Luna roja.
Sentía mi cuerpo adolorido y muy pesado, me era imposible mover un solo musculo, no tenía control sobre mí.
Abrí lentamente mis ojos.
No sé dónde estoy.
Lo último que recuerdo es que era de noche e iba caminando de regreso a casa, de repente sentí como alguien me seguía, avance lo más rápido posible, me sentía acorralado, trate de escapar pero lo que me seguía era más rápido, sentía mucha angustia y desesperación, sabía que no era humano porque su olor era insoportable y nauseabundo quise gritar pero un fuerte golpe me hizo perder el conocimiento.
No reconozco el lugar; es un cuarto totalmente vacío, yo me encuentro en medio de la habitación con mis muñecas atadas a una cuerda que pende del techo.
En una esquina se encuentra una puerta grande de madera muy vieja
Trato de moverme nuevamente pero sin resultado.
Intento gritar para pedir auxilio, pero mí no es capaz de emitir sonido alguno.
Sudo frío, la cabeza me da vueltas.
¡Que alguien me ayude! ¿Quién pudo hacerme esto y por qué?
Un segundo después escucho algunos pasos acercándose, abriendo la puerta lentamente y entrando despacio a la habitación.
Era una mujer de hermosa piel blanca, con cabello largo hasta la cintura, negro con destellos azulados, alta, pero lo más aterrador era su rostro pues en lugar de ojos tenia cuencas vacías y su sonrisa de deformaba en una mueca siniestra.
Lentamente fue eliminando la distancia que nos separa y elevándose a mi lado, estiro su mano para tocar mi mejilla llegando lentamente a mis parpados. De pronto presionó demasiado fuerte mis parpados mientras dejaba escapar carcajadas incontrolables que me erizaban la piel;
Con la otra mano sostenía una larga daga que enterró bruscamente desde mi pecho a mi abdomen desgarrándome la piel.
Uno de mis ojos comenzó a sangrar, el aire empezó a faltarme y ella detuvo su risa con brusquedad.
"No te preocupes Sasuke, algún día tú podrás hacer lo mismo y te divertirás saciando tu apetito"
Clavó su daga en mi otro ojo y con un solo movimiento lo arranco para después ofrecérmelo.
Grite entre la inconciencia y el miedo
¡No por favor!
No sabía qué hacer, trate de zafarme pero fue peor, sus largas y afiladas uñas desgarraban parte de mi piel y puso la daga con mi ojo en mi boca.
Respire profundo y lo devoré, era repugnante pero a la vez sentí un placer desconocido al obedecerla.
Solté un grito desgarrador mientras ella lamía la sangre que empezaba a brotar de mis ojos ahora inservibles.
El terror se apodero de mí.
Siento como la vida se me escapa.
Antes de caer de nuevo inconsciente creyendo que sería el final ella susurro suavemente:
"Te convertirás en uno de nosotros, serás mío y saciaras tu hambre, quedaras maldito hasta la eternidad, yo seré tus nuevos ojos".
Disclaimer: el mundo de Naruto es de Kishimoto.
*Sí, Hinata es la que lo tortura*
