Chapter 1: Chapter 1
Estrella
Gracias a él ahora soy una chica independiente y fuerte, jeje, se me olvido presentarme hola mi nombre es Kagome Higurashi de seguro tienen dudas sobre a que me refiero con eso de una chica independiente y fuerte, ¿a quien le estoy agradecida? y ¿cómo fue que paso? bueno entonces les contare mi historia
Flash Back
Aquella noche estábamos todos sentados alrededor de la fogata cenando era una cena normal con lo típico Sango queriendo golpear a Miroku por tocarla el pequeño Shippo comiendo mucho, algo que no debería sorprenderme a crecido ya bastante y ya no cabe en el saco de dormir conmigo, Inuyasha con sus malos hábitos alimenticios, ahora que lo pensaba se parecía mucho a la forma en que comía Shippo, está bien, empezaría a enseñarle a Shippo la forma de comer y yo, bueno yo ya tenía 2 años de estar recolectando los shikon no kakera y a destruir a Naraku, dando un gran bostezo Shippo decidimos que ya era hora de que todos nos fuéramos a dormir. Ya en cuando todos dormían me encontraba en mi bolsa de dormir, pero no podía dormir, no tenia sueño, al parecer el dios Morfeo no se encontraba a mi favor esta noche así que tome la decisión de ir a distraer mi mente un rato y cansarme para que me invadiera el sueño al rato que regresara.
Estaba caminando todo estaba silencioso, parecía que hasta los animales nocturnos habían decidido tomar un descanso esta noche, mire al cielo vi las estrellas que brillaban, eran tantas, algo que ya no se veía en su época y que amaba de está y la luna llena en su mayor esplendor dando su gloria, demostrando quien era el mandamás del cielo nocturno, dí una risita a mi pensamiento, mandamás, como si hablaran o dieran ordenes, baje la mirada y en eso que la baje vi de reojo unas luces azules, la curiosidad en mi es grande así que decidí acercarme pero lo que vi al estar allí, hizo que mi pobre corazón se apretara pero soportando esto durante dos años me había enseñado a no demostrarlo en mi cara.
-Kikyo...-
-Inuyasha...¿qué haces aquí?- pregunto de espaldas a él, Inuyasha no contesto nada provocando un silencio entre los dos.
-Vine a ver como te encuentras- al fin dijo Inuyasha
-No es necesario- Vi como Inuyasha se acerco la volteo y la jalo hacía si
-Kikyo entiende que si te pasara algo yo nunca me lo perdonaría-le dijo abrazándola fuertemente a sus brazos
-inuyasha...- ¿Por qué sigo aquí?, mi pobre corazón se destroza
Entonces vi como inuyasha lentamente se acercaba más y más a la cara de Kikyo, no, no puede ser, me sentí traicionada, excluida, como si mil dagas se enterraran en mi corazón, quería ir y decirle lo que sentía, quería llorar hasta ya no poder, quería gritar hasta quedarme sin voz.
Divagando entre mis pensamientos del dolor que me agonizaba me di cuenta al final que había estado caminando y me encontraba en un lugar hermoso, había una cascada que caía en un lago cristalino tanto que podía ver dentro de el y como si tuviera un espejo dentro del lago había algunas rocas, cerca del lago había un gran árbol y el pasto era un hermoso verde entre oscuro y claro, me acerque y me senté en una de las raíces del árbol vi mi reflejo en el agua, vi que no tenía ni una lagrima pero el brillo en mis ojos había desaparecido, me quede sentada viendo el panorama, hacía algo de calor, no había nadie, quien podría venir, nadie, Inuyasha estaba demasiado ocupado y si me atacaba un youkai, ya que mas da, solo soy el detector de fragmentos, nada más.
Me metí al lago y estaba frió, sentí que con el frió de el lago podría disipar mis sentimientos, así que nade al fondo del lago, estuve adentro un tiempo hasta que mi cuerpo se acostumbro a lo frió del lago, cuando sentí mis pulmones pedir ese trago de aire para sobrevivir nade hacía la superficie y al subir sentía mi cara fría pero algo caliente cruzando en líneas mire a mi reflejo en el agua y note que habían varias gotas saliendo de mi cara pero hubieron unas específicamente que salían de mis ojos, eran mis lagrimas, no sabia como y cuando me había puesto a llorar al principio fueron pocas, que aumentaron y siguieron, tanto era que me estaba resignando a caer en un llanto ruidoso, pero no, ahogue un pequeño grito en mi garganta, así que rápidamente me volví a meter al fondo mis lagrimas habían parado, asíque salí del fondo y decidí salir del agua.
Tome mi rumbo al árbol para tomar mi ropa cuando en eso sentí una ráfaga de viento que cruzaba mi cuerpo, el agua del lago era fría y asi misma ponía mi piel pero no era inmune a los repentinos ataques del viento, asíque me dio un escalofrío, podía ser frió o hasta la naturaleza tembló de que algo se acercaba, podía ser la segunda opción, así que tome el valor y vire la cara.
Del otro lado del lago vi a alguien que no podría ver mas que en una lucha, Sesshomaru, su cabello plateado brillaba mas con los destellos de la luna parecían solo uno, el ángulo de su cara nunca me había fijado, hasta ahora, lo finas que eran sus facciones, su piel blanca tenia un destello especial, igual q su estola, sus ojos le daban un toque mágico, era un príncipe de cuento de hadas, no era lejos de un príncipe, pero de cuento de hadas definitivamente no, ya que este era frío y cruel, note que se me quedaba viendo y que yo estaba de espaldas desnuda, esto era muy vergonzoso, bueno otro hombre que puedo agregar a mi lista que me han visto desnuda, a lo que pienso ¿cúanto tiempo tiene observando?, pasando un furioso sonrojo en mi cara, puse manos a la obra y huía a la parte atrás del árbol y recordando que deje mi ropa en frente del árbol tome un respiro y extendí el brazo para alcanzarlo, ¿quien diría que mantener algo de dignidad era tan difícil?, al fin alcance la ropa y me comencé a vestir.
Cuando termine de vestirme salí y vi que sesshomaru ya no estaba allí, di un suspiro, sentí un poco de alivio, bueno no un poco, mucho, ya que había olvidado mi arco y flechas y no tenían como luchar, como si tuviera una gran posibilidad contra Sessomaru, pero de cualquier forma era un alivió, cuando me voltee vi a sesshomaru atrás de mi, esta bien, esto no estaba bien después de todo, no tenía como enfrentarme a él, pero no dejaría demostrarle mi miedo, así que me quede parada en mi lugar mirándolo con valentía.
Nos reflejamos cada uno en los ojos del otro, era una batalla de miradas, que el iba ganando pero no iba a admitir la derrota y tampoco iba a dar marcha atrás, aunque si lo pensaba bien el podía matarme con un solo movimiento de sus garras, esta bien , no debí a ver pensado eso.
-Los humanos son patéticos- Bueno eso si fue una sorpresa para que hablara, pero no iba a bajar la guardia y... espera, ¡¿me dijo indirectamente patética?!, bien, esto es guerra.
-Algo que no te debe importar entonces esta raza humilde- dije sarcásticamente, haciendo que el entrecerrara mas los ojos, ya me di cuenta que quizás no fue buena idea, solo conseguí que se enojara más, ya nimodo ya me metí en esto a ver como salgo, aunque tengo motivos para enojarme, ¡me vio desnuda!, no que haya sido una gran novedad pero de cualquier forma.
-Ustedes los humanos tienen esos llamados sentimientos que solo los hace mas débiles y vulnerables- dando un paso más cerca de mí
-¿Tu como puedes saber?, no lo sientes así que ¿como estas seguro? ¿como puedes saber?- fue insolente pero me mantuve en mi lugar
Observe sus ojos, para ver alguna reacción pero no había nada, sus ojos eran como bloques de hielo pero de color dorado, pero apesar de que no demostraba nada vi como dio de repente una mirada puntiaguda y se dio la media vuelta y se fue.
Sentí que el mundo se me cayo encima no era necesario que hablara con esa mirada puntiaguda lo entendí, "tu", no necesitaba palabras y aunque no quisiera admitirlo el tenia razón yo era débil me sentía humillada, avergonzada, patética, destrozada, me había abierto los ojos, de una forma impar, pero sabia lo que tenía que hacer fui demasiado tiempo débil por dejarme llevar por esos sentimientos de amor hacía Inuyasha y siempre querer que me defendiera, ese sentimiento me detuvo y dejaría de amarlo pero no eliminaría todos mis sentimientos Sesshomaru tenía razón pero al mismo tiempo se equivoco pero ese no era el asunto, ahora ella iba a entrenar, iba a saber defenderse sola, independiente y fuerte, ya no seria débil, no, ya no más.
Mire al cielo totalmente decidida a lo que haría, estaba completamente decidida y en un momento del locura al ver el cielo vi una estrella entre el montón, la mire y solo se me ocurrió una cosa mirándola, "gracias sesshomaru" pensé y baje la mirada, y no me di cuenta como la estrella se fue.
En el otro lado del bosque se encontraba Sesshomaru caminando con tranquilidad, de repente paro y alzo la cara al cielo y vio una estrella pasar, "gracias sesshomaru" oyó dentro de su cabeza de repente, volviendo la mirada al frente siguió caminando.
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Este es mi nuevo y mejorado capitulo uno de la historia de estrella, me puse a leerlo y encontre varias partes como que faltaban asique decidi hacerle una mejora ire mejorando y subiendo el capitulo de poco en poco a lo mejor el segundo capitulo lo suba hoy o despúes ya vere mientras diganme que opinan del primer capitulo, ¿ok?
Bueno, bye!!!
Kigami Aizawa