Reconozco que perdí.

Por que definitivamente algo no anda bien conmigo…

El simple hecho de mirarte me hace sentir idiota , pero con el deseo de alcanzar la cima del mundo. Siento que tengo dos pies izquierdos, que me tiemblan las rodillas y que un tren quiere atropellarme, pues la adrenalina al correr por mis venas invade mi cuerpo. Sin embargo el único capaz de hacerme sentir todo este tipo de emociones es este chico que está en frente de mí, pero el simplemente no me mira y si lo hizo fue para saludarme…

Y eso me hace odiarlo de mil maneras diferentes a más de amarlo porque de repente me doy cuenta de que el idiota en frente de mí jamás me verá como lo que soy realmente: una alocada, divertida, enamorada, sorpresiva. ¿Por qué queremos tener lo que nos es inalcanzable? ¿Y por qué desechamos lo que está en nuestras manos? Me gustaría ser una niña otra vez y decirle sin miedo que le quiero ¿Es mucho pedir?

Te fijas en los ojos de ella , en esas orbes verdes y enormes, en su sonrisa, en su rostro de muñeca y el modo en el que camina. Me lastima que no la puedo odiar, que sé que es una persona maravillosa y que me esfuerzo demasiado por encontrar algo chueco en su figura o en su pasado para sentirme mejor… y a la larga eso me da el efecto contrario. Si es más bajita, si es más torpe, si no puede cocinar, si sus notas son más bajas… Pero a la larga y convenciéndome de lo que digo me pregunto ¿Entonces por qué ella y no yo?

Ese momento vuelvo a mi escritorio a sentarme y escribir, porque no hay mejor manera de desahogarme que contarle todo a mi diario. Empiezo siendo casual, describiendo lo que pasó en el día y de una forma u otra el tema se desvía a ti, a tu cabello, a tu modo de hablar, a como sonríes, lo genial que eres, lo amigable que te portas con todos y a como hoy te vi de reojo en el pasillo. Porque mis letras siempre terminan desviándose a ti y así es como escribo de largo, soñando lo que es y no me gusta para terminar con lo que quiero que sea y jamás sucederá.

Y me conformo de un modo muy con verte, con intentar algo débil para llamar tu atención y que no funcione (como siempre) poniéndome roja cada vez que te veo, con intentar lucir más atractiva, con preguntarles a mis amigas qué es lo que te gusta en una chica e intentar ponerlo en práctica, con intentar saludarte, con no escuchar música romántica pues aunque me guste el ritmo, la letra siempre me recordará a ti.

Con intentar olvidarte…

Y no poder hacerlo.

Meiling Li


¡Queridos! ¡Regresé de las tinieblas!

Solo quiero decir que la inspiración parece salir de los mejores y peores momentoS. Creo que estoy enamorada y no correspondida... por primera vez. Y la sensación no me gusta. Así que en parte lo que me imagino que siente Meilin es lo que he podido llegar a sentir, y necesitaba desahogarme. Como última cosa quiero agregar que estoy contenta de haber vuelto ¡Aunque sea en forma de one-shot!