Sin ti sería silencio.

Desde que no estás
el escenario duerme
sólo con tu voz despertará

Sonrió en la oscuridad. En una de las habitaciones de la torre de los Premios Anuales una castaña fingía dormir.

Si pudieras ver
lo mucho que me faltas,
mi guitarra se ha muerto de pie…

El Slytherin levantó un poco más la voz, no importaba si ella estaba durmiendo. Le cantaría con todo su sentimiento. Haría lo que fuera porque lo perdonara, incluso ponerse en ridículo como lo estaba haciendo en este momento.

Cada noche es un acto de amor
y el concierto se hace una cama,
pero faltas tú, tu respiración
es la nana que me calma…

Hermione se tapó la cara sintiendo enrojecer sus mejillas. Recordando aquella vez. Su primera vez. ¡Esto no podía estar pasando! ¡Draco no podía estar cantándole aquella canción! Sonrió nuevamente intentando mantenerse en su cama, tenía que ser fuerte.

Sin ti sería silencio,
sin ti se muere mi voz,
sin ti tiritan de frío
los sueños de cada canción…

"¡Vamos Princesa! ¡Sé que puedes escucharme!" pensó desesperado tocando el siguiente acorde. Seguiría parado frente a esa puerta hasta que ella saliera para sacarlo a patadas o a perdonarlo por la estupidez que había cometido.

Porque si no estás,
¿Quién me va a curar
de mi soledad?
Porque sin tu voz
no me curaré, hoy quiero cantar…

"¡HERMIONE JEAN GRANGER MANTENTE EN TU CAMA!". Su subconsciente la regañaba cada vez más mientras ella escuchaba embelesada como cantaba su bello novio detrás de la puerta. Estaba sentada en la orilla de su cama debatiéndose entre salir o no. ¡Simplemente Draco Malfoy no hacía estas cosas!

Desde que no estás
los minutos se hacen horas,
la derrota silba una canción

Dime dónde estás,
necesito que tus manos
maten mis miedos al aplaudir…

La necesitaba, con todo su ser. No se imaginaba ya su vida sin ella, sin su castaña. Le había ayudado tanto, le había contado todos sus miedos y todos sus secretos. Le había entregado su corazón cada minuto que pasaba a su lado. "¡Amor mío, fui un imbécil! ¡Pero Te Amo, juro que lo hago!" pensó con dolor. Nunca se había sentido más estúpido en su vida, ¡Mira que perder a la mujer que amaba por una apuesta!

Cada noche yo te imagino aquí
regalándome tu mirada,
abrazándome con brazos de luz,
tu sonrisa era mi almohada

Ella sonrió nuevamente, esta vez frente a la puerta. No podía más. Se había enojado por una tontería y lo sabía. Miró hacia su cama nuevamente observando las flores que le habían llegado a lo largo del día, todas de parte de su novio. ¡Lo amaba! Se mordió el labio mientras giraba el pomo de la puerta, ya quería ver la expresión de su amado.

Necesito oírte,
necesito que tu voz
nunca se borre de mí ser...

Sin ti sería silencio,
sin ti se muere mi voz,
sin ti tiritan de frío
los sueños de cada canción…

Draco aguantó la respiración. La puerta se había abierto y dentro estaba su novia con su hermoso camisón blanco. Parecía un ángel. Su ángel. Le sonrió abiertamente rasgando su guitarra. ¡No lo había sacado a patadas! Confirmó su pensamiento anterior: La amaba. La única chica que amaba estaba parada frente a él, con su cabello desordenado y su perfume de vainilla hechizándolo como siempre. Él era de ella, y se lo quería demostrar como sea.

Porque si no estás,
¿Quién me va a curar
de mi soledad?
Porque sin tu voz
no podré escuchar a un ángel cantar…

Le dejó terminar cantar. Era una delicia escuchar su voz cantándole. Solo para ella. En cuanto dejó su guitarra a un lado se lanzó a su cuello. No necesitaba palabras para saber que estaba perdonado.

El rubio hundió sus dedos en los cabellos de su amada. ¡Lo perdonó! No cabía en sí de la felicidad. No le importaba haber cantado como un idiota a una puerta o haberle mandado flores sin respuesta alguna. Todo valió la pena. Volvía a tener a su castaña entre sus brazos.

-Te amo. – susurró, haciéndola temblar. – Te amo, te amo, te amo. – sus manos buscaron su rostro y acaricio sus mejillas. – Soy un idiota. – ella rió con nerviosismo.

-Pero eres mi idiota. – sus ojos se abrieron y sonrió. – Y yo soy la magnífica novia que se encargará de hacerte un poco más inteligente. – la castaña le guiñó un ojo. No pudo resistirse más y la alzó en sus brazos haciéndola girar. -¡Draco me estoy mareando! – dijo antes de terminar devolviendo su cena.

-Lo siento, ¡Estoy tan feliz Amor! – sin aguantar más la besó. Con necesidad, deseo y cariño.

-Draco, espera. – la castaña se separó un poco de su novio.

-¿Qué sucede? – preguntó con un puchero el rubio.

-No te dije algo importante. – susurró riendo. El frunció el ceño, preocupado.

-Te amo. – murmuró besando su entrecejo.

Ese fue el detonante para el Slytherin. Acortó las distancias y la dirigió hasta su cama, cerrando hábilmente la puerta sin despegar sus labios de su princesa.

.::::::::::::::::::::.

Hooooooola, Hola Es el primer One Shoot que escribo, espero les haya gustado. ¿Parece SonFic, verdad? ¡Es que adoro la canción!

Por favooooooooooooooor háganme saber si les gustó, si lo leyeron, lo que sea, prometo regalarles chocolate :3

Nos vemos en el siguiente Fic :3

HoennMalfoy. 3