Ninguno de los personajes me pertenecen, todos ellos son creación y propiedad de Sunrise.
De carretera en carretera
El motor rugió un poco más fuerte al ser exigido, la mujer tomó la curva sin problemas, rozando suavemente la rodilla con el asfalto, disfrutando cada segundo en el que la velocidad y la inercia luchaban por arrebatar su cuerpo del control que le proporcionaban sus músculos. Forzó nuevamente el poder de su motocicleta, la cual rugió, aumentando la velocidad. El viento se lanzó sobre sus manos aún más fuerte, mientras ella seguía incrementando la velocidad y pasando el límite por un amplio margen. Sobre el rugir del escape y el metal esforzándose escuchó los truenos que presagiaban una tormenta, no les presto atención, nunca lo hacía y menos ahora, que su moto desplegaba todo su poder y casi sentía que la llevaba en brazos hasta el cielo. Nuevamente tocó el pavimento al doblar, entró en una serie de curvas que le obligaron a reducir la velocidad, momento que aprovechó la lluvia para dejarse caer. Maldijo por lo bajo, necesitaba la velocidad para recorrer toda la distancia posible antes de que se le hiciera tarde. Esperó a que las curvas desembocaran en una recta suave, con el pavimento bien nivelado y sin resaltos, para levantar la nariz de la Ducati Desmosedici RR y reducir la fricción entre el asfalto y los neumáticos. Recorrió el camino como un destello azul y se vio obligaba a reducir la velocidad en cuanto entró al pueblo. Miró la hora en uno de los tantos relojes que adornaban las esquinas de la ciudad y suspiró más tranquila, aún tenía tiempo suficiente. Ronroneando suavemente se paseó por la ciudad, recorriendo las calles y reconociéndolas, llenando el estanque de la máquina y haciendo hora para entrar en el momento apropiado.
Aparcó cerca del edificio y se sacó el casco para respirar aire freso luego de horas de conducción, su cabello largo cayó suavemente y sus ojos verdes destellaron con las luces de la ciudad, aún llovía, por lo que se encontraba empapada, pero no tenía frío, una excitación incontenible la controlaba. Quedaban solo treinta minutos para empezar a actuar, así que mató el tiempo observando los autos que pasaban por la calle. La gente paseaba tranquila a su alrededor, sin prestar atención a la joven mujer que se debatía internamente por el curso de sus acciones. No había vuelta atrás, ya no podía negarse, tampoco quería hacerlo, pero el miedo la asaltaba y, a pesar de que estaba segura de sus sentimientos, el temor corría por su espalda igual que la lluvia. El tono de su celular la sobresaltó, examinó rápidamente el aparato y leyó el mensaje "Cinco minutos más". Chasqueó la lengua, se había demorado más de lo que había supuesto, se caló el casco nuevamente y arrancó a toda máquina, le tomaría unos cinco minutos llegar hasta las puertas del edificio. Saltándose un par de rojas y adelantando con una determinación casi suicida llegó hasta el punto deseado. Su móvil vibró y timbró nuevamente, lo sacó rápida y aceleró en cuanto leyó el mensaje "Ahora", hizo correr a la moto toda la cuadra y levantó la rueda delantera para chocar contra las puertas de la iglesia, irrumpiendo de forma dramática en la ceremonia. Todos se dieron vuelta alarmados ante la importuna interrupción, la motociclista aceleró nuevamente y, describiendo un cerrado y arriesgado circulo alrededor de la futura pareja, tomó a la novia de la cintura, la cargó delante de ella en la moto y partió, acelerando a fondo sin mirar hacia atrás y sin detenerse, conduciendo con maestría entre autos y peatones, saltando pares y rojas como si la vida se le fuera en ello. La mujer raptada no opuso resistencia, sabía perfectamente de quién se trataba y se dejó llevar, hasta una cabaña algo retirada de la ciudad que tan bien conocía. Estacionaron en la cochera y por fin la joven deshizo su abrazo de la cintura de la novia, depositándola con cuidado en el suelo y bajándose ella con prisa también. Ambas quedaron de pie bajo la lluvia, una sin saber que decir y la otra con una mirada que exigía explicaciones.
-Natsuki debería ser menos melodramática cuando interrumpa en las bodas- Dijo la novia, observándola profundamente con sus ojos rojos.
-No se me ocurrió otra forma- Se excusó la joven. Bajó la cabeza para sacarse el casco y en cuanto alzó la mirada una fuerte bofetada le hizo dar vuelta el rostro -¿Shizuru…?- Inquirió, alarmada, sus peores miedos se materializaron frente a ella.
-Tuviste meses para evitarlo, sabías perfectamente cuando ocurriría la boda, incluso fui a pedirte… mejor dicho a arrastrarme para que me dieras un solo indicio, solo un gesto para abandonarlo todo, ¿Por qué ahora?, ¿Crees que es tan fácil?, ¿Entiendes siquiera como me siento?- Su voz tranquila iba lentamente quebrándose, Shizuru se detuvo para recuperar el control de si misma nuevamente, sabía que sus palabras estaban doliendo en su captora y secretamente disfrutó del momento -Si no te explicas en exactamente un minuto me retiraré- La joven Fujino la miró dolida –Empieza ahora-
Natsuki abrió la boca, pero fue incapaz de articular una sola palabra, los segundos transcurrían dolorosamente y la joven entraba en desesperación, solo quedaban unos pocos momentos para que se cumpliera el minuto y ella seguía ahí, bajo la lluvia, sin poder explicar el curso de sus acciones. Shizuru suspiró pesadamente, su corazón nuevamente sangraba y ya estaba cansada de sufrir, de esperar y de amar, la traspasó con sus rubíes antes de decirle adiós suavemente. La joven Kuga la observó alejarse, sintió que el control se le escapaba de las manos y que la vida se le iba en el lento bambolear de caderas de Shizuru al caminar, perdió el control de su cuerpo y dejó a sus instintos actuar. Corrió hasta la mujer, la tomó salvajemente de un hombro para darle vuelta, barrió una de sus piernas obligándola a colgarse de su cuello para evitar la caída y la besó desesperada, ávida de amarla, de entregarse, de aceptarse, de descansar. La castaña abrió los ojos sorprendida, intentó resistirse pero la joven Kuga la apretó más fuerte contra ella en respuesta, finalmente se dejó llevar, afianzó el agarre de sus brazos y le devolvió ese beso, torpe por los nervios, que le brindaba. Se separaron, respirando entrecortadamente, Natsuki se enderezó y la soltó suavemente. Su cara adquirió un tono rojizo que la lluvia no disimulaba, avergonzada bajó la vista.
-Shizuru yo…- La aludida espero, quería escuchar si valía la pena esperar a la mujer que amaba, dar la última batalla antes de rendirse –Yo… yo… no sé que siento- Levantó la vista, su rostro pintado totalmente de rojo pero con la determinación tatuada en sus ojos verdes –Pero, no quiero estar lejos de ti, necesito tenerte cerca, olerte, sentirte… besarte… y bueno… supongo que… amarte- Bajo nuevamente la vista –Y no lo supe hasta que te fuiste… cuando me di cuenta que por mi cobardía perdería a la persona más importante de mi vida- Shizuru tomó una de sus manos, Natsuki no podía distinguir si era la lluvia o lágrimas lo que le corría por las mejillas, pero levantó su mano libre para limpiarlas tímidamente –No sé que será de mi vida, no tengo trabajo ni estudios, tal vez estoy perdida y solo soy una motociclista loca y sin destino, pero… te amo y no quiero perderte, duele… no tenerte duele más de lo que estoy dispuesta a tolerar y todos se pueden ir al carajo con sus opiniones, solo quiero tenerte cerca… no te vayas, no me dejes por favor- Suplicó, se acercó, acortando la distancia entre ellas, y un relámpago de furia cruzó su mirada al recordar a cierto personaje por lo que no pudo evitar gruñir -Menos por ese idiota- La joven castaña la miró intensamente por unos segundos, segundos en los cuales Natsuki temió que se fuera nuevamente, dejándola sola en medio de ese vacío que la perseguía, pero se acercó y posó su frente en su hombro.
-¿Por qué tardaste tanto en decirlo?- Inquirió suavemente, abrazándola por cintura –Me quedaré contigo, no me importa lo que tienes o lo que sabes, para mí tú eres suficiente, seas de la forma que seas- Susurró, acercando su boca a la oreja de su nueva pareja -¿No Nat-su-ki?- Completó riendo al sentir el calor que despedía su novia.
-S-si… Shizuru- La morena buscó su rostro, para besarla, esta vez de forma más suave y tímida, sin prisa ni angustia -¿Entramos?, arrendé esta casa hasta mañana, así que tenemos tiempo de cambiarnos y comer algo caliente antes de que tu familia empiece a buscarme para descuartizarme por secuestrar a su preciosa hija- Rió tirándola de una mano, para guiarla al interior de la cabaña.
-Ara Natsuki, ¿No habrás olvidado que hoy es nuestra noche de bodas?- Sonrió ante la expresión atónita que se formaba en el rostro de la mujer –¿Secuestras una novia y luego te desentiendes de tus deberes?, pues me encargaré de recordártelos… después de todo el matrimonio DEBE consumarse- Susurró, dejando que la lujuria rodara por sus palabras. Natsuki sintió como los colores le subían por el rostro por décima vez en la noche –Pero esta bien-Shizuru la abrazó mientras entraban y se guarecían de la lluvia –Tenemos toda la vida por delante- Ronroneó, feliz de que su día oscuro terminara de una forma que ni siquiera fantaseó. La lluvia empezó a descampar en la mañana, cuando ambas subieron a la motocicleta y se perdieron por la carretera, guiadas solo por el camino, concientes de que su hogar se encontraba donde estuvieran ambas juntas.
NdA: Revisando los archivos de mi pc encontré este proyecto... la idea de este fic es dar fogonazos sobre la vida de los personajes de Mai HIME. Es mi espacio para escribir solo situaciones o momentos, que sin embargo tendrán cierta continuidad. Así pueden ir unidos o separados. Mis intenciones son las de escribir sobre todos los personajes, pero creo que siempre habrán más sobre Shizuru y Natsuki... como este. Robarme una novia de esa manera siempre ha sido uno de mis sueños locos ^^, pero tengo que cambiar mi moto scotter por una real... bueno cuando por fin tenga un sueldo decente lo haré. Mi otro fic se encuentra en proceso de construcción, pero no estoy segura de poder sacar el capítulo para el lunes, pondré todo mi esfuerzo en ello. Las entregas de este fics serán saltadas, descontinuadas y erráticas, ya que colgaré un one-shot cada vez que lo termine... Esperando que les haya gustado y no haberlos aburrido con tanta explicación, me despido.
