Gracias Papi.

Estaba sentada en el porche de la casa de los abuelos Carlisle y Esme, hoy en la escuela no me había ido muy bien.

-¿Qué haces Ness?- peguntó papá.

-Nada.

-Algo me dice que no te fue bien ¿quieres contármelo?

-Papá, ese "algo" son mis pensamientos, y de que sirve que te lo diga, si todo lo vas a ver en mi mente.

-Prefiero que me lo digas tú.

Tomé aire muy profundamente.

-En la escuela, las que creía que eran mis amigas me botaron por no se que cosas.

-Y por eso te preguntas ¿Con quien me voy a juntar ahora?

-…-

-¿Nessie, te quieres a ti misma?

-¿A que viene esa pregunta?

-Solo dímelo.

-Pues si.

-Entonces no debes sentirte sola.

-No… no entiendo.

-Mira Ness, el hombre o mujer… o niña en tu caso, que no se tiene a si mismo, esta solo, no importa de cuanta gente esté rodeado.

-¿Qué?

-Mira lo primero que debes hace es quererte y tenerte, a que me refiero, quiérete tal y como eres, tente, en la forma de que tu seas la primera persona en la que confíes, ósea que confíes en ti misma.

-Entiendo.

-¿Abrazo?

-No…- papá puso un puchero.

-Como crees que te negaría un abrazo… venga.- le dije y nos abrazamos.

Nos quedamos así unos 30 min.

-¿Sabes?- dije.

-¿Qué?

-Si ellas no quieren estar conmigo, no me importa por que tengo a la persona más importante para mí.

-¿Quién Ness?

-YO.

Me levanté para ir con mamá, y cuando estaba a punto de entrar giré y le dije.

-Gracias papi.