Porque quiero que sean felices

La guerra ninja había terminado, Uchiha Sasuke al final lucho a favor de la aldea, y en conjunto con Uzumaki Naruto pelearon contra Madara, matándolo, por lo que ahora el único Uchiha fue perdonado por la aldea regresando a ser ninja al servicio de esta. Lo que también favoreció al Uchiha es que "misteriosamente" los ancianos del consejo fueron brutalmente asesinados en medio de la guerra.

Al haber terminado la guerra hace casi un mes, y como la aldea de la hoja fue el escenario final de esta, la aldea estaba casi destruida nuevamente, por lo que ahora con ayuda de todos los aldeanos y los ninjas están siendo reconstruida.

En este mes que ha pasado Sasuke con sus antiguos camarada y antiguo hogar seguía siendo muy callado, teniendo expresiones enigmáticas, eran contadas las veces en las que se le veía reflejar algo en su mirada o muecas—cosa que solo pasaba cuando Naruto lo saca de sus casillas con sus ocurrencias—. A pesar de que los demás de su generación le hablaran o intentaran sacarle platica el pelinegro los ignoraba, con los únicos que convivía y no ignoraba era con sus primeros y únicos compañeros; el equipo siete, aun así eran muy contadas las palabras que les dirigía, pero siempre los escuchaba. Pero los demás del equipo siete nunca dejaban solo a su amigo, hacían todo lo posible por darle más vida al Uchiha.


Es una tarde lluviosa, en donde las muchas nubes que hay en el cielo la hacen ver más oscura. Tsunade esta sentada tras su escritorio, teniendo los codos apoyados en este y sus manos entrelazadas. La luz de un potente relámpago se reflejo atrás de ella alumbrando más el despacho.

- ¿Seguro que quieres hacer eso? –pregunta con seriedad, apoyando su barbilla en sus manos entrelazadas, viendo atenta a Sasuke que esta parado frente a ella teniendo esa expresión enigmática que lo caracteriza.

El pelinegro ahora viste un pantalón algo holgado de color azul marino, una playera sin mangas color negra y con el símbolo de su clan bordado en su espalda. Su banda ninja la lleva adornando en su frente. Usa sandalias ninja color azul.

- Si. –contesta cortante y la rubia suelta un profundo suspiro.

- Dime tu razón para pedirme algo así. –ordena con firmeza.

Sasuke voltea su rostro, mirando hacia la ventana, viendo la potente lluvia que cae haya afuera.

- No los merezco. –Tsunade ensancha los ojos dándose una idea de que habla. –Los he lastimado mucho y no merezco lo que me dan. Mate a mi hermano, hice sufrir a los que me aman, intente matar a las personas que me importan por mi ceguera de venganza. No merezco ser feliz, no merezco regresar a la aldea que traicione y recibir el afecto que ellos me dan. –dice de forma monótona sin apartar su mirada de la ventana, pero aun así la rubia pudo ver soledad en sus ojos.

- Y por eso quieres huir. –dice molesta a la vez que frunce el entrecejo. –Sabes que al irte harás que ellos sufran nuevamente. No tienes idea de lo que lucharon esos tres para que tu equipo este reunido nuevamente, para tener esa vida de gennin que tanto disfrutaron.

A la cabeza del pelinegro vinieron escenas de todo este mes conviviendo con ellos, y otras más de cuando eran gennin, haciendo que sus ojos reflejen mas soledad, así que agito levemente su cabeza intentando sacar todos esos recuerdos.

- Esta vez no me iré para alejarlos, me iré para que ellos sean felices. Quie… quiero que ella… —Tsunade pudo notar que se le dificultaba decirle lo que quería decir. –que ella aprenda a amar a alguien que si la merece. Y que él se dé cuenta que tiene mejores amigos.

- Son igual de cabezones que tú, no lo entenderán. ¡Pero en fin! –la rubia soltó un profundo suspiro mostrando resignación. –Tu sabes lo que haces, ya estas grandecito como para que alguien te diga lo que debes hacer. –dice con fastidio. –Y la verdad no pienso mantenerte aquí a la fuerza, pero espero que pronto te des cuenta de tu error. –Sasuke se mantiene callado, escuchándola atento. –Desde que murió Jiraiya, no tengo ninjas espías, no tan buenos como lo fue él. Tú sabrás como arreglártelas para hacer que me llegue información de cosas que afecten a la aldea. –Sasuke asintió. –Te daré la oportunidad de negarte a este trabajo cuando lo desees.

Por otro lado; aunque pienses que no estando aquí ellos serán felices, yo se que no será así, pero también sé que necesitas tiempo a solas para pensar todo.

Sasuke simplemente volvió a asentir, ya había tomado una decisión y no iba a cambiar de parecer sin importar lo que le digan.

- Partes mañana. –dice firme.

El Uchiha hizo una leve inclinación de cabeza y dio media vuelta saliendo de la oficina ante la atenta vista de la quinta.

- (Ese mocoso idiota no aprende… ojala no sé de cuenta de su error demasiado tarde, cuando en verdad pierda todo lo que aun tiene) –la rubia soltó un profundo suspiro y su rostro reflejo cansancio.


- (Hice lo correcto. Los hice sufrir, no los merezco. Mate a mi hermano cuando él solo se sacrifico teniendo una vida horrible por mi y su aldea, yo no merezco vivir mejor que él) –los oscuros ojos del pelinegro brillaron reflejando mas tristeza.

Sasuke bajo su rostro haciendo que su cabello tape hasta mediación, y teniendo las manos metidas en los bolsillos delanteros de pantalón siguió caminando sin importar empaparse con la lluvia.


Sakura ha salido del hospital, donde estaba ayudando con las reparaciones y con los enfermos. Como no conto que llovería esa mañana que se fue no llevo paraguas por lo que ahora se esta mojando mientras corre por las calles para ir a su casa.

La peli-rosa sigue vistiendo igual, y su cabello sigue corto, además que aun conserva esas facciones delicadas y lindas.

Cuando paso por uno de los parques de la aldea sus ojos se desviaron viendo a un chico sentado en una banca teniendo la cabeza agachada y parecía no importarle estar completamente empapado por la lluvia.

Sakura detuvo su paso, sabia quien era el chico y sus ojos reflejaron tristeza. Aunque haya pasado un mes y Sasuke estuviera con ellos, sigue teniendo esa mirada llena de soledad y eso la entristece porque ha pesar de todo aun lo sigue amando, y se siente impotente al no poder hacer nada para que el pelinegro recupere algo de felicidad.


- Sasuke-kun.

El pelinegro ensancho los ojos al reconocer esa voz, estaba tan metido en sus pensamientos o mas bien en sus recuerdos que no la sintió venir. Quitando toda sorpresa en sus ojos alzo el rostro mirándola viéndole reflejar en sus jades preocupación, y no pudo evitar sentir calidez en su pecho con solo ver sus ojos, esos ojos que siempre le han gustado.

A Sakura no le sorprendió verle esa mirada vacía, sin vida que no demostraba nada mas que desolación, desgraciadamente ya se había acostumbrado a ella al igual que Naruto y Kakashi.

- Si sigues aquí mojándote te enfermaras. –dice en forma de regaño.

- Tu también Sakura. –su tono de voz no transmitía nada como siempre, y Sakura sonrío levemente.

- Pero yo a diferencia de ti no me estoy mojando por gusto. –dice con algo de diversión.

Sakura se puso en cuclillas y Sasuke bajo su mirada al sentir una suave y delicado tacto sobre su mano que tiene apoyada en una de sus rodillas, viendo que sobre ella Sakura a posado su propia mano. Al verla así noto lo pequeñas que son las manos de la chica a comparación de la suya, no podía creer que con esas pequeñas manos ella soltara golpes que pueden destruir montañas.

- ¡Vamos! ¡Acompáñame a cenar! –dice amigable, dedicándole una cálida sonrisa.

- (¿Por qué no? Ya no la volveré a ver después de no se cuanto tiempo… solo quiero estar con ella un rato más)

Sasuke quito su mano y se puso de pie comenzando a caminar. Los ojos de Sakura reflejaron tristeza pensando que ha rechazado su invitación, pero Sasuke solo camino un par de pasos mas y se detuvo.

- Vamos. –dice sin voltear a verla.

Una sonrisa llena de felicidad adorno el rostro de la peli-rosa que se puso rápidamente de pie y corrió dándole alcance y así empezar a caminar ambos a la par.


Ambos se adentraron al departamento de Sakura estando completamente empapados, el agua que escurría mojaba el piso de madera.

- Toma asiento Sasuke-kun, iré por unas toallas. –dice corriendo perdiéndose de vista por el pasillo.

Sasuke se encamino hacia una silla para sentarse en ella y así no mojar los sillones de la chica. sasuke apoyo sus codos en sus piernas, agachando su rostro mirándose los pies.

- (La hare sufrir, no debí venir, pero solo quiero estar con ella un momento más) –Sasuke podía sentir como una parte de él se arrepentía por estar ahí, gritándole que se fuera, que se alejara de ella lo más que podía, pero otra parte le gritaba que se quedara, que sea egoísta y acepte lo que ella le da.

Sus pensamientos fueron cortados al sentir algo suave caerle en la nuca, levanto un poco la mirada viendo las piernas de su compañera delante de él, la levanto un poco más y se arrepintió de hacerlo porque ahora veía bien como lo mojado de la ropa hacia que a Sakura se le pegara esta como una segunda piel.

Aunque Sakura aun no este muy desarrollada para él esta perfecta. El verle sus pezones erectos por el frio casi le saca un ronco gemino que su autocontrol paro. El verla así de empapada le provoco un enorme deseo, cosa rara porque él se consideraba anti hormonal, aunque este ultimo mes se ha dado cuenta que tiene hormonas, que Sakura despierta sin problemas, o simplemente ya que no esta cegado por la venganza esas hormonas que siempre estuvieron ahí salian a flote.

- ¡Pareces un niño Sasuke-kun! –dice divertida, inclinándose un poco sin darse cuenta de la mirada del pelinegro en sus pecho porque su cabello no le permite verlo bien.

La peli-rosa puso sus manos en la cabeza del pelinegro, encima de la pequeña toalla que le había puesto ahí segundos antes y comenzó a darle un suave masaje secándolo.

Sasuke no podía apartar su mirada de los pequeños pechos de su compañera, se moría de ganas por tomar con su boca uno de esos erectos pezones que sobresalen de la ropa.

Sakura se extraño porque Sasuke no se haya quitado y siga dejando que le seque el cabello como si fuera un niño pequeño, por lo que agacho la mirada para verle el rostro notando que los ojos del pelinegro están completamente oscurecidos. Tenia una mirada como de… de ¿deseo?, así que curiosa bajo su mirada notando que él miraba sus pechos, y pudo ver que por lo frio y lo mojada sus pezones sobresalían, haciéndola sonrojarse completamente de la vergüenza al momento que se abraza a si misma cubriendo sus senos.

Sasuke al verla así tan tímida, avergonzada y sonrojada intentando tapar sus senos con las manos hizo que su deseo por ella creciera.

- (Quiero tenerla—No debes—La deseo, quiero hacerla mía, marcarla como mía.— ¿Para qué? ¿Para que mañana te vayas nuevamente haciendo más fuerte su sufrimiento? —Pero la deseo tanto. Quiero recordar el sabor de su piel, la sensación de sentirme dentro de ella, solo… solo quiero tener ese recuerdo de ella—No la mereces, no mereces tener ese privilegio. Tú solo mereces sufrir y pagar lo que has hecho: abandonaste tu aldea, te convertiste en un traidor, casi matas a tu mejor amigo varias veces, casi la matas a ella; la mujer que amas, mataste a tu hermano, volviste a lastimar a los que mas te quieren uniéndote al enemigo de ellos, los insultaste y humillaste—Pero necesito un poco de ella para no hundirme en esta oscuridad) –Los ojos del pelinegro se oscurecieron más y se puso de pie haciendo que Sakura se enderece también y de un par de pasos hacia atrás. – Solo esta noche, permíteme tenerte Sakura.

Sakura se sorprendió al ver y oír que tanto sus ojos como su voz reflejaban una necesidad que jamás pensó oír viniendo de él.

- (¡Eres un maldito egoísta! ¿Por qué la torturas así? ¡Maldito! ¡No la mereces!—Lo sé, pero no puedo soportarlo más) –Sasuke estiro su mano hacia Sakura, mostrando suplica en su mirada porque la tomara.

Sakura aun tiene sus ojos muy abiertos, y sus mejillas están muy sonrojadas, su corazón palpitaba con tanta fuerza que sentía que se le saldría del pecho, y sin dudar tomo la mano de Sasuke haciéndoles a ambos sentir una extraña corriente recorrerles por todo el cuerpo por ese tacto. El pelinegro la atrajo a él hasta que la punta de sus pies tocó las del otro.

- Sasuke-kun. –Sakura cerró sus ojos en clara muestra de entrega hacia él y Sasuke jamás la vio tan perfecta como en ese momento.

- (¡Bastardo! ¡Mira lo que haces! ¡Mira lo que lastimas y vas a lastimar más! ¡Eres un maldito egoísta que no la merece!) –Sasuke ignoro esa voz en su cabeza e inclino su rostro uniendo sus labios con los de Sakura, lo hizo de forma tímida y lenta, como si temiera que el ser brusco con ella la fuera a lastimar.

Cuando sintió su sabor, su respiración y ella movió con timidez sus labios sobre los suyos termino haciéndole perder toda cordura que le quedara y profundizo más el beso, llevando sus manos a la cintura de ella acercándola más a él, como si quisiera fundir sus cuerpos en uno solo.


Ya casi amanece, y solo hace una hora que Sasuke y Sakura dejaron de hacer el amor, al quedar la peli-rosa completamente dormida.

Acostada sobre su cama esta Sakura completamente dormida, su cuerpo solo es cubierto por esa delgada sabana blanca que marca su silueta. Sasuke esta a su lado, usando uno de sus brazos como almohada y mirando el rostro de la chica con tranquilidad. Solo viste sus bóxer.

- (¡Eres un bastardo Uchiha Sasuke! ¡No mereces nada de lo que tomaste esta noche!—Lo sé) –Sasuke frunció el entrecejo sintiéndose molesto consigo mismo por no poder controlar sus deseo. Acerco mas su rostro al de Sakura sintiendo su cálida respiración chocar con su rostro y esta seguro que ella siente la de él también. –(Lo siento Sakura. No puedo tomar lo que me ofreces. Me iré de la aldea nuevamente.) –los ojos del pelinegro reflejaron tristeza, y le dio un beso en la nariz viendo al separarse como ella sonreía levemente ante su tacto.

Sasuke sintió que se le partía el alma al saber que ya no la vera dormir, ya no la vera sonreírle y ya no podrá sentirla. Con cuidado de no despertarla se pone de pie y comienza a buscar su ropa regada por la habitación para vestirse, sin ver como Sakura se mueve, dándole la espalda. Sasuke ya se ha puesto el pantalón y la playera.

- Te vas nuevamente verdad.

Sasuke se tenso al oírla, temeroso miro por sobre su hombro notando que le daba la espalda pero sabia que esta despierta.

- Duérmete Sakura, es tarde. –dice sin alguna clase de sentimiento, no viendo como lagrimas comenzaron a salir de los ojos de la chica al ver que no negaba lo que había dicho, se sentía completamente idiota al haber ignorado ese presentimiento de que algo andaba mal.

- ¿Sabes? Cuando te vi en el parque tuve la sensación de que sino iba a ti no te volvería a ver y me dio miedo, pero pensé que soy algo paranoica así que ignore ese temor. –Sasuke sintió más fuerte la opresión en su pecho al notar la tristeza con la que hablaba. –Pero veo que mi instinto me advertía que te volveríamos a perder. –Una sonrisa vacía adorna su rostro. –Esta noche no te pediré que te quedes, no te pediré que me lleves contigo y mucho menos te ofreceré una vida conmigo a cambio de que te quedes, porque algo me dice que diga lo que diga igual te iras ¿y sabes que Sasuke-kun? Ya me canse de ir atrás de ti, me canse de seguir un amor que jamás será correspondido. –Sasuke apretó con más fuerza los puños. –Soy una tonta ¿verdad? ¿Cómo no pude darme cuenta que lo que paso hace un momento fue un momento de lastima de tu parte o un simple arranque de deseo de tu parte? –Sasuke apretó más los puños, él jamás le haría algo así a ella por lastima, pero no podía decírselo. –Al menos ahora tengo suerte, no me dejaras en una banca sino en mi cama.

Sakura rio de forma seca, pero no volteo a verlo porque sabia que si lo hacia el vería sus lagrimas, su dolor y ella terminaría suplicándole que se quedara, que no la abandonara. En cuanto Sasuke lucho con ese nudo en su garganta y sintió más fuerte la opresión en su pecho. Sasuke tomo su espada y la puso en su cinturón, para después caminar hacia la ventana abriéndola, ya había dejado de llover y él se subió en cuclillas al marco de la ventana.

- Adiós Sakura. –fue lo único y ultimo que dijo antes de saltar por la ventana e irse sin mirar atrás.

Y Sakura, ella se puso a llorar a llanto abierto, a llorar como una niña pequeña, fue un llanto lleno de dolor y tristeza, sintiendo su corazón dolor con más intensidad que la primera vez que él se fue.


Dentro del despacho de la quinta esta está sentada tras su escritorio y frente a ella están Naruto y Kakashi con los ojos muy abiertos.

- ¡¿CÓMO QUE SE FUE? –grita furioso Naruto. – ¡MALDITO BASTARDO! ¡AHORA IRE A TRAERLO DE VUELTA DE LOS PELOS SI ES NECESARIO DATTEBAYO! –grita decidido.

- Cálmate Naruto que Sasuke no se fue de la aldea, solo se fue de misión. –dice con cansancio, ya sabia que las cosas se pondrían así cuando se los dijera.

- A bueno, debiste decirlo antes vieja, solo una misión. –dice aliviado.

- ¡NO ME DIGAS VIEJA! –grita furiosa lanzándole lo primero que encontró que fue un grueso libro de informes que estaba leyendo y le dio en la frente al pobre rubio, sacándole un chichón y a Kakashi le resbalo una gota de sudor en la nuca, mirando incrédulo a su alumno.

- ¿Y cuando regresa? –pregunta curioso, ignorando el fregazo en su frente.

- No lo sé. –dice con seriedad. –Él pidió una misión larga, muy larga que incluso le pueden tomar años. –Tanto Kakashi como Naruto ensancharon los ojos nuevamente.

- ¡MALDITA VIEJA LOCA! ¿CÓMO SE TE OCURRE HACERLE CASO AL TEME CUANDO TODOS SABEMOS QUE SE LE ZAFO UN TORNILLO DESDE QUE MATARON A SU CLAN?, ADEMAS QUE LOS UCHIHAS NUNCA HAN SIDO CUERDOS, AHÍ TIENES A MADARA E ITACHI… ¡¿POR QUÉ LO MADASTE A UNA MISIÓN ASÍ? ¡¿QUÉ PASA CON EL EQUIPO SIETE? ¡YA DECIA YO QUE LA TRAES CONTRA NOSOTROS DATTEBAYO! –grita furioso, pero luego se tenso y se escondió atrás de Kakashi al ver la expresión sombría que puso Tsunade.

- ¡TE ENSEÑARE A HABLARLE CON MAS RESPETO A TU HOKAGE MOCOSO DEL DEMONIO! –grita tétrica.

- Kakashi-sensei sálveme. –pide suplicante el rubio el cual e tensa al oír que la rubia se tronaba los dedos.

- Ahora que recuerdo tengo que ir a buscar algo que se me quedo en el sendero de la vida. –dice despreocupado desapareciendo en un "puff" dejando al rubio a merced de la rubia.


Kakashi apareció fuera de la torre de la hokage y hizo una mueca de dolor al oir el llanto mariconado lleno de sufrimiento de su alumno acompañado por golpes y gritos de la rubia hokage. Sin mas se dispuso a seguir su camino, ni loco se queda ahí, lo siente por Naruto pero no puede permitir que destrocen su hermoso rostro.


Naruto va refunfuñado mientras va caminando por las calles de Konoha. El pobre rubio esta todo mallugado y lleno de moretones, y la razón por la que el rubio ahorita puede caminar a pesar que Tsunade le rompió casi todo el esqueleto es porque Shizune se compadeció del pobre y lo curo con su chakra, además que el chakra del zorro ayudo bastante en su recuperación también.

- ¡Yo!

El rubio casi muere de un paro cardiaco cuando frente a él aparece de cabeza Kakashi, que se sostiene de la rama de un árbol usando chakra en sus pies, y lee con tranquilidad su libro.

- ¡¿PIENSA MATARME DE UN PARO CARDIACO KAKASHI-SENSEI? –grita furioso, apuntándolo de forma acusadora.

- No. Solo quería asustarte. –dice despreocupado, sin apartar la vista de su lectura, solo sintiendo como su rubio alumno lo fulmina con la mirada.

- Mejor ni me hable, aun estoy molesto con usted por dejarme solo con la vieja. –dice con resentimiento, entrecerrando su mirada.

- ¿Qué podía hacer? Soy muy hermoso y joven para morir. –dice despreocupado al momento de cambiar de pagina en su libro.

Naruto entrecerró más su mirada y una gota de sudor resbalo por su frente.

- ¿Estás listo Naruto? –el peli-plata levanta la mirada mostrando seriedad haciendo que el rubio lo mire extrañado, no sabiendo de que habla. –Sakura. –ante el solo nombre de la femenina del equipo el rubio ensancho los ojos recordando que ella aun no sabe que Sasuke se fue.

- ¡Ese maldito bastardo sigue sin pensar en los demás! –dice furioso, apretando con fuerza los puños.

- Pienso que porque por primera vez pensó en los demás hizo lo que hizo, pero es tan tonto que no sabe que lograra lo contrario de lo que pretende. –dice pensativo.

- ¿De que habla?

- Déjalo Naruto, es algo muy avanzado para ti. –Kakashi lo mira con compasión, estando resignado a la torpeza por no decir idiotez de su alumno.

- (Tengo la sensación de que me esta insultando) –el rubio vuelve a entrecerrar la mirada intentando dar en que forma lo esta insultando, pero luego suspiro con pesadez sabiendo que no es momento para eso. –Tenemos que ir a decírselo a Sakura-chan. –dice con tristeza.

- Por eso te esperaba, pienso que ambos debemos decírselo. –dice con seriedad y el rubio asintió.


Sakura esta sentada en su cama, teniendo las piernas flexionadas y apoyando sus brazos en sus rodillas, tiene la mirada perdida, sus ojos están rojos e irritados. La peli-rosa solo esta vistiendo una camisa que le queda muy holgada, es una que usa comúnmente para dormir y un bóxer femenino, su cabello esta algo revuelto.

- ¡Yo! –Kakashi aparece frente a ella en una nube de humo, pero su sonrisa perezosa se borro al ver a su alumna.

- Kakashi-sensei, no sea conchudo y use la puerta. –en el marco de la ventana esta Naruto en cuclillas mirando a reproche a su sensei, pero al ver como este mira con seriedad hacia el frente dirige su mirada a la misma dirección viendo a su compañera.

Kakashi y Naruto con solo verla sabían que algo había pasado, sus ojos lo decían todo además que esta vez Sakura no grito, ni golpeo a Naruto, reclamándoles por entrar así a su casa mientras Kakashi desaparece.

- Sakura-chan. –dice con tristeza el rubio, mostrándose acongojado en su mirada.

- Sasuke-kun se fue. –dice cortante, sin quitar su mirada perdida.

Kakashi miro de reojo a Naruto, el cual no quita su mirada llena de tristeza de su compañera.

- Lo sabemos. –dice con seriedad regresando su mirada hacia Sakura, la cual sonrío de forma vacía.

- Tal parece que tengo la mala suerte de verlo ir cada que se va. –dice con ironía y hasta burla.

Naruto se adentro completamente en la habitación y camino hacia ella sentándose a su lado, y sin más la estrecho en sus brazos. Sakura al sentir la calidez del abrazo de su amigo escondió su rostro en su hombro, abrazándolo con fuerza y comenzó a llorar nuevamente, ya no un llanto abierto como el de hace unas horas, sino uno silencioso.

Kakashi mira con tristeza el cuerpo de su alumna estremeciéndose ante el llanto, Naruto siente las lagrimas de su amiga mojarle el hombro y la estrecha más al momento que rebeldes lagrimas resbalan por sus ojos.

Ninguno dijo nada, no había necesidad, era como si los tres supieran los que sentía el otro, y con la sola presencia se dieran apoyo, a ese grado a llegado el fuerte lazo que los une. Y los tres saben el tipo de tristeza que siente cada uno ante la ida del otro integrante del equipo.


Han pasado dos meses, en ese tiempo cada uno de los originales miembros del equipo siente intentaban animarse ante la ida de Sasuke, aunque la que parecía no superarlo casi nada es Sakura. La peli-rosa casi no comía razón por la que había adelgazado y se le veía algo demacrada, sus sonrisas eran apagadas al igual que su mirada, era como si una segunda perdida no la pudiera soportar.

Nadie decía nada e intentaban no hablar de Sasuke frente a ella, porque no es secreto para ninguno de sus amigos del gran amor que ella le tiene al único Uchiha. Aunque Naruto, Kakashi, Sai, Ino y Tsunade la intentaban animar a su manera, aun así no conseguían mucho.

Ese día le toca entrenamiento al equipo de Kakashi, como casi todas las mañanas. El líder del equipo los puso a pelear en parejas mientras el de lo más tranquilo leía un libro en la comodidad de una rama de un árbol donde estará seguro de los ataques de esos cuatro.

A Sakura le había tocado pelear contra Yamato, y a Naruto contra Sai.

- ¿Vez Sai? ¡Meterte con Uzumaki Naruto, el futuro Hokage no esta a tu nivel! ¡Jojojo…! –el rubio tiene sus manos en las caderas estilo jarra mientras ríe y mira con superioridad al pobre pelinegro que esta tirado frente a él con los ojos en forma de espiral y el rostro coloreado de verde.

- (Pero si Sai solo quedo noqueado porque Naruto le echo un pedo en la cara en medio del combate) –Kakashi alza la mirada de su libro mirando con compasión a Sai.

- ¡Nombre, si me sorprendo a mi mismo de lo mucho que me he superado! –dice con admiración el rubio sintiendo su ego flotar por las nubes justo en el momento que Kakashi salto cayendo de pie atrás de él.

- Naruto, deberías ponerle nombre a esa técnica... no sé, algo así como: "Elemento gas: pedo atómico" –dice burlón y las mejillas del rubio se sonrojaron al momento que voltea todo su cuerpo quedando de frente a su sensei.

- Es que el rameen de anoche me cayo pesado. –dice apenado al momento en que se rasca su nuca con la mano derecha y con las izquierda se soba la tripa mientras sonríe apenado.

- ¡SAKURA!

El grito asustado de Yamato hizo que ambos voltearan viendo a Sakura en el piso con Yamato a su lado, echándole aire con una de sus manos.

Yamato mira preocupado a la chica, pero en eso sintió un jaloneo que le hizo cerrar los ojos, al abrirlos ya no vio a la inocente Sakura inconsciente sino el rostro del furioso Naruto que lo mira como psicópata asesino, y eso le dio mucho miedo al pobre ANBU.

- ¡¿QUÉ DEMONIOS LE HICISTE A MI SAKURA-CHAN, MALDITO GOLPEADOR DE MUJERES? –Naruto que tiene tomado a Yamato de las solapas lo agita con brusquedad comenzando a marear al pobre pelinegro. –¡BIEN LE DIJE A TODOS QUE SE DEJARAN GOLPEAR POR ELLA EN LOS ENTRENAMIENTOS! ¡NO IMPORTA SI TE ROMPE LOS HUESOS NO DEBISTE GOLPEARLA! ¡¿QUÉ NO VEZ QUE AUNQUE TENGA FUERZA DE ELEFANTE ES UNA MUJER DELICADA? –ante cada frase el rubio agita con mas brusquedad al pobre Yamato y sus mirada de psicópata se va marcando más. – ¡ADEMÁS BIEN SABES QUE CON LO DEPRIMIDA QUE ESTA CASI NO COME, DEBERIAS DEJARLA GOLPEARTE PARA QUE SAQUE TODA LA FURIA COMO YO LE HE HECHO EN LOS ENTRENAMIENTOS SIN IMPORTARME QUE PARE EN EL HOSPITAL CON LOS HUESOS HECHOS CENIZAS PARA ANIMARLA Y TU NO PUEDES HACER ESE SACRIFICIO!

- ¡Es que yo no tengo el chakra del zorro como tú! –dice con dificultad Yamato aun teniendo los ojos en forma de espiral y comenzando a ponerse verde por el mareo.

- ¡ME VALE UN PEPINO! ¡QUÉ MUERAS SERÁ UNA BUENA CAUSA POR LA FELICIDAD DE MI SAKURA-CHAN! ¡AL MENOS GRACIAS A ESO ESTARA TU FEO NOMBRE GRABADO EN LA PIEDRA DE LOS CAIDOS, ASÍ QUE CONFORMATE CON ESO!

- Naruto deja a Yamato ya, o le sacaras todo el desayuno. –dice divertido Kakashi, palmeándole el hombro a su alumno.

El rubio chasqueo la lengua resignado, y suelta a Yamato haciendo que caiga de pompas al suelo.

- Lo mejor es que llevemos a Sakura al hospital y de pasada a Sai y Yamato. –dice despreocupado, apuntando a ambos que están tirados en el piso con los ojos en forma de espiral, uno por el elemento gas: pedo atómico y el otro por la zarandeada.

Naruto asintió dándole la razón, y tomo de una pata a Yamato arrastrándolo hasta llegar a Sai golpeándole en el proceso la cabeza con cuanta roca había en el lugar, luego tomo a Sai de una pata y lo arrastro junto con el otro pelinegro hacia donde esta Sakura haciendo que ambos se golpeen la cabeza con cuanta roca hay ahí. Ya para cuando los tres llegaron con Sakura, los pobres desmayados tenían una montaña de chichones en la cabeza, y Kakashi esta más entretenido en leer su libro.

- Kakashi-sensei, suba a Sakura-chan en mi espalda. –dice al momento de inclinarse para que la suban.

Kakashi aparta la mirada de su libro con resignación y va por Sakura para subirla en la espalda de su alumno, y así Naruto camina llevándose a los tres, y Kakashi camina con tranquilidad atrás de él mientras lee con tranquilidad su preciada novela.


Al llegar al hospital Naruto abre la puerta de una patada.

- ¡VIEJA TSUNADE! ¡VIEJAAA…! ¡VIEJAAA…!

El rubio grita como poseído parado en la entrada, mirando a todos lados en busca de la rubia, y casi todos en el lugar lo voltean a ver asustados, pero al notar que se trata de Naruto regresaron sus miradas a lo que estaban haciendo al estar ya acostumbrados a sus loqueras.

Kakashi se encogió de hombros restándole importancia y camino hacia la recepción viendo a la recepcionista sentada en una silla dándole la espalda.

- ¿Está Tsunade-sama, muñeca? –pregunta galante.

La recepcionista se gira hacia él junto con la silla y Kakashi se asusta al ver que se trata de una viejita más arrugada que una pasa, teniendo el cabello pintado de negro y los labios pintados de un intenso rojo.

- (¡A la madre! ¡Me cambiaron a la recepcionista!) –al peli-plata se le erizo la piel como gato al ver la mirada deseosa que la anciana le dirige y ese sonrojo en sus mejillas le provoco más escalofríos. – (¿Por qué tenían que cambiarme a la sexy Megumi-chan por esta momia?) –Kakashi llora internamente, y se aclaro la garganta intentando ignorar la mirada coqueta de la cachonda viejita. –¿Está Tsunade-sama? –pregunta con seriedad.

- Si es para Naruto-kun no esta… bombón. –dice coqueta y guiñándole un ojo haciendo que el peli-plata se ponga más verde que un moco en momentos de gripe.

- ¿Y Megumi-chan? –pregunta esperanzado por quitarse la mirada de esa vieja golosa de encima.

- ¡Ah! Como se caso tomo vacaciones para ir a su luna de miel.

- (mmm… es verdad, Megumi-chan se iba a casar, ya recuerdo que hace una semana tuvo su despedida de soltero conmigo. Se hecho su canita al aire antes de casarse. Y es que es difícil que se resistan a mis encantos) –Kakashi sonríe con arrogancia bajo su mascara recordando esa candente noche y lo apasionada que es Megumi-chan.

- (¡Que apuesto es Kakashi-kun!, y me han dicho que al ninja copy le gustan las enfermeras. ¡Ojala pronto se me haga!) –piensa soñadora la viejita golosa, mirando con ojos en forma de corazón al peli-plata. –Yo me llamo Rika, pero puedes llamarme Rika-chan, muñeco. –dice coqueta, y mandándole un beso parando sus arrugadas trompas provocándole nauseas a Kakashi.

- Ejem… claro Rika-chan. –dice nervioso y deseando jamás haber ido a ese lugar a ligarse a alguna enfermera, digo; a llevar a sus compañeros de equipo.

- Me han dicho que te gustan las enfermeras. ¿Y que crees cariño? Soy una enfermera. –dice coqueta volviéndole a guiñar un ojo.

- (Creo que ya no vendré al hospital a ligarme enfermeras) –A Kakashi se le sombre la frente de negro y sus ojos se entrecerraron tanto hasta parecer dos franjas.

- Sensei. Ya deje de ligarse a la recepcionista y llame a la vieja. –dice con reproche el rubio, llegando a su lado.

- ¡Ay que pena! El muchacho ya se dio cuenta que coqueteabas conmigo. –chilla apenada, tocándose sus sonrojadas mejillas, y a Kakashi se le sombreo mas su frente de negro.

- (El gusto de sensei ha decaído, de gustarle las chicas mas jóvenes que él y sexy, paso a gustarle las mayores con piel de pasa) –el rubio mira con los ojos como plato a su sensei y una gota de sudor resbala por su nuca, pero luego agito su cabeza al recordar que eso no importa ahorita. –Como decía sensei. Deje sus ligues para después y ayúdeme a buscar a Tsunade-obachan que Sakura-chan se esta muriendo. –Lagrimas de cocodrilo comenzaron a resbalar por las mejillas del rubio sin darse cuanta que las personas que pasaban atrás de él le pisaban el rostro a los pobres de Yamato y Sai, los cuales el rubio sigue tomándolos de los pies para arrastrarlos.

- ¡QUÉ SAKURA SE ESTA MURIENDO! –grita exaltada y asustada Tsunade saliendo e debajo del escritorio asustando a Naruto que sintió que moriría de un paro cardiaco.

Ahí se dio cuenta Kakashi que la vieja estaba escondida disfrutando como la anciana cachonda le coqueteaba. Es listo y sabia que Tsunade lo odia por llegar siempre tarde, inventarse escusas estúpidas intentando verle la cara, por ligarse a las enfermeras de su hospital para después desecharlas, y porque hace un par de semanas se tiro a Shizune y la desecho como trapo viejo como a todas. ¡En fin!, por esa clase de "pequeñeces" se ha ganado el odio de Tsunade, el caso es que la vieja lo odia y por eso le puso una viejita pervertida como recepcionista para joderselo mientras ella mira desde abajo burlándose. Conocía a su Hokage, y sabe que sin importar lo que pasara, sin importar tener una aldea que manejar esperaría ahí hasta que llegaran para ver su reacción ante la viejita golosa... aunque admitía que la rubia sabia que no tenia que esperar mucho, el como su equipo es cliente frecuente del hospital que visitas a diario y hasta cinco veces al día; que porque Naruto se ahogo con el rameen, que porque Naruto cayo en una trama explosiva, que porque Naruto se le atoro el pie en el drenaje, que porque Naruto tiene indigestión estomacal por tragón, que porque Sakura molió a golpes a Naruto, que porque Naruto medio mata a un miembro de su equipo con su elemento gas: pedo atómico, etc., etc., etc. Y ellos como equipo iban a llevar al rubio u otro miembro al hospital y pues Kakashi iba como buen líder que es se preocupa por sus chicos… ¡nee! ¿Para que mentir? Iba para tener sexo ardiente en alguna habitación con alguna enfermera en lo que espera que curen al que llevan al hospital, había descubierto que le dio fetiche con los trajes de enfermeras, ¡y bueno!, aunque Sakura es medic-ninja y una de las mejores no siempre estaba con Naruto cuidando que no se muera, solo en los entrenamientos lo cura, pero las demás horas del día ¿qué? Por eso Kakashi le aconsejo al rubio que se case con una enfermera, y este le contesto que nada mas a Sakura deje de ser tan violenta le pide que se case con él. Pero bueno, retomando el tema:

- ¿Qué le paso a mi alumna? –pregunta asustada mirando a la mencionada, para después dirigir su mirada asesina hacia Kakashi que sonrio nervioso bajo su mascara. – ¡¿Qué le hiciste a mi alumna, Kakashi-puto-maricón? –pregunta furiosa, poniendo una mirada de psicópata asesina poniendo más nervioso a Kakashi y a Naruto le resbalo una gota de sudor en la nuca.

- (Como que comienzo a pensar que Tsunade-sama la trae contra mí. Pero solo me folle a Shizune una vez, no le veo motivo a tanto resentimiento) –Kakashi marco más su sonrisa al ver que la rubia es rodeada por una potente aura tenebrosa. –am… Tsunade-sama, yo no le hice nada a Sakura, se lo juro por mis icha icha. –Tsunade frunció el entrecejo sabiendo que si lo jura por esos pervertidos libros es porque dice la verdad.

- Es verdad ba-chan, Kakashi-sensei no le hizo nada. Mejor deje de buscar culpables y cure a Sakura-chan. –pide suplicante el rubio y haciendo ojos de cachorro mojado.

- ¡Tienes razón! ¡Ahorita lo único que importa es mi alumna! Rápido! ¡Traigan electroshock, camilla, insulina! ¡En fin, todo tipo de cosas y medicamentos que haya en el hospital! –dice alarmada y a todos los que están cerca les resbalo una gota de sudor en la nuca ante la exageración, bueno, menos a Naruto que esta igual de alterado gritándole a Sakura que no camine hacia la luz.

- Por cierto Tsunade-sama, ellos también necesitan atención médica. –dice Kakashi apuntando atrás de Naruto y Tsunade se asomo para verlos.

- ¿Qué les paso? ¿Un ataque ninja o que? –pregunta espantada al ver a Sai y Yamato desmayados con varias bolas en la cabeza, marcas de pies en el rostro los cuales están desfigurados y sangre saliéndoles por todas partes de la cara.

- No estaban así en el campo de entrenamiento. –dice Kakashi extrañado y con una gota de sudor resbalando por su nuca al momento que se rasca la cabeza intentando buscarle lógica al porque se ven tan heridos esos dos.


Los tres miembros de team Kakashi fueron llevados a una habitación para ser curados. Sakura al ser la consentida y la alumna de la quinta le dieron habitación vip, de esas habitaciones grandes que parecen de hotel de lujo y es para una sola persona, mientras que a Sai y Yamato los aventaron con la demás chusma, en una habitación como con diez enfermosa más y pues fueron atendidos por simples doctoras del hospital, mientras que la peli-rosa es atendida por la mas grande, la única, la mejor, la chichona más chichona de todas y la kage de la aldea… ¡así es! ¡la mismísima Senju Tsunade!

Afuera de la habitación vip esta Naruto caminando de un lado a otro como león enjaulado, parecía como si estuviera esperando a su esposa dar a luz, y eso que es soltero. ¿Y kakashi? Bueno él esta sentado en una silla, leyendo su novela favorita de lo más tranquilo mientras de vez en cuando le da leves tragos a el refresco que hace unos minutos compro en la maquina de la esquina.

Unos pasos chocar contra el piso hizo que Naruto detenga su caminata y Kakashi levante la vista de su libro, ambos vieron a una despampanante y hermosa enfermera caminar hacia ellos, haciendo que el ojito de Kakashi la escanee con rapidez y brille con perversión.

- (Tiene buena nalga, buena pierna, buenas bubis, linda cara, en resumen esta buenota) –el ojito del peli-plata brillo de forma picara y la enfermera al notar su mirada se sonrojo al momento de detenerse frente al rubio.

- Señor, sus amigos ya están estables. Afortunadamente los golpes en la cabeza no llegaron a más, pero probablemente haya secuelas, mas no lo sabremos hasta que despierten. –dice toda profesional intentando no mostrar el nerviosismo que la penetrante mirada del sexy ninja copy le dedica.

- Bueno, pienso que es mejor así para ellos, si pierde la memoria haber si con la nueva se vuelven mas cool. –Naruto se agita de hombros restándole importancia.

La enfermería miro incrédula al rubio, pero luego se encogió de hombros restándole importancia, ya ha oído lo loco que esta el rubio y su equipo, así que hizo una leve inclinación y dio media vuelta comenzando a caminar para alejarse de esos dos antes de que el rubio le pegue lo loco o de que sucumba ante los encantos del peli-plata.

- ¿A donde va sensei? –pregunta curioso al ver a su sensei ponerse de pie y estar dispuesto a caminar extrañamente por donde se fue la enfermera. En cuanto Kakashi dejo su pie en el aire y lo miro de reojo.

- Me ha estado doliendo mucho la garganta estos últimos días y ya que estoy en el hospital aprovechare para que me chequen. –dice de forma perezosa y despreocupada.

- ¡Entiendo sensei! ¡Es bueno preocuparse por su salud! –dice amigable y dedicándole una zorruna sonrisa.

- (Ingenuo) –Kakashi sonrio con burla bajo su mascara, y esta por terminar de dar el primer paso para seguir con su camino hacia su próxima conquista pero en eso la puerta donde esta Sakura es abierta haciendo que tanto él como el rubio volteen curiosos viendo a Tsunade salir con la cabeza inclinada y un aura siniestra rodeándola, aura que para Naruto es triste y para Kakashi le dio mala espina.

- ¡¿No me diga que no pudo hacer nada y mi amiga murió? –pregunta horrorizado Naruto.

Tsunade levanto el rostro dejando ver esa mirada psicópata que Naruto la vio como una mirada llena de dolor por lo que se dejo caer de rodillas al piso y comenzó a llorar como magdalena gritándole al cielo que le regrese su Sakura-chan.

La rubia miro a Kakashi haciendo que este tenga un mal presentimiento, por lo que se dispuso a hacer los sellos para hacer un jutsu de tele transportación y huir de ahí, usando su súper velocidad para que nadie vea en que momento los hace, pero Tsunade fue mucho más rápida y ya esta frente de él tomándolo de las solapas impidiendo su huida.

Kakashi miro atemorizado a la rubia, no quería recibir una paliza como la que recibió cuando se tiro a Shizune, esa vez quedo con los huesos hechos aserrín. Lo bueno es que se había protegido el rostro, pero ahora no recordaba que haya hecho algo como para merecerse otra paliza, al menos… ¡al menos que se haya vuelto a follar a Shizune, ¡pero no lo recuerda! Pero le ve imposible esa teoría, ya pensándolo mejor no fue eso, ya que él nunca olvida cosas así, además desde esa paliza ya ni se acerca ni poquito a la pelinegra alumna de la quinta, cumple al pie de la letra la ley que impuso Tsunade de no acercarse a Shizune a menos de cien metros, al menos que sin querer haya rebasado una milésima de distancia y la Hokage que lo sabe todo se entero.

- ¡Tú..! ¡tú maldito pervertido! ¡Como te encanta hacerle la vida imposible a mis alumnas hijo de puta! ¡No solo Shizune sino también Sakura! –Naruto dejo su drama y miro curioso a la quinta cuando menciono a su amiga. –Pensé que Sakura se salvaba de estar en tus garras al haber sido tu alumna y la respetabas por eso cabrón!

- ¿Eh? –Kakashi alza sus cejas no entendiendo nada, no sabia de que le hablaba la rubia, pero sospechaba que termino por volverse loca.

- ¡Péguele vieja! –anima el rubio, conoce a su sensei y sabe que si Tsunade dice que le hizo algo a su querida amiga es porque debe ser verdad.

- No ayudes. –Kakashi mira con ojos entrecerrados a su alumno y este le sonríe de forma zorruna. –haber. –el peli-plata suspira con pesadez y dirige nuevamente su mirada a la rubia intentando no zurrarse del miedo al verle ese brillo asesino, desde que lo golpeo por lo que le hizo a Shizune quedo traumado con esa mirada en los ojos miel de su Hokage. –Antes de que me muela a golpes dígame lo que según usted le hice a Sakura.

- ¡La embarazaste maldito pervertido pedófilo! –grita furiosa.

Naruto y Kakashi ensancharon los ojos mostrando sorpresa, no podían creer lo que acaban de escuchar.

Continuará

ke tal? les gusto? ke pasara ahora? como se lo tomara saku? como se lo tomaran los demas?

see, se que aun tengo varios fic pendientes, pero este es uno de los fic ke tengo avanzado, asi ke decidi publikarlo ya para que tengan en ke entretenerse mientras subo los cap de los demas fic XD, en lo personal me diverti mucho escribiendo ste cap, kakashi y naruto me divirtieron con sus lokeras XD hacen buen duo esos dos XD