Disclaimer: Naruto pertenece a Masashi Kishi-gay. (?)
Bueno aquí traigo por fin un KibaHina, después de todo esta pareja es parte de mi trío favorito: SasuIno, NaruSaku y KibaHina, duh~ Espero les guste. Enjoy~
Vestido negro.
Siempre se presentaba elegante. Con una sonrisa discreta y diminuta. Era respetuosa y callada. Pero había algo con su mirada, parecía no tener alma. Aquellos ojos perlados que con un pequeño brillo iluminarían la sala, estaban apagados y sin esperanzas.
Su caminar era lento y majestuoso. A cada paso su vestido negro bailaba; parecía hecho por los ángeles, de tan bello que era. Su tela era suave y se podían ver pequeños brillos en aquella oscura ropa. Su cuerpo estaba esculpido perfectamente, y su tez era clara como la nieve. Era una dama preciosa, parecía una estrella en el desafiante cielo nocturno.
Pero su mirada no reflejaba lo que su imagen; felicidad, ternura y compasión. Reflejaba lo que aquel color en su vestido; tristeza, desolación y melancolía.
Era una joven desorientada. Un ángel sin alas. Una princesa que había perdido todo con un amor pasado, había perdido su esperanza, su alma y corazón.
Y creía que ya nada podía hacer. Pero no quería preocupar a los demás, así que siempre sonreía, aunque se sentía triste. Pero sus ojos revelaban la verdad. Aquella mirada mostraba lo que en realidad le sucedía.
Hasta que lo conoció a él.
Un muchacho de ojos salvajes, llenos de confianza y amor. Con cabello castaño y despeinado. Él estaba repleto de alegría, y con su sonrisa lograba iluminar todo a su alrededor. El joven se dedicaba a viajar por el mundo, y en ningún lugar había visto joven tan bella y elegante como ella, por eso le llamó la atención su mirada triste.
Él era atrevido y decidido, así que sin pensarlo dos veces, se le acercó y le regaló un suave beso en la mano. La joven abrió los ojos perlados grandes, y examinó al chico con curiosidad, lentamente un brillo apareció en sus luceros cuando el muchacho le sonrió.
—Me llamo Kiba —dijo haciéndole una reverencia, para luego volver a tomar su mano y sonreírle una vez más—, ¿me haría el honor, mi dulce dama, de revelarme vuestro nombre?
—Oh, valiente hombre, me halaga con vuestras palabras. Me llamo Hyuuga Hinata.
—Tiene unos hermosos ojos, mi princesa, hacen que las estrellas sientan envidia por su perlado brillo —la chica le obsequió una mirada alegre, llena de brillo como el que tenía antes de que su corazón se rompiera. Él le había entregado su amor, y gracias a ello pudo recuperar el resplandor en su mirada.
Y el chico prometió quedarse con ella para protegerla y amarla por siempre. Y ella no permitió que la oscuridad volviera a su vida. Y cambió los vestidos negros por colores más alegres.
Fin.
N/A: ¿Y? ¿Feo? ¿Lindo? ¡Díganme que les pareció con un Review! ;3 Bye~