Aclaración: Naruto no me pertenece, sólo la trama de este fic.

Resumen: Sakura es una chica con dotes para la guitarra. Después de un triste pasado deja de tocar durante un tiempo, terminándose por enamorar de cómo toca un nuevo grupo de música: SOTN (Shadows of the night). SOTN tienen una plaza vacante y no se detendrán hasta que Sakura se les una y consigan ser de los grupos mundiales más famosos.


Sólo necesito una guitarra para hacerte suspirar


Prólogo: Yo en el sillón, tú en el televisor.


-No…, no…, no…, no… ¿Es que nunca hay nada interesante por la tele?- pensaba en voz alta mientras iba haciendo zapping- documentales no, noticias no, anuncios no, dibujos animados no, programas del corazón no… Qué aburrimiento.

Se levantó pesadamente hacia la cocina en busca de algún aperitivo dejando la televisión encendida. Se cogió un zumo y volvió a tumbarse en el sofá. Fuera, las gotas de lluvia golpeaban aún más intensamente los cristales de la casa.

La chica apartó la vista de la ventana para coger el mando y reanudar el muermo de sábado. Pasaron 20 minutos y no hubo cambio.

"Seguro que se han puesto de acuerdo para fastidiarme el día"- pensó exasperada.

Un ruido la sacó de sus pensamientos: alguien tocaba el timbre.

Salió en pijama de invierno sin importarla demasiado quien pudiera estar al otro lado de la puerta. Un trueno resonó justo cuando abrió al extraño, y dejó la casa sin luz.

-Genial- murmuró para sí misma. Levantó la vista y vio al cartero ruborizado sin dejar de mirarla- Esto… ¿quiere algo?- inquirió dado que el tipo no pronunciaba palabra.

-¡Ah! ¡Sí, sí! ¿Están los señores de la casa, pequeña? Tengo un paquete para ellos- respondió el cartero saliendo del trance.

"¡¿Pequeña?! ¡¿Cómo qué pequeña?!"- pensó molesta sin dejar notarlo.

-Lo siento pero mi padre se encuentra ocupado en este momento. Si quiere déjemelo a mí y se lo doy- mintió. La verdad era que sus padres se acababan de marchar y no volverían hasta bien tarde, pero eso no lo tenía que saber todo el mundo.

-De acuerdo. Firma aquí, por favor- señaló. La lluvia cedió un poco de fuerza, aunque resguardados en el porche no importaba mucho.

-Gracias, adiós- se despidió la joven cansada de las miradas del carterito. Dejó el paquete encima de la mesilla de la entrada y se dirigió a tientas a la habitación de debajo de las escaleras.

Después de tropezarse seis veces encontró por fin los plomos. Los subió y la luz volvió a la casa. Soltó un suspiro de resignación mientras dejaba todo como antes, volviendo con su querido amigo en televisor.

-¡ATENCIÓN ADOLESCENTES! ¡PORQUE ESTA SEMANA ES EL GRAN CONCIERTO DEL FAMOSO GRUPO "SHADOWS OF THE NIGHT"!...- Ahora sí que presentaba atención a la tele. Se veían imágenes de cada uno de los integrantes del grupo. De ruido de fondo se escuchaban los gritos histéricas de las chicas. Y es que no era para menos. ¡E iban a tocar esta semana en Konoha! "¡Sí! ¡Hoy es el mejor día de mi vida!"- …ENTRADAS AGOTADAS PERO LA RETRASMISIÓN SERÁ EN DIRECTO…

Se siguió viendo más imágenes de los integrantes del grupo, pero la chica ya no prestaba atención. Estaba ocupada, tumbada sobre la alfombra quejándose de su pobre vida. Acababa de perder la oportunidad escuchar a SOTN en pleno concierto.


Sus padres llegaron bastante tarde aquella noche. El paquete había resultado ser comida mandada por su abuela. La chica cenó en silencio mientras su madre comentaba que iba a haber un gran concierto la próxima semana de un grupo llamado shadows of no sé qué.

Se dirigió a la cama aún más deprimida. Sábado por la noche y ella acostándose a las 11. Muy triste.

-¡Cariño, el teléfono!- escuchó la voz de su madre. ¿Quién sería a aquellas horas? Nadie la solía llamar al fijo a partir de las diez. No se atrevía a enfrentarse a la furia de sus padres.

-¿Sí?- preguntó sin mucho ánimo.

-¡No te lo vas a creer! ¡Deja de lamentarte por no poder ir al concierto y escucha bien a tu prima!

-¿Temari? Te he dicho mil veces que primero se saluda. ¿Y cómo sabes que no puedo ir al concierto?

Se internó a su cuarto escuchando los gritos de su prima al otro lado de la línea.

-¿Bromeas? Ya estás al tanto de que yo estoy trabajando programando las representaciones de los SOTN (Shadows of the Night) y hace semanas que no quedan entradas, ¿no?

-Ajá, ¿y?- siguió inquiriendo mientras se tiraba a la cama de plancha.

-Pues que tu querida prima te ha guardado una entrada por el favor del otro día.

Se dio la vuelta incorporándose automáticamente.

-¡¿Quéé?! ¡Temari! ¡Eres la mejor! ¡Te quiero, no, no, te amo!

-Ey, ey, ya vale con cursilerías que me pongo enferma. Bueno, ya sabes…

-Sí, sí, sí. A las 9 de la noche allí y todo eso- exclamó saliendo del cuarto y tirando todo a su paso.

-Genial. Disfruta. A lo mejor nos vemos por la zona- conocía esa risa. Era la de: escondo algo pero no te voy a decir qué.

-Claro, besos, prima ¿ya te he dicho que te adoro?

Devolvió el teléfono a su madre sin pronunciar palabra para volver a descargarse en su habitación.

"¡Sí, sí, sí!"- pensó saltando en la cama y tirando aún más cosas- ¡Atención! ¡¡¡El próximo viernes Haruno Sakura escuchará a SOTN!!!

-¡Sakura! ¡No hagas tanto ruido!- chilló su padre desde el piso de abajo.