Esta es una nueva historia que se me ocurrió mientras estaba acostada, espero y la disfruten.

¡Pasen y lean con confianza!

CHARACTERS: Pertenecen a MASASHI KISHIMOTO, yo sólo los uso para complacer a los fans y a mí... TT^TT Si no nos dieron yaoi canon ni en el manga ni en el anime, pues a escribirlo xD

COUPLES: NARUSASU / ITADEI / etc...


CAPÍTULO UNO

~ EL TRATO ~

"Y si desde un principio, ¿el libro estaba escrito?..."

Neko-Kitsune

—Herma...

—¡Ah! ¡Itachi! ¡Detente!...

Sasuke iba a decir "Hermano, ya llegué" como siempre hacía, pero no pudo terminar la frase.

Quedó confundido al escuchar esa voz masculina y suave a la vez que hacía eco entre las solitarias paredes de aquella enorme casona, intentando mantenerse oculta en ellas.

Se acercó para saber de dónde provenía.

"El living", se dijo.

Sigiloso y con facilidad, llegó al lugar de donde venían todos esos ruidos. Él sabía perfectamente que su hermano tenía pareja, así que pudo imaginar la situación con la que se iba a encontrar. Sin embargo, nunca la había conocido. Sólo sus padres sabían, ¿por qué nadie se dignaba a presentársela?

Miró desde la entrada, escondido entre las sombras de la pared. Le causaba curiosidad. Puesto que, él no sabía nada sobre sexo, o tener una pareja, a pesar de que ya tenía quince años. Con suerte conocía los términos y las consecuencias de tal acción, nada más.

Frunció el ceño. No veía bien. Y quería conocer a la pareja que le robaba el tiempo a su hermano. Le causaba curiosidad, una atormentante e insana curiosidad…

Claro que, no esperó para nada ver como su hermano besaba un cuerpo masculino en lugar de uno femenino, que era lo que esperaba ver. Y no lo besaba en la boca simplemente, sino que bajaba y bajaba... ¿Se podía besar más abajo?

Sasuke sin darse cuenta, empezó a respirar más agitadamente, y a sonrojarse.

—¡Ah! ¡Itachi!

¿Y eso? ¿Por qué gemía? ¿Le gustaba o le disgustaba?

Sasuke ya no entendía para nada lo que hacían los adultos.

Pero, quería entenderlo.

Itachi tomó el delgado cuerpo del muchacho desde la cintura, y lo sentó sobre él de una sola estocada, causando en Sasuke un extraño estremecimiento que hizo a su cuerpo saltar al mismo tiempo que se realizaba la otra acción. Asustado, vio al joven dar un gran grito a la vez que sus ojos lagrimeaban y sus rubios cabellos se desordenaban sobre su rostro envuelto en un rojizo placer.

¿Le gustaba o disgustaba?

Él no podía entenderlo.

—Dime que te vendrás a vivir conmigo... ¡Ah! —Le trataba de convencer en medio de la faena el mayor de los Uchiha.

—¿Y...Y Naruto?

—Que venga también.

Los besos intensos, repletos de desmesurada pasión cubrieron el lujoso living, en donde los únicos testigos aceptados eran las paredes aterciopeladas, color crema, y los cuadros que enseñaban a los ancestros de la familia Uchiha, que si hubiesen estado presencialmente en aquel lugar, probablemente habrían pensado que aquello era un desvergonzado acto, sin ninguna moral, vulgar; sin embargo, para ellos, era una muestra de su amor, de su anhelo por el otro.

A veces las palabras se interponían, tratando de alcanzar el nivel que sus cuerpos tenían en esos minutos, mas, les era imposible. Esos mini diálogos, solo servían para complementar la acción, pero no eran suficientes para expresar todo lo que ellos estaban sintiendo, y mucho menos cuando llegó el momento de la culminación, después de un último abrazo.

Sasuke decidió subir las escaleras y encerrarse en su habitación.

¿Ese chico viviría con ellos de ahora en adelante? ¿Él y otro más?

Eso era muy injusto.

Sonrió maliciosamente.

Tal vez si les hacía la vida imposible terminarían yéndose. Alejándose de su hermano.

Los padres de ambos Uchiha siempre pasaban en el extranjero por un montón de cosas, trabajo, amistades, y al final ambos se terminaron criando casi solos. Mejor dicho, Itachi fue el único que cuidó de Sasuke, desde que tenía trece años y Sasuke ocho. Ahora, ya con veinte seguía siendo su tutor.

El único tipo de amor que Sasuke conocía era el que le proporcionaba su hermano. Por eso era posesivo, celoso, incluso llegaba a ser protector (a su manera), y si esos tipos querían quitarle a su hermano, él no les dejaría el camino libre. Un Uchiha daba pelea ¡Hasta el final!

Hace mucho Sasuke había decidido que tener novio era malo (y prometió nunca tenerlo), que era como robar, así que ahora, cinco años después de aquella promesa, conociendo al novio de su hermano (de la peor forma posible) decidió que acabar con eso era lo mejor.

Él aparentó que no sabía nada, hasta que llegó el momento de la presentación oficial del novio por propia voluntad de su hermano. Lo que ocurrió un mes después.

El timbre sonó. Y escuchó como Itachi le decía a la sirvienta que él abría.

Estaba preparado, había desarrollado perfectamente su plan: "Acabar con el novio y que mi hermano sea libre", el cual venía con un extra: "Y que el novio también sea libre".

Pensaba un día escribir un libro donde resumiera sus planes y pudiera así salvar al mundo de la malicia del noviazgo.

—Sasuke, baja. Quiero presentarte a alguien.

Asintió dándose ánimos y bajó con precaución. La última vez no le había visto la cara al tal novio (ni sabía cómo se llamaba), pero imaginaba que era feo, como las brujas de sus cuentos.

Sasuke fue directo al comedor. Y miró al joven parado al lado de Itachi, quien era algo más bajo que el primero. El chico tenía una cabellera rubia y larga, que ese día llevaba tomado en una coleta, inhaló y exhaló. Se notaba que estaba nervioso.

—Hola Sasuke —saludó lo más cordial que pudo.

¿Qué mierda pasaba ahí? ¿Y la bruja fea y con verrugas? Frente a él había un hermoso joven de ojos azules que le extendió la mano para saludarlo...

Ah, entonces recordó que las brujas pueden hacer conjuros para verse hermosas, y se compuso.

—Hola —saludó de vuelta frío como un témpano.

Deidara tuvo que bajar la mano, e Itachi le acarició el hombro en señal de que no le diera importancia.

—Sasuke, él es Deidara Namikaze. Mi novio. Hace tiempo quería presentártelo, pero como creía que te lo tomarías mal, decidí esperar por un momento oportuno.

—Mmm...

En eso, Sasuke miró a todos lados. Faltaba la otra pieza de su plan ¿Dónde estaba el tal Naruto?

—Sasuke ¿a quién buscas? —le preguntó su hermano.

—A Naruto.

Sasuke se alteró, le había contado a su hermano sin querer a quién buscaba.

—¿Conoces a Naruto? —le preguntó Deidara interesado, en cómo aquel chico conocía a su hermano.

—¿Eh...? —Lo mejor era mentir ¿cierto?—. Sí.

Ni siquiera había visto al tal Naruto en una foto y tuvo que decir que lo conocía. Eso podía terminar mal.

—Eso me sorprende. Tú no sueles ser muy amistoso con otros niños —dijo Itachi con agudeza.

—¡Me alegro! Bueno, amor, es que Naru-chan es muy sociable. Todos se vuelven sus amigos.

—Eso es cierto. —Rio.

—Lo siento Sasuke. —Lo miró Deidara apenado—. No sabía que se conocían, no pensé que podía traerlo. Pero, si quieres lo llamo y le digo a mi chofer que lo traiga.

Sasuke asintió. Ahí venía la otra parte de su plan. Apostaba a que el hermano de Deidara sería un instrumento clave en su plan, él lo ayudaría a separarlos y ambos tendrían a sus hermanos devuelta. Sin conflictos, ni problemas, ni enredos de más.

Naruto al ser tan sociable como había dicho Deidara, probablemente era alguien sereno, amistoso, tranquilo y comprensivo, que de seguro estaría de acuerdo con sus planteamientos.

—¿Aló? ¿Naru-chan? ¿Puedes venir?

— ¡Pensé que no me invitarías Dei-nii, dattebayoo!

—Sí, es que Sasuke preguntó por ti. Así que como son amigos le dije que podía llamarte para que vinieras.

Sasuke sudó frío cuando escuchó eso.

¿Ah?... dio una carcajada nerviosa y respondió—: Ok. Voy a decirle a al chofer que me lleve.

—Bueno, te esperamos.

Sasuke respiró aliviado. Ese Naruto no había dicho nada. Eso era bueno, muy bueno.

Se sentaron a la mesa del comedor de la gran mansión Uchiha y esperaron al último invitado para empezar a comer.

Durante la espera Deidara e Itachi conversaron amenamente, de la universidad, de cuando tenían días libres y demás cosas. Y aunque intentaron que Sasuke participara, éste simplemente se excluyó.

Al rato llegó un coche con un rubio niño dentro. Éste bajó con una gran sonrisa. Corrió a la entrada de la mansión y antes de que se pusiera a juguetear con el timbre, le abrieron.

—Ah, debe haber llegado —anunció Deidara.

Por la entrada del comedor llegó un esbelto rubio de quince años con ojos azules como el cielo.

—Dei-nii, menos mal que me llamaste, pensé que te habías olvidado de mí tt-bayoo.

—Hola Naruto —saludó Itachi.

—Hola pervertido —le devolvió el saludo "amistosamente".

Itachi puso una cara de rabia contenida, y Deidara limitó a burlarse bajito. Estaba bastante acostumbrado a las mini "peleas" de esos dos, quienes parecían tener más parentesco que con sus verdaderos hermanos en momentos como esos. Además, era increíble, que Itachi le siguiera el juego como si fuese un niño… Eso era bastante tierno, y algo inesperado de ver en alguien que lucía tan maduro como el universitario. De todas maneras, también le gustaba ese lado de él, aunque aquello no se lo diría, pues era una bala directa al orgullo Uchiha.

Sasuke aún no había querido mirarlo, pero casi se cae de la impresión al escuchar semejante oración dirigida hacia su hermano. ¿Quién era "ese" para tratar de forma tan confianzuda a Itachi? Y peor aún, el tal Naruto ese, conocía a Itachi, a la pareja de su hermano mayor, pero él no conocía a Deidara hasta ese momento ¿Por qué lo habían excluido? ¿Por qué su hermano no había confiado en él? Se sintió todavía más ajeno a esa reunión familiar, y con más ganas de tomar cartas en el asunto y explicarle a solas su plan; la verdadera razón de porqué había dicho conocerlo.

—¿Dónde está Sasuke? —preguntó Naruto.

—Sasuke, saluda a tu amigo, tú hiciste que viniera —le pidió su hermano a una melena azabache que no dejaba ver su rostro.

Sasuke nervioso volteó la cabeza y miró al tal Naruto.

Deidara era lindo, pero ¿de dónde había salido ese ángel?

Naruto de igual manera lo miró directamente a los ojos.

Itachi era guapo, pero ¿y ese Adonis?

Ambos se sonrojaron instantáneamente. Los mayores no entendieron nada al principio, hasta que Itachi sonrió por lo bajo, recelosamente...

—Sasuke no me habías dicho que también tenías novio, y mucho menos que era mi cuñadito.

Su rubio lo miró como diciéndole "¿De qué estás hablando?", hasta que captó la idea de Itachi.

—¿N-novio? —Sasuke no podía ocultar sus emociones, estaba enrojecido hasta las orejas, pero tal como la termorregulación decidió estabilizarse—. ¡Yo nunca tendré novio! —le gritó.

Una risa surgió del recién llegado, agarrándose el estómago, parecía interminable. Seguidamente se calmó y volvió a su típica sonrisa inicial.

—¿Qué hay para comer?

De la nada Naruto fue y se sentó al lado de su "amigo" y la conversación, por el momento llegó hasta ahí.

—Sasuke —mencionó el hermano mayor durante el postre, que todos degustaban y Naruto tragaba—, he pensado que ya es tiempo de que la relación entre Dei y yo avance, así que quería traerlo a vivir a esta casa, claro, y también a su hermano. Así yo podré estar con Dei, y ahora que sé que tú y Naruto son amigos… bueno, mejor todavía, pueden salir a jugar por ahí.

Sasuke dio otra mordida a su pastel.

—Naru-chan, sé que al principio estabas renuente a venir a vivir con nosotros, pero...

—¡Lo acepto! —Sonrió Naruto.

Ambos mayores se miraron con cara de desconcierto, sorprendidos. El rubio que nunca daba su brazo a torcer había dicho que aceptaba ir a vivir con los Uchiha ¿por qué? Antes había hecho huelga de hambre, de estudios, de no dormir... Se había encerrado en su pieza por semanas... ¿Por qué cambió de parecer?

—Con una condición —soltó Naruto.

Itachi alzó una ceja y Deidara le prestó toda su atención. Sasuke se mantuvo distante raspando el plato donde antes hubo un trozo de pastel de mil hojas y mucho manjar.

— ¿Cuál? —preguntó su hermano mayor.

—Si ustedes son novios… ¡Yo también quiero tener novio!

— ¿Eh? Bueno, tienes mi permiso Naru-chan.

—Ok —Sonrió—. ¡Sasuke será mi novio entonces!

Sasuke casi se tragó la cuchara. Se volvió para de frente reclamarle fúrico, pero... Naruto se adelantó a sus acciones y tomándolo fuerte del brazo lo besó, con gran destreza en la boca.

Itachi y Deidara se miraron y luego sonrieron.

Cuando el beso terminó, Sasuke no sabía dónde meterse, esperaba que eso fuera un sueño y que la tierra lo tragara, que fuera una mala broma.

—Vaya hermanito, ya dije yo: ¿Por qué no me dijiste que tenías novio? Más si es mi cuñado.

Sasuke furioso, los miró a todos con odio.

Tomó al rubio del brazo y se lo llevó —sin ninguna objeción del afectado— hasta su habitación.

—Sasuke aún eres muy pequeño para llevar a alguien a tu habitación —replicó con arrogancia el Uchiha mayor mientras le daba un sorbo a su café Ristretto ardenza. Un café que sólo él podía beber en esa casa, ya que, era bastante fuerte, lo cual lo hacía amargo e indeseado entre los demás miembros presentes.

Deidara le pegó en el hombro.

—Son niños. Pervertido.

—Qué sabes tú —le dijo—. Hoy en día los niños son bastaaante agrandados.

—Itachi tonto —suspiró—. Bueno, ¿por qué los molestaste así cuando ambos se miraron?

—Porque se sonrojaron.

—¿Y? Supongo que se gustan.

—No es eso. Yo conozco perfectamente a mi hermanito.

—¿Qué quieres decir?

—Que ninguno de los dos se conocía —soltó simplemente para volver a darle un sorbo a su café.

—¡¿Qué?! Pero...

—Sasuke mintió, y Naruto le siguió la corriente. —Levantó los hombros para bajarlos inmediatamente y de esa manera quitarle importancia al hecho mencionado.

—Esos dos... —Se iba a levantar para regañarlos, pero Itachi lo sostuvo de un brazo.

—No hagas ni digas nada.

—¿Por qué?

—Porque empieza a ser divertido.

—¿Divertido? ¡Ay Itachi!

—Es divertido cuando los niños se gustan, principalmente a primera vista. Y además todavía me intriga porqué ambos se siguieron la corriente. —Volvió a sonreír, para luego tirar de Deidara hasta besarlo en la boca—. Nunca había visto esa expresión en mi hermanito, esto va a ser divertido, muy divertido.

—Sádico —le reclamó Deidara para volver a besarlo.

Mientras en la habitación de Sasuke, se encontraba Naruto muy sentadito en la cama del primero, mirando entretenido como el azabache se paseaba de un lado a otro, y claro, aprovechando de otear el cuarto ajeno, en el cual, nunca antes había estado. Se fijó en cada esquina: en los libros ordenados en el estante y sobre el escritorio, parecían organizados por clase de libro; en la cama perfectamente arreglada, sin ninguna arruga sobre su tela; en cómo no había polvo en ninguna área, ni siquiera en los bordes de las ventanas; en el alfombrado piso, que provocaba ganas instantáneas de quitarte los zapatos y caminar descalzo sobre lo afelpado.

También prestó singular atención al basurero que mantenía unos pocos papeles y mucha basura de lápiz dentro de él, gracias a eso dedujo que enfrente tenía a una persona que escribía muy seguido, probablemente por sus estudios. Luego dirigió su mirada al armario a un lado de la cama, junto al escritorio, hecho de madera, alto, y probablemente fijo a la pared, y por un segundo esperó que Aslan apareciera con su gran melena ¡Y es que parecía sacado de la novela de Las crónicas de Narnia! Finalmente se enfocó en la puerta a un metro de los pies de la cama, la cual probablemente guiaba al baño personal del adolescente.

El viento entró travieso por la ventana entreabierta y meció la cortina delgada y blanquecina, junto con los cabellos de la criatura más cercana, Naruto.

—¿Estás así por qué te besé?

—Sí… ¡No! ¿Cómo demonios te atreviste a hacer eso? —le respondió aceleradamente con otra pregunta volviendo a sonrojarse, a la vez que se tapaba la boca en un intento de protegerse.

—Haciéndolo. Tú dijiste que yo era tu amigo, con algo tenía que cobrarme el haberte seguido la corriente. —Se relamió los labios manteniendo la mirada fija en su presa.

—¡Pues no me hubieras seguido la corriente!

—Creo que si no lo hubiera hecho estarías en problemas. A todo esto ¿por qué mentiste?

¿Le decía o no le decía?

—Voy a separar a Itachi de tu hermano —dijo bajito.

— ¿Por qué? —Su mirada se volvió seria.

—Porque tener novio es como robar.

Naruto se quedó pensativo y se imaginó a él robando un bote de ramen y comparó eso con haber besado a Sasuke... ¡No encontraba el parecido!

—No entiendo.

—Idiota —escuchó un ¡No me digas idiota!, pero prosiguió igual, sin prestarle atención—, lo que digo es que hay que separarlos, tener novio es malo, porque apartan a las personas de otras. No dejaré que Deidara me aparte de mi hermano.

—¿Ah...?

—¿Ves? Algo te falta en la cabeza. No eres listo, por eso no me entiendes.

—Hagamos un trato Sasuke —puso una expresión muy parecida a la de un zorro, llena de astucia.

—¿Me ayudarás?

—Sólo di sí o no.

—Primero dime si me ayudarás.

—Más que ayudarte quiero hacer un trato contigo.

—¿Un trato? ¿Y en qué consiste?

—Fácil. Mira, yo seré tu novio, por al menos un año. Si no te gusta estar conmigo, pues entonces voy y te ayudo a separar a mi hermano del tuyo.

—¿Qué? No quiero ser tu...

—Shhh. Te probaré que tener novio no es malo. —Le sonrió abiertamente.

Sasuke sin darse cuenta había generado un tic en el ojo izquierdo...

—¡Claro qué no! ¡Lárgate de mi casa!

—Si no aceptas le diré a tu hermano que mentiste porque quieres separarlos.

—¡Tú también te meterías en problemas!

—No, yo siempre les juego bromas a ellos. En cambio tú, no te ves como si fueras así. Apuesto a que quedarías por el piso cuando tu hermano supiera lo que quieres hacerle.

Naruto mintió. No creía que Itachi se enojara con Sasuke, ni tampoco Deidara, lo tomarían como una broma. Él sabía que eso no era suficiente para separar a una pareja, pero no pudo evitar decirlo, solo lo soltó. Quería que Sasuke aceptara, quería poder besarlo otra vez sin problemas, y quería por sobre todo decir que ese chico era SU novio.

Diría lo que fuera para que él aceptara.

Sasuke puso mala cara, con odio total en ella y después de morderse el labio asintió.

—Bien, trato hecho. Seré tu novio, pero por un mes.

—Un año o no hay trato.

—Mierda… Un año, entonces… ¡Pero nada más que eso!

A Naruto le brillaron los ojos, se acercó rápidamente y lo atrapó entre sus brazos.

—Ahora somos formalmente novios.

—Formalmente no, de trato.

—Pero el trato consiste en que todos sabrán que somos novios —reveló.

—¿Qué? ¡Eso no lo dijiste!

—Tú aceptaste el trato y no preguntaste las reglas —recalcó ganador el rubio y se acercó para besarlo, pero sintió un duro golpe en el estómago.

Sasuke lo quedó mirando como una fiera frente a un depredador y se tronó los dedos.

—Conque no escuché las reglas...

Naruto lo miró sobándose el estómago.

—Pues tú tampoco escuchaste las mías, no sabes qué clase de novio soy. Y como aceptaste el trato, te aguantas.

—¿Ah?

—Ahora largo de mi pieza.

—No me iré, pensé que dormiríamos juntos, eso es lo que hace Dei-nii cada vez que Itachi va a la casa.

—Olvídalo. —Respuesta tajante.

—Pero...

—¡Largo! Tu novio, mi querido rubio, se está enojando —le dijo agarrándolo de la polera naranja que llevaba y acercándolo a él.

Naruto no se movió, pero de eso se encargó Sasuke. Con una fuerza sobre humana, lo levantó sacándolo casi a patadas y puso el seguro a la puerta.

—Ay, ay —se quejó el rubio una vez de pie.

Bajó al comedor, donde Itachi y Deidara se besaban olvidándose del aire necesario en sus pulmones, y se sentó cerca.

Los mayores dejaron de hacer su apasionada acción y le prestaron atención al niño, que despeinado (más de lo normal), se sobaba la cabeza y también el estómago.

—¿Qué te pasó Naru-chan? ¿Te caíste?

—No —suspiró—. Sólo tengo un novio difícil y duro como un coco.

Itachi se empezó a reír y Deidara puso cara de: "Oh, te compadezco".

Esos días empezarían a ser divertidos, totalmente fuera de la rutina, y los cuatro lo sabían, sólo que había uno que no quería aceptarlo.

Sasuke en su habitación abrazaba con fuerza su almohada, no podía dormir, sentía ardiendo sus labios, recordando los de aquel rubio idiota que se atrevió a pasar a llevar su espacio personal y de una manera...

—Lo odio... Lo odio... Lo odio... ¡Yo definitivamente lo odio!


Ya lo sé, ya lo sé. Estoy atrasada con muchos fics, pero de igual manera comprenderán que a veces las personas no tenemos mucho tiempo.

Bueno, aquí traje este nuevo fanfic, este es el capítulo uno, el dos ya está listo. Lo subiré enseguida ¡Y disculpen el retraso con los otros fics! De verdad tuve que esforzarme este año y ahora que estoy de vacaciones por fin puedo escribir con calma, aunque eso no significa que tengo todos los días libres... Hay mucho que hacer siempre.

¡Pero continuaré escribiendo! Porque en realidad esta historia me ha gustado, me he divertido mucho escribiéndola. Espero y les guste.

Saludos y Gracias por leer ^^

Un review no hace mal a nadie :3 ¡Dejen los suyos! (jajajaj parezco promotora de un producto comercial xD)

Neko-Kitsune©

Última corrección: 15/12/16 - 08/06/19 - 25/06/19