¡Hola!
Aquí llego con mi mayor shipp de este videojuego/anime. Peter x Boris o, de la forma que más me gusta, White Rabbit x Cheshire Cat *-*
— TO YOU, MY KITTY —
Prólogo
Recuerdo la primera vez que lo vi.
Su Majestad, la actual Reina de Corazones no era más que una niña recién coronada y Blood Dupre, su aun más joven hermano, apenas y estrenaba su primer sombrero como Sombrerero Loco.
Yo recientemente me quedé solo, pues mi primo, la Liebre de Marzo, única familia con la que había contado, se unió a la mafia de Blood. Lo siguiente que supe de él es que se había convertido en la mano derecha del nuevo Sombrerero y había tomado forma humanoide. Elliot March se llama desde entonces. Y desde entonces lo detesto con toda mi alma.
Solo y siendo un simple conejito poco importante y, sobretodo, con ganas de devorverle la traición a Elliot acudí a la aniñada Majestad, enemiga de la mafia de su hermano, para que me acogiera.
Me habría conformado como simple mascota real, pero podríamos decir que la suerte me sonrió esa vez.
Así me convertí en el Conejo Blanco, mensajero y mano derecha de su Majestad. Con ese importante puesto llegó mi rostro, el cual me diferenciaba del populacho sin cara. Por supuesto, también me convertí en humano. Su Majestad la Reina de Corazones me dio el nombre de Peter White, y aun lo llevo con orgullo.
Pensaba que no pude tener mejor suerte al conseguir una jefa tan benevolente como su Majestad. Pero entonces descubrí su lado sádico.
Nunca me imaginé todos los problemas mentales que tenía esa niña, así como la gran depresión en la que estaba hundida, hasta que fue tarde. Un día ordenó que le cortasen la cabeza a todos los gatos de este mundo fantástico en el que vivimos. Su razón: le parecían más lindos que ella.
El cruel mandato fue cumplido... casi.
Un pequeño gatito recién nacido se salvo, al saltar de uno de los cestos llenos de gatos que guardaban en las celdas. Nadie se dio cuenta, excepto yo.
El día en que ocurrió la tragedia no podía aguantar los maullidos lastimeros y el ruido del hacha al cortar. Era simplemente traumatizante para el niño conejo que fui. Así que me escondí en las celdas de piedra vacia. Menuda sorpresa me llevé al notar el pequeño par de ojos violeta rasgados que me observaban asustado desde el otro lado de la celda.
Cheshire era tan pequeño e indefenso en ese tiempo, que recordarlo solo me causa ternura. Su cuerpecito peludo tenía la misma longitud que mi mano de niño humano, estaba helado del frío y no dejaba de maullar, suponía que por hambre. Pero yo no podía darle comida, hasta temía que su Majestad quisiera cortarme la cabeza a mi también por ocultar a todo el mundo el hecho de que había un gato vivo.
Simplemente me lo quede abrazando, esperando poder darle algo de calor, mientras que la masacre seguía teniendo lugar fuera.
Nunca olvidare como, en mis brazos, el pequeño gatito se transformo en un bebé humano con cola y orejitas de gato, que no dejaba de berrear.
Se había convertido en el último de su especie, y eso realmente le hacía importante.
Sin embargo, no tenía ni idea de que hacer con él. Así que, como todo nino sensato, salí corriendo hacía el bosque con el gatuno bebé en brazos, tratando en la medida de lo posible hacer que se callara.
Nunca supe con certeza cuanto estuve corriendo. Pero bendita mi suerte cuando acabé en la entrada del parque de atracciones. Mary, el dueño, me socorrió. Estuve un tiempo con él, le conté lo que su Majestad hizo y porque traía ese bebé gato en mis brazos.
Él me dijo que no debía preocuparme. Por suerte, él era un hombre sin familia que deseaba una, así que adoptó a Cheshire.
Realmente me quedé muy aliviado y regresé al Castillo con una felicidad indescriptible, propia de un niño. Estaba feliz por Cheshire. Tendría un padre, después de todo.
¿Quién me iba a decir a mi, a la tierna edad de 10 años, que ese bebé crecería como un adolescente rebelde que pondría mi mundo organizado de cabeza, de la forma menos esperada? ¿Quién me iba a decir, con 10 años, que acababa de salvar al amor de mi vida?
Espero que os gustase :3
¡Nos vemos! :D