Crepúsculo y todos sus personajes pertenecen a Stephanie Meyer©, solo la historia es mía ;) ©

Calificado M, ¡no lean si no les gusta el lemmon y si no quieren imaginar a los personajes diciendo malas palabras XD!

N/A: Muy bien, mi mente sencillamente no para, así que esto es lo nuevo. Ok, mi inspiración fue la película y el libro de "Tri Metri Sopra il Cielo" (Tres Metros Sobre el Cielo), quedé prendidísima de la peli hasta que vi el final, ¡lo odié!, así que me dije a mi misma; esto necesita un final mejor XD. ¡Disfrútenlo!

-Io e Te; Tre Metri Sopra Il Cielo-

(-Tú y Yo; Tres Metros Sobre El Cielo-)

-Es como tocar el cielo con los dedos ¿o no?- Pregunta ella mirándolo. -No, es como tocar a, "tre metri sopra il cielo..."-

Iera Parte: Tre Metri Sopra Il Cielo

-La Fiesta-

En algún departamento lujoso, ubicado en la mejor zona de Roma, ella se prepara para ir a clase a primera hora, estudia el último año de secundaria en una escuela sólo de chicas, lleva el cabello suelto un poco más abajo de los hombros agarrado arriba con un cintillo blanco muy fino, el uniforme consta de una falda azul marino que debe ir diez centímetros más debajo de las rodillas y una camisa blanca abotonada hasta el cuello con una pequeña cinta atada en un lazo del mismo color de la falda que no favorece la hermosa figura de la joven, lleva zapatos escolares negros con las medias a unos cinco centímetros más arriba de los tobillos, es de tez algo pálida y a diferencia de su hermana no está maquillada, sus ojos color chocolate son profundos, misteriosos, a simple vista y con esta vestimenta, no deja mucho que desear, son las seis y media de la mañana, sus padres esperan en el auto y su hermana no para de hablarle acerca de su nueva víctima, un niño ricachón que planea conquistar en la fiesta de esta noche, ella sólo sonríe y le repite a su hermana que su madre va a matarla, salen del departamento dejando a la criada en casa y bajan en el ascensor, llegan al bello Mercedes Benz negro y suben sonrientes, Bella Swan tiene una vida normal, es una adolescente que a veces hace una que otra travesura, es excelente alumna y nunca tiene problemas serios con sus padres, una joven que inspira ternura pero no es tan inocente como aparenta, a pesar de todo, su vida es algo, aburrida, rutinaria, muy, normal, ella sabe que en lo más profundo algo le falta a su vida...

Al otro lado de la ciudad, en otro departamento un poco más pequeño, él, acaba de llegar de Dios sabe donde, su estilo es bastante desaliñado, mide alrededor de un metro noventa, tamaño heredado por su padre, lleva unos jeans oscuros y una chaqueta de cuero juvenil, debajo de ésta, una franela negra cubre su bronceada piel, tiene el cabello de color cobrizo y totalmente desarreglado en unos rulos seductores, sus ojos verdes vuelven locas a todas las chicas que se dejan encantar por ellos, se quita la chaqueta y la deja caer en un sofá blanco que está en la sala, entra a su cuarto y se quita la camisa y la lanza en una cesta rebosada de ropa sucia, deja al descubierto su bien formado pecho, todo un adonis, se deja caer en su cama devastado, con los pies se arranca los zapatos y medias, mira fijamente el techo tratando de encontrar un punto que llame su atención pero todo es blanco, su hermano mayor se asoma por la puerta y le recrimina por su comportamiento y éste se limita a ignorarlo, su teléfono vibra y observa la pantalla, un mensaje de texto, Tanya, "¿Te veré esta noche?, espero verte, de verdad", se burla y se pregunta a sí mismo: -¿Acaso cree que por un polvo ya somos algo?, que ilusa-, Edward Masen, un joven que sólo sabe buscar problemas, apenas salió de la secundaria se dedicó a la vida desenfrenada, hace todo lo que quiere, un día duerme bajo las estrellas, al otro está en casa de su hermano y así, y al igual que Bella, algo falta en su vida...

En cuanto Bella llega a la escuela, baja del auto junto con su hermana y se encuentra con su mejor amiga, Rosalie, su hermana también se encuentra con otro grupo y desde allí no se ven hasta el medio día. Bella se agarra del brazo de su amiga, una rubia de curvas espectaculares que el uniforme disimula bastante bien, cuya personalidad atrevida y extravagante no pasa desapercibida. Comienza a preguntarle acerca de su encuentro con un joven la noche anterior, y ésta muy frescamente le contesta que sólo se limitó a tener sexo con él, y dejó bien en claro, que el tipo en cuestión, no era muy bueno, ambas ríen disimuladamente, Rosalie le pregunta a su amiga acerca de la salida con Mike al cine y ésta le habla de lo grosero que fue; esa tarde, en el cine, el chico se atrevió a llevar una de sus manos al muslo de la chica, y ya que ésta llevaba falda, no fue difícil tocar lo que no debía, Bella lo observó con molestia y él se detuvo, luego, en el auto del joven, a mitad de un beso, el tomó una de sus manos y la llevó al bulto en su pantalón, de la ira, Bella le dio un apretón que de seguro le hizo recordar la primera vez que vio la luz en la sala de partos. Entraron a su respectivo salón e intercambiaron tareas con otras compañeras, en la materia de inglés no todas eran tan buenas como Bella y una que otra chica, la profesora entró y todas se pararon en sus respectivos escritorios, en cuanto ésta se sentó las jóvenes la imitaron, la mujer que aparentaba cincuenta años sacó un bolígrafo y revisó un cuaderno empastado, nombró algunos apellidos y las aludidas se levantaban, una de ellas, Rosalie, quien no entendía absolutamente nada del idioma.

-Hale, lea y traduzca lo siguiente- Refiriéndose a Rosalie, se levantó y escribió en la pizarra la fulana frase y Rosalie comenzó a leer entrecortadamente.

-"If you live here, and your mother in Texas, how can you visit her?"- La vieja la miró como si fuera un insecto y se distrajo un poco con un cuaderno, Rosalie miró a Bella y ésta le decía la traducción en voz muy baja y Rosalie apenas y pudo captar. –"Si vives aquí, y tu madre en Texas, ¿cómo puedes visitarla?"- La mujer la miró de reojo y luego miró a Bella.

-Señorita Swan, si de verdad tiene tantas ganas de participar, ¿porqué no viene y lo hace aquí al frente?-

-Aún no es mi turno profesora, no estoy preparada...-

-¡Entonces guarde silencio o la nota que tendrá su compañera se la descontaré a usted!-

Bella hizo una mueca de disculpa hacia Rosalie y ella encogió los hombros. Así, transcurre el resto del día para la joven estudiante. Mientras, a las once de la mañana, Edward despierta, se levanta de la cama, se da una ducha, se viste, se come lo primero que encuentra en la nevera y toma las llaves de su moto, se coloca la chaqueta y toma el casco. En cuanto llega al estacionamiento ve su hermosa moto negra con piezas cromadas y otras grises, sonríe y se sube a la misma, la enciende, se coloca el casco y arranca a toda velocidad. Va por las calles sin rumbo fijo, sólo mira los autos, la gente, las calles, más de lo mismo, siente que su vida sigue siendo lo mismo desde hace mucho. Bella sale de la escuela, se despide de su amiga y se dirige al auto junto con su hermana Alice, algo parecida a ella pero más flaca, de nariz perfilada y cabello corto, una vez en el auto con sus padres, se dedica a hablar de cómo ha ido su día. El auto anda por las calles a una velocidad aceptable, Bella va en el asiento trasero y observa por la ventana a las personas, se detienen ante la luz roja, al lado del auto una enorme moto hace un ruido ensordecedor, Bella sale de su ensoñación y voltea a mirar al susodicho, éste se quita el casco y lo pone entre sus piernas, el joven se ojos verdes sonríe y Bella sólo alza una ceja.

-¿Quieres dar un paseo?-

-No, gracias-

-¡Vamos, te divertirás!- Insistió Edward con una hermosa sonrisa dibujada en su rostro.

-Lo siento pero no eres mi tipo- Contestó Bella secamente.

-¿Quién es Bella?- Preguntó el padre curioso.

-No es nadie-

-¿Nadie?- Se metió Edward. –Soy tu amigo, nos conocimos hace tiempo, en tus sueños más anhelados me has visto y adivina qué hacemos en ellos- Dijo con voz victoriosa y riendo en voz alta.

-¡Idiota!-

-Ahora veo cual es tu problema...-

-¿Cuál?- Preguntó una Bella molesta.

-El sexo-

-¡Que te den!- Gritó Bella en el momento en que el auto aceleró, Edward rió por lo bajo, se volvió aponer el enorme casco y aceleró.

Se dirigió al punto de encuentro con sus amigos, una plaza abandonada donde había unas largas escaleras, paró su moto al pie de estas y se bajó sacándose el casco. Algunos jóvenes tan acuerpados como él, se acercaron y lo saludaron, otros sólo alzaron la mano, se abrazó de su mejor amigo y lo tomó por e cuello con fuerza como si quisiera ahorcarlo, bromearon un rato y luego se soltaron, se acercaron a la moto de Emmett, el amigo de Edward, y revisaron algunas cosas que parecían funcionar un poco mal, la tal Tanya no paraba de mirarlo, se lo comía con los ojos, se acercó a él con pasos lentos la joven de curvas pronunciadas y cabello castaño, ella trataba de parecer tierna, inocente, pero alto "kilometraje" se notaba a simple vista, Edward se enderezó y ella aprovechó para pegarse a él, llevó sus manos a su cuello y él se tensó.

-¿Vendrás a mi casa esta noche?-

-No lo se...- Contestó soltándose de su agarre.

-¿Qué pasa?- Peguntó la joven confundida.

-Eso me pregunto, ¿qué pasa?-

-Edward...- Rió con nerviosismo. –Vamos, tú y yo...-

-Sólo fue un polvo Tanya, sólo eso...-

-¡No seas grosero!, vamos, sabes que te quiero, Edward...- Forcejeó un poco con él pero obvio, él es más fuerte.

-¡Basta, a todos les dices lo mismo, déjame en paz!- Se alejó de ella, dejándola enfurecida con una amiga.

-¿Y qué, la Tanya, te agarró?- Le dijo Emmett en tono de burla y Edward le lanzó una mirada asesina.

-¡Vale, está bien, no toco el tema!-

Mientras los jóvenes revoltosos conversaban y lanzaban pestes a las mujeres, Bella se arreglaba para ir a su clase de ballet. En cuanto se termina de alistar sale del departamento y su madre la acompaña a su clase como todos los días. Renée, la madre, observa a su hija orgullosa mientras practica la coreografía de su próxima presentación, ella sólo quiere lo mejor para sus dos hijas, pero sabe que una de ellas, Bella, no es del todo feliz, sabe que ésta no sonríe sinceramente desde hace mucho, piensa que la causa es que no tiene muchas amistades como ella, que le hace falta socializar con gente de su mismo nivel, y quizás, salir con un chico que la realce, uno que tenga un buen apellido y muchos millones que heredar. Mientras Bella danza, piensa y sueña despierta, con ir más allá del horizonte; salir de casa y vivir su propia aventura, pero sólo son sueños que quizás nunca podrá alcanzar. Termina su práctica y regresa a casa con su madre, conversa un poco con ella acerca de la fiesta de esta noche y su madre no deja de preguntar con insistencia si en esa fiesta sólo habrá jóvenes de su clase, Bella asiente aburrida. Al cabo de unas horas las hermanas se arreglan para ir a la dichosa fiesta, el cumpleaños número dieciocho de Angela, otra niña adinerada de la escuela. Alice usa una minifalda de jean y una blusa morada, se maquilla de un modo que la hace ver mayor de lo que es y se acerca a su hermana para preguntarle cómo se ve.

-¿Cuántos aparento arreglada así?- Bella la observa de arriba abajo.

-Aparentas unos, trece...-Contesta bromeando.

-¡No me jodas, tengo quince!-Vuelve a verse en el espejo. –¡Necesito verme mayor, ayúdame!- Bella ríe y la ayuda con su maquillaje y peinado. –Lo siento, esta noche, van a besarme, ¡será el primero!-

-¡Por Dios Alice, estás muy chiquita, ¿cómo piensas en eso?!-

-¡Tú no eres muy grande hermanita, eres una anticuada!, además, tú has hecho cosas peor que yo- Insinúa Alice con sarcasmo.

-¿A qué te refieres?-

-¿Crees que no se lo que pasó con Mike el otro día?- Se echó a reír y Bella abrió la boca en modo de asombra para luego reírse también. –La vida es corta Bella, ¡disfrútala, haz algo loco, se rebelde!-

Bella pensó por un momento en las palabras de su hermana, tenía algo de razón. Se dirigió a su habitación para terminar de arreglarse, vestía más recatada que su hermana pero no por eso dejaba de verse linda, usaba unos jeans oscuros tipo tubo y unas zapatillas negras patentes, tenía puesta una blusa negra con un adorno plateado en el pecho y se recogió el cabello en una cola de caballo, apenas y maquilló su rostro. Rosalie ya esperaba abajo del edificio en un flamante auto deportivo rojo pagado por su padre socio de una empresa petrolera, las jóvenes se montaron el dicho auto y se dirigieron al lugar donde se daría la fiesta, Bella sólo sentía que iba a una fiesta más, nada diferente, sin pensar que esa fiesta le cambiaría la vida. Por otro lado un grupo de jóvenes algo descarriados se jugaban entre ellos, tomaban cerveza barata y los que estaban emparejados se atascaban a sus novias, Edward estaba recostado de las escaleras y miraba las estrellas con detenimiento, Tanya lo miraba de vez en cuando con miedo de acercársele, el joven corpulento sacó un cigarrillo del bolsillo de su chaqueta, lo encendió y comenzó a aspirar de el, de pronto los demás chicos se levantaron del suelo y se gritaban entre ellos mismos que irían a una fiesta, Emmett se lanzó sobre su amigo y lo obligó a levantarse, le habló de la fiesta a la que entrarían coleados y Edward rió, miró a Tanya por un momento, ella esperaba que él la invitara pero el sólo la ignoró, se subió a su moto y todos arrancaron a la vez.

Ya en la fiesta, Bella escuchaba las disculpas de Mike aburrida mientras los demás jóvenes bailaban y bebían alegres, alguien llamó por el intercomunicador del edificio diciendo que era el hermano de una tal Jessica, Angela aceptó y se dirigió a la susodicha para decirle que su hermano había llegado, lo raro aquí era que Jessica, no tenía hermanos. Angela se acercó a la puerta del enorme departamento para encontrarse con un grupo de jóvenes desaliñados con caras muy desconocidas, entraron uno por uno con rapidez y la chica no pudo hacer mucho, más que insultarlos por infiltrarse. La mayoría detuvo cualquier cosa que estuviera haciendo para ver como estos desadaptados entraban y destruían todo a su paso, algunos se acercaban a los grupos de chicas para emitir algún mensaje obsceno que las hacía reír, otros buscaban objetos de valor y los guardaban en sus bolsillos, Emmett se apresuró a buscar las habitaciones, encontró la principal y se adentró en la misma para hurgar entre los bolsos y carteras que muchas chicas habían dejado. Edward sólo caminaba por el departamento, le podía caer el techo del mismo en la cabeza y él no se fijaría en ello, estaba ensimismado, subió la mirada y se encontró con un rostro conocido, sonrió al recordar las palabras que le había dirigido ese mismo día en la mañana cuando esperaban la luz verde del semáforo, al lado de la chica venía un joven rubio con cara de niño mimado y Edward resopló, caminó con una sonrisa torcida hasta la chica que se detenía frente a un mesón, al parecer estaba algo molesta, se paró frente a ella y ésta lo miró de pies a cabeza con una ceja alzada.

-Ciao- Saludé Edward con superioridad.

-¿Y tú quien eres?- Preguntó Bella odiosa.

-¿No me recuerdas?, dimos un pequeño paseo esta mañana, te recalqué, cual es tu problema más íntimo- Su sonrisa torcida se hizo más pronunciada.

-¡Lo que me faltaba!- Dijo Bella alzando los brazos.

-¿Quieres beber algo?- Le preguntó Mike a la joven ignorando la presencia de Edward.

-Si, yo quiero Champagne- Respondió Edward con chocancia y Bella lo miró como diciéndole que no sea metido, Mike se tensó y Belle puso una mano en su pecho.

-Déjalo, yo lo hago- Tomó la botella y dejó caer el líquido en una copa alargada, se volteó hacia Edward quien sonreía y le lanzó el líquido en la cara.

-¡¿Pero que coño...?!- Gritó Edward molesto.

-¡Ay, perdón, no me fijé, que distraída!- Dijo Bella sarcástica. Edward sonrió pero al ver a Mike ahogado de la risa se enserió y se le acercó.

-¿De qué te ríes?-

Lo tomó por el cuello y le plantó un puñetazo en la nariz tumbándolo en el suelo, otros se acercaron para ayudarlo a levantar y Bella comenzó a golpear a Edward en la espalda causándole, más que dolor, cosquillas, éste rió y se agachó, la tomó por la cintura y se la montó en el hombro como si fuera un saco, la joven pataleaba y le gritaba que la soltara, subió unas escaleras en busca de un baño mientras que en el salón se desataba una cadena de golpes que no tenía fin, al encontrar el fulano baño, la dejó caer en el jacuzzi dispuesto a vengarse. Mientras, en la habitación principal, Emmett se enriquecía fácilmente con el dinero de las chicas, tomó un bolso blanco muy grande y comenzó a registrarlo, encontró una cartera y la abrió para sacar todo lo que había en ella, un rubia alta y hermosa se adentró en la habitación asustándolo, alzó una ceja y siguió hasta adentro, se detuvo frente a él del otro lado de la cama y lo observó detenidamente, dejándose encantar por sus enormes brazos y bellos ojos, Emmett se sintió de alguna manera intimidado y detuvo su labor con molestia.

-¿Qué quieres?- Preguntó.

-Mi bolso- Contestó ella con odiosidad.

-Agárralo-

-Lo haría, pero un idiota lo tiene en las manos- Emmett miró el fulano bolso y se lo lanzó, Rosalie sacó quien sabe que y le devolvió el bolso lanzándoselo. –Cuando acabes guardas mi cartera...- Él subió la mirada y la hizo detenerse.

-¡Hey!- Ella volteó. –¿Saldrías conmigo mañana?- Movió los billetes que tenía en la mano con descaro y ella sonrió. –Yo invito-

-Después de clase, a la una, ¿vale?- Él sólo asintió, la joven se dio la vuelta yu siguió su camino y él aprovechó de mirar su trasero.

Edward seguí en el fulano baño discutiendo con Bella y Mike aprovechó toda la confusión para llamar a la policía, Bella gritaba y le metía golpes a Edward por donde podía y éste abrió la llave de la regadera para mojar a Bella y ésta gritó más alto, Edward rió al ver que sus gritos eran por lo fría que estaba el agua y la cambió por agua caliente, Bella tomó un envase y se lo lanzó pero él muy infeliz lo esquivó, siguió divirtiéndose con Bella y la regadera hasta que un chico se le acercó y le gritó que habían llamado a la policía, Edward miró a Bella una última vez y salió del baño apresurado, Bella se levantó y al encontrarse toda mojada y humillada sólo pudo llorar de rabia. Todos los que se habían colado en la fiesta salieron corriendo del lugar, Angela caminaba de un lado a otro maldiciendo, ahora su casa era un completo desastre. Bella le pidió ropa seca a Angela y al cabo de una hora se fue con Mike quien la llevaría a su casa, ahora la invadía otra preocupación; ¿dónde rayos estaba Alice?. Un estruendo de moto la sacó de sus pensamientos, de repente, ocho motos rodeaban el auto y comenzaron a golpearse contra el mismo, Bella gritó de pánico al escuchar el estruendo de un vidrio partido, Mike trataba de escaparse pero las motos no le daban el espacio suficiente, en un impulso de molestia Mike giró el volante hacia la izquierda tumbando a uno de los jóvenes, los demás se detuvieron y Mike aceleró, cada tanto miraba por el retrovisor pero ya nadie los seguía, se detuvo en una cale solitaria y se bajó del auto para revisar el vidrio partido, la ventana de la puerta trasera de la derecha efectivamente estaba despedazada. Bella se abrazaba a sí misma por el frío y Mike maldecía golpeando una llanta con el pie, de la nada apareció otra moto, el tipo se paró detrás de ellos, se bajó de su vehículo, soltó el casco y tomó a Mike por el cuello de la camisa, Edward, el joven le recriminó por haber llamado a la policía, Bella se bajó del auto y trató de detenerlo pero él la empujó, esta vez el puño dio justo en el ojo derecho, Mike logró soltarse, se llevó una mano al ojo y al ver la sangre se horrorizó lo suficiente como para salir huyendo, subió a su auto y arrancó dejando a Bella abandonada.

-¡Hey!- Gritó Bella pero Mike no se detuvo, miró a Edward quien volvió a subirse en su moto ignorándola, ella se acercó a él y éste la miró confundido. –Déjame subir- Musitó tratando de montarse.

-¿Qué?- Edward meneó la moto para que ella no pudiera subirse. –Me odias, te doy asco, ¿y quieres que te lleve?, ¡Jódete!-

Se colocó el casco y arrancó a toda velocidad, Bella se quedó ahí parada luego se dio vuelta para caminar por la desolada calle, pasaron dos autos y ninguno se detuvo, de todos modos ella no estaba pidiendo que la llevaran, un auto se detuvo a su lado, un joven de cabellos oscuros le sonrió.

-¡Eh Bella, ¿te llevo?!- Preguntó refiriéndose más al significado de la palabra en italiano que al nombre de Bella. En ese instante Edward apareció de repente al otro lado del carro frenando en seco, salió de la nada.

-¡Lárgate!- El chico obedeció y aceleró, Edward ladeó la cabeza. -Sube- Bella obedeció.

Aceleró dejando un hilo de humo blanco atrás. Bella se abrazó fuertemente de él y no abría los ojos, él no pensaba en nada. Una vez en casa de Bella, se detuvo frente al portón y al notar que ésta no se soltaba le habló.

-Ya llegamos, puedes soltarme- Ella se bajó algo mareada.

-Disculpa, pero es que manejas como un animal- Edward bufó. Un hermoso Mercedes Benz se detiene frente a ellos. –Mierda, mis padres- Edward la mira.

-¡Bella, ¿qué pasó, y la fiesta, qué haces montada en una moto?, te he dicho mil veces que lo odio, ¿y tu hermana, dónde está Alice?!-

-Mamá yo...- Otra moto se hizo presente, Alice bajó de la misma apenada al ver a sus padres, Renée las miraba furiosa. –Yo no sabía...-

-¡Calla Bella, al auto las dos, ahora!- Ambas obedecieron y Alice se despidió del joven con el que llegó.

Bella observó a Edward una vez más a través de la ventana, el rostro del joven no demostraba ningún tipo de emoción, al igual que el de ella, el auto siguió su camino y Edward retrocedió un poco con su moto para desaparecer con su compañero. En cuanto Bella pudo poner la cabeza en la almohada repasó en su mente la discusión con Edward, como casi la deja abandonada en aquella calle, meneó la cabeza como si de esa manera pudiera sacar los recuerdos de su mente, se acomodó y se dejó vencer por el sueño. Edward, por su parte, no conciliaba el sueño por completo, pensaba en los ojos de la niña malcriada y reía recordando el momento en que la bañó en la fiesta, detuvo sus pensamiento s en cuanto se vio a si mismo sonriendo. A partir de ahora sus caminos se cruzarían para no separarse nunca más...

Continuará...

N/A: ¿Les gustó? ¡Díganme que si! Jaja!, si ya se que estoy medio loca, escribo y escribo sin parar y no termino los otros fics pero no es mi culpa! XD, prometo que actualizaré los demás, no olviden dejar su review, recuerden que sus palabras me inspiran a seguir escribiendo!