molestaba más de todo lo sucedido, era que la sinvergüenza de Granger había tenido el atrevimiento de acusarlo frente a McGonagall, como si él fuera un pequeño de primero que hacía alguna travesura. "Que inmadura" pensaba. "La única forma que tiene de defenderse es escudándose tras sus adorados profesores". A decir verdad Draco cometía este tipo de injusticias al menos cuatro veces por día, y nadie NUNCA se atrevía a acusarlo frente a una autoridad. Ni siquiera la misma Granger lo había hecho en ocasiones anteriores, en las que el la había tratado peor que en esta insignificante (a su parecer) riña de niños.

- Estupida sangre sucia.- Murmuró para si, recordando como McGonagall lo había vigilado constantemente toda la semana, y como estuvo a punto de limpiar los asquerosos baños de enfermería si no fuera porque Snape actuó una vez mas en su defensa y lo salvó por un pelo.

- No deberías utilizar ese lenguaje Malfoy- dijo una suave voz a sus espaldas- Ni siquiera cuando hablas contigo mismo como una clara muestra de lo ególatra que puedes ser, al no soportar ni un segundo de soledad sin tener que quejarte de lo cruel que se comporta el mundo con tu "perfecto ser"- Recalcó las ultimas dos palabras con especial sarcasmo, mientras que el aludido (que ya se había girado) la miraba con una mezcla de desprecio, asco y odio.

Ahí estaba ella, la dueña de sus pensamientos y de sus deseos de asesinar que tan recientemente lo agobiaban.

- Granger.

- Malfoy.

Silencio… silencio muy tenso.

- Verás sangre sucia…- Empezó Draco- Mi "perfecto ser" como tan acertadamente me has llamado, no tiene tiempo para escuchar las suciedades que tu impura boca puede dejar escapar- Sonrió burlonamente al ver como en el rostro de Hermione aparecía una expresión molesta mal disimulada.- Por lo tanto, te recomiendo que te pierdas de mi vista antes de que el ambiente termine de contaminarse.

A Hermione le había dolido el comentario, pensó que tal vez se estaba dejando manipular por Malfoy; Pues estaba empezando a discutir con él frecuentemente, y ya no lo ignoraba como lo había hecho siempre. Incluso en esta ocasión era ella quien lo estaba provocando, pero bueno eso se justifica, pues él la había llamado "Estupida sangre sucia", aunque de hecho no se estaba dirigiendo a ella, pues eso mas bien pareció un pensamiento en voz alta que el rubio dejó escapar en un mal momento. Pero Hermione sabía perfectamente que ese "Pensamiento" se refería a ella. Esta vez no permitiría que ese estupido Hurón le ganara, estaba decidida: Ella había empezado la riña, entonces ella debía ponerle fin.

- Que poco original eres Malfoy ¿No se te ocurre otro insulto que no tenga nada que ver con "sangre sucia"? O tal vez has empezado a tenerme aprecio, porque si es así lamento informarte que no deseo tener una relación contigo que vaya más allá del odio.- Hermione sabía que el punto débil de Draco era su orgullo, y definitivamente no se equivocaba.

Draco se pasó una mano por la frente hasta subir a su cabello peinándolo hacia atrás, inútilmente claro, pues su cabello volvió a caer sobre su rostro.

- No seas ilusa Granger, yo JAMAS podría acercarme más a ti de la distancia higiénica prudente, además creeme que se me ocurren muchos insultos que te irían perfectamente.- Draco esbozó una sonrisa (claro si eso podía llamarse sonreír) bastante triunfante.- Veamos…- Puso una mano bajo su barbilla y miró hacía arriba, fingiendo estar pensativo- Eres una sabelotodo insufrible, ratón de biblioteca, bicho raro alejado de la sociedad, con una vida sexual poco activa seguramente…- Hizo una pausa para mirar como Hermione enrojecía hasta el final de su frente- Estás enamorada de una comadreja pobretona que le falta un día para graduarse de idiota, además de ser una infantil mimada que no puede defenderse sin escudarse en sus idolatrados profesores, seguramente estudias solo para eso, para tener su apoyo permanente ¿Me equivoco Granger?

Hermione se había quedado helada¿Cómo podía Malfoy ser tan atrevido como para meterse en su vida intima? Además ¿Acaso era tan evidente lo de Ron? (no lo de su graduación de idiota) Ella siempre había pensado que era la única testigo de sus sentimientos hacía el pelirrojo, pero obviamente se equivocaba. Bien, pues si el Hurón quería meterse con el orgullo de Hermione mencionando sus problemas, pues ella no se quedaría atrás.

- Si Malfoy, si te equivocas, yo no estudio solamente para tener seguridad frente a los profesores, lo hago porque me nace y porque sé que soy buena, y si ellos me defienden es porque también les nace… En cambio tú…- Una fugaz llama de malicia cruzó los ojos color avellana de Hermione, llama que no pasó desapercibida por Draco- En cambio tú tienes inmunidad con Snape solo por ciertos "Favores íntimos" que le haces ¿Me equivoco Malfoy?

Eso sí que había sido suficiente para Draco¿Cómo se atrevía esa sangre sucia despreciable a insinuar que él y el profesor Snape…? Cielos, su rostro se contorsionaba de asco de solo pensar algo así.

Si, Hermione había triunfado. No cabía en sí de la alegría que le causaba el poder ver por fin al "invencible" Draco Malfoy con el rostro contorsionado de asco y furia, ella casi podía contar los segundos que faltaban para que Draco sacara su varita y le apuntara, pero no lo iba a dejar llegar a ese extremo, ese era el momento preciso para retirarse dejándole iniciado.

- Bueno Malfoy- Hermione había empezado a hablar rápidamente para no darle a Draco alguna oportunidad de interrumpirla- Creo que tenemos una ronda por hacer, no sé tú pero yo no quiero salir castigada por no cumplir con mi deber, así que me dispongo a retirarm…

Hermione había sido interrumpida, pero no por causa de Draco, sino porque sintió mientras hablaba un rápido pero fuerte jalón en la parte de atrás de su cabello, y pudo detectar como varios cabellos le eran cruelmente arrancados. Eso sucedió en una fracción de segundo, porque para cuando Hermione se había girado bruscamente en un acto reflejo, no había absolutamente nadie en todo el oscuro pasillo. Se quedó buscando con la mirada mientras se frotaba la cabeza con su mano derecha para aliviar el dolor que habían dejado sus desaparecidos cabellos.

- ¿Qué te sucede sangre sucia¿Acaso te asustó algún fantasma?- Draco, quien ya se había recuperado del Shock en que lo dejó el despiadado insulto de Hermione, la miraba retomando su posición de arrogante superioridad.

- Oh, ya cállate hurón- Dijo Hermione mientras seguía buscando inconscientemente a su agresor por el rabillo del ojo mientras se volteaba a ver a Draco a los ojos- Realmente debo irme Malfoy, es mejor que empieces a hacer tus rondas por los pasillos de esta torre si no quieres terminar limpiando los baños de enfermería.

Draco observó como la sangre sucia Granger se alejaba con la última palabra. Por esta vez y solo por esta vez Draco estaba dispuesto a dejarla ir sintiéndose triunfadora, pero no era porque le faltaran ganas de humillarla. No. Era porque el había notado una fugaz mano que flotaba por detrás de la enmarañada cabeza de Granger mientras ella le hablaba de las rondas y otras tonterías. Draco no se había inmutado ante esta visión, pues descubrió al instante porque aquella mano flotaba sin razón aparente tras Granger.

"Capa de invisibilidad" concluyó "La única vez que he visto algo parecido ha sido en Hosmeage en tercer año, cuando la cabezota de Potter apareció flotando en el aire, el resto de su cuerpo de seguro estaba cubierto por la capa" pensó recordando a un Harry invisible que le lanzaba bolas de nieve cerca de la casa de los gritos.

Malfoy caminó durante un rato por el oscuro pasillo tanteando en el aire en busca de algún cuerpo invisible. Cuando se enteró de que parecía un idiota cazando moscas en la oscuridad desistió de su absurda búsqueda "Definitivamente alguien con capa invisible no se dejaría atrapar fácilmente, pero ¿Por qué rayos esa persona habría tomado de los pelos a Granger?" No es que a Draco Malfoy el príncipe de Slytherin le interesara el hecho de que alguien hubiese lastimado a la sangre sucia, es mas, deseaba enterarse de quien era esa persona para enviarle flores. Lo que lo impulsaba a buscar era "Simple curiosidad" como el mismo había dicho mentalmente.

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Habían pasado casi 45 minutos desde el último encuentro de Draco y Hermione cuando el primero revisó un fino reloj dorado que solía guardar en su túnica.

- Ya son las 9:55.- Murmuró leyendo la hora; al parecer por fin había terminado la aburrida ronda de ese miércoles.

Draco pasó sus manos por su rostro en una muestra clara de cansancio, y luego empezó a descender por el hall hacia un pasillo que finalmente lo llevaría a las mazmorras, donde estaba ubicada su sala común. Pero para su desgracia una ya conocida sombra se le acercaba por detrás seguramente para molestarlo. Era ella, Hermione Granger de nuevo al ataque. "¿Qué demonios hice hoy para ganármela?" Draco miraba como Hermione se acercaba cada vez más, y fue entonces cuando notó que se veía un poco… Distinta… en realidad su forma de caminar había cambiado, y su mirada… definitivamente en su mirada se podía notar a leguas una gran determinación, como si estuviera a punto de hacer algo que cambiaría su vida. Lo que Draco Malfoy no sabía es que el momento que venía a continuación efectivamente si cambiaría su vida.

Draco se extrañó ante aquel porte distinto que tenia Hermione, pero prefirió darse la vuelta, ignorarla y seguir con su camino. Pues de esa forma seguramente la haría enfadar, porque era muy notorio que Granger se estaba encaminando hacía él; No todos los días una Gryffindor caminaba sola en dirección a las mazmorras, además a las diez de la noche, hora en la cual debería dirigirse a su propia habitación. De seguro lo seguía a él.

"La ignoraré. Tal vez McGonagall necesita que me diga algo" Pensó Malfoy "Bueno pues tendrá que esperar a la próxima ronda, yo ya acabé mi turno" Sonrió ante sus constantes y buenas ideas para molestar a Granger.

Draco sintió como Hermione se acercaba cada vez más, hasta el punto en que sus pisadas se oían a menos de un metro por detrás de él. No le importó, así que aceleró el paso para dejarla sola. Bueno. Esa era su intención, porque fue detenido por una delicada mano que se posaba en su hombro, "¿Que demoni…?"

Antes de que pudiera articular siquiera un pensamiento la dueña de esa mano lo había girado con una fuerza casi masculina, poniéndolo frente a frente con ella. Draco iba a gritar algo hiriente cuando sintió unos suaves y delicados labios posarse en los suyos. La sensación fue tan calida que Malfoy se disponía a cerrar los ojos para entregarse al tibio beso, pero recordó en una fracción de segundo quien lo estaba ¿Besando?

- ¿Qué demonios crees que haces Granger?- Gritó Draco mientras empujaba a Hermione después de romper bruscamente el contacto.

- ¿Qué parece que hago idiota? Un momento… ¿Dijiste Granger?- Hermione parecía tan extrañada después de escuchar su propio apellido en los labios de Draco, que este pensó por un segundo que tal vez la sangre sucia había olvidado quien era.

Y en realidad la única razón por la cual la sabelotodo podría besarlo sería una perdida de la memoria a gran escala.

- Claro que dije Granger, ese es tu nombre- Con cada palabra Draco subía una tonalidad de desprecio en su voz- Y déjame comunicarte que no debes dejar que tus pasiones secretas se salgan de control…- Malfoy sonreía, esta era la oportunidad perfecta para cobrarle a Granger todas las que le había hecho, acababa de descubrir que la sangre sucia se había enamorado de él- Y en cuanto vuelvas a acercar tu impura presencia a menos de dos metros de distancia, te hechizaré…¿Qué dirán Potty y la comadreja cuando se enteren? Porque te aseguro que se van a enter…

Draco se interrumpió en medio de la frase, pues una delicada pero fuerte mano había ido a posarse en su mejilla izquierda, en una forma no suave precisamente.

- Asqueroso mortífago en potencia- Escupió Hermione, después se alejó y doblo el pasillo a su izquierda, que estaba a pocos metros.

Malfoy se recuperó del golpe (que en realidad había sido muuuuy fuerte) y salió corriendo tras Hermione, con intenciones violentas seguramente, pero cuando dobló el pasillo por el que ella acababa de desaparecer, se dio cuenta de que efectivamente había ¿desaparecido?

No había rastros de Hermione, era como si se hubiese esfumado, pero lo mas ilógico era la longitud de aquel pasillo, pues cualquier persona se tardaría por lo menos cinco minutos en llegar al final; Tampoco tenia puertas, solo era un pasillo con cuadros y antorchas lúgubres, y Draco estaba seguro de haber reaccionado rápido (lo mas rápido que podría esperarse de alguien que recibió aquel golpe) como para poder alcanzarla.

"Bueno, de igual forma me vengaré" Pensó Draco con malicia antes de continuar el camino a su sala común.

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Estaba parada frente a Ron, quien la miraba con ternura mientras ponía sus fuertes manos en la cintura de ella. Se encontraban cerca del lago, hacía un día un poco nublado y los terrenos del colegio empezaban a enfriarse, por eso el le había puesto su capa a Hermione. Ron empezó a acercar su rostro al de ella.

- Hermione- pronunció suavemente el pelirrojo- Hermione- Repitió, aunque esta vez su voz sonó un poco aguda- Hermione despierta- La voz de Ron definitivamente sonaba como la de una mujer… ¿mujer?

Hermione abrió los ojos de golpe, y se encontró en una habitación con varias camas adoseladas que tenían cortinas color rojo escarlata, y frente a ella unos ojos oscuros la miraban con el seño fruncido.

- Hermione llevo años intentando despertarte- su expresión cambió a una muy picara- ¿Dime con quien soñabas que no querías abrir los ojos?

- Con nadie en especial Lavender- Mintió Hermione con tono aburrido- Gracias por despertarme, acaso ¿Se hizo tarde?- Para esta pregunta Hermione se sentó en su cama haciendo material su preocupación.

- No tontita, lamento profundamente interrumpir tus sueños con Malfoy, pero tengo que preguntarte algo, ya sabes nuestra amistad es de muchos años y pienso que confías en m…

- ¿QUE DIJISTE?- Definitivamente Lavender había llegado a su limite de chismorreo, pues Hermione casi gritó la pregunta- ¿Acaso insinúas que yo estaba soñando con Malfoy?

Lavender era la persona mas chismosa que había pisado Hogwarts, y por eso Hermione no le tenía mucho aprecio, pues prefería no tener mucho contacto con personas que podían calumniar a su propia madre; Esto sin agregar que durante el año anterior Lavender había sido novia. No. Siamesa de Ron Weasley, y desde que cortaron Hermione no hablaba mucho con ella, así que si Lavender se había tomado la molestia de despertarla era porque un chisme especialmente gordo estaba rodeando a la castaña.

- Tranquila Hermy, solo digo lo que imagino, es normal que las chicas soñemos con el hombre que nos gusta- Lavender hablaba con el tono con que se le explica algo a un niño de cinco años- Solo vine a preguntarte porqué no me lo habías contado antes; Fíjate que robarle un beso a Draco Malfoy requiere de cierta preparación femenina, para que no termine… ya sabes… como ter... Como terminó.- Así finalizo Lavender con cierta vergüenza ajena que no pudo ocultar.

Hermione no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Acaso Lavender estaba insinuando que ella había besado a Draco Malfoy? Claro que lo insinuaba, en realidad lo decía abiertamente como si fuera una verdad irrevocable.

- Lavender…

-… y me parece que como mínimo debiste contarle a Ro-Ro…- Lavender seguía hablando mientras ignoraba la mirada de furia que se estaba formando en el rostro de Hermione.

- Lavender.

- …yo te pude preparar, pude arreglar tu cabello para él, para que no tuvieras la vergonzosa necesidad de robarle un beso…- Para este punto la voz de Lavender empezó a quebrarse.

- La-ven-der.- Hermione definitivamente estaba llegando a su 90 de paciencia.

- …si desde un principio me lo hubieses contado, no tendríamos problemas por el amor de Ro-Ro, pues desde un principio yo sabría que realmente te gustaba Malfoy y no me preocuparía por cuidar a Ronnie de ti…

-¡LAVENDER!- Alerta, Alerta, Hermione explotó al llegar a su 100 de paciencia agotada y gritó a su compañera, consiguiendo así el tan anhelado silencio por parte de la exnovia de Weasley.

- Hermy, no tenías porque gritarme- Lavender había empezado a llorar mientras se alejaba de Hermione como si esta quemara.

- ¡Y no lo hubiera hecho si te hubieses callado de una buena vez!- Añadió la castaña conservando su tono irritado- Ahora escúchame bien porque no planeo repetirlo¿Quién diablos se inventó ese… ese… chisme?- Hermione estaba bastante molesta, y casi suplicaba que fuera Lavender la autora de tal atrocidad, pues de esa forma su victima de asesinato estaría justo frente a ella y no tendría que tomarse la molestia de buscar al culpable.

- Bue... bueno yo… este… - Lavender estaba dando un show digno de ser recordado, pues lloraba (sin lagrimas) y balbuceaba cosas sin sentido.

- ¡HABLA DE UNA PUÑETERA VEZ!- Estalló Hermione de nuevo.

- Seamus… dijo… ean… chado… Malfoy… Bullstrode… Goyle… tú… eso… parvati… tonces… aquí… tigo- Lavender había hablado tan rápido que Hermione apenas entendió un par de palabras.

- Lavender… mas despacio por favor- Murmuró la Gryffindor.

- Ay pero que sorda- Ante esto Hermione rodó los ojos- Te decía que Seamus le dijo a Dean que había escuchado que Malfoy le contó a Millicent Bullstrode, quien a su vez le estaba contando a Goyle que tú le habías robado un beso a Malfoy, entonces Parvati se enteró y me dijo que viniera aquí a hablar contigo- Terminó Lavender con expresión de "es verdad".

Bien, esto era el colmo¿Cómo era posible que alguien creyera una información tan filtrada? Además de ilógica. Hermione Granger, la chica genio de Hogwarts, la prefecta perfecta¿Robándole un beso a Draco Malfoy? El mismo hurón detestable, mortifago en potencia, con odio declarado a los sangre sucia, los pobres, los traidores a la sangre y todo aquello que no tenga que ver con él mismo; el mismo Draco Malfoy que Hermione abofeteó en tercero por el simple hecho de que era un idiota (es), el mismo Draco Malfoy que la insultaba en cada oportunidad. Definitivamente quien inventó aquello tenía que estar muy mal del coco. Además la fuente era improbable.

- Pero Lavender, eso es ilógico, además de estupido y repugnante,- Puntualizó Hermione evocando una imagen de ella besando a Malfoy- ¿Cómo es posible que Seamus haya oído un cotilleo contado por Millicent Bullstrode? Pues hasta donde yo sé no se lleva muy bien con ningún Slytherin, la única opción sería que lo hubiese escuchado en el comedor, pero la hora del desayuno está a punto de empezar.- Hermione sonrió inconscientemente, pues quería llegar a la conclusión de que la misma Lavender había inventado tal blasfemia, y por lo ilógico del relato al parecer iba por buen camino.

- Seamus lo escuchó en el gran comedor, pues estaba casi vacío porque era muy temprano, ahí estaban Bullstrode y Goyle cotilleando en voz muy alta, por lo que Finnigan se enteró muy fácilmente de lo que sucedió…

- No sucedió- interrumpió Hermione.

- Bien, de lo que "No" sucedió, y por si te interesa Seamus desayunó temprano porque su mamá le envió una lechuza diciéndole que…

- Ya basta Lavender, no necesito que me cuentes la vida de Seamus Finnigan, no creo que a él le agrade- Interrumpió nuevamente Hermione.

- No te la contaré- Murmuró resignada Lavender quien había perdido todo rastro del "Llanto" que asomaba por su rostro minutos antes.

Hermione ya no escuchaba a Lavender (quien había vuelto a hablar), pues su mente trabajaba rápidamente buscando al verdadero creador de tal mentira, porque de lo que si estaba segura era de la total falsedad de esa situación. La ultima vez que vio a Malfoy fue después de que mientras discutían alguien (o algo) le jaló el cabello; En ese instante ella se retiró a realizar su ronda nocturna, al mismo tiempo que buscaba un culpable a su falta de por lo menos 10 cabellos, y cuando faltaban aproximadamente 10 minutos para que la ronda finalizara se dirigió al despacho de la profesora McGonagall, pues ella la había citado para que aclararán unos puntos de las clases avanzadas que Hermione había decidido tomar. Después de unos 15 minutos con la profesora, Hermione se retiró rumbo a la torre de Gryffindor a descansar.

Por lo tanto, si Hermione hacía una eliminación de las personas que habían pasado el chisme, después de Goyle, Millicent Bullstrode debió escuchar la mentira directamente de los labios de:

- Malfoy- Murmuró la chica mientras entornaba los ojos como si con desearlo Draco pudiera aparecer frente a ella para ser asesinado.

- … Entonces Parvati me dijo que… ¿Dijiste algo Hermy?- Lavender se interrumpió a si misma y miró a Hermione con los ojos muy abiertos.

- No Lavender, ya me voy, y ni se te ocurra repetir esta mentira- Contestó Hermione mientras se levantaba y se alejaba de su cama adoselada dirigiéndose a la puerta de la habitación que para su desgracia compartía con Lavender.

XxXxXoXxXxX

Draco se había despertado muy temprano ese día, y se había dormido muy tarde la noche anterior, porque no podía parar de pensar en la mejor forma de vengarse de Granger. Al final decidió que lo mejor sería publicar aquel patético intento de beso, para así dejar la reputación de la sangre sucia por el suelo; Bastaba con contárselo a algún Slytherin (del sexo femenino claro) para que a la hora del desayuno todo Hogwarts se diera por enterado. "Bueno, tendré que omitir algunas partes del relato" pensó Draco mientras se frotaba la mejilla izquierda, que aún estaba muy adolorida.

Aunque Malfoy no se había pasado la noche en vela solo pensando en venganza, pues también había repasado mucho lo sucedido con Hermione desde el momento en que se encontraron en un pasillo para empezar la ronda, hasta el momento en que ella lo besó y luego lo abofeteó para luego desaparecer tan misteriosamente por aquel pasillo. "Que rara" pensaba Draco "Primero me insulta, luego me besa descaradamente y al final me golpea como si yo fuera el que le robó un beso a ella."

Al final el rubio descubrió que le estaba dando muchas vueltas a un asunto tan "insignificante", y decidió que lo mejor sería dormir yo no volver a gastar una sola neurona en honor a la sangre sucia. Pero desgraciadamente durmió pensando en ella, soñó con ella y se despertó con la imagen de su rostro plasmada en su pensamiento.

- Que lata, mejor voy a contarle a Pansy ó a Bullstrode lo de la sangre sucia- Murmuró Draco enojado con si mismo por pensar tanto en Hermione.

Ok... este es el principio espero que pongan sus opiniones para ver si lo continuo...

Besos