Hace algunos años, mi padre murió de una extraña enfermedad, es curioso, era extraña en ese entonces, pero ahora, los doctores son capaces de curarla en una semana, pero cuando yo tenía seis años, no eran, y mi padre murió sin que pudieran salvarlo.
Mi madre paso tres años sola, dedicada a darme la mejor vida que pudiera como madre soltera, aunque papa nos había dejado una muy buena fortuna, pero después, cuando cumplí nueve años, mi mama me anuncio de que iba a casarse de nuevo, un hombre llamado Turbo, aunque a veces le gusta que lo llaman King Candy por lo "dulce" que es, tenía dos hijas de su misma edad llamadas Taffyta y Candlehead (si, ese es su nombre)
Desde que me las presentaron supe que les desagradaba a las dos, sobre todo a Taffyta, Candlehead intento conocerme pero su hermana se lo impidió, ella hace todo lo que su gemela le diga y jamás la he visto contradecirla.
Bueno, mi mama se casó con Turbo, el me prometió que me daría la vida de una princesa, y que seriamos una gran familia feliz, ¿y qué fue lo que paso?
Mi madre murió de causas naturales dos meses después de la boda, derrame lagrimas sobre su cama el día en que partió de esta tierra, pero aún recuerdo sus palabras muy bien.
-Mi querida Vanellope, en ti, he visto la luz más brillante de mi vida-luego me entrego su medalla, la que había ganado en las competencias donde conoció a mi padre-Tu padre era un juez en ese concurso, y me entrego esta medalla, ahora, yo te la doy a ti, cuídala muy bien.
La puso en mi mano y yo la envolví en un puño sin dejar de llorar.
-Que esto sea un recordatorio de que siempre estamos contigo Vanellope, y que la luz que de ti emana, jamas deje de brillar, mi querida.
Despues de eso...
Murio.
Turbo y mis hermanastras no lloraron con la partida de mi madre, es mas, en cuanto termino el entierro, me sacaron de mi cuarto y me enviaron al atico, Turbo le dio a Taffyta y a Candlehead todos mis vestidos, ropa, joyas, juguetes, todo, lejos de tomarme como su hija y hermana, me tomaron como su sirvienta.
Me obligan a hacer el desayuno, plancharles la ropa, limpiar la casa, hacer la comida, lavar la ropa, hacer la cena, ir al pueblo a comprar todo lo que necesitemos, en pocas palabras, yo hago todo en la casa que solia ser mia, y me dan las peores ropas, soy la ultima en comer, como dije, soy su esclava.
Turbo, es un avaricioso, y Taffyta y Candleheah son unas mimadas, sobre todo Taffyta, que es la que mas me odia, y es capaz de convencer a su hermana para que me odie tanto como ella.
Pero esto no va a detenerme, debo honrar las ultimas palabras de mi madre, por lo que a pesar de mi mala suerte, tengo que salir adelante, y ayudar a quien lo necesite, si yo soy menospreciada, no dejaré que nadie mas lo sea, saldre adelante, como siempre lo hago.
Hace unos días, Turbo me regalo este diario, mientras que a sus hijas les compro ropa y joyas caras, a mi me trago un monton de hojas de papel en blanco, y no podría estar mas feliz por ello, aqui sere capaz de contar mi historia, de desahogarme, sin miedo a ser criticada, sin temor a nada...
-Vanellope von Schweetz.
