No soy muy bueno con las palabras, lo sé. Pero espero que esta carta me ayude a mejorar el lazo que tenemos juntos, que te ayude a entender una vez más lo que siento por ti y al mismo tiempo permitirme abrirme un poco más para poder expresarte mis sentimientos fácilmente.
Han pasado casi cuatro años desde que te conocí, hemos dejado de ser niños y ahora nuestra vida de la secundaria comienza. Empezaré esta nueva etapa junto a ti, Sakura.
Aún recuerdo cuando llegué a Tomoeda y siempre te perseguía intentando quedarme con las cartas Clow, no logré salir victorioso en muchos de nuestros encuentros. Tienes un poder inmenso, que crece más y más cada día y hace que sea muy difícil enfrentarse contra la dueña de las cartas Sakura.
También recuerdo cuando pensábamos que nos gustaba Yukito. Eran tan divertidas las pocas ocasiones que peleamos por él o escuchar que hablabas de tus celos hacia tu hermano con Tomoyo... ¡Vaya! ¡Éramos tan ingenuos!
¿Recuerdas cuando Meiling llegó a Japón? Estaba celosa de ti, en esa época se me hacía muy tedioso lidiar con ella pero ahora todo me parece muy cómico, la verdad.
Ella nos tiene un aprecio único, el dejar a la persona que quieres para verla feliz con otra es hermoso. Siempre estaré agradecido con ella por la oportunidad que nos dio.
¿Pero sabes? Tengo cuatro hermosos recuerdos preciados para mí.
El primero fue cuando me di cuenta que eras especial para mí, aquella vez encerrados en el elevador cuando tuviste que atrapar una carta y pensé haberte perdido.
El poder envolverte entre mis brazos por primera vez fue sin lugar a duda, aunque suene cliché, algo mágico. Siempre atesoraré ese momento.
El segundo recuerdo más preciado fue en el aereopuerto, cuando tenía que volver a Hong Kong y fuiste a despedirme. Al fin habías descubierto que también tenías sentimientos hacia mí, y gracias a ello creaste la carta Love.
Tu oso, aunque ya no lo tengo conmigo, sé que lo cuidas muy bien al igual que yo lo hago con el tuyo.
Mi tercer recuerdo más preciado contigo fue el día de la obra escolar. Tú eras la princesa y yo tuve que reemplazar a Yamazaki como príncipe.
Lograste crear la carta Hope y salvaste a las demás cartas Sakura, además de todo eso me hiciste recobrar la memoria. Ese precioso sentimiento, el amor que te tengo no se perdió.
Tras decirme que realmente te gusto te lanzaste hacía mí. Lograr atraparte y tenerte entre mis brazos fue una de las mejores experiencias de mi vida.
Y mi cuarto recuerdo, más reciente cabe recalcar, fue cuando volví de Hong Kong.
El inicio de clases en la secundaria Tomoeda, los cerezos habían florecido y la tranquila brisa primaveral volaba los pétalos por doquier.
Cuando te vi en la acera, después de un año, sentí como mi corazón se detuvo.
Estaba tan nervioso, lo único que fui capaz de decir fue un "he vuelto" para luego recibirte en mis brazos.
Sakura extrañaba tanto tu cercanía, tu calidez, lo suave que sentía tu cabello bajo mi cabeza, tu dulce voz, tus hermosos ojos color esmeralda. Te extrañaba más de lo que te imaginabas.
Este es un nuevo comiezo para todos. Las cartas están cambiando, las personas que nos rodean y todas nuestras vidas. Mas te aseguro algo, mis sentimientos hacia ti es lo que sin lugar a duda nunca cambiarán.
Sakura, te quiero.
