Nota: Hola amigos y amigas South Parkianos :D
Les traigo un nuevo fanfic a este foro escrito por mí y por mi amigo Coyote-Smith. Ya he visto que no es la primera vez que se escriben crossovers de South Park/American Dad pero piensen que al menos soy la primera ficker en escribir un crossover en español.
No esperaban combinar esta serie de humor negro con otra serie de un humor mucho más negro y morboso xD pero ya que, no pierdo nada con intentar, después de todo es mi primera experiencia.
Aclaro que no soy muy fiel a la serie "American Dad" por lo que puede haber acciones y palabras de los personajes que están MUY fuera de contexto. También quiero avisarles que todo el fanfic está ambientado en un Apocalipse AU.
Bien, South Park no me pertenece sino a los maricas de Trey Stone y Matt Parker…wait! Era al revés, jejeje, una pequeña confusión de apellidos xD y American Dad tampoco me pertenece, le pertenece al hijo de p*ta troller de Seth MacFarlane.
Advertencias: Contiene violencia, lenguaje vulgar y grosero, apariciones de criaturas extrañas, etc.
Género y Clasificación: Parodia, Ciencia Ficción, Aventura. Clasificación Teen y Mature.
No tengo nada más que decir, solo disfruten el fanfic, dejen reviews, etc, etc… A trabajar!
Capítulo 1: El comienzo del fin.
(Se escucha la canción de intro de las primeras temporadas)
-Goin´ down to South Park gonna have my self time-Canta el señor que toca el banjo, mientras los personajes de la serie se suben al autobús.
-Friendly Faces everywhere, humble folks without temptation-Cantan al mismo tiempo Stan y Kyle alrededor de unos 17 años al igual que los chicos y chicas del resto del elenco.
-Goin´down to South Park, leave all my woes behind –Sigue cantando el sujeto con el banjo.
-Ample Parking day or night, people spouting "Howdy Neighbor!" -Canto Cartman.
-Heading up to South Park, gonna see if I can´t unwind- Canta el sujeto del banjo al momento en que el autobús se detiene en la escuela, Kenny comienza a cantar pero usando su capucha naranja.
-Mpmmmp Mmpmmmhp (Trad: I like Girls with big fat tittles, I like girls with big vaginas)-Canto Kenny
-Come down to South Park, ´n meet some friends on mine-Termina de cantar el tipo con el Banjo y se ve a todos los personajes de elenco saludando a la pantalla.
Nuestra historia comienza un día de clases como cualquier otro en la escuela secundaria de South Park. Dentro del salón de los chicos del último año se encontraban cuatro amigos protagonistas de nuestra historia, una chica Otaku y otros chicos y chicas pertenecientes a esa clase de los que más tarde hablaremos, ya que ellos también son muy importantes en nuestra historia.
En fin, los 4 chicos llamados Kenny, Cartman, Kyle y Stan estaban sentados en sus respectivos bancos esperando a que las clases acabaran pronto porque se estaban aburriendo muchísimo y no dejaban de bostezar. El profesor explicaba de forma lenta y detallada, como si se tomara su tiempo para dar la clase, ni siquiera se preocupaba por la hora que mostraba el reloj; por otro lado, Neko no dejaba de bostezar y sentía que sus ojos se cerraban en cualquier momento pero intentaba prestarle atención a la clase, sabía que no faltaba mucho para salir e irse a casa.
-Para concluir con la clase de hoy, podemos decir que al hablar de la Filosofía estamos técnicamente mencionando a Platón y Sócrates como una bisagra de la historia del pensamiento humano-Explicaba el profesor señalando la pizarra donde había anotado las consignas de la clase-¿Alguien tiene una duda respecto a lo que dije?-
La Otaku castaña no había escuchado ni una palabra de lo que dijo el profesor, sintió que sus ojos se cerraban del todo por el sueño y el cansancio, cruzo sus brazos sobre la mesa y recostó su cabeza en ellos, comenzó a respirar de forma relajada quedándose dormida sobre su escritorio en cuestión de segundos. Antes de dormirse escucho la voz de Kyle diciéndole que no se quedara dormida, que pronto acabaría la clase y podía irse a descansar a casa pero tampoco lo escucho, en su cabeza solo se oían voces que susurraban a su alrededor haciendo que tuviera más sueño y se duerma profundamente.
.
.
.
No supo cuanto tiempo paso desde que se durmió en la clase de Filosofía. Solo supo que al despertar no había nadie en el salón de clases, estaba ella sola. Todos sus compañeros se habían ido y el profesor tampoco estaba, pero algo que le llamo más la atención era el desorden que había en el salón de clases, algunas sillas estaban desparramadas por el suelo repletas de escombros y polvo, las mesas estaban sucias, caían gotas de agua del techo y un solo tubo de luz colgaba de este emitiendo una luz parpadeante digna de una película de terror.
-¿Q-Qué paso? ¿Cuánto tiempo me quede dormida?-Se pregunto la chica, levantándose de su lugar, saco la mochila de su silla y la coloco en su espalda comenzado a caminar lentamente para salir de ahí-¿Por qué nadie me despertó para avisarme que ya termino la clase?-vio que las puertas de los salones estaban casi todas abiertas y los bancos y sillas desparramados por todas partes, también le impresiono la cantidad de papeles y basura que había regada por el suelo de la escuela donde se ubicaban los casilleros-¿A todos se les ocurrió salir de la escuela al mismo tiempo? Algo no anda bien aquí-
Siguió caminado viendo los pasillos en esa espantosa condición en la que ningún ser humano desearía vivir. No supo cuando su estomago comenzó a rugir dando una señal de que tenía hambre, así que decidió ir a la cafetería de la escuela para buscar algo de comer, solo esperaba que aun hubiera comida ahí y que esta no se haya echado a perder; camino por el pasillo y cada paso que daba había menos luz y manchas de sangre en las paredes junto con algún que otro arañazo.
Por fin llego a la cafetería pero para su mala suerte pudo ver que la puerta estaba cerrada con llave y trabada con parte de los casilleros del gimnasio, al costado pudo ver una advertencia escrita con pintura blanca chorreante con letra algo inentendible que decía lo siguiente:
"CAFETERÍA CERRADA! MONSTRUOS DENTRO, NO PASE"
-Shit, estas cosas tenían que pasarme justo a mi-Pensó Neko alejándose de la puerta de la cafetería, apenas lo hizo esta comenzó a sacudirse de forma violenta haciendo que se asustara un poco. Así que lentamente se alejo y comenzó a correr para salir de la escuela, necesitaba respuestas a sus preguntas, quería saber que carajos estaba pasando y porque había monstruos en la escuela ¿A quien le pertenecían las manchas de sangre en las paredes? ¿Qué tipo de criatura había hecho esos arañazos? Y lo más importante… ¿Dónde estaban sus amigos? No los vio desde que se despertó de su (supuestamente) breve siesta en el salón de clases-¿Estarán haciendo una película de zombies?-
Neko comenzó a correr hacia la casa de Stan, era el primer lugar que pensaba visitar antes de ir la casa de Kyle, la de Kenny y a su casa, quería evitar ir a la casa del gordo infeliz bueno para nada de Cartman a toda costa. Apenas llego a la casa de su amigo pelinegro pudo ver que la puerta estaba abierta, así que no era necesario tocar; paso lentamente para ver el interior de la casa y tanto la cocina como la sala estaban desordenadas. Al entrar a la cocina pudo ver que faltaban las cosas de la alacena y el refrigerador también estaba abierto, lo único que había ahí eran unas latas de cerveza vacías y aplastadas.
-Stan, viejo ¿estás ahí?-Pregunto Neko saliendo de la cocina y subiendo lentamente las escaleras a las habitaciones que estaban en la segunda planta de la casa junto con el baño. Vio la puerta de la habitación del pelinegro apenas abierta-¡Stan! Pensé que te habías ido, no se qué está pasando ¿Tu lo…?-apenas termino de abrir la puerta no vio a nadie en el interior de la habitación-¿Sabes…?-
La otaku comenzaba a desesperarse, no sabía donde carajos podía estar el pelinegro ni el resto de sus amigos que había hecho cuando llego a ese pueblo montañés. Se sentó en la cama del joven Marsh y se quedo ahí mirando fijamente el suelo, de repente el teléfono celular de su amigo comenzó a vibrar. Rápidamente lo desbloqueo y pudo ver en la pantalla rota que tenia 3 llamadas perdidas y todas eran de su madre, Sharon Marsh. Abrió el buzón de voz para escuchar las llamadas en silencio y sin interrumpir.
-Mensaje numero uno de Sharon-Escucho por el altavoz del celular, automáticamente la voz pre-grabada de la mujer comenzó a sonar-"Stan, Stan hijo ¿Sigues en la escuela? No se qué rayos está pasando pero necesito que regreses a casa pronto, algo…a-algo muy extraño está ocurriendo en South Park pero no se cómo explicártelo, te llamo luego"-Se corto el mensaje y dio paso a los otros dos-Mensaje número dos de Sharon: "Stan, esto es más grave de lo que pensé. Hay unos monstruos caminando por las calles de South Park, si aun no saliste de la escuela por favor no salgas, NO SALGAS, quédate donde estas, tu padre ira con Shelly a buscarte a ti y a tus amigos"-Mensaje numero tres de Sharon: "S-Stan *sollozo* H-Hijo, n-no podemos ir a buscarte *la transmisión empieza a fallar* s-sal de l-l-la escuela con tus amigos, por favor, salgan de South Park lo m-más rápido que pu-puedan *sollozo* recuerda q-que tu padre, tu hermana y yo t-te queremos mucho, n-no…t-t-te a-am-ama…"-
De repente el teléfono cortó el mensaje mostrándole a la otaku una notificación de que el celular tenía baja batería. La castaña se quedo callada viendo el teléfono roto y lo dejo en su lugar, tenía que salir de la casa cuanto antes y debía ir a buscar a Kyle y a Kenny o por lo menos pasar por sus casas y revisar que ya hayan abandonado South Park. Aun seguía sin tener ni una puta idea de que rayos estaba pasando y cómo fue que el mundo se vino abajo apenas despertó en el salón de clases.
Una vez que salió de la residencia Marsh comenzó a correr lo más rápido que podía a la casa de Kyle, cuando llego no se atrevió a pasar, en cambio se dedico a contemplar la casa desde afuera y pudo ver que no había nadie en el interior pero las ventanas estaban selladas para impedir el paso de la luz, a excepción del cuarto de su amigo que tenia las cortinas apenas cerradas. Se alejo y corrió hacia la casa de Kenny, entro en ella y vio que estaba en las mismas condiciones de desorden y abandono como en la casa de Stan. Se dirigió a la habitación de Kenny y su hermana Karen para comprobar que estuvieran vacías, si, estaban vacías y no había sabanas ni frazadas en las camas, los juguetes que conservaba Karen de cuando era una niña estaban tirados por el suelo, ni siquiera había ropa dentro del armario.
Cuando salió de la casa de Kenny, Neko pudo ver el cielo y se dio cuenta de que estaba anocheciendo, había desperdiciado toda la tarde buscando a sus amigos que ni se dio cuenta de que el tiempo giraba alrededor suyo. Camino lo más rápido que podía para llegar a su casa, empacar sus cosas y comenzar un largo viaje para reunirse con sus amigos pero apenas puso un pie en el suelo cuando escucho un gemido desgarrador a lo lejos.
-¿H-Hola?-Dijo Neko mirando para todos lados-¿Hay alguien ahí? Sea quien seas, sal ya y muéstrate-no hubo respuesta y eso preocupaba a la Otaku-H-Hablo en serio, sal ya o iré a buscarte-
¡Ojala nunca hubiera dicho eso! Apenas se acerco a ver de donde provenían esos gemidos, detrás de ella apareció una especie de alienígena mutante de color amarillo muy escuálido con el rostro consumido y la piel amarilla cenicienta, sus ojos eran negros brillantes, redondos y estaban muy pegados a su rostro. Neko se detuvo al sentir unos pasos detrás de ella y apenas se giro pudo ver al mutante frente a ella, lanzo un grito de horror al igual que esa horrible criatura, pero apenas lanzo el grito, Neko se tapo los oídos ya que los gritos de esa criatura eran tan agudos que podían destruirte los tímpanos de un solo golpe y dejarte sordo.
La Otaku rápidamente se echo a correr siendo perseguida por la criatura y otras 3 mas detrás de ella, necesitaba salir de South Park pronto, tenía que reunirse con Kyle, Stan, Cartman y Kenny. También necesitaba verlos, abrazarlos y saber que estaban a salvo de esas espantosas criaturas.