Nuestro ultimo invierno

Supongo que este invierno es distinto, a diferencia de los anteriores podíamos salir a jugar en aquella blanca nieve, y digo podíamos porque debido a mi condición, tu has sacrificado mucho… incluso salir a disfrutar del ambiente.

Desde entonces as estado aquí a mi lado, tocando esa tonada que me gusta tanto, en el viejo piano de la habitación, con esa sonrisa que solo tu puedes darme.

Pero yo se que esto no durara mucho, ambos lo sabemos, sabemos que pronto llegara mi fin, supongo que por eso as estado aquí junto a mi, realmente me lamento tener que ser una carga para ti.

Todo desde ese día, a sido una rutina para ambos, mas para mi, el echo de no poderme levantar de esta maldita cama, me ase sentir inútil, como desearía que todo fuera como antes, poder salir los dos a disfrutar la vida, pienso que esta enfermedad me a hecho egoísta, realmente lo e de ser, tenerte todo el tiempo aquí, me convierte en eso, pero supongo que a ti no te importa.

Siempre desde esta ventana veo el paisaje, de ese pequeño parque que esta enfrente de la casa, a pesar de la época, ay muchos niños jugando, como me gustaría poder jugar igual.

Pero para ser honesta, lo que mas me preocupa eres tu, talvez pienses que no me doy cuenta, que el echo de estar aquí encerrada en la habitación, no quiere decir que no me permita enterarme de cómo te encuentras tu, se muy bien que por las noches lloras, ¿Por qué? ¿Es por mí? ¿Es mi culpa? Realmente yo no quiero que llores, no tienes porque, supongo que as de pensar que no me doy cuenta, pues te equivocas, se que sufres, sufres por mi culpa, mi maldita culpa, aun así siempre sonríes para mi, ¿Por qué?

Los días pasaban rápidamente y se que yo eh empeorado, me doy cuenta, me conozco pues al fin de cuentas, es mi cuerpo, y aunque tu después de las revisiones del doctor me diga "valla que as mejorado, pronto acabara esto", se que mientes, tratas de hacerme sentir bien. Solo dices algo que es verdad y es que todo pronto acabara.

Supongo que esa noche te llevaste una sorpresa al igual que ami, yo no quería, no quería soltar esa taza, "supongo que no la agarre bien, perdón" te dije, tu solo me miraste sorprendido, tu sonreíste, "no importa toma la mía" me mencionaste antes de limpiar todo y bajar por otra, dios esto cada ves es peor…

Después de que regresaste tomamos el chocolate juntos, reímos de cosas sin importancia, me alegraba verte tan feliz, como siempre debió ser, te pedí que tocaras aquella melodía, nuestra melodía.

Siempre me lo decías "Te amo", siempre esperabas que yo también te lo dijera, supongo que nunca te diste cuenta que siempre que me lo decías te escuchaba, aunque fueras muy precavido y por eso siempre fueron susurros, susurros que se llevo el viento.

Ganas nunca me faltaron, correr y decirte yo también, supongo que no cabria la felicidad en tu rostro, si esas siempre fueron mis intenciones, corresponder tus sentimientos, más… no creo que sea posible, no quiero que sufras más de lo que ya lo haces.

Cada día empeoro más, supongo que es todo indicio de esta enfermedad.

Han pasado algunos meses, después de que me descubrieras, supongo que todo fue por culpa de ese constante sonrojo que invadía mi rostro, y la verdad no pude evitar decirte que te amaba, yo sabia que corresponderías mis sentimientos, pero me sentía mal, sin duda te aria sufrir mas de lo que ya estabas, pero quiero que seas feliz con migo, sueno cruel ya lo se.

Ahora mi sentido del oído es casi nulo, por no decir que casi lo eh perdido, ya cada ves escucho menos, no quiero dejar de oírte, no quiero dejar de escuchar tu voz, esa linda voz que usas para cántame en las noches con las que me ases sentir bien y, con la que me reconfortas.

El recordar esa noche en la que nos entregamos me llena de alegría, sin duda esa vez fue la noche más feliz de mi vida, por fin fui tuya, sentir como recorrías mi piel con tus carisias y tus besos, en ese cuarto solo estábamos los dos, tu estabas preocupado, no querías hacerme daño, sin duda tenias miedo de lastimarme, pero en esa ocasión nada me importo, ni siquiera esa enfermedad, desde entonces ya no dormía sola en esa cama, bueno lo hacia debes en cuando pero no me importaba.

En los últimos meses me eh sentido extraña, e sentido extrañas nauseas, me pregunto si son consecuencia de la enfermedad pero no importa, también he comido mas de lo que lo hacía, supongo que por tu rostro as de pensar que como mejor… tal vez ¿este mejorando? No lo se, espero que si…

Ahora que lo recuerdo cumplimos ocho meses de noviazgo, valla que es mucho tiempo ¿no lo crees? Eso me alegra, me siento feliz.

Hoy que as ido al mercado, a comprar alimentos, tenias miedo de dejarme sola, yo te eh dicho que estaría bien, que no te preocuparas, tu te fuiste poco convencido, yo me limite a sonreírte…saliste de la casa y solo te despedí desde mi ventana, vi como te alejabas, aproveche que no estabas para levantarme, busque una hoja en tu habitación, la encontré, vi toda tu alcoba, sin duda estaba llena de tu dulce aroma "Bananas" pensé, pues es tu fruta favorita.

Mire todo el lugar, tantos recuerdos invadieron mi mente, tan solo pude soltar unas melancólicas lagrimas, ¿cuando es que todo se torno tan mal?... supongo que la respuesta ya no importaba, Salí de tu recamara y me dirigí a la mía, busque una pluma y comencé a escribir esto, no pienso hacer esta carta muy larga, no quiero aburrirte con mis cursilerías…

Detuviste tu lectura, cuando te das cuenta unas gotas mojan la hoja, palmeas tu rostro buscando respuesta, lagrimas salen te tus ojos, no comprendes el porque, continuas tu lectura.

Se que puede que este sea mi final, no importa ahora, se que cuando todo acabe, nos volveremos a ver, te lo prometo, supongo que estarás triste, no lo estés…

Quiero que seas feliz, aunque yo no este a tu lado se feliz, vive lo que yo no podré, por favor no seas débil, yo se que tu podrás, te pido que superes todo esto, no que me olvides, seria triste si me olvidaras, solo supéralo, ¿sí?...

Eh volteado a la ventana te veo que as vuelto, eso me alegra, no tardaste mucho, vez te dije que estaría bien, te veo entrar, compraste muchas cosas por lo que vi, bueno se que estarás abajo, así que continuare…

En esos días lo único que me iluminaba era tu sonrisa, se que aunque todo este oscuro, tu estarás con esa sonrisa que me dará seguridad, que me brinda alegría, que… que me enamoro, deberías verme se que estoy roja, pero no importa…

Supongo que te preguntaras porque escribo esto… la respuesta es sencilla, se que hoy es mi ultimo día, ¿como lo se? Intuición supongo, pero simplemente lo se, y sabes no me importa fui feliz a tu lado y lo seré asta que ya no pueda más.

No puedo irme si antes despedirme y decirte Gracias… por todo, por tu cariño, por tu cuidado, por tu amistad, por tu amor, por… por ser el amor de mi vida, Gracias…

Gracias Len… Gracias…

Cuídate, no olvides que te amo y que eres lo mejor de mi vida, sonríe…gracias

Con amor…

Rin kagamine.

Terminas de leer, arrugas las hojas que tienes en tu poder y lloras, lloras a todo lo que tu alma te lo permite, mientras recuerdas el cuerpo inerte de tu amada, sucumbido por la muerte en la nieve del jardín de tu casa, esperando la respuesta de esos médicos…

En estos momentos recuerdas como se llego hasta este punto…

Recuerdas que estabas en la cocina, acomodando los víveres que acababas de comprar, entonces una voz te llamo…

-Len…-

Miraste hacia donde provenía aquella voz, para encontrarte con el cuerpo de tu gemela, quien tenía puesto un abrigo y una bufanda, la miras extrañado, lo único que te responde es con su brazo señalando la puerta que da al jardín, la miras confundido, ella te sonríe, vez en sus ojos algo que no habías visto en mucho tiempo mientras susurras su nombre…

-Rin…-la sigues mirando ella no deja de sonreír y te dice

-por favor…una ultima vez…- sin mas tu le afirmas con el suave meneo de tu cabeza, subes a tu habitación por un abrigo, para después bajar lo mas rápido posible, encontrándote con ella, tomas su brazo y salen juntos.

Ella sonríe, tu no puedes dejar de mirarla, aunque ella ya este lejos, tu te pierdes en sus ojos, en su rubio cabello, pero algo te saca de tus pensamiento, es aquella bola de nieve que te ah lanzado…

Sonríes y también le lanzas una, más pequeña, no quieres hacerle daño, ella te grita que jueguen, tú la persigues, una pequeña guerra de bolas de nieve se lleva acabo, pero sin duda te sientes cansado, pides que descansen, ella afirma y camina muy despacio hacia donde tú, pero algo esta distinto, camina cojeando, para que cuando este donde tú se desplome.

No puedes creerlo, solo alcanzas a evitar su caída, ella te sonríe, tú la miras rogando por que este bien, ella simplemente se acerca a tu rostro, y lo acaricia con su temblorosa mano, para después acabar con la distancia de los dos, y darte un tierno beso, tu no lo puedes creer, pero sin mas correspondes, se separan por falta de aire, la miras y le dices TE AMO, con la mayor alegría de tu corazón, ella te sonríe de igual forma y con su ultimo suspiro te dice:

-yo también… te amo… gracias… Len…-

Después ella cierra sus ojos, sabes bien lo que significa eso, gritas desesperado su nombre, la mueves para que reaccione, no ay respuesta, sin más la tomas y la abrazas, sin pensarlo mas la cargas y la llevas a tu pequeño auto color amarillo, pero sientes unas hojas en el bolsillo de su abrigo…

Llegas al hospital más cercano, por la sala de urgencias, los doctores y enfermeras toman a tu amada, tú gritas que la salven, las enfermeras te tranquilizan y te llevan a una sala de espera, donde empezaste a leer la carta…

El tiempo pasa y un doctor de cabello morado ha salido a darte noticias, esperas que sean buenas, la cara de ese hombre te indica lo contrario,

Tan solo lloras, por esa mujer que te dedico su ultimo aliento, pero algo que el medico a dicho te hace querer morir, "embarazada" esas palabras resuenan en tu cabeza… lloras y lamentas que tanto ella como ese bebé murieran o al menos eso es lo que tu mente te hace creer…

-repito que es increíble que esa joven estuviera embarazada- habla el medico con una voz sorprendida- pero… mas increíble a sido que hallamos salvado a ese bebé…- termina

Tú miras atónito al doctor, no puedes creerlo, tu mente no acaba de procesar lo dicho… esperas que el doctor diga algo… y lo hace.

-sígame-

Han pasado dos semanas desde su muerte, y tu te encuentras parado enfrente de aquella lapida con su nombre escrito, mirando y recordando, con un pequeño bulto en brazos, miras aquella pequeña persona que duerme placidamente y sonríes, miras la lapida de tu amada, para dedicarle unas ultimas palabras antes de irte…

-mira ella es nuestra pequeña hija… tiene nuestro cabello, rubio como el sol, sus pequeños ojos azules como el cielo, se párese mas a ti, a su madre, por eso… se llama como tu- concluyes sigues sin poder creer que a tus 18 años de edad, ya eres padre, que un pequeño ser esta a tu cuidado, sonríes, sabes que una nueva vida te espera, no puedes evitar sollozar, tratas de no despertar a Rillianne , tu pequeña hija, a tu pequeña Rin.

-es muy bonita…- un susurro que logras escuchar se ase presente, sabes que es ella, tu amada, sonríes de nuevo, y comienzas tu andar asía tu hogar

Al llegar, a tu hija la recuestas en una pequeña cuna que as comprado, y colocado en tu alcoba, no quieres estar lejos de tu niña, sales de la habitación, no te das cuenta que ay una presencia mas en ese cuarto, aquel ser se recarga sobre el marco de la cuna, y acaricia a la bebé

-mi niña-susurra mientras acaricia la mejilla de la bebé-siempre estaré con tigo-ríe- no pudiste tener un mejor padre y no pude tener un mejor hermano… Len… -mira hacia la entrada donde estas parado, regresando con un biberón – gracias…- dice antes de desaparecer…

Sonríes mientras lagrimas salen de tus ojos, llegas con tu hija, la cargas y susurras a la nada- Gracias a ti… Rin…- hablas mientras te sientas en tu cama con tu bebé mientras miras a la ventana, donde una ciudad se mueve ajena a tu vida, y donde aquella chica de cabellos rubios se aleja no sin ante mirar a su amado y a su bebe…

hola bueno este es mi primer fic espero que les aya gustado, yo llore con el final no se ustedes, podria volverla una historia mas larga, pero seria con la pequeña hija, ¿como? jejeje es un plan maquea velico, bueno eso es i ustedes quieren, comentarios se los agradeceré a y vocaloid no me pertenece ( o no aun) n-n con eso me despido bye