PFFFFF. Helow, aquí viene Happy-chan con un nuevo fic. :D Uno basado en las primeras experiencias de la autora cuando le regalaron el móvil nuevo. xD Muy, muy corto-poco más de 300 palabras XD-. Espero que les guste.

Disclaimer: Ni 2p!España ni 2p!Romano me pertenecen. El Spamano tampoco, ojalá. X'D Pero la historia sí es totalmente mía.~


El pelirrojo observó el objeto que el joven italiano había puesto en sus manos, con atención pero sin entender nada. Según lo que había entendido de los grititos del rubio, era un móvil equispirria o algo así, un nombre inglés que no le gustaba nada y que le sonaba de haber visto en la televisión. El aparato en cuestión era negro, extremadamente fino y sin botones por ningún lado.

-¿Qué cojones…? ¿Esto es un móvil?-cuestionó, frunciendo más el ceño de lo habitual. Romano asintió, muy emocionado.-Pero no tiene…Nada. Solo pantalla.

Amore, por dios, no seas tan out! ¡Es táctil!

España lo miró como si hubiera hablado en ruso.

-Ay…Esto va a ser más difícil de lo que pensaba-suspiró.-Mira, se enciende aquí…

-A-Ahá… ¿Y para qué me regalas esto, si no es mi cumpleaños y yo estoy perfectamente con mi móvil?

A Romano casi le da un ataque cardíaco al escucharle, y para enfatizarlo se llevó dramáticamente una mano al pecho.

-¡Peroperobueno! ¡Ese móvil era una piedra totalmente out del cretácico!

-No, era un nokia, creo…

El italiano sacudió la cabeza, tremendamente disgustado con el poco interés que demostraba su pareja en un móvil de última generación totalmente in.


-Y esto es el Whatssap~-concluyó rato después.-Es una aplicación muy cool para hablar con la gente.~

-Pero para eso tenía yo el nokia…Para llamar y hablar…-se lamentó el español. No recordaba ni una mierda de lo que le había dictado el italiano antes.

-¡Pero esto es mucho más práctico, amore mio! Y gratis.~

A España se le iluminaron los ojos inmediatamente al oírle. ¿Gratis? ¿Había dicho gratis? Amaba esa palabra.

-¿E-En serio? ¿Totalmente gratis? ¿Sin cuotas, ni facturas…?

-Sì, amore-el rubio rió entre dientes, satisfecho. Por fin una reacción positiva de su español por el regalo que tanto dinero le había costado. La verdad es que el pelirrojo se veía adorable, jugueteando con el artefacto como si fuera un niño pequeño. Pocas veces se dejaba ver así…

Se sentó a su lado, mientras el español curioseaba muy atento su nuevo teléfono, de vez en cuando haciendo muecas al no entender algo. Romano se conformaba con mirarle hacer y explicarle sus dudas, admirando la concentración que España tenía para las cosas cuando le despertaban la curiosidad.

Ah, se ve incluso más lindo que de costumbre.~


Vale, quedó muy fail, muy corto, y tal cual. xD Pero solo lo hice para entretenerme un rato, y a ser posible, entreteneros a vosotros y sacaros alguna sonrisilla.~ Aunque sea mental. C':

Chauchau!