Pequeños problemas

Volví con otra historia, primero que nada quiero agradecer a la gente que leyó mis otros escritos, de verdad lo aprecio mucho, esta historia es un tanto disparatada, bueno, no podría salir nada mas de mi cabeza ¿no lo creen? jejejeje espero que les guste al leerlo así como a mi me gusto al escribirlo. El titulo de este capitulo va en honor a Florchis que fue quien me dijo que lo escribiera. Hibari.

Capítulo 1: "Que dinda edes Hedmione"

Aaaah- emitió un pequeño grito un joven dejándose caer en uno de los sofás pertenecientes a la sala común de los leones. Un pelirrojo un tanto mas alto que él termino haciendo lo mismo en un sillón cercano a la chimenea.

Chicos…-les llamo una voz femenina

msmsfksfskmfs…- susurraron a manera de respuesta ambos al mismo tiempo.

Ya que somos los únicos Gryffindors que permanecemos en la torre, creo que será mejor que hagamos los deberes que nos dejaron Mcgonagall y Snape para tener el resto de las vacaciones en paz…- la idea no fue bien aceptada por ambos ya que la miraron de la misma manera como si tuvieran un Ghoul frente a ellos.

Hermione…por favor…dime que tienes fiebre…- le pidió el pelirrojo.

No tengo fiebre Ron, que seas un inmaduro irresponsable no quiere decir que yo lo sea y menos Harry!- le termino gritando para salir en dirección al retrato de la dama gorda bastante ofendida. Harry no pudo ni siquiera refutar algo cuando ya había desaparecido en dirección desconocida…

Ron…-le cuestiono totalmente cansado-…cuando será el día que aprendas a tener un poco más de tacto…- le recrimino el joven Gryffindor.

No se tu Harry, pero yo no tengo ganas de ver algo que tenga relación con el "nariz de gancho" Snape tan rápido…además Hermione debería saberlo ya…- termino de decir en un suspiro de resignación al ver la expresión del rostro de su amigo.

Bueno sea como sea la próxima vez no abras la boca por impulso, primero piensa aunque eso te resulte casi imposible- termino de decir con una sonrisa

El pelirrojo en forma de venganza le lanzo lo primero que tuvo a mano, el libro de encantamientos de Hermione, Harry lo recibió de lleno en el rostro, la pelea hubiera seguido si no hubieran visto a Crookshanks mirarlos fijamente al ver que estaban destrozando las cosas de su dueña, Harry desistió de seguir por temor a que la prefecta se enterara, lo que menos quería en ese momento era que su amiga le entrara una rabieta por su culpa…

El tiempo paso rápidamente para ambos pese a estar metidos en mirar el techo en el caso del ojiverde o estar pensando en la inmortalidad del cangrejo en el caso de Ron. La prefecta de la casa no había regresado aun, lo que empezó a preocupar a ambos muchachos, Ron estaba comenzando a sentir algo extraño en el por la situación, cuando se lo comento a su amigo lo único que consiguió fue que le dijera que aquello era la "culpa" por haberle hablado de ese modo, el pelirrojo solo lo miro de la misma manera que si Snape le hubiera ofrecido pasar la tarde junto a él catalogando pociones, antes que eso prefería tener que darle clases a Crabbe y a Goyle.

Cerca de la hora de la cena decidieron bajar a ver si se encontraba ya en el comedor, durante el almuerzo no habían bajado gracias a que el amigable elfo domestico se había ofrecido a llevarles comida luego de que Ron exagerara al decir que no tenia fuerzas para caminar debido al hambre que tenia lo que era totalmente mentira ya que había desayunado lo suficiente como para alimentar a todo un ejercito, pero que se le iba a hacer aquel pelirrojo no podía funcionar si no estaba tragando algo…

El camino al gran comedor fue tranquilo, no se escuchaba ninguna clase de ruido mas que los ronquidos de los cuadros que habían decidido descansar y lo pasos de ellos al caminar, pero la sensación de escalofríos que les recorrió a ambos fue interrumpida por la aparición de la prefecta, según la apreciación de Harry el rostro de la joven revelaba una calma infinita, parecía que el aire puro de los terrenos le había dado un buen tranquilizante, lo que el pelirrojo rezaba era que le durara por lo menos hasta dos días antes del comienzo de las clases, para así poder molestarla con que le ayude con la redacción de transformación y pociones, el pelirrojo nunca cambiaria…

La cena resulto en paz para el trío, que disfruto de los manjares que los elfos habían preparado para los pocos habitantes del castillo, Ron nuevamente comió lo suficiente como para alimentar todo un ejercito de Trolls, Harry a veces se preguntaba si el colegio podría seguir pagando los gastos de alimentación de todos los estudiantes, el pelirrojo si seguía así podía llevar a la bancarrota a cualquiera…

Luego del particular banquete, el trío se dirigió nuevamente a la sala común a distraerse de lo que les rodeaba, para que mentir, según Hermione y con mucha razón ambos chicos que la acompañaban de seguro seguirían haciendo lo mismo de siempre, rascarse el ombligo con diferentes técnicas e intentar descubrir el nirvana, pero no contaban con que a la vuelta del pasillo por el que iban sucediera algo que les agitaría por completo el panorama…

Un potente rayo de luz los había alcanzado, Hermione así como sus dos amigos se vieron forzados a cerrar los ojos para evitar hacerse daño con la radiante luminosidad, como un acto reflejo la prefecta de los leones extendió su mano hacia donde estaba Harry, intento palparlo para ver si seguía ahí, pero no sintió nada, de forma desesperada y sin poder abrir los ojos aun, palpo hacia su otro costado donde se encontraba el pelirrojo, con desesperación noto que el tampoco se encontraba, un sentimiento de angustia se apodero por completo de su persona, "¡¿que diablos pasaba!" si hacia solo unos instantes ambos estaban hablando tranquilamente a su lado, por desgracia no había nadie en ese momento que pudiera ayudarlos, los segundos fueron pasando, lo mas extraño para la castaña era que aunque quisiera no podía escuchar nada, con los ojos cerrados, palpo nuevamente hacia el lado donde se suponía que debía estar Harry, donde debía estar su cabeza y su rostro había solamente aire, el sentimiento de angustia creció rápidamente, donde debía estar el brazo de Ron solamente había aire, "¡¿que diablos estaba sucediendo...!"

Luego de unos agonizantes segundos la luz había bajado en intensidad permitiéndole abrir los ojos nuevamente, busco con desesperación alguna muestra de vida de sus amigos, pero al voltear a todos lados solo encontró vació, los cuadros seguían durmiendo como si no hubiera pasado nada "¡¿es que acaso se habían vuelto locos!", sacudió su cabeza en claro signo de extrañeza, no todos los días se presentaba una interrogante que la prefecta y posible premio anual no pudiera resolver, la respiración se le había agitado y el solo hecho de que Voldemort tuviera que ver con ello le erizaba la piel, el imaginarse no volver a ver a sus amigos, no poder ver a Harry rascarse la nuca nervioso le revolvía el estomago…si esto había sido obra de los seguidores de Voldemort no debían estar muy lejos, busco su varita con desesperación, en cuanto dirigió su mano a su bolsillo de la túnica rozo algo peludo, la mano se le paralizo en el instante, "¿seria alguna criatura del lado oscuro?", pero como buena Gryffindor haciendo valer el orgullo de su casa saco su varita sin dirigir la mirada, después de todo algo de valor siempre le faltaba…pero se llevo una sorpresa cuando sintió que algo le tironeaba la parte baja de la túnica, decidida a mirar finalmente lo que era aquello, la sorpresa que se llevo fue casi de muerte cuando vio que a la altura de su rodilla un poco mas arriba se encontraba una mata negra, se alejo con rapidez temiendo que se tratara de algún Lethifold que acababa de digerir a sus amigos, levanto la varita dispuesta a lanzar el encantamiento patronus cuando noto que lo que ella creía una criatura tenia pies y manos, además de cuerpo entero y la forma de persona, mirar aquello la descoloco por completo "¿quien era?" o "¿que era aquella cosa?", con la varita en alto se dirigió hacia el en total desconcierto, en cuanto estuvo parada a su lado, noto que el rostro de aquella cosa o persona se le hacia familiar, aun pensando que se trataba de magia oscura, levanto su varita, pero fue incapaz de hacer algo ya que otro tironeo de la parte de su túnica por la espalda casi la derriba, volteo la mirada para encontrarse con una mata de cabello rojo y una pequeña mano que le intentaba hurgar en los bolsillos…

Quedo cadamelos…- le escucho decir, con la cara totalmente desencajada volteo a ver hacia su otro lado donde la pequeña mata negra reclamaba nuevamente su atención

quedo que me deas un qento- le dijo

Hermione parecía atar cabos y lo que estaba pensando no le gustaba para nada

Ha…Harry?- pregunto temiéndose que la respuesta fuera afirmativa

a ti me lamo- le respondió el pequeño con una sonrisa que dejaba ver que le faltaba uno que otro diente.

El rostro de Hermione se ensombreció, volteo a su otro lado donde el otro pequeño estaba hurgando sus bolsillos en busca de alguna golosina, le tomo la mano con delicadeza y le pregunto

Ro…Ron?- el chico la miro clavando su mirada en ella, le sonrió y le dijo

Donald Weasy- le respondió, el chock para la prefecta había sido demasiado así que con una ultima mirada hacia donde se encontraba su amigo Harry, al verlo revolver su cabello de forma descontrolada y por ello poder ver su peculiar cicatriz se dio de bruces contra el piso.

Despertó no supo cuanto tiempo después, pero el pequeño golpeteo de algo contra su mejilla derecha no la dejaba en paz, abrió los ojos pensando que había tenido un sueño cuando se encontró con unos ojos verdes bien conocidos por ella.

Harry?- Le pregunto en cuanto se hubo separado de su rostro

Ya te dige que adi me damo –le contesto con un bufido que si hubiera sido otra situación le hubiera parecido tierno, la prefecta abrió los ojos lo más que pudo cuando noto que no había sido un sueño, a su lado se encontraba una versión en miniatura de Harry que la miraba como si fuera algún mono de circo…

Donde esta Ron?- le pregunto deseando que su amigo pelirrojo no estuviera de igual forma que el.

Adi…- le respondió señalando con su pequeño dedo hacia su lado derecho donde se hallaba una pequeña mata de pelo rojo de espaldas jugando con quien sabe que…

Ron – lo llamo, pero el pequeño no le presto atención – Ron! – le volvió a llamar esta vez levantando el tono de voz

Que le pasa?- le pregunto a Harry

No te- le dijo mientras sacudía sus manitos- tenia hambe y agalo un padito que taba en tu mano…- le respondió mientras hacia morisquetas imitándola a ella, en cuanto Hermione escucho eso se levanto de golpe empujando al pequeño Harry, con el envión lo hizo caer sentado, no se dio cuenta que el pequeño había empezado a llorar, lo que quería ahora era recuperar lo que seguramente seria su varita ya que no la veía por ningún lado…

Ron…- le llamo, el pequeño al escucharla cerca volteo a verla, en cuanto Hermione callo en cuenta de lo que aquella versión en miniatura de Ron tenia en su boca era su varita, se la saco tan de golpe que ahora el también lloraba, en cuanto la tuvo guardado nuevamente en su túnica, con lagrimas en los ojos al ver que habían unas pequeñas marcas en donde el pelirrojo de su amigo había intentado morder, cayo en cuenta que habían dos llantos bastante agudos a su alrededor

Hedmione mada- lloraba a todo pulmón el pequeño Harry

Quedo comel vadita!- chillaba el pequeño Ron

Vamos chicos compórtense y no me sigan haciendo bromas- Hermione se puso a la defensiva pensando que todo era un plan de sus amigos para jugarle una mala pasada, los chicos seguían llorando a todo pulmón y los retratos de la escuela estaban gritando fastidiados que los dejaran dormir.

Hedmione mada no me quede- Harry seguía gritando y pataleando contra el piso

Buja!-grito el pelirrojo- Hedmione no me deja comed vadita!- Ron seguía protestando por aquello y seguía llorando, realmente aquello se escapaba de una simple broma, estaba comenzando a temer que todo fuera verdad.

Oigan escuchen- les dijo intentando calmarlos

Hedmione mada- le dijo Harry con las lagrimas cayendo por el rostro e intentado retener la mucosidad que se le escapaba por la nariz, aquella imagen hablando el corazón de la prefecta, se acerco a el y se coloco a su altura

Lo siento…-le dijo mientras le limpiaba las lagrimas con la manga de su túnica- no quería hacerte llorar…- en cuanto el pequeño escucho esas palabras le sonrió de manera dulce que a Hermione le hizo enternecerse, pero el efecto no le duro por mucho tiempo ya que el pequeño Ron al ver que ahora se hallaba a su altura le había agarrado una ataque contra el pelo de la prefecta.

Buja!- le gritaba mientras le tironeaba unos mechones- Quedo comed vadita!- y seguía chillando mas que llorando.

Hermione hartándose de paciencia lo retuvo con una mano y lo coloco al lado de Harry

Lo siento Ron…-le dijo, le costaba demasiado decir esas palabras por mas que fuera a un niño al que se las estaba diciendo- Te prometo que te voy a dar cosas mas ricas si me acompañas a donde voy - le dijo poniendo voz de felicidad para entusiasmarlos

Codas dicas?- dijeron los dos jóvenes a la vez lo que provoco una sonrisa en el rostro de Hermione al ver sus expresiones.

Si, cosas muy ricas, ahora vengan que los llevo…- al ver que ambos dejaron de llorar se puso a pensar en que iba a hacer, realmente no tenia explicación para lo que estaba pasando, de seguro ya no se trataba de una broma, sus amigos no tenian la capacidad aun de poder realizar algún hechizo de aquella magnitud…bueno…no que ella sepa…tomo el camino hacia las cocinas pero esto era una emergencia así que se desvió al despacho de Dumbledore de inmediato, después de todo aquel viejo mago iba a arreglar las cosas rápidamente.

Durante el trayecto hacia la oficina del director tuvieron la suerte de no cruzarse con ningún profesor, en especial con Snape y Filch con su gata, la calma del trayecto no duro mucho ya que ambos se quejaron de cansancio.

Toy cantado- le dijo Harry- devame a upa- y le tendió sus manos Hermione para que lo levantara en alzas, la joven lo miro, pero al notar la mirada de pequeño ángel que tenia no podía negarse, lo tomo de los brazos y lo cargo, pero aquello no trajo nada bueno, Ron que seguía en el piso se había puesto celoso y reclamaba la atención de la joven.

Quedo upa do tamben- y saltaba esperando que Hermione le tomara en alzas,

No puedo ahora Ron-le respondió con cara triste esperando que con ello lo calmara

Do quedo upa!-grito y Hermione se temió una rabieta por parte de su amigo

Mira déjame llevar a Harry primero y luego te cargo a ti…- le dijo esperando convencerlo.

Do quedo pimedo!- le grito y estaba a punto de ponerse a llorar

Harry me lo pidió primero, además así después tu también vas a estar a upa cuando lleguemos donde están las cosas ricas-

Pedo…- protestaba colocando cara de borreguito que a Hermione le enternecía

mira Ron, ahora llevo a Harry y luego te llevo a ti, te parece?- el chico asintió no muy convencido del trato

En cuanto volvieron a emprender la marcha Harry se había prendido del cuello de su amiga parecía estar durmiendo así que lo dejo así hasta que le tocara su turno de cambiarse con Ron, lo que no sabia es que a espaldas suyas, el ojiverde se hallaba haciéndole muescas de burlas al pelirrojo que se estaba colocando del color de su pelo por la furia, por suerte había tocado el cambio y Harry bajo muy a su pesar queriendo quedarse un ratito mas en sus brazos.

Ahora es el turno de Ron –dijo la prefecta para convencerlo-ya estuviste a upa y descansaste bastante- el joven bajo y se quedo parado, Hermione levanto a Ron y emprendió el viaje, pero en cuanto se movió un poco sintió que una pequeña mano se aferraba a su túnica, acomodo de manera tal a Ron que con una mano libre cogio la pequeña mano de su amigo para seguir caminando, el pelirrojo se había aferrado al cuello de la prefecta pero en cuanto levanto la mirada noto las caras de burla que el ojiverde le hacia, su rostro se estaba colocando de mismo color de su pelo y comenzó a gritarle al pequeño Harry

Feo, edes feo y padeces un sapo!- le dijo, Hermione lo miro de forma extraña pensando que aquello era una ofensa contra ella, pero en cuanto noto que Harry le sacaba la lengua y Ron tiraba pequeños puños intentando pegarle entendió

Quedo bajadme- le pidió el pelirrojo

No te voy a bajar porque vas a pelear con Harry- le respondió ella intentando calmarlo

quedo bajadme!-le grito

No lo voy a hacer, porque vas a pelear- volvió a negarse

Quedo bajadmeeeeeeeeeeeeeeee!- grito logrando que la prefecta lo colocara en el piso cuando sintió su oído reventar, en cuanto el pelirrojo estuvo en el suelo comenzó a perseguir a Harry que se puso a correr alrededor de la prefecta intentando golpearlo.

Hemi, Hemi, la comadeja quiede pegadme-

Ron basta, no lo sigas-

Pedo…el me mido mal…- se defendió el pequeño

Pero no por ello vas a pegarle, ahora le hablo pero tu no hagas nada malo bien?- el pelirrojo asintió con una mirada de triunfo en dirección a Harry.

Ya no me quedes?-le pregunto con una cara de tristeza que la dejo descolocadas, aquellas palabras le habían provocado un increíble shock.

No es eso Harry le dijo, solo que no molestes a Ron bien?-

El pequeño asintió contento y camino a su lado mientras que del otro se hallaba Ron mirándolo mal y diciéndole "sapo feo" por lo bajo.

Hermione se detuvo frente a una gárgola, ambos pequeños miraron la escultura y se abrazaron a sus piernas en señal de miedo, rió por aquella reacción, pero ahora había cosas de que preocuparse, dijo la contraseña del despacho y espero a que la escalera hiciera aparición, los dos no querían subir por temor a que ese bicho se los comiera pero con un leve empujoncito los encamino hacia la oficina del director.

Golpeo la puerta tres veces antes de escuchar la invitación de entrada a la oficina, separando a cada uno por un lado ya que habían vuelto a pelearse entro con ellos de la mano, no tenia idea de cómo explicarle al director que dos de sus alumnos de los últimos años habían vuelto a ser unos niños pequeños.

Señorita Granger-le saludo el anciano- que la trae por acá?-

bueno en realidad…no se como empezar-

El principio siempre es una buena idea, porque no toma asiento?- le ofrecio amablemente.

Ambos chicos se habían ocultado detrás de la chica, que con su túnica los tapaba por completo.

Se trata de Harry y Ron…-

Que hicieron esta vez?- pregunto en tono jovial

Bueno…véalo por usted mismo-dijo, y en lugar de seguir hablando dejo que lo viera por el solo

Ante la vista del viejo director aparecieron dos pequeños que se hallaban mirando todo con gran asombro, se acerco para cerciorarse que lo que suponía le quería decir la Señorita Granger no fuera cierto, en cuanto los pequeños notaron que un viejo alto con nariz larga y ganchuda se hallaba mirándolos detrás de unos lentes de medialuna

Vejo feo, vejo feo!-comenzaron a gritar ambos mientras corrían de un lado para otro ante la atenta mirada de los retratos y los ojos del director

Señorita Granger? Que paso?- pregunto totalmente extrañado

Bueno en realidad no lo se…-

Cuénteme que fue lo último que hicieron, la prefecta tomo aire y comenzó a detallar claramente todo lo que había pasado

Entonces dice que fue esa luz blanca no?-

si pero no se de donde salio.-

Usted puede arreglarlo no?- le pregunto esperando una respuesta afirmativa

Supongo, pero si no sabemos bien que hechizo fue o que fue realmente no podemos hacer nada por si causamos algún efecto duradero, por ahora será mejor que permanezcan así hasta que encontremos la solución…- el director había terminado de decir todo alegremente pese a la situación.

Y que va a pasar con ellos?- preguntó Hermione completamente sorprendida por la reacción de su mentor

En la escuela no se encuentran demasiados alumnos, no creo que sea problema…y será mejor que los cuide usted señorita Granger, parecieron tomarle demasiado cariño…- en aquel instante se hallaban los dos pequeños intentando subirse a las faldas de Hermione la cual no entendía la situación hasta que Ron en forma de venganza se dirigió a la barba de Dumbledore y comenzó a tirarla lo mas fuerte que podía para un niño de su edad

Ronald basta!-le gritó la prefecta, pero el niño la ignoraba y lo peor ahora era que Harry se había incluido en el juego provocando que el director temiera que le arrancaran su enorme barba.

Hermione suspiro en gesto derrotado y dejo que siguieran con lo suyo, después de todo el viejo director necesitaba un escarmiento, se sentó en la silla nuevamente y pregunto algo que le estaba dando vueltas por la cabeza desde hacia bastante rato.

Director…? Como puede ser que ellos…? Me refiero a que saben quien soy…pero no recuerdan nada del resto…no mencionan ni a Voldemort ni a los mortífagos…no se quejan por el estado en el que se encuentran…-

Eso Hermione es porque han vuelto a ser niños…-le respondio el anciano con una sonrisa

y yo…?- pregunto la castaña demasiado confundida-…como puede ser que recuerden quien soy…?-

Usted señorita Granger ha sido una persona muy influyente en la vida de ambos jóvenes, puede ser que por ello ambos la recuerden…- le respondio de manera simple

Madame Pomfrey los cuidara no?-

El anciano se rió por lo bajo antes de dar una respuesta

Creo Señorita Granger que por lo mismo deberá ser usted quien cuide de ambos hasta que encontremos una solución a este problema o "pequeños problemas".

La castaña asintió lentamente procesando la información que acababa de recibir, debía hacerse cargo de los dos hasta que el director descubriera la solución, dejando la silla en su lugar desprendió de la barba de Dumbledore a Harry y a Ron, encamino a ambos hacia la salida aun no creyéndose en el lió que estaba metida, tener que cuidar de dos niños en un inmenso castillo no iba a ser trabajo fácil y aun en ese momento no sabia cuanta razón tenia.

En la salida de la oficina, los chicos comenzaron a quejarse nuevamente.

Mentidosa!- le dijo Ron –me pometite dame codas dicas, pelo los peditos del vejo feo tenias sabol a gusalapo!- termino de decirle con un puchero en los labios.

Hermione lo miro con cara sorprendida, Ron estaba intentando comerse la barba del director…y podia ser que hubiera intentado comerse un gusarapo

Ron…eso no se come eso es pelo y te puede hacer mal…- le dijo la chica

Pelo quedo comel!- y la miro con ojos llorosos

Quedo comel- esta vez había sido Harry quien se quejo de hambre

Ahora les llevo algo, pero primero deberán prometerme que se quedaran quietos a donde los voy a llevar y después les traeré algo de comer…-

Yo quedo comel ahoda!- se quejo Harry

y vas a comer Harry, solo que no les gustaría…- les dijo mientras los miraba a ambos- …comer frente a una chimenea con el ambiente calentito y no acá en el frió…- les termino de decir con la mejor voz de entusiasmo que podía poner pese a la situación.

Ambos chicos parecieron contentarse inmediatamente por la respuesta de la joven, la que sonrió por la manera sencilla de convencer a esos dos de hacer lo que ella quería, por un minuto cruzo por su cabeza la idea de aprovecharse de la situación, con una pequeña sonrisa en los labios camino con ambos en dirección a la sala común de Gryffindor ignorando que lo que se le venia dentro de unos momentos iba a ser completamente contrario a lo que ella imaginaba…

Caput Draconis- susurro la prefecta en cuanto estuvieron los tres frente al retrato de la dama gorda que miro con una cara totalmente extrañada la presencia de dos niños en la sala común, iba a objetar algo cuando noto que la mirada de la prefecta le indicaba lo contrario, no pudiendo aguatar las ganas de averiguar de que se trataba en cuanto la castaña y los chicos entraron salio rápidamente del cuadro para averiguar o "chusmear" con su amiga.

Bueno chicos- les dijo- siéntense en algunos de los sillones y no tomen nada extraño y menos si les habla entendieron?- ambos chicos le miraron con una expresión de inocencia que dejo conforme a la prefecta

entonces, lo prometido es deuda, ahora les traigo lo que les dije, pero… espérenme acá de acuerdo?-

Ambos chicos volvieron a asentir colocando sus mejores expresiones en el rostro, la prefecta satisfecha con ello se dirigió a la salida del retrato en dirección a las cocinas, seria más sencillo si le pidiera ayuda a Dobby pero no quería abusar de la amabilidad del elfo luego de que seguramente le pelirrojo abusara de el con sus pedidos de comida.

Los cuidas Crookshanks...- le susurro a su gato patizambo que se hallaba cerca de la salida cuando puso un pie fuera de la sala, el minino levanto la cola en señal de entendimiento y con paso erguido se dirigió en dirección a los dos chicos que seguían sentados en los sillones sin intenciones aparentes de moverse de ahí.

Mientras se hallaba caminando en dirección a la cocina, no imaginaba para nada el desastre que se estaba desarrollando dentro de la sala común, en cuanto salio atiborrada de todo tipo de alimentos ofrecidos gentilmente por los elfos domésticos de Hogwarts, emprendió el camino de regreso con cuidado de no volcar nada de lo que llevaba, el camino de retorno tardo mas de lo previsto por la imprevista aparición del poltergeist entonando un villancico bastante vulgar de navidad, intento contener lo mejor que pudo las ganas de lanzarle una maldición por la cantidad de palabrotas que estaba diciendo el duende, pero ahora tenia dos asuntos mas importantes que atender por el momento así que sin perder mas tiempo, retomo el camino de regreso.

En cuanto entro nuevamente a la sala común ante la atenta mirada de la señora gorda que había regresado de su viaje de chusmerio con su amiga, lo que descubrió dentro de los aposentos de los leones le hizo caer la cara en el ángulo mas extraño que pudiera imaginar.

Que demo…que diablos paso aquí!- grito dejando las cosas sobre uno de los sillones que estaban llenos de plumas y de una sustancia viscosa que prefería no querer averiguar por el momento de que se trataba.

En cuanto Harry y Ron notaron la presencia de la chica en la zona, dejaron caer lo que Hermione aseguraba eran sus varitas, se sentaron en donde la chica los había dejado antes de irse y se quedaron callados. Hermione entorno los ojos dispuesta a gritarles nuevamente cuando noto una pelota de color castaña muy parecida a su gato casi a los pies de ambos chicos, no le había tomado la suficiente importancia hasta que escucho salir un maullido de adentro de ella, con el corazón en un hilo mascullo lo poco que pudo por la impresión.

Croo…Crookshanks…- en cuanto el animal reconoció la voz de su ama soltó un maullido aun mas potente, Hermione corrió en dirección a su gato para encontrarlo atado de patas y con una cara de susto no propia para un animal de su categoría, era la primera vez que veía el rostro de su gato con una expresión de temor, en cuanto lo hubo desatado el minino corrió como presidente de banco en fuga en dirección opuesta a la de los dos pequeños, aun sorprendida por la situación, con semblante serio se dirigió a los dos pequeños que la miraban con cara de no haber hecho nada.

Quiero que me digan que fue lo que hicieron en cuanto me fui a buscarles la comida que me reclamaban!- la expresión de dureza en el rostro de la chica asusto a los dos jóvenes los que comenzaron a hablar rápida y atropelladamente intentando defenderse, esa situación se le hizo particularmente conocida a Hermione, cuantas veces no habían estado así cuando ella les exigía que aparecieran para terminar las tareas pero ambos se iban a jugar al campo de Quidditch…

Comadeja me dijo que qedia jugal a los magos y yo le dige que no pelo…-

mentila!- se quejo Ron- tu quedias jugal a los magos!- volvió a gritar

Hermione miraba de un lado para otro como si fuera un partido de tenis.

pato donald quedia jugal al qudich despes y…- comenzó a decir Harry mirandolo ceñudo a Ron

El me dijo que atalamos al gato y lo usadamos de buger…- volvió a defenderse el pelirrojo

que hicieron que con que! – exclamo la castaña

El gato quedia!- se defendió el ojiverde temeroso de la chica

Hermione los miro severamente a los dos nuevamente lo que provoco que ambos se sentaran nuevamente en los sillones quedándose en completo mutismo por el momento.

Mi gato…- dijo lo mas calmada que pudo-no es un juguete y no lo deben tratar así, el estaba cuidándolos a ambos…- termino de decirles intentando que con ello les remordiera un poco la conciencia

No tas enojala conmigo?- le pregunto Harry tomándole la túnica cuando ella se acerco.

Y conmigo tamben?- le siguió Ron

Hermione les iba a contestar que estaba muy enojada con ambos, pero al ver la cara de pena que tenían tuvo que reprimirse las ganas de gritarles nuevamente, no podía reprimir la ternura que le provocaban las miradas de ambos chicos, sacudió su cabeza en señal de negación y volteo a buscar las cosas para darles de comer lo que le pedían ambos, lo que no contaba era que en cuanto se dio la vuelta, ambos chicos se miraron con caras cómplices y sonrieron al ver que había logrado lo que querían…

Hermione regreso con las cosas a su lado y las coloco en la mesita que usualmente utilizaban para estudiar o terminar algún ensayo, repartió las cosa que había traído y les sirvió un vaso de leche a cada uno, si recién tenían 3 o 4 años tenían que alimentarse bien, no sea que cuando crezcan nuevamente tuvieran alguna consecuencia. Los chicos se sentaron a cada lado de ella y comieron todo lo que sus pequeños estómagos les permitía entrar, lo que resulto ser bastante al notar que las tartas y pasteles de calabaza desaparecían de los platos ubicados en la mesita, como ellos seguían comiendo la prefecta solo tomo una pequeña porción de pollo, ambos chicos seguían tragando a su paso todo lo que encontraban hasta que sintió un pequeño tironeo proveniente de su lado derecho, cuando dirigió la mirada hacia el lugar se encontró con los ojos verdes brillantes de Harry que la miraban de manera tierna.

- "Que dinda edes Hedmione"- le dijo mientras le sonreía lo mas que podía reflejar su rostro.

Fin capitulo 1

Bueno, estoy acá nuevamente con esta historia que surgió en un momento de fiebre y a las dos de la mañana jejeje y no estoy mintiendo, bueno, espero que les guste y si quieren no esta demás que dejen su opinión con críticas, más críticas y muchas más criticas jejeje. Un besote de Hibari.