NUNCA DEJE DE AMARTE…

Hola, soy nueva en esto de los Fic, no conocía su existencia, pero me enganche de lo lindo, tanto que me animo a escribir

Disclaimer: Basado en la serie de la ABC "Erase una vez", ninguno de los personajes me pertenece, salvo la idea original.. Desde Colombia para ustedes, espero que lo disfruten.

EMMA

Mi felicidad no podía ser más completa, ahí en medio del bosque, acampando estaba con mis padres, a quienes amaba aunque no se los demostrara, lejos quedaban esos sentimientos de abandono y rechazo, y Henry, mi pequeño príncipe, el verdadero creyente, que si no va en mis busca, aun estaría en mi mundo gris y solitario, y no al lado de mi verdadero amor: Regina, mi Reina..Si definitivamente, no sería tan Feliz!.

Aun no salgo de mi asombro, pensé que habría gritos, amenazas, uno que otro desmayo, cuando les dijera, quien era el motivo de mi no tan secreta felicidad, si su una vez "enemiga mortal"… después de unos minutos de silencio, y uno que otro choque de miradas cómplices, se acercan y me abrazan, deseándome lo mejor del mundo, ya lo sospechaban, nunca fui muy discreta que digamos, si apenas con verla se me iba el alma y colocaba esa cara de adoración, hasta babeaba dicen entre risas..

Estoy tan feliz, que no puedo esperar hasta mañana y contarle a mi Reina, que su preocupación no era real, que mi familia no se opondría a nuestro amor, y que seriamos felices por siempre, como siempre lo quiso y como siempre lo soñé..voy en mi auto, lo más rápido que puedo, o que puede mejor dicho, si, voy a hacerle caso y cambiarlo por fin, sería una manera de demostrarle lo mucho que me importa, Regina te amo, te amo, te amo..Se me hincha el corazón y el alma, nunca hasta hoy había sentido a plenitud el significado de esas 5 letras…

Llego corriendo, porque mi "ataúd en ruedas" me dejo como a 3 cuadras de su casa, entro con la llave que está debajo del felpudo, debo hablar que la cambie de lugar, no es muy seguro, bueno también es que no hay nadie tan estúpido como para irrumpir en la casa de La Alcaldesa, ex Reina Malvada, Regina Mills, sin que se arriesgue a terminar como una antorcha Humana y no propiamente como el de los 4 Fantásticos…

Dejo mi chaqueta roja, en el sofá, la casa se siente sola, no la veo, me asomo en la cocina, nada..Cuando me dirijo al estudio..siento que el mundo se abre a mis pies y un frio mortal atenaza mi corazón y alma… no puede ser, no puede ser, me repito una vez y otra vez, mientras sigo el sendero de ropas que van dirigiéndome a nuestra habitación, si nuestra habitación desde hace 2 semanas..

A medida que me acerco, esa sensación de vacío, de dolor se incrementa, no puedo respirar, me duele respirar, me pesan las piernas, no sé como continuo, por inercia tal vez, por mi maldita suerte tal vez, que me impulsaba a ver con mis ojos, que una vez más el destino jugaba conmigo pero nunca tan cruel, tan doloroso como ahora, ni siquiera con Neal, sentí este dolor tan agobiante, que siento que arranca pedazo a pedazo mi ser interior…esos jadeos, esos gemidos, me tienen como hipnotizada, me siento como una Cobra ante la música del encantador, es como si me obligaran a seguir…

Y si, ahí estaba Mi Reina, Mi Amor, Mi Regina, cabalgando extasiada, dejándose llevar por unos besos y unas caricias que no son las mías, por un cuerpo que no es el mío… cuando todo se desintegra en mi interior, un velo rojo cubre mi ojos, mi entendimiento, mi ser…veo y siento todo como en cámara lenta, no sé en qué momento llegue a la cama y la empujo de encima de él, desde ahí es más confuso solo escucho gritos, mi nombre, el nombre de él…

Ahora soy yo la que estoy encima de él, destrozándole el rostro sin piedad, destrozándolo como estoy yo por dentro; Regina trata de apartarme, pero no puede, ni un ejército podría apartarme ahora de mi presa, en estos momentos el velo rojo que me cubre es sangre, Su Sangre, pero aun quiero más…

En eso siento un impacto como el de un cañón en mi lado izquierdo que me lanza a varios metros y me hace estrellar con la cómoda, partiéndola en pedazos, me incorporo a medias, aun no sé como lo hago, por mi orgullo maltrecho imagino, quedo en cuatro, humillada, deshecha literalmente, cuando siento el sabor inconfundible de la sangre llegar a mi boca y expulsarla..Vomite sangre, me quedo observándola unos segundos, me levanto, haciendo acopio de la poca fuerza que me queda.. Y salgo con la cabeza gacha, no deseo mirarla nunca más, lo único que quiero es olvidar, olvidar, olvidar…

No sé como baje las escaleras, lo último que recuerdo es ver como el piso de su sala salió al encuentro de mi rostro, un grito profundo, unas manos que me tomaban de los hombros y me hacían girar, un techo blanco, unos ojos marrones inundados en lágrimas, unos ojos que fueron mi perdición, unos labios rojos, que no cesaban de decir mi nombre y un "perdóname" incansablemente…después oscuridad..