-¡chicas es hora de tomar el tren! ¡si no bajan en este instante, tendré que subir por ustedes!

Siempre, cada 1 de septiembre era lo mismo, la bondadosa Ann repetía lo mismo, y cada 1 de septiembre las Kellington bajaban corriendo de sus respectivas recamaras.

La familia Kellington era una familia de abolengo, prestigiosa y respetada por todos a la redonda, estaban perfectamente conectadas y se rumoraba que el hijo mayor Alan Kellington podría llegar a ser el próximo primer ministro de magia.

Julian Theodore Kellington era dueño de Industrias Kellington especializada en la manufactura de escobas de quiddich, haciendo así la gran cantidad de dinero que tenían, aunque respetado por la sociedad el Señor Kellington respetaba a los hijos de muggles y odiaba sin lugar a dudas a todo aquel que se hizo nombrar mortífago. Su esposa Marie Frances Kellington era una bella y tierna mujer, capaz de contrarrestar el carácter duro de su marido. Los Kellington al primer año de casados tuvieron a su primer hijo Alan Theodore Kellington y cinco años más tarde tuvieron la bendición de Merlín de tener a las mellizas Cecile Blair Kellington y Meena Charlotte Kellington.

Cada 1 de septiembre Alan acompañaba a sus hermanas al andén 9 3/4 para que subieran al tren y pudieran continuar con sus estudios en la afamada escuela para magos Hogwarts.

Al subir al auto Meena recordaba cuando su hermana mayor por un día entero se puso en el banquito con el sombrero seleccionador hacia ya casi ocho años (y ocho por que regresaron a Hogwarts después de la guerra) ella vivaz y feliz con su melena negra y su fleco tapando casi todos sus ojos y la chispa que conocía en sus ojos observándola

El sombrero tardó unos impertinentes minutos hasta que gritó ¡SLYTHERIN!; sabía que su hermana lo soportaría, podría pasar siete años de su vida con ellos por que era astuta y sabía como manejarse... ¿ella? ¡no sabía que diantre quería!

Pero asustada con los ojos fijos en su hermana mayor se subió al banquito y espero a que el sombrero seleccionador se pusiera sobre su cabello rizado y siempre recordaba aquellas palabras con exactitud

"¡otra Kellington! si...eres igual a tu hermana, pero algo tienes, algo diferente, al igual que todos los Kellington...tu hermano y tu hermana son diferentes ¿por que tu no?...veamos, si...eres muy leal y astuta...pero si...eso será lo mejor...¡RAVENCLAW!"

Y la mesa de las águilas estalló en aplausos ¿separada de su hermana? Pero no había vuelta atrás.

-¡Meena! ¡regresa!

-¿que?

-bueno…pues no respondes, -dijo su gemela con voz queda-ya llegamos

Cess llamada así de cariño bajó rápidamente del auto y esperó a su hermana y a su hermano mayor.

-y recuerden, no se metan en problemas-rezaba su hermano siempre-manden cartas y las quiero mucho

-ni parece hermanito-dijo Cess sonriendo-¿o que dices Meen?

La gemela sonrió despreocupada y abrazó a su hermano cariñosamente

-es verdad...ni parece

-par de...las quiero, no se olviden de mi ¿de acuerdo?

-¿nosotras?-dijo Meena-¡jamás!

-¡vamos Meen, o perderemos el tren!

-¿y me dice a mi dramática?-la chica de cabello rizado con lentes rió fácil y se despidió por segunda vez de su hermano-hubiera deseado que papas estuvieran aquí...¡es nuestro último año!

-gusana, ya sabes como es la vida de papás...cuídate y ¡cuídala!

-si, señor!

Al subir al tren caminaron por los pasillos encontrando a una amiga mutua Mon Shaw una Slytherin amiga de Cess

-¿tranquilo su viaje a Paris?-dijo soltando el libro que tenía en mano

-igual que siempre-dijo Meena-¿y el tuyo?

-igual que siempre, la familia vino, salí a comprar las cosas de Hogwarts, si, lo mismo de siempre.

Mon Shaw no provenía de familia de abolengo como sus amigas pero sin embargo su familia había escalado un buen lugar en la sociedad. hija única de un auror y una medí maga, haciendo esto casi imposible ver a sus papás, pero era feliz en fin de cuentas, amaba la música y siempre hacía lo que no debía causando a la respetuosa Meena un dolor de cabeza.

El viaje transcurrió tranquilamente, entre revistas poco leídas, libros y tareas, y la típica ronda de prefectos.

-este año se siente raro ¿no creen?

Meena asintió al igual que Mon

-tal vez es porque Potter no tiene que sacrificarse por nosotros, ¡vamos! ¡hasta parece un hombre nuevo!-dijo Mon riendo

-si, camina más seguro ¡ja!-aseguró Meena

Las hermanas Kellington se despidieron y caminaron cada quien a sus respectivas mesas.

Todos hablaban rápidamente sobre la nueva adquision en la mesa de profesores, la guerra, las perdidas

-¡alumnos! ¡calma! Ahora, bienvenidos a la escuela, este es el primer año después de la guerra, ofreciendo a los que hayan perdido familia y amigos en la batalla el más sentido pésame-muchas cabezas de varios chicos sonrieron por el anuncio-a los que hayan luchado al igual se les agradece, bien, tenemos noticias sumamente importantes, hay dos profesores nuevos, el profesor Keith Xekn que dará la clase de pociones y Oliver Wood como profesor de vuelo.-El revuelo se hizo esperado, niños y no tan niños murmuraban indefinidamente cosas sin sentido, Meena rodó sus ojos ¡vamos! ¡era sólo un ex alumno! ¬¬ -bueno, por favor ¡silencio!-y todo el gran salón calló-recuerden que el tercer piso esta estrictamente prohibido y el bosque prohibido también esta fuera de los límites...sin más por el momento ¡bienvenidos!