Prólogo
Lo observaba, casi siempre lo hacía. Era un enigma por resolver, un misterio, el personaje raro de la cinta. Todo eso era él, aunque muchas cosas más. Ese silencio no era incomodo, al contrario, era reparador. De cierta forma lo entendía, lo admiraba y también lo detestaba.
Suspiro de cansancio, ya empezaba a dolerle la cabeza.
Te duele la cabeza – pronuncio sin mirarla
Sabes que si – toco su frente – siempre lo sabes
Hm
Y así terminaba su conversación, típico de ellos. Típico de él por decirlo, no le molestaba, ya se había acostumbrado a esas pocas palabras y los monosílabos.
Tengo que ir por él – miro sus pies – ya debe haber acabado
Vamos – él se ofreció a ayudarla
No – el , la miro sorprendido – esta vez iré sola
¿Por qué? – la miro entre molesto y curioso
Tu sabes la razón – salto del árbol cayendo de pie, había mejorado
No me parece agradable – apareció a su lado – iremos juntos
Dije que no – comenzó a caminar
Para su sorpresa, sintió que la tomaban del brazo y la hacían girar. No fue brusco pero si firme, se miraron a los ojos. Bueno ella tuvo que levantar un poco la mirada, era muy alto.
No lo permitiré – la sujeto con más firmeza
Eres tan difícil de entender – trato de soltarse – acabas de decirme que soy una piedra en tu camino, ahora me sujetas.
Puedo con la piedra
Pero yo no contigo, esto se tiene que acabar – logro zafarse pero otra vez era sujetada
Te lo dije, no lo permitiré
¿Qué ganas con esto? – subió un poco el timbre de voz, estaba cansándose
No lo sé – la siguió viendo fijamente – solo sé que no lo permitiré
Ya basta – le grito – no estoy para tus niñerías, recuerda que soy mucho mayor que tu
Eso solo lo dices tú – levanto la voz – no lo permitiré
Dije que se acabó – lo empujo – se acabó todo, ¿entendiste? No dejare que te nos acerques, mantente lejos y hablo en enserio Uchiha
También hablo en enserio cuando digo que no lo permitiré – se acerco
Eres egoísta
Dime algo que no sepa
Ok, ya no podía soportarlo, le dio la espalda y comenzó con su camino. Estaba por dar el tercer paso cuando sintió un brazo envolverla, ahí estaba de nuevo. Tratando de usar los sentimientos.
No caere esta vez – trato de escapar
Siempre lo haces – la hizo girar – siempre lo hacemos
Miro a directo a su ojo descubierto y esta vez no vio el sharingan, solo vio el zafiro que ahora brillaba. Molesta, lo abofeteo y el bastardo solo sonrió de lado. Había vuelto a caer, claro si la miraba de esa forma obviamente caería, quien no.
Iremos juntos
Por favor entiéndeme
Iremos
Que terco era, suspiro en aceptación y se dejó caer en el pecho del Uchiha. El la abrazo, calentándola. Por Dios olía tan bien, subió su nariz hasta el cuello del joven, lo olfateo. Pudo sentir como la piel de chico se erizaba al contacto, atrevida le beso el cuello, la mano del hombre recorrió su espalda. Tenía que detenerse o sería muy tarde.
Iremos juntos – pronuncio el Uchiha antes de besarla de esa forma endemoniadamente salvaje
Ok, había perdido, él no sabía besar de forma delicada. Desde el primer beso que se dieron, el solo besaba salvajemente.
Entonces esa es la razón –
Se separaron al escuchar la voz algo cansada y decepcionada, giraron al mismo tiempo para verlo. Por instinto el Uchiha la empujo detrás suyo. Ella se dejó.
Ahora entiendo, no te culpo – el hombre le sonrió, bueno es lo que pudo notar en la máscara – pero contigo es otra cosa – señalo al Uchiha – deja engañarla por favor
No sabes lo que dices Kakashi
Hokage – suspiro con cansancio – soy el Hokage, más respeto. ¿Sabe ella sobre el asunto?
Se lo diré
¿Qué asunto? – trato de adelantarse
Ya veo aún no se lo dices, bueno – la miro – te espero en mi oficina dentro de una hora, se te hace tarde. Debe estar esperando por ti
Yo se lo diré
Perdiste tu oportunidad Sasuke – y en una explosión de humo el Hokage desapareció
¿Qué sucede? – ahora estaba confundida
Primero iremos por él, después hablaremos de lo que sucedió
Tengo que hablar con Kakashi
No – hablo firme – no te dejare sola con el
Ya te lo dije – volvió a molestarse – le debo una explicación
Entonces quédate con el – se dio la vuelta, ahí estaba otra vez el niño caprichoso - ¿Qué esperas?
Como digas – comenzó a caminar y esta vez no sintió nada que la detuviera – y que quede claro – giro a verlo – terminamos
Hizo los sellos lo más rápido que pudo y desapareció, no le dio tiempo a que el argumente algo o diga algo diferente. Estaba cansada, harta por decirlo de una forma más clara. Y no termino nada porque nunca habían comenzado nada. De seguro el estaría riéndose a carcajadas, al final siempre encontraba la forma de ganar.
Maldito –
Sintió unas manos frías tirar de su brazo, casi grita pero su boca fue cubierta por una. Miro al personaje y volvió a suspirar, ahora tendría que lidiar con él.
¿Por qué? – le pregunto bajándose la mascara
Kakashi, por favor me duele la cabeza – trato de no mirarlo, era como violar su intimidad
No creo que se compare con mi dolor – se acercó demasiado a su rostro
No por favor – trato de empujarlo, de esquivarlo
¿No te gusto? – el sonrió de lado
Demonios, grito mentalmente. Porque los dos tenían que ser malditamente sexys, porque a los dos les daba por sonreír así.
Tengo que ir se me hace tarde – miro el suelo
Lo sé – se volvió a subir la máscara – lo que tengo que decirte es serio
¿Sucedió algo? ¿Por qué Sasuke dijo eso?
No quiere que regreses – la miro seria
¿Cómo?
sabe cómo devolverte – acomodo su máscara – hace poco descubrió la forma de hacerte volver pero según investigue no quiere mostrártela, se ha encaprichado contigo
No lo creo – claro el nunca haría eso – sabe lo importante que es eso para mi
No estoy del todo seguro pero – miro a varias direcciones – basándome en sus antecedentes y en que no lo sabias, no te diría
¿Estás seguro?
No del todo – le sujeto las manos – estas fría, vamos iremos juntos
Se supone que iría sola – se dejó llevar
Soy el Hokage, es una orden
Como digas
Se dejó llevar, su corazón le dolía pero una parte se sentía feliz. Él quería retenerla, tal vez si la quiera un poco al menos. Por otro lado el hokage también le mostraba signos de que estaba en un triángulo amoroso. Oh por Dios jamás se pelearon por ella en su mundo pero aquí, era muy deseada. Se sintió algo extrañada y sabía porque, sabía que Sasuke la observaba, sintió claramente el sharingan.
Giro un poco con una sonrisa en el rostro, solo para que él se enfade un poco. Cuando llegaron a la academia, se soltó rápidamente de Kakashi, corrió a la puerta y lo vio. El motivo de su existencia, un niño de cabello castaño, ojos marrones corrió al verla.
Mamá – grito – te hizo tarde
Mi amor – lo abrazo – lo siento estuve ocupada
¿Y Sasuke? – miro a varios lados
Tuvo que hacer unas cosas – sonrió – mira quien vino
Kakashi – el niño corrió a abrazar al Hokage que lo cargo eufóricamente
¿Cómo está el niño más fuerte de Konoha?
Aprendí un jutsu – su hijo estaba emocionado – ¿quieres verlo?
Si – lo dejo en el suelo – muéstramelo
Sorprendida vio cómo su hijo realizaba unos sellos y un remolino de viento apareció en sus pies, después las hojas se elevaron y el viento parecía cortarlas.
Creo que lo hice mal – el niño estaba algo decepcionado
Claro que no – ella se acercó – estuvo genial
¿En serio? – el niño sonrió
Claro que si
Vamos a mostrárselo a Sasuke, quiero que él me lo diga
Él está ocupado – esa vez Kakashi fue el que hablo
No – el susodicho hacia acto de aparición, caminado con la mirada enfadada – acabo de desocuparme
Sasuke – el niño corrió y salto abrazándolo
Sasuke solo sonrió un poco mientras abrazaba al niño
Muéstrame ese jutsu increíble
Claro que sí, vamos a la casa – giro – vamos mamá
Si – dijo dudando – lo siento Hokage, después me acercare a su oficina
No te preocupes, nos vemos. Adiós Haki – al decirlo solo desapareció
Adiós
Camino algo molesta, su hijo platicaba muy animado con el que hasta hace poco había terminado. Sería difícil separarlos.
Y entonces el maestro me dijo, bien hecho Haki pero sé que aún me falta mucho para alcanzarte Sasuke
Lo harás pronto – lo subió a sus hombros – practica mucho y tendrás resultados
Está bien
Ya lo sé todo – camino al lado del terco
Imagino, conociendo a Kakashi y su interés por ti, te habrá dicho su versión
No creo mucho en su versión, te conozco algo y sé que si no fuera peligroso me lo hubieras dicho así estés encaprichado conmigo
Engreída
Mira quien lo dice – lo miro y pudo ver una sonrisa sádica en el terco – sádico – le dijo
Tonta – le dijo en voz baja – ¿escucharas mi versión?
Si
¿Prepararas la comida que me gusta mientras lo haces?
No
No te lo diré entonces
¿Qué te parece si me lo dices mientras nos duchamos? – dije casi susurrando
Suena bien
Ella sonrió y se apegó un poco, sintió la falta del brazo pero poco le importo. Sería muy interesante escucharlo.