Nota: Los personajes de Candy tristemente no me pertenecen ... en fin ... ya lo sabiamos.
SON SOLO PALABRAS
Por Scarleth
No era una mala persona, sólo había necesitado una oportunidad, se la habían dado y la había aprovechado lo mejor posible.
No todo en esta vida se puede cambiar y Neal aunque luchaba con todas sus fuerzas contra la parte negativa que en alguna ocasión dominó su vida, no la podía erradicar del todo y mucho menos después de lo vivido no hacía tanto tiempo.
Era un hombre sumamente atractivo, había bondad en su corazón, pero también algunas veces prepotencia y altanería. Lo había tenido todo con sólo tronar los dedos y eso era suficiente para no poder cambiar de la noche a la mañana.
Posible o imposible de creer ahora compartía un departamento bastante amplio con sus primos Archie y Candy, quienes asistían a la misma Universidad que él.
Candy ahora era la prometida de Albert Andrey y Archie recién había dado promesa de matrimonio a Annie Britter. Trataba de no pensar en esas parejas felices, pero a veces resultaba muy difícil evitarlo.
-¡Hola! – Saludó Candy abriendo la puerta y llevando sus zapatos en la mano - ¿hay alguien? – preguntó al ver que no era respondido su saludo.
-¡Sí! – se escuchó una voz que salía de la cocina - ¿muy pesada la guardia? – preguntó el hombre con un vaso de jugo en la mano.
-¡Demasiado! – exclamó dejándose caer rendida en el primer asiento que encontró y cerrando los ojos.
-Ve a tu habitación a descansar.
-Creo que ya no puedo ni moverme – le contestó con la cabeza completamente echada hacia atrás y sin fuerza en el cuerpo.
-Te ayudo – se ofreció Archie acercándose a ella y poniéndola en pie casi cargándola.
Candy era una joven demasiado profesional. Su tiempo entero transcurría entre la Universidad y el hospital donde trabajaba y daba prácticas. Pese al deseo de Albert de que únicamente estudiara, había decidido seguir trabajando. No podía imaginarse si quiera estar fuera de lo que más le gustaba hacer en la vida aunque terminara rendida los fines de semana.
Archie la dejó sobre la cama y observó que ya estaba completamente dormida.
-Gatita … eres única – murmuró al salir de la habitación y dejar sobre la estufa la comida que la Srita Wilmort les había preparado para ese día después de terminar de arreglar el departamento.
Se sentó un rato en la sala sabiendo que la joven no despertaría sino hasta después de varias horas y pensando en qué tal irían las cosas para Neal. Realmente había cambiado, estaba estudiando Administración Financiera y Publicidad y fue una sorpresa para todos el comprobar lo inteligente y capaz que era. Harían una excelente mancuerna según los pensamientos del futuro Administrador Cornwell. De Eliza era mejor ni hablar, seguía perdiendo el tiempo en fiestas y tratando de lograr un buen matrimonio.
Sin embargo, a pesar de todo lo que Neal había cambiado y logrado, había una parte de él que seguía exigiendo un trato preferencial, el derecho a merecer todo y sobre todo la firme creencia de que nadie jamás se burlaría de su persona ... ¡JAMÁS!
-Y con Patricia ahora en la Universidad no sé qué pueda suceder.
Patricia O'brian había sido su pareja dos años y medio antes y habían terminado su relación después de un año de noviazgo. Neal se había sentido herido en su amor propio incluso más que cuando ocurrió el incidente del compromiso con Candy no queriendo volver a saber nada de ella ni de ninguna otra.
Archie y la futura doctora habían tratado por todos los medios de ayudarlo y estar ahí para su primo pero había sido hasta cierto punto inútil.
-Espero que no eche a perder todo lo que ha logrado por algo … imposible.
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Neal la esperaba fuera del salón. El día anterior había sido un shock descubrir quién era la nueva compañera. Al verla todo había regresado con mayor fuerza revolviendo sus entrañas. La mujer que lo había dejado por otro ahora se mudaba a Boston y tenía el descaro de elegir la misma Universidad y encima de todo ...
-Lo sabías Patricia – murmuraba indignado tirando al suelo un cigarrillo y pisándolo con furia – no podía ser de otra manera siendo que estudiamos lo mismo … ¡maldición! – exclamaba colérico.
En ese momento la vio salir y fue un remolino de sensaciones las que golpearon su cuerpo. Se acercó a ella con paso apresurado para interceptarla.
-¿Qué se supone que haces? – le dijo tomándola del brazo con fuerza.
Hacía tanto tiempo que no estaban uno frente al otro, ella lo vio con sorpresa y una chispa encendió los bellos ojos color miel tras los lentes. El tiempo había sido generoso con la muchacha estilizando su figura, adelgazando sus facciones y dejando atrás a la joven tímida que había sido.
-¡Neal! – dijo sintiendo que el corazón le golpeaba de manera violenta el pecho.
-¿Por qué justamente esta ciudad? ¿Por qué la misma Universidad?
Se notaba la furia, el coraje y el resentimiento que le tenía. Su rostro que en tantas ocasiones le regalara una sonrisa capaz de iluminar el día más gris ahora era una máscara dura que le dolía hasta el alma.
-No sabía que tenías exclusividad – le respondió tratando de aparentar calma - pero si quieres una respuesta lógica te la daré: Porque es la mejor en el ramo.
-Sabías que estaría aquí.
-No me detendría sólo por eso.
-¿No?
-Primero es mi carrera y después todo lo demás.
-Viniste a humillarme, a que todos se enteren que me cambiaste y que sea el hazmerreír de todo Boston como lo fui de Chicago.
-¡Claro que no! Yo jamás te humillaría … Neal ...
-¡Lo haces al estar aquí!
-Lamento que lo veas de esa manera.
-No lo lamentes, sólo vete.
-Eso no lo haré Neal – afirmó separándose bruscamente de él.
-Entonces te arrepentirás Patricia.
-No ganas nada amenazándome … te conozco, que no se te olvide.
La miró con desprecio y dio la media vuelta pensando en cómo haría para lograr que ella se borrara de una vez y para siempre de su camino.
-Lamento todo lo sucedido – murmuró la joven con sus ojos llenándose de lágrimas al ver la gallarda figura alejarse y ser consciente de todo el odio y rencor encerrados en ese dolorido corazón.
Continuará …
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Hola ... ahora sera una aventura en la que participaran activamente Neal, Candy, Archie y Paty.
Voy a dejar descansar poquito a mi principe y veremos como los va a estos 4 en su ausencia.
Un beso y espero que tambien les guste este fic ...
Scarleth Andrey =)