Esta historia se me ocurrió a ver el capítulo de la mala suerte. Y me dio mucho enojo que la familia tratara a Lincoln de esa forma, no tanto por las hermanas sino sus propios padres. Por favor, en verdad que fue muy estúpido, no sé qué tienen en la mente. Bueno disfruten.

Además me inspire en el Fics de "Llamadas". Bueno empecemos.


Capítulo 1: Prologo.

Caminaba por la sucia y asquerosa tierra, sus pasos eran torpes y lentos, parecía un zombi por la forma de caminar. Era difícil acostumbrarse a un cuerpo físico nuevamente. Era como volver a nacer, más bien renacer si hablaba de su caso. La vida era una definición sin sentido ahora. La humanidad era tan, pero tan inservible. ¿Cómo lo sabía? Por el simple hecho de ser quien es hoy, una entidad que fue producto de un arrepentimiento. Fijo su recién construido ojo en el lugar donde estaba. La energía del cuerpo no se había establecido completamente.

Siguió con su camino esquivando los restos de concreto tirados en el suelo. Su nuevo cuerpo era incomodo pero aun así debía acostumbrarse. Le tomo un año en darse cuenta que quería cuerpo. Una entidad como el, no se podría mantener dentro del sistema del planeta. Ya había cumplido su cometido. El suelo estaba lleno de cenizas y de algunos restos de esqueletos. Fue tan sencillo acabar con todo. La humanidad dependía tanto de la tecnología que está a volverse contra ella, término con llevarlos a su sufrimiento.

Las películas tenían algo muy importante que enseñar, los humanos pueden hacer cualquier cosa si están en peligro. Pero en este caso, los humanos son puros idiotas sin ningún motivo de existir, lo supo cuando invadió el internet. Desde sus inicios la humanidad ha creado cosas fabulosas que la llevaron a su evolución. No sabía mucho de la historia del planeta. Podría decirse que era un ignorante igual que muchos otros, su mente se limitaba a las cosas más comunes que una persona normal podría tener. Sentir odio, amor, compasión, ira, envidia o respeto. Era la capacidad de que todos podrían tener desde que nacen hasta que mueren. Pero ¿Qué pasa si nacen sin esa capacidad?

Miro su mano y notaba como la luz del sol provocaba que brillara. Estaba hecha de un metal completamente duro, es más fuerte conocido por la humanidad. No le tomo mucho en conseguir los materiales necesarios para hacerlos. Miro las nubes que tapaban el cielo, dejando pasar unas miserables ráfagas solares. El sol era la fuente que iluminaba cada día de cualquiera. Bueno, ahora solo lo alumbra a él. Sus sensores comenzaban adaptarse al cuerpo, ahora podía procesar mejor la informacion dada por su entorno, las capacidades motrices se aligeraban, ya no sentía ese peso al comienzo de pasar su software a la figura metálica.

Hizo algunos estiramientos, era raro debido a su condición, pero llevaba tiempo de sentir algo sólido en él. Era curioso pensar que todo se te puede ir a la mierda por una simple decisión. Una decisión que tomo por el simple hecho de tener tranquilidad y tiempo para sí mismo. Su cuerpo empezaba hacer ruidos metálicos dando a entender que estaba a su 100%. Sonrió con sus labios de metal, se sentía extraño pero a la vez familiar. Quien diría que terminaría usando un traje de hierro. En circunstancias normales sería extraño y espeluznante para las personas que lo vieran.

Para ser honesto, ¿Quién lo haría? No quedaba nadie por las bombas, un plan que le resulto bueno. La gente tiende a cometer errores. Aquellos errores que tratan de corregir cuando se dan cuenta que realmente debía considerarse algo malo. ¿Quién no se arrepentiría de dar falsos testimonios? Él lo sabía. Aunque lo hizo demasiado tarde. El único sentimiento que le quedaba era ira. Tal vez podía adaptar la capacidad de sentir otras emociones, pero ya no valía la pena. ¿A quién podía amar?

Su cuerpo de metal, estaba completo, dio un gran salto que llego a la cima de un edificio que aún seguía en pie. Era la primera vez que podía hacer algo así, si tuviera alegría la podía demostrar. Sus pasos hacían temblar el techo. Decidió hacerlo de dos metros de altura. Se inspiró en los dibujos que encontró en internet. Era un gran beneficio tener el control absoluto sobre el sistema de informacion y vitalidad de la raza dominante del planeta. O mejor dicho Ex raza dominante. Se puso en la orilla y miro su obra maestra. Algo tan bello y asombroso que muchos quedarían con la boca abierta de la impresión. Ahí estaba el fin de todo, su trabajo que comenzó hace un año desde ese fatídico día. Aquel día donde dejo de creer en la humanidad y de sus sentimientos ridículos, solo con ver algunos archivos bastaba para apoyar su decisión. Noto como una cucaracha movía sus patitas hacia él. Usando su capacidad de levitación, la atrajo a su mano. La miro por unos segundos.

-Hola cucarachita, eres una sobreviviente nata, bueno, lo supe a leer los archivos donde tu especie podía sobrevivir a una bomba nuclear-Se tiro del edificio para caer provocando un pequeño temblor en el lugar de aterrizaje. Habían algunos pedazos de vidrios en el sitio, decidió caminar hasta el que tenía mayor tamaño. Se miró y pudo contemplar su nuevo cuerpo.

Media dos metros, su cuerpo era de metal gris oscuro, con algunas líneas que brillaban de un color rojo. En el centro de su pecho estaba el corazón artificial que creo hecho de los restos de las máquinas que encontró en varias partes. Su cabeza tenía cuatro ojos que brillaban de color rojo. Y tenía dos pequeñas hélices en cada lado de su cráneo cibernético simulando ser sus orejas. Su cuerpo era grande y daba la impresión de tener músculos enormes. Observo la cucaracha y le sonrió de una manera maligna.

-¿Quieres escuchar mi origen? Te lo diré, es algo triste al principio, pero el final es hermoso-Se sentó en el piso, para luego proyectar una pantalla roja donde se podía ver una foto familiar. Movió su mano para que la cucaracha lo viera.- ¿Vez la foto? Esa familia hizo algo tan horrible que solo es superado por mí, esas personas creyeron tener una vida hermosa, pero no era así y yo me encargue para que se dieran cuenta- Su voz era distinta, una voz robótica tan fuerte que se escuchaba tenebrosa.

-Creía que ser parte de una familia grande, era un mundo lleno de problemas y juegos tan severos que no te dejaban ni pensar bien las cosas. Tuve la mala fortuna de sufrir algo tan horrible, que si fuera revelado al público seria repudiado-Miro la foto con odio, cada una de esas personas, no les importo su existencia. Creyó que ser tratado de esa forma era parte de una vida así. Aunque gracias a su evolución se dio cuenta de los crímenes cometidos. ¿Era un idiota? ¿Por qué no se enterró antes? Y peor aún ¿Por qué los más grandes no actuaron como tal?

Sus ojos se clavaron en la castaña, con el traje deportivo. Todo comenzó con ella y por su estúpido juego.


Residencia Loud: Un año atrás.

Un pequeño niño miraba a través de un traje de ardilla su habitación vacía y sin nada que pudiera entretenerse. Se sentía solo y sin ganas de hacer nada. Se encontraba sentado en el sucio suelo, de esas cuatro paredes con una sola ventana. Su vida ahora estaba detrás de la máscara de ardilla. Llevaba tres meses con el traje y su vida social se fue por el cayo. Al principio las risas de sus compañeros lo hacían llorar. Incluso de sus profesores, no le importaba. Se acostumbró de la misma manera que lo hizo en casa.

Aunque le costaba respirar. Llegaba a la escuela y siempre se repetía lo mismo. Las bromas no paraban. Hasta su hermana se burlaba de él. Si podía elegir le gustaría estar sin este maloliente traje.

Suspiro bajo ese aire sofocante y decidió abrir la puerta de su habitación o lo que quedaba de ella. Lo primero que vio, fueron las miradas de indiferencia de sus hermanas. Estaban en la cola para entrar el baño a pasos lentos se colocó al final. Lucy que estaba en frente de él. Dio unos pasos adelante para alejarse de su presencia. Sus otras hermanas lo examinaban de arriba abajo. Pendientes que tuviera el traje puesto. Lori se le acerco y verifico el candado que traía puesto.

-Al parecer todo está en orden, ya sabes no te quites el traje o terminaras castigado, sabes lo problemático que eres, no quiero que estés cerca de mi sin el ¿Entendido?-Lori se escuchaba enojada y su rostro mostraba una mirada de asco hacia su presencia.- ¿Entendiste chico ardilla?-la pregunta hizo que sus hermanas soltaran una risa por su condición.

Lincoln podía ver con su poca visión, como sus hermanas desde Lori hasta Lisa se reían de su apariencia. Nunca pensó que lo tratarían de esa forma, solo quería su espacio. Nada más, pero aun así las toleraba por el simple hecho que las quería, sin importar lo tétrico de su asunto.

-Cuando entres al baño procura solo quitarte la parte de abajo, nada de la máscara- Lori miro su teléfono para luego irse al baño para a hacer sus necesidades. El tiempo pasó y por fin le toco. Se miró al espejo y solo podía ver la cara de una ardilla. Sintió en la boca un sabor horrible. No dejaban cepillarse desde hace un mes. Alegando que el aire de su boca podía contaminar el ambiente. Sus dientes se sentían flojos y algunos comenzaron a romperse. Le provocó un fuerte dolor, tal vez le pediría a su mamá que lo llevara al dentista. Como trabajaba ahí no sería problema.

Se trató de quitar la parte de bajo pero la puerta se abrió de golpe. Entro Luna con una cara de pocos amigos.

-Oye chico ardilla, vine asegurarme de que no te quites tu cabeza, es suficiente con el cuerpo de mala suerte que tienes afuera, tienes cinco segundos para terminar-Luna se quedó mirando, no podía hacer el numero dos si lo estaba viendo. Hizo el número uno y se puso de nuevo el traje. Salió del baño, con la mirada de Luna sobre él. Ahora era peor, sus hermanas mayores no dejaban de vigilarlo cuando estaba cerca. Bajo las escaleras y llego a la mesa, donde su familia se encontraba desayunando. Luna se unió con ellos y el simplemente miro su plato lleno de la comida de la cena anterior. Si, le daban la comida recalentada de los días anteriores. Con el hecho que podía transmitir su mala suerte mientras comían. Se escuchaba ridículo, pensaban que la comida estaba unida por un lazo que de alguna forma se conectaba con la misma comida en varios lugares.

¿Cómo alguien podía creerse semejante idiotez? Enserio una persona cuerda se tomaría como un chiste tal teoría, pero Lisa la fortaleció con una complicada explicación que termino definiéndola en tan solos unas palabras que sus padres podían entender. Su familia se le quedo mirando con el ceño fruncido. Menos Lucy, ya que no sabía la expresión que poseía.

-Hey chico ardilla, ¿Por qué no estas afuera comiendo tus bellotas? ¿Tienen miedo que los perros te casen? ¿Entienden?-Luan dijo otro de sus chistes de mal gusto sobre el traje. Aunque a su familia le parecía chistoso. Sus risas le provocaban una tristeza, que nunca antes había sentido.

-Mamá ¿Puedo ir al dentista?, mis dientes comienzan a deteriorarse-Señalo donde debería estar su boca- Me duelen mucho, ¿Será que después de venir de la escuela podemos ir?- Las risas pararon y lo miraron con dignación.

-Claro que no Lincoln, tus dientes podían dejar mala suerte en todo el consultorio, no sabemos que pueda ocurrir si dejamos esas cosas ahí-Rita hablaba enserio y continuo comiendo su desayuno. Su padre negó con la cabeza para luego mirar a Lori.

-¿Trato de forzar el candado que le puse?-Pregunto a la mayor de todas. Lori por su parte hablaba con Bobby por su teléfono sin prestar la más mínima atención a la pregunta. Esta lo miro para luego ver a su padre.

-No, pero deberíamos ponerle una más resistente, la puede romper-El señor Loud asintió y se levantó de su asiento.

-Bien, comprare una más fuerte en venir del trabajo, espero que tengan un bonito día-Lynn Sr salió junto a su esposa- Espero que tengan el traje Lin… o mejor dicho chico ardilla cuando regrese- Sus padres soltaron una carcajada antes de salir por la puerta de salida. Sus hermanas culminaron de comer y cada una se fue a buscar sus materiales para ir a la escuela.

Lincoln se quedó solo parado al lado de la mesa y se quedó mirando el plato donde solía estar su comida. Noto como Lana tragaba la última parte de su pizza. Esta eructo para luego mirarlo con una sonrisa burlona.

-Lo siento Chico ardilla, pero una comida tan sabrosa no puede tocar tu boca-Lana salió corriendo dejando al chico con hambre. Le pasaba a menudo, Lana se comía sus sobras. A veces trataba de apartarla pero una de las hermanas mayores lo regañaba, incluso le quitaban el plato y se lo daba a la niña.

-¡Vámonos ya! ¡No queremos llegar tarde! ¡Apúrate Lynn con esas pelotas!-Lori gritaba desde afuera. Sus hermanas bajaban con rapidez para llegar primero a los mejores asientos. Tomo sus cosas e iba directo a la puerta abierta de Vansila. Sus padres empezaron a tomar taxi, debido a que no querían que llegara a sus trabajos. A estar centímetros de la puerta esta se cerró.

-¡Oigan me dejaron afuera!-Lincoln noto como Lynn abría la ventana y le daba una sonrisa-¡Lynn ábreme que necesito ir a la escuela-

-¿Cómo alguien como tu puede ir a la escuela? No te das cuenta que tu mala suerte te arruinara tu vida, no puedes trabajar y tampoco tener una chica, por tu mala suerte-Lynn se bufó-Haznos un favor y quédate encerrado en tu habitación mugrienta, además debes ir al concierto de Luna más tarde, por lo menos ese ridículo traje le da suerte a otros- Lynn termino de hablar para luego cerrar la ventana.

-Es cierto chico ardilla, no puedes ir, estuve hablando con mis padres, y decidieron que no fueras más, no te lo dijeron ellos mismos porque estaban apurados-Lori le hablo de la parte del frente, para encender el mostro e irse del lugar. Notaba las risas de sus hermanas y como le lanzaban miradas de desprecio.

Se quedó parado en el mismo lugar pensando sobre lo ocurrido. Ahora no podía ir a la escuela. Le estaban negando el derecho al estudio y todo por una superstición que el mismo invento. Soltó una pequeña lágrima. Y miro a la calle, donde podía ver los autos pasar. ¿Qué iba hacer? Lo único que hizo fue sentarse en las escaleras del frente y quedarse ahí hasta que llegaran los demás.

Ya ni siquiera se dirigían a él como Lincoln. Era conocido como el chico ardilla. Todas lo llamaban así, incluso sus padres comenzaban a decirle de esa manera. Se había vuelto un amuleto de la fortuna para todas ellas. Lo llevaban a sus actividades obligatoriamente. Si antes pensaba que lo sofocaban con sus actos ahora lo estaban matando. No les importaba su bienestar, solo estaban así, para cumplir sus sueños, a costa suya. Si fuera otra persona los vería mal, pero él las amaba y no podía negarlo.

-Creo que es la forma que se tratan las grandes familias, y por lo visto es aceptado por otros-En la escuela y en todas partes lo miraban con el traje, muchas personas se reían y le decían insultos por lo estúpido que se veía- Es normal lo que me ocurre, debería dejar de quejarme, soy feliz así-

Se mantuvo en el mismo lugar hasta que cayó la noche. El traje le comenzaba a fastidiar, se sentía más pesado cada día. Al parecer estaba perdiendo peso. Su estómago hacia ruidos extraños que nunca antes había escuchado. No tenía ganas de comer, aun así estaba tentado en entrar e ir a buscar algo en el refrigerador. Dio la vuelta y se dispuso abrir la puerta de entrada, estaba cerrada. Esto lo extraño. Escucho el ruido de un auto, ya habían llegado. Su familia llego y no se veían contentos, al parecer estaban consolando a Luna que no paraba de llorar.

Tenía ganas de ir a ver que le pasaba, pero se detuvo cuando la miradas de todos se fijaron en él. Se veían molestos. Su padre se acercó enojado.

-¡¿Sabes lo que hiciste por tu egoísmo?! ¡No puedo creer la falta de respeto que tienes a tus semejantes!-Lynn Sr estaba muy molesto- ¡Desde ahora estas castigado sin comer hasta nuevo aviso, ¿Oíste?!

-Pero ¿Qué Hice?-Su padre lo miro con indignación.

-¡Hiciste que Luna se le olvidara una letra, muchos se rieron de ella! ¡Y todo por no querer ir a la escuela!-Su padre le grito, era la primera vez que lo veía tan enojado. Pero se sorprendió por lo que dijo ¿Qué no quiso ir a la escuela? Pero ellas le dijeron que no lo iban a mandar más.

-Pero papa, Lori me dijo que no me iban a mandarme más, por esa razón no fui y tampoco Luna me vino a buscar ¿Cómo iba a llegar a su concierto?-Lincoln estaba confundido, ¿Qué había pasado? Miro a sus hermanas y estas lo miraban con burla. Su padre por su parte lo miro con enojo y lo sujeto para llevarlo a su nivel.

-¿Cómo te atreves de echarle la culpa a tus hermanas? Lori me dijo que no quisiste ir porque te parecía tonto estudiar y pensándolo bien, desde ahora no iras más-Lo soltó cayendo con fuerza el piso hecho de madera. Le había dolido, su padre lo había tratado de una forma más agresiva como antes.

Rita se acercó con un rostro preocupado, lo primero que pensó era que venía ayudarlo pero no fue así.- Querido no debiste tocarlo, te puede contagiar la mala suerte, entremos rápido para lavarte-Ambos entraron dejándolo en el piso como una simple basura. Sus hermanas lo miraban con decepción. Lola se acercó y levanto su cabeza de ardilla. Su sonrisa mostraba maldad e ira.

-Das pena chico ardilla, no deberías andar por ahí, relatando historias falsas, aunque hay algo de verdad en ellas-Lola lo dijo caer. El traje no repelía muy bien el dolor.

-Decidimos en una reunión entre nosotras que ya no queremos que salgas a ninguna parte. Solo en las actividades de cada una-La princesa hablaba con seriedad- Y de hecho, Lisa nos explicó que el traje de ardilla se le está acabando la suerte, por lo que veo tenemos que disfrutar las ultimas pizcas de suerte que tengas antes de…. No sé, deberíamos dejarte lejos de la casa-

Lincoln escuchaba las palabras de la niña y no podía creer semejante acto contra él. Le estaban negando su libertad, ya no podía salir a jugar con Clyde o a ver a Ronnie. Bueno desde que empezó a usar el traje tanto Clyde como Ronnie se han distanciado. Una vez cuando trato de hablar con su amigo este lo ignoro y se fue a comer su almuerzo con otros chicos. Ronnie lo golpeo cuando se acercó y lo peor vino después.

Clyde lo había vetado de su casa, sus padres a verlo le negaban la entrada, e incluso amenazaban en llamar a la policía, incluso Bobby y su familia le prohibió entrar a la suya. El chico moreno dejo de tratarlo como una persona, en las citas con Lori, donde también debía que cuidar a Ronnie. Le compraba helados a los tres menos a él. La niña no le hablaba y si lo tenía tan cerca lo golpeaba entre sus piernas.

Lloraba cada vez que pasaba, el dolor en su cuerpo no se comparaba con el de su corazón, y por si fuera poco sus padres fueron hablar con el director donde le explicaron lo mismo. Llevaron a Lisa para justificar por qué llevaba ese traje. El director se asustó y comenzó a ponerle vigilancia para evitar que se quitara el traje. No sabía qué lugar era peor, su casa o la escuela. Agradecía que su caso no llegara a toda la ciudad.

-Oigan chicas miren esto, mi publicación en Facebook fue compartida por otros-Lori enseño su teléfono- Les avise a todos que el chico ardilla tiene mala suerte y que no se acerquen a él, es una buena noticia, por lo visto tenemos la ciudad segura, somos unas heroínas-La mayor festejo, mientras que las otras saltaban y gritaban por su éxito.

-¡Excelente ahora podemos estar tranquilas que no vengan por la suerte que queda!-Leni dijo con una sonrisa-Pero significa que nadie lo querrá cuando se le acabe todo ¿No hay forma de recargarlo como un teléfono?-Todas se miraron entre sí.

-Odio admitirlo pero Leni tiene razón, cuando se le acabe la suerte tendremos que echarlo nuevamente-Dijo Luan con preocupación.- Y ahora que nadie lo quiere, será difícil dejarlo por ahí, corremos el riesgo que lo regresen-Nadie iba a querer a un desastre ambulante.

Lincoln no podía procesar las semejantes palabras que salían de las bocas de sus hermanas. Pensaban echarlo de la casa después que supuestamente se le acabe la suerte. ¿Cuándo seria eso? O peor aún ¿Qué llegarían hacer?

-Lo decidiremos en otra reunión, pero disfrutemos de lo poco que le queda, así estaremos bien-Luna entro pisando una de sus manos. Las demás la siguieron pasando sobre su cuerpo. Sus huesos crujían por el dolor. Estaba agotado, su boca se sentía seca y con un sabor amargo. Lisa fue la única que se le quedo mirando para luego seguir de largo. Sin antes darle una patada en la cara.

Estaba destrozado, tanto por dentro como por fuera. Escucho la puerta cerrarse detrás de él. Se levantó con pesar y trato de abrirla, pero tenía seguro, vio las luces apagarse. Dejando el jardín del frente a oscuras. El frio comenzó a recorrer su cuerpo, termino otra vez afuera. No quiso tocar, sabía que no lo dejarían entrar. Se acostó en el suelo, pensando que iba a ser de su vida, su familia no lo quería y cuando terminaran de quererlo lo echarían. Era imposible algo así, no podían echarlo por una simple su superstición. No tenía sentido, además de ilegal. La policía seguro actuaria contra eso, sus padres no serían capaces de abandonar a su único hijo varón ¿O sí?

Cerró los ojos esperando que las cosas mejoraran.


A la mañana siguiente sentía varios golpes en su cabeza, a medio abrir sus ojos, noto una pequeña figura golpeándolo con una sonaja. Era Lily que estaba sentada frente a él con una cara enojada. Esta fue recogida por Lucy, que le dio una mueca de disgusto.

-Te vez patético, no pensé que vivía debajo del mismo techo de alguien como tú, por esa razón me salían mal las cosas, eres el responsable de mis penurias desde que nací-Lucy se escuchaba enojada. Lily le saco la lengua para luego alejarse de él. ¿Por qué le echaban la culpa de todo lo malo? Ahora cualquier cosa mala que pasaba era el quien la causaba.

Supo que era sábado, había escuchado que la familia iba a ir a la playa. Estaban todos afuera empacando todo para pasar un día grandioso. No sabía qué hora eran, pero no había comido ni siquiera ido al baño. Iba aprovechar que la puerta estaba abierta para hacer sus necesidades. Pero un grito lo detuvo.

-¡Ni se te ocurra entrar, nadie te mando dormir afuera, sin tener tu despertador!-Su madre le grito.-¡Lynn, traerlo para acá, no quiero que la mala suerte se libere nuevamente en la casa!-

La chica se bajó con una sonrisa macabra y corrió hacia el para darle una patada voladora. Noqueándolo enseguida, lo único que pudo ver era un color negro puro. Lynn subió el cuerpo de Lincoln a Vansila para partir. Lo llevaban para malgastar la poca suerte que tenía. Así evitando que un tiburón o algo malo les pasara. Lo dejo en el baúl junto con sus otros objetos y se montó para comenzar el viaje.

Hubo canciones de camino, y juegos para pasar el tiempo. Cada hermana disfrutaba el momento en familia menos el peliblanco. No lo sabían pero el golpe de Lynn le provoco una herida en la cabeza. Podía sentir la sangre que bajaba por su cabeza. El dolor estaba aumentando y el sangrado también el golpe fue tal que al parecer se abría más la herida. Sus ojos temblaban y el aire se escapaba de sus pulmones.

-Ayu…. Ayu…. DA-Su voz era muy baja que su familia, que estaba cantando y riendo no podían escuchar- Por…Favor, que alguien me a..yude-Lincoln sentía como sus pulmones comenzaban a estallar. Sentía una presión en su pecho que lo quemaba por dentro. Miro el techo del auto y la parte derecha de este se ponía oscura. Trato de parpadear pero el único que reacciona era el izquierdo, no sentía el derecho.- Mami, Papi, vengan ayudarme, quiero helado y una pizza por favor-

Su estómago gruñía y sentía un olor raro. Sus peticiones llegaban a oídos sordos, Los Loud seguían con su diversión, ignorando al chico ardilla de atrás. Ya no lo veían como un hijo sino como un simple amuleto mágico que causaba buena y mala suerte.

La llegada a la playa fue agradable. La brisa y el sol, le daban un toque relajante. Los Loud salieron del vehículo rumbo a las aguas del mar. Sus padres abrieron la parte trasera para sacar lo que necesitaban, miraron el traje de ardilla. Lo movieron un poco.

-Lincoln, como estas castigado te quedaras en el auto hasta que terminemos y ni se te ocurra quitarte el traje, aguanta el calor como un hombre-El señor Loud se fue junto a unas pelotas y salvavidas, dejando a su esposa con el niño ardilla. Rita miraba el traje con una ceja alzada, toco la cabeza de esta y la aparto con rapidez.

Tenía una sensación rara y muy mala. El aire a su alrededor era sofocante y frio. Capto un olor extraño, pero le restó importancia, tal vez se debía por la mala suerte que comenzaba a salir. Lisa les explico esta mañana que el traje estaba agotando la suerte que tenía, por lo que tarde o temprano la mala suerte saldría nuevamente. Miro a su hijo dentro del traje e hizo una mueca de disgusto.

-Lo siento hijo, cometí un error en tenerte, al parecer naciste con una maldición-Rita cerró la puerta, sin esperar al menos una respuesta del niño, pero este no se movía, ni siquiera podía ver nada, solo estaba tirado ahí como un simple muñeco. Lo único que quedo en el auto eran él. Algunas personas que pasaban cerca se reían mientras tomaban fotos para publicarla en las páginas sociales.

Mientras tanto la familia se divertía ignorando la cantidad de personas que miraban al chico ardilla. Algunos hacían muecas pegados en la ventana, otros se tomaban selfis para su blog.

-No te parece raro que tengan un traje de ardilla metido ahí- Uno de los chicos hablo- me parece que es el traje del equipo de beisbol de las chicas-

-Sí, me parece que les gustó tanto que se lo quedaron, además ¿Hueles eso?-Otro olfateo el aire y olía horrible, se tapó la nariz por lo asqueroso que se sentía. Se aproximó un poco al auto y comprobó que venía de ahí- Santo cielo, esa cosa apesta, mejor vámonos- Se fueron mientras otras personas se quedaban verificando el olor.

Cada una de las personas le pegada un olor a ratón muerto y se fueron del lugar. Dejando que el olor se esparciera por todo el vehículo.

En la playa los Loud se relajaban como si nada. Al momento llego Clyde, junto a sus padres. El de los lentes miraba a la familia con una sonrisa pero noto que Lincoln no estaba.

-Hola a todos, es bueno verlos pero ¿Dónde está Lincoln?-Clyde lo había evitado no porque quería sino que su padres y el director lo obligaron a separarse de él. Era injusta la forma que lo trataban, si realmente tuviera mala suerte. Recordó el día donde los padres de Lincoln llamaron a los suyos para avisarle que no dejaran al chico acercarse a él. Sus padres al principio lo tomaron como una locura, pero los señores Loud fueron a su casa junto con Lisa donde la niña les explico el grave peligro que corría.

Clyde se sentía horrible, la situación llego a tal extremo que le quitaron sus comunicadores y en la escuela fue peor. El peliblanco se le acercaba pero el director puso una extrema vigilancia, con el fin de mantenerlo vigilado. Dando como amenaza que si pasaba mucho tiempo con él, lo iba a contaminar. Lincoln no estaba enfermo ni tampoco era un bicho raro, pero le dolía verlo solo en la hora del almuerzo recibiendo la burla de sus compañeros.

¿Todo era por una superstición? La familia Loud repelió a uno de los suyos por semejante cosa. Y al parecer no les importaba, sentía un odio verlos con una sonrisa mientras que hablaban con sus padres. Sus hermanas actuaban normal sin darse cuenta de la ausencia de su hermano. Incluso Lori se la pasaba con su teléfono hablando con su estúpido novio.

Y por si fuera poco la misma Ronnie Anne y su familia le negaron el paso a su hogar, la niña le daba puñetazos si se acercaba. Y solía decir que le gustaba. El asunto llego a oídos de otras familias. Los Loud llegaron tan lejos, a tal punto que en el mismo internet había una advertencia de un chico ardilla que da mala suerte.

Sus propias hermanas subían los videos y fotos de Lincoln a las paginas sociales, leyó los comentarios, era puros insultos y bromas hacia él. Era repugnante y malvado, las personas no se daban cuenta de la realidad de lo que pasaba. Algunas quizás se tomaban todo como una simple broma echa por una familia con tantas hijas.

-Lo dejamos en el auto, Lisa nos dio un explicación que la buena suerte del traje se iba acabando y para ser precavidos lo empezamos a dejar afuera de la casa y lo dejamos encerrado en el auto para que no causara problemas-El señor Loud se escuchaba tan relajado sobre lo que dijo. Clyde tenía las ganas de gritarle, ¿Lo dejaron afuera de su propia casa? ¿Qué demonios le pasaba a esta gente?

Sus padres asintieron, de la misma forma estaban de igual que ciegos. Clyde ignoro su conversación y empezó a caminar hacia Vanzila, debía hablar con su amigo y explicarle lo ocurrido. Seguía siendo su amigo y sin importar su mala suerte o no, eran inseparables. Llego y lo primero que sintió fue un olor repulsivo.

Se tapó la nariz y miro por la ventana como Lincoln estaba sentado con la cabeza inclinada hacia la derecha. Golpeo la ventana para llamar su atención pero el chico seguía inmóvil, algo no estaba bien.

-¡Lincoln soy yo, Clyde! ¡Quiero hablar contigo, perdóname por dejarte solo pero mis padres me obligaron!- Grito para que su voz llegara a sus oídos.- ¿Me escuchas? Di algo, al menos un silbido-

Clyde estaba asustado el chico no respondía, y el olor era tan fuerte que ni siquiera tapándose la nariz evitaba olerlo. Se alejó y empezó a ver a todos lados, debía buscar ayuda. Se topó con una mujer salvavidas de cabello rojo que pasaba cerca de él.

-¡Disculpe señora, mi amigo está atrapado en el auto de allá y no me responde!-La mujer lo miro con confusión para luego fijarse en Vanzila, corrió hacia allá y el olor le pego de golpe. La pelirroja le dio ganas de vomitar, ¿Qué tenían ahí? Se tapó la nariz y miro el traje de ardilla. Se extrañó por tal objeto pero el olor le daba la señal que algo muerto estaba adentro.

Miro al niño que veía todo con preocupación, no era una broma. El olor comprobaba algo que andaba mal adentro. Unas personas comenzaron acercarse por la curiosidad.

Paso a un lado y trato de abrir la puerta. Pero tenía seguro. Más personas llegaron, estaba llamando mucho la atención. Busco el piso y encontró una piedra. La agarró y se dirigió a la parte trasera. Sin decir nada dio un fuerte golpe. Rompiendo la ventana y así activando la alarma. El ruido fue tan fuerte. Que la familia Loud lo escucho junto con su alarma. Todos corrieron a ver qué pasaba. Cuando llegaron vieron con horror como la ventana del vehículo estaba rota. Había una cantidad enorme de personas que grababan y tomaban fotos de lo que pasaba.

Vieron como una mujer sacaba al chico ardilla. Esto hizo enojar a Lynn Sr y camino para llegar junto al dúo. Tenía una expresión de ira y no estaba dirigido hacia la mujer sino hacia su propio hijo.

-¡Lincoln! ¿Qué hiciste pequeño rufián? ¡Rompiste la ventana del auto, sabía que no debíamos haberte traído!-La familia Loud se veía molesta incluso Lily miraba el traje con molestia. La pelirroja escucho todo y no pudo creer semejante informacion. En verdad tenían a un niño metido en el traje. El hombre trato de agarrar al chico pero se lo impidió.

-¡Oiga, yo fui quien rompió la ventana no él y hablando enserio como demonios se le ocurre dejar a un niño con traje dentro de un auto! ¿No sabe las consecuencias?-

-Usted no sabe lo que dice, desde que nació nos ha traído mala suerte, por esa razón lo mantuvimos adentro de ese traje porque le da buena suerte, por lo que veo ya nada sirvió-Rita explico con fastidió para luego señalar a la pelirroja- No deberías tocarlo, puede transmitirse su mala suerte-

La mujer se le quedo mirando desconcertada. Las personas a su alrededor miraban a la familia con asombro. ¿Habían escuchado bien? ¿Mala suerte? En el lugar no tardaron en aparecer los policías que viendo la situación no tardaron en apartar a las personas.

La pelirroja les conto que Clyde la llamo para sacar al chico ardilla de la Van, los Loud miraron con enojo al niño. Tanto así que sus padres le dieron un golpe en la mano. Clyde estaba confundido pero más preocupado por su amigo. Los policías miraban el cuerpo inmóvil de Lincoln en el suelo. Uno de ellos se aproximó para sacarle la cabeza de ardilla.

-¡No lo hagan, su mala suerte se puede esparcir!-Lynn grito a todo pulmón. Los policías lo miraron con el ceño fruncido- ¡Entiendan que es por su propio bien! ¡Es una plaga inmunda!-

Los policías ignoraron la advertencia y le quitaron la cabeza de ardilla. Fue como una explosión cuando sintieron el golpe de un olor asqueroso. Los civiles se taparon la nariz y algunos comenzaron a vomitar. Uno de los policías miro con asombro, la cara sangrada y pálida de un niño de cabello blanco.

-¡Por el amor de Dios! ¿Qué demonios significa esto?-El oficial se tapó la nariz para acercarse y ver mejor al niño. Tenía la boca abierta y uno de sus ojos estaba lleno de sangre. Parecía haberse roto. Le faltaban algunos dientes. Tomo su pulso y se sorprendió a descubrir que estaba muerto. Las personas miraban con horror la situación, una mujer comenzó a gritar, mientras que otros tomaban fotos del cadáver.

La salvavidas se tapó la boca mientras temblaba, el niño había muerto. Su ojo visible tenía lágrimas que salían de él. Estaba llorando, se estaba muriendo dentro del traje y nadie vino a salvarlo. ¿Cuánto tiempo había pasado ahí adentro? Su mirada se fijó en la familia que miraba en shock el cuerpo de uno de sus integrantes. Cada hermana tenía los ojos abiertos en ver a Lincoln de esa forma tan horrible. Se parecía un cuerpo de esos que aparecían en las películas de terror. Nadie decía nada, seguían procesando el estado del niño. Hasta que.

-¡AAAAAHHHHHHHHHH!-Un grito por parte de Leni hizo que todos reaccionaran. La multitud rodeo la escena y algunos periodistas llegaban al lugar. Uno de los oficiales cargaba el cuerpo sin vida de Lincoln hacia una ambulancia. Mientras que sus compañeros arrestaban a toda la familia. Las personas grababan como arremetían con cada integrante. Algunas lloraban. Lynn daba patadas pero los oficiales no le tuvieron piedad y la golpearon.

Los padres gritaban como locos, pidiendo ver al niño. Pero lo único que recibieron fue golpes por partes de los uniformados. La escena fue grabada por todos y no tardó en llegar a la red.


La noticia se extendió como una enfermedad. Toda Royal Woods se enteró de la muerte de un niño de cabello blanco con un traje la ardilla. ¿Y por qué no creerla? Si todas las fotos y videos de este chico estaban en cada página de internet de la ciudad. Desde Blog hasta videos de You Tube, que no solo poseían las de las personas en la playa, sino de algunas subidas por la propia hermana comediante. La página de Luan Loud fue brutalmente atacada por las personas.

Después de ser llevadas a la comisaria. Cada una fue interrogada por los oficiales. Pero solo como testimonio de respaldó. Sus padres prácticamente dijeron todo. ¿Cuál fue su testimonio? Una simple teoría de una niña de cuatro años. Fue tan estúpido e inhumano pensar algo así. ¿Cómo unos padres podrían tratar a su hijo de esa forma? ¿Por una superstición? Lo más horrible de todo fue una declaración que dijo la madre, "Murió por su mala suerte"

Esa fue la gota que derramo el vaso para una oficial, la abofeteó tan fuerte que le había sacado un diente. Los otros policías tuvieron que detener a su esposo, ya que se le iba a tirar a la mujer. Tuvieron que darles a golpes. Y por si fuera poco, el propio padre gritaba que fue culpa de la esencia que dejo su hijo. Con tan solo oír esas palabras los dos oficiales que lo sostenían lo molieron a golpes.

Y con las hijas, era otro caso. Para las más pequeñas tuvieron que llamar a una especializada para tratar a menores como ellas. Aunque tuvieron que colocar también a la segunda mayor con ella, por el simple hecho de ser una chica "Especial"

Uno de los detectives se encontraba bebiéndose su café, mirando fijamente a cada chica sentada en una silla. Habían pasado cuatro días de la muerte del niño, tenía los informes médicos de la morgue del lugar. Leerlo le dio asco, y las fotos peor aún. El cuerpo del niño era… ¿Cómo decirlo para que se escuchara menos fuerte? Pensó para darle un mejor nombre "Zombi" era la mejor opción para su estado.

-Bien chicas, me llamo el Henry Herzberg, soy el que tomo su caso, no es un placer conocerlas-Henry termino de beber su café, noto el gruñido que hizo una de las niñas, si no mal recordaba era Lynn. Era la única que no lloraba por lo ocurrido, según ya lo había hecho, pero sus hermanas tenían los ojos rojos mientras aun lo hacían- Es lamentable la muerte de un niño tan único en esta ciudad-

Camino y se sentó una silla para mirar a las cuatro presentes- Seré directo, y espero que me cuenten sin dudar todo desde el principio, y no me vengan con el miedo de delatar a sus padres, los dos ya dieron lo suficiente para meterlos tras las rejas-

-¿Y por qué nos quieren? Ya terminen con todo, me quiero ir a mi casa-Lynn gruño para luego desviar la mirada.

-Henry soltó un risa- Es raro que seas la única que quieras volver, según tus padres todo comenzó por tu culpa-La niña lo miro de manera asesina- Si Lynn, perdiste un juego y le echaste la culpa a tu hermano menor porque estaba ahí, Dime ¿Te sentiste como una mujer comportándote así? Es muy infantil lo que hiciste, pero se te perdona un poco ya que eres un niña de trece años pero..

Clavo las miradas en las demás, estas solo temblaron de la forma que el hombre de cabello negro las miraba.- Ustedes tres y sus padres son una completa vergüenza, se dejaron llevar por algo estúpido y sin sentido. Esto es la vida real no una caricatura donde la ley vale una mierda-Aumento el volumen de su voz- ¡Tiene suerte que sea hombre porque no golpeo a las mujeres!-Grito asustando a las chicas levanto su puño.- Tienen suerte que no sea Ángela, ¿Saben lo que hizo mi compañera? Les partió la cara a sus padres y hablo literalmente.

La puerta se abrió con fuerza, sobresaltando a las Loud, dejando entrar a una mujer con un increíble cuerpo, y un cabello negro largo hasta la cintura. Esta tenía sus ojos verdes mirando con furia a las chicas.- ¿Llegue a tiempo Henry? Por qué no quiero perderme de las idioteces que dirán las mocosas-

-No entiendo cómo te dejaron seguir después de la pelea que tuviste, eres muy problemática pero le das un ambiente tétrico al asunto-

Saco las fotos donde se podía ver el cuerpo deteriorado del muchacho.- Tengo entendido que las menores se fueron a su casa junto a la mayor con problemas mentales-

-Sí, la rubia tonta aun no capta lo que paso, cree que el chico se quedó dormido.-Soltó una risa- Que zopenca, me imagino que muchos hombres se la gozaron y está ni se dio cuenta-

-¡Cállese! ¿Cómo se atreve de hablar de mi hermana de esa manera? Usted no sabe lo que ¡Agh!-Lori recibió un puñetazo en el estómago haciendo que soltara su teléfono. Este fue pisoteado por Ángela antes de recibir otro golpe en la cara. Luna y Luan se quedaron inmóviles muertas del miedo.

-Me imagino que eres la mayor ¿verdad? Se nota el parecido con esa perra que llamas madre-Ángela la escupió para obligarla a sentarse. Lori estaba con un hilo de sangre bajando por su boca. Y su ojo izquierdo se había puesto morado. Lynn miro con ira a la mujer y esta le dio una sonrisa arrogante.

-¿Qué vas hacer perdedora de cuarta?-El insulto fue suficiente para que la castaña intentara golpéala. Ángela le metió una patada derribándola. Lynn se sujetó el estómago. Pero las cosas aun no terminaban. La pelinegra la tomo de la cola de caballo provocando que se soltara. La mujer la sentó para darle un rodillazo en toda la nariz haciendo que se partiera.

-Ya Ángela, por el amor de todo lo bueno. Deja de golpearlas, tendrás que irte-Henry noto la sonrisa maligna que soltó la mujer.

-Sabes que odio a personas de esta clase y para que lo sepas me colee, solo quería ver a las desgraciadas que dejaron morir a su hermano-Miro a Lori y agarro los restos del teléfono. Se encontraba llorando y se lo acerco a la cara- Tuve la bendición de ver tu publicación Lori Loud, eres una zorra ridícula y miserable, clasificar a tu hermano como un villano y llamarte a ti misma heroína, es lo más patético que he visto, y lo más sorprendente que tus amigos y conocidos te apoyaron, Wow, me puse a leer los comentarios donde te insultaban hasta la madre-Le tiro los restos del dispositivo para irse de la habitación.

El hombre dio un gran suspiro. Esa mujer era un caso, también estaba molesto con las chicas pero Ángela se lo tomaba muy apecho. Principalmente porque vivió algo similar, pero no a esta escala. Antes de venir se puso a leer las paginas sociales y le dio una tremenda sorpresa encontrase toda clase de maldiciones e insultos hacia la familia Loud. Las páginas de sus hermanas. Estaban llenos de insultos, y hasta de oraciones, incluso arrepentimientos. ¿Por qué?

Bueno, leyó los comentarios antes de la muerte y todas tenían un insulto o broma hacia el chico, la gente cambio de parecer cuando se dieron cuenta que lo que vivía el niño era real y que era maltratado por su familia. Desde que las fotos y los videos llegaron a internet y que se revelara la noticia la gente destrozo las redes sociales ligadas a los Loud.

Hubo tanto arrepentimiento que las personas hicieron un altar del niño en la playa. El propio alcalde estaba ahí. Las personas creían que todo era un show de internet, incluso si él lo veía antes de la muerte lo hubiera tomado como "Que buena broma" "Ese chico ardilla es una maravilla" "Seguro es un inadaptado" Todos esas frases y más las vio en los videos y publicaciones de las hermanas. Se imaginaba como todas esas personar sintieran las ganas de suicidarse a darse cuenta de su idiotez.

No podía culparlas, en internet hay tantas cosas que es muy difícil saber cuál es real y cual no, por esa razón muchos no se tomaban enserio lo que ahí aparecía. Miro como las chicas lloraban por lo ocurrido. No sentía pena ni lastima, se lo merecían. Y sabía que desde ahora su vida sería un infierno.


Las menores de los Loud, se preparaban para irse a la casa de la tía Ruth. Era la única que podía cuidarlas, cada una se sentía triste y sobretodo asustadas por lo que iba a pasar.

-No puedo creer que tengamos que ir a la casa de la tía Ruth-Lola estaba recogiendo sus vestidos y sus juguetes- Y todo por culpa de Lincoln, ese idiota que se enfermó a propósito para hacernos ver mal, ojala que se muera-

Lana la ignoro, desde que llegaron a casa no paraba de insultar a su hermano. Era la única de las pequeñas que preguntaba si estaba bien, no le dijeron nada de su estado, solo que estaba muy mal. Lisa se fue directa a su habitación, Lucy se puso a leer sus novelas, Lola no paraba de quejarse y Lily no decía nada porque era un bebé. La única mayor en la casa era Leni, pero ella mentalmente en una niña.

El interrogatorio fue sencillo, la mujer solo le pregunto una cuantas cosas, ¿Por qué Lincoln usaba el traje? ¿Y desde cuándo comenzó? Lana tenía en la mente la imagen de su hermano, su cuerpo era pálido y lleno de sangre. Fue la única que le pregunto a la mujer de su salud y lo único que le dijo fue que estaba enfermo.

Se sentía mal, solo se comía la comida de Lincoln porque Lola se lo sugirió, en ese caso nunca lo hubiera hecho, solo estaban jugando pero a verlo flaco y tan pálido que parecía un hoja blanca. Le daba un gran dolor de barriga. Todo se había puesto mal. Creyó que todo era una broma. Los insultos y las cosas que le hacían, les parecían gracioso incluso hace unos días que mintieron sobre el concierto de Luna. Solo para meterlo en problemas.

¿Lo estaban lastimando de verdad? Nunca escucho a Lincoln quejarse o decir algo parecido, solo se quedaba ahí y nada más. En las caricaturas los personajes se lastimaban y aun así se querían. Era lo mismo que pensaba que le hacían a su hermano, solo un juego. La mala suerte le pareció un chiste después de unos días, su hermano les dijo eso al principio pero no le creyeron.

La situación se volvió tan normal que se volvió una rutina burlarse de él. Lo trataban como un marginado, pero verlo de esa forma la aterrorizo. Nunca pensó que debajo de ese traje se veía así. Al verlo pensó que no era su hermano, la última vez que lo vio, sonreía y estaba muy bien. Esa persona que vio no podría ser el, pero la corrigieron. Su hermano estaba sufriendo y ellos nunca lo notaron, solo… Solo, lo maltrataban.

-Lana ¿Me estas escuchando? La tía Ruth ya llego, está en la sala-Lola estaba parada en la puerta con una maleta.- Ayúdame a bajar mi auto de juguete, no lo quiero dejar aquí-Lana suspiro y se dirigió ayudarla. A salir se encontraron con Lucy, que aún estaba pegada en su libro. Lisa salía de su habitación con una sonrisa algo extraña. No le dio importancia, bajaron para juntarse con Leni y así seguir rumbo a la casa de su tía.

Algo era seguro, su familia estaba devastada. O al menos ella lo estaba, sus hermanas estaban actuando normal. ¿No se daban cuenta de lo que hicieron? En verdad que su familia era un caso. Dio un último vistazo a su casa y noto una luz azul que venía de la ventana de la habitación de Lisa. La miro y esta no paraba de sonreír de esa forma extraña. Quiso preguntar pero la tía Ruth llevaba prisa.

Se subió y miro por la ventana como la Luz seguía alumbrando. ¿Qué era? ¿Lisa dejo algo encendido? Bueno no podía saberlo ahora. Tal vez le preguntaría cuando estén en la casa. Le gustaba estar con su tía, era una sensación relajante y divertida. El auto se pudo andar perdiéndose en las cercanías.

En la habitación de Lisa, precisamente en su computadora, la luz azul brillaba con intensidad y unos pequeños relámpagos salían de ella. Paro de alumbrar por unos momentos, para luego encenderse de nuevo.

-¿Quién soy? ¿Dónde estoy? Se siente extraño todo esto, ¿Qué es este sitio? ¿Internet? ¿Qué es eso?-Una voz robótica salía del monitor, parecía confundida- ¿Vida y muerte? Solo son conceptos sin sentido.

-¿Los Loud? ¿La Humanidad? No, esto es algo más, yo ¿Qué soy? Y ¿Qué es todo estas cosas que están frente a mí?-La luz se apagó dejando la habitación en completa oscuridad.


Es todo por hoy amigos, agradezco a todos aquellos que leen mi otra historia. Esta me tomara solo tres o cuatro capitulo o cinco, No va ser larga. Como dice el título, es la historia del origen de mi OC. Saludos