Los personajes son de J. K. Rowling... el drama es mio.

Hola! Sé que el capitulo es largo pero asi es la introducción, para que se enteren cómo es la historia de nuestro Sev.

Esta historia surgió hace algunas semanas mientras estaba atorada en el fic de Volviendo a vivir… y pues este fin de semana se fue formando y no pude evitar escribirlo… espero que les guste, hay drama… yo me derretí al escribirlo y al irlo formando en mi mente los próximos capis… dejen muchos reviews para ver si funcionará. Y ya está en proceso el capítulo de Volviendo a vivir y siii chicas hay lemmon, ya me llegó la inspiración.

Dialogos entre comillas y negritas, conversación por oclumancia entre comillas negritas y subrayado, pensamientos o pequeños recuerdos solamente en cursivas

SIEMPRE TE ESTARÉ ESPERANDO SEVERUS… Y YO TRATARE SE VOLVER A TI HERMIONE…

¿POR QUÉ NO ME DI CUENTA ANTES?

HERMIONE

¿Por qué tuvo que ser así? ¿Por qué las cosas tenían que terminar de esta forma?, mis más profundos miedos están acabando conmigo Severus, quisiera rogar a Dios que esto sea solo un boggart porque sé que el hecho de perderte a ti o a cualquiera de mis amigos acabaría conmigo en un minuto, si tan sólo hubiese podido convencerte de quedarte ¿por qué tenías que ir?, cada noche te pedía que abandonas esta maldita guerra, que no era tuya y cuantas veces me gritabas diciéndome que tenía que aceptar el destino, ¿acaso también esto tengo que aceptarlo?, ¿tengo que aceptar que morirás, que me dejaras?, sabes que no lo haré, nunca te dejare, siempre te esperare detrás de cada puerta, de cada misión, estaré esperándote siempre pero tú tienes que volver Severus, siempre lo has hecho, no me falles ahora.

Lo prometiste, me prometiste que saldrías con vida de toda esta mierda, que empezarías una vida desde cero, me dijiste que era la única amiga que tenías, que confiabas en mi y que eso no iba a cambiar con nuestra victoria, que sólo yo había podido conocerte en verdad, que todo esto cambiaría al finalizar tu trabajo como espía, debes de cumplir Severus, porque si me fallas gritare a medio mundo mágico que Severus Snape no tiene palabra, ¿eso no te gustaría verdad?, dime que no te irás, que lucharas a mi lado una vez más, sólo una por favor.

No sé cómo puedo permanecer aquí de pie viéndote morir, cómo demonios me dejo convencer por ti para que finalices tu última misión, por darle a Harry los malditos recuerdos tengo que verte así, no podré aguantarlo por mucho tiempo – te digo por medio de la oclumancia, no me importa ya nada Severus, mi la misión, ni Harry, ni Voldemort, nada, sino te saco de aquí mandare todo al infierno.

- "Tienes los ojos de tu madre" – Lily, quieres irte con ella, lo sé, lo percibo en tus ojos, en tu mirada vacía, esos ojos negros que tantas veces me miraron están inexpresivos, sé que quieres irte y lo comprendo, nadie en esta vida puede comprenderte mejor que yo, pero no lo aceptare, no dejare que te vayas, tu mirada se posa en mí, esta noche de nuevo en mí – "Hermione" – tu voz suena sofocada, el veneno está dañando tus cuerdas bucales.

- "No hables Severus" – no es necesario hablar, nosotros muchas veces no lo hacíamos, utilizábamos la piedra o la oclumancia para eso, tuve al mejor para enseñármelo todo – "Aquí estoy"

"Lleva a Harry al pensadero, tiene que verlos él mismo, ¿cuántos faltan?"

"Solo Nagini y Harry" – mis amigos nos observan como al no decirnos nada no perdemos el contacto visual entre nosotros, me giro para verles, se que se está terminando el tiempo.

- "Harry llévalos al pensadero, Ron acompáñale, se está acabando el tiempo"

- "Mione ¿y tú?" – me pregunta Ron, es irónico cómo hace unos minutos estaba feliz que él me dijera que me amaba y ahora mi estabilidad, mi felicidad y todo se iba por la borda el solo hecho de pensar que el dejara de existir.

- "Yo me quedare aquí, vayan rápido, Harry tiene que verlos"

- "No me iré sin ti Mione"

- "Vete Ron ahora"

- "Pero…"

- "¡QUE SE VAYAN!" – les gritó y ellos terminan aceptando y se van.

Me acercó, me hinco frente a ti, es más de lo que puedo soportar, este dolor es raro, profundo, demasiado fuerte para que lo pudiera estar causando un humano, tomó tus manos, están tan frías, tus ojos fijos me dicen palabras que no quiero escuchar, sabes que no las aceptare, ni siquiera sé porque te tomas la molestia de repetirlas, ¿cuántas veces hemos tenido esa conversación?, no lo haré, nunca, mis manos suben a tu mejilla fría, la mitad de tu cara bañada en sangre, la herida de tu cuello es demasiado profunda, nunca te había curado de algo así pero sé que podré hacerlo.

"Debes irte, la guerra no termina, mata a Nagini sólo queda ella, Harry hará su parte"

"Ellos no me necesitan, tu sí, ayúdame a levantarte te sacaré de aquí"

"No Hermione, esto se acabó"

"Claro que no se ha acabado Severus, puedo hacerlo" – intento levantarte pero tú no quieres, te has negado, como si quisieras dejarte morir.

SEVERUS

Me destroza verla así, sabe que todo ha acabado y se niega a verlo, mi pequeña, siempre tan fuerte, tan impetuosa, terca, valiente, nunca se deja vencer por nada, pero es sentimental, frágil, llorará cuando me vaya, lo sé, y quisiera poder hacer algo para irme de este mundo con su dolor también, ella ha sufrido demasiado con esta guerra, sólo quiero que ella se salve, que sea feliz y tenga una vida que yo no pude.

En este mundo de obscuridad siempre estuvo ella al final del camino, para mostrarme que a veces valía la pena ver la vida con otros ojos, fue mi luz, mi esperanza, siempre presente con una sonrisa franca, curando mis heridas después de las reuniones, haciendo el trabajo que no podía hacer, siempre ahí, presente en todo, esperándome en el enorme sillón negro, desvelada, llorando pero siempre fiel, nunca me falló aunque yo nunca se lo pidiera nunca me abandonó.

Fui un estúpido al prometerle que viviría, pero como no hacerlo, me lo pedía entre lagrimas entre gritos y desesperación, ahora sabía que fallaría, que esta vez no podría volver a su lado como lo hacía cada día, cada noche, en esta ocasión la abandonaría, pero antes de irme quiero mostrarle que debe seguir luchando, que no se detenga, que cumpla con su misión, como hice yo con la mía, que siga con su vida y sea feliz.

"No Hermione, esto se acabó"

"Claro que no se ha acabado Severus, puedo hacerlo" – de nuevo intentando enseñártelo pequeña, aprendiste duelo, pociones, magia blanca, oscura, maldiciones, hechizos, te entrene para que fueras la mejor y nunca aprendiste esta lección.

Flash Back

Ella se encontraba terminando unas pociones, lo hacía espectacular para su edad y preparación, aprendía rápidamente todo lo que le enseñaba, la hechicera no había descansado bien en días, le insistía que no era necesario que me esperara cada noche que tenía reunión con el Señor Tenebroso pero siempre estaba esperándome, al principio me molestaba, llegue a correrla en muchas ocasiones, otras me reconfortaba, después de sesiones de tortura hacía mí y otras más inocentes, la calidez de su voz me tranquilizaba. Pero bien sabía que a pesar de ser una Gryffindor era muy inocente, extremadamente sensible para mi gusto, lloró demasiado con la muerte del sarnoso de Sirius, con el accidente de Weasley, con todo lo concerniente a Harry, y lo más sorprendente fue verla llorar varias veces cuando yo llegaba hecho trizas, una vez su loca mente le permitió decirme que abandonara la misión, que no fuera más con el Señor Oscuro, que viviera, que no soportaría verse a sí misma esperando en esa habitación días que se transformaran en semanas o meses. Tenía que enseñarle la lección más difícil que no muchos aceptaban con facilidad.

- "Estas muy cansada, deberías dormir más, yo haré lo que falta mañana y no te pondré deberes en toda la semana, reponte"

- "No, estoy bien, ¿necesitas algo más hoy?, y mañana vendré a la misma hora a hacer lo que falte, así que no empieces, ¿falta algo?"

- "Si, hay algo muy importante que debes aprender hoy, tan importante como todo lo que te he enseñado, pociones, antídotos, defensa, oclumancia, sino aprendes esta lección… todo se puede ir por la borda".

- "Muy bien Severus que libro traigo, que tipo de magia es" – se levantó hacía el librero.

- "Esto no se aprende con libros, sino con palabras, demos un paseo" – le sorprendió lo que le pedí y aceptó gustosa. Salimos de las mazmorras y caminábamos por los jardines, no hacía mucho frío a pesar de que pasaba de las once de la noche, debido al calor solo estaba presente una brisa. No hablaba, no sabía cómo se lo tomaría. – "Quiero que me escuches con mucha atención, sabes que la guerra se acerca, en ella se va a perder y ganar lo sabes" – ella asintió solamente. – "Debes tener en cuenta que quizá una vez te toque perder".

- "Pero para eso me estas preparando, para que eso no suceda, te juro que seré cuidadosa, precavida, no cometeré errores".

- "Confío en ti Hermione, sé que no fallaras, yo me refiero a otras perdidas… si pierdes a alguien quiero asegurarme que no dejaras la guerra, eres un punto clave, si llegara a pasar quiero que sigas, no te detengas".

- "Para Severus, calla…"

- "No, escúchame, la única perdida que debe importarte es la de Harry, sólo esa, se que amas al alcornoque de Weasley a pesar de que él está lo suficientemente ciego para no saberlo, pero si le llegara a pasar algo a él, no quiero ver que te derrumbes, sigue, sólo sigue lo entiendes verdad, veas caer a quien veas caer"

- "No, no lo entiendo, pides que siga si uno de mis amigos muere, si Ginny, Ron, Luna, mis padres, tu Severus, quieres que siga con esta porquería si llegara a pasarte algo" – ya no me sorprendía que le importara tanto, ella era la única que le importaba a esta inmundicia de mortifago.

- "Sabes que quizá esto no acabe bien, puede que un día ya no le sea útil al Señor Tenebroso y pued…" – me interrumpió llena de lagrimas.

- "Cállate, no me entiendes, no, si piensas que voy a aceptar eso, algo no está funcionando, tu eres el que más tiene derecho a salir libre de esta guerra, a empezar de nuevo".

- "¿Y para qué Hermione, para que voy a empezar de nuevo, para regresar a una aula a dar clases de aquí a que me muera, a corregir ensayos, preparar pociones hasta el final de los tiempos, a impregnarme más de pócimas repugnantes, ¿qué es lo que tengo, para querer empezar?"

- "Te voy a decir dos cosas SNAPE, tal vez para ti soy una estudiante más, quizá ya volví a ser la insufrible sabelotodo, a la que tienes por obligación que enseñar y soportar pero estoy fiel a ti, soy tu… amiga, búrlate si quieres de mis sentimentalismos absurdos y ridículos, no es mucho pero te espero cada día, cada noche que ese miserable te llama te espero, cuando no llegas en toda la noche, me invade un miedo que acaba con mi cuerpo, pero siempre será así, siempre te esperare, siempre, y al final de toda esta guerra cuando le derrotemos estaré ahí esperándote, te guste o no, lo valores o no, te importe o no y la segunda cosa que te voy a dejar bien en claro, si me trajiste aquí para que yo aprenda a darle la espalda a quien muere y más si es alguien que quiero, pierdes el tiempo, no lo aprenderé, nunca" – estaba tan exaltada que no quise interrumpirla, me amenazaba con el dedo como si fuera una varita con una maldición imperdonable –"Escuchaste bien, nunca" – salieron las lagrimas que lucho por tenerlas dentro y se regreso al castillo, dejándome ahí en el jardín y confirme lo que supe desde el principio, esta no sería una lección fácil que ella debía aprender.

- "¿Puedo pasar profesor Snape?" – sabía que vendría, nunca dura enojada tanto tiempo, a penas era al día siguiente…

- "Pasa Hermione" – se acercó hasta quedar muy cerca de donde estaba sentado -"Y ¿desde cuándo volví a ser el profesor Snape?, ¿sigues enojada?"

- "Pensé que estabas con alguien" – aún no sabía que hacía ahí, le había dicho que no fuera.

- "No hay nada que hacer hoy, te mandé una lechuza"

- "Lo sé, vengo a pedirte disculpas por haberte hablado así anoche y dejarte ahí"

- "No pasa nada" – me levante para poder verle a los ojos – "Debes entender que quiero prepararte para cualquier circunstancia y esa es una posibilidad" – me detuve, no quise seguir el tema, sus ojos comenzaron a humedecerse de nuevo, odiaba ver a la gente llorar, pero ella era distinta, siempre… "Ven acá" – le extendí los brazos y se refugió en ellos llorando silenciosamente.

- "Tengo miedo Severus, mucho miedo"

- "Lo sé pequeña, no te pasará nada te lo prometo"

- "No es por mí, es por ti" – era una mujer valiente, fuerte, inteligente, astuta pero a la vez delicada, limpia, franca, sensible, una mujer que no debió de estar en esta guerra como blanco número dos, no debí permitir que participara, si moría también ella, en esta ocasión no lo soportaría. Seguía llorando, la abrazada pero no dejaba de llorar. Quería prometerle que nada me pasaría si eso la tranquilizaba pero no quería mentirle.

- "Calma, estoy aquí, siempre lo estaré"

Fin del Flash Back

¿Cómo decirle que ya no estaré ahí? ¿Cómo hacer que ella aceptara que no volvería a abrazarla, a limpiar sus lagrimas y llenarla de seguridad?, mostrarme duro con ella no era una táctica que sirviera, nunca funcionaba, pero mi ser egoísta no me dejaba en paz, en estos últimos minutos me alegraba verla, que lo último que me llevara fueran sus ojos castaños y me encantaría una sonrisa, algo que esa noche no sucedería.

HERMIONE

"Debes entender que a veces se pierde"

"No perderemos" – no estoy preparada para perderte, no quiero escucharte, tengo que ser fuerte por los dos, pero mis lágrimas lo son aún más y están empezando a salir de mí.

"Escúchame, no olvides tu misión para que fuiste entrenada, además…" – te interrumpo.

"No, cállate, no te dejare lo sabes, si mueres dejare de luchar"

"Mi pequeña" – me acaricias con esfuerzo mi rostro, cierro los ojos, quisiera recordar la última vez que hiciste eso sin tener encima una preocupación de la guerra, quizás una alguna de nuestras vacaciones a la cabaña – "Necesito que seas fuerte, lo serás, saldrás delante de esta, eres la mujer más aguerrida que conozco, quiero que me prometas que no me lloraras, odio verte llorar…"

"No te estés despidiendo de mi ¿vale? porque no yo no lo haré" – creo que empezare a hiperventilar, mis lágrimas salen cada vez más, no son silenciosas, mi respiración se vuelve agitada.

"Eres la mejor bruja que conozco, me superaste, quiero que triunfes, que conozcan tu nombre por todo el mundo mágico, cásate, Weasley es un idiota, muy poca cosa para ti, pero si lo amas cásate con él, ten hijos y se feliz"

"No, para por favor"

"Quiero verte feliz, promételo, hazlo por mí"

"No, te sacare de aquí y en unas semanas nos estaremos riendo de esto y vas a estar bien y…"

"Prométemelo" – había acabado todo, lo sabía, estaba despidiéndose de mí, lo había perdido…

"Te lo prometo, seré feliz"

"Gracias por todo lo que hiciste por mí en estos años, por esperarme cada día, cada noche, aunque a veces tardara en volver gracias, en toda esta oscuridad fuiste una luz en mi camino, una esperanza en esta guerra, fuiste la pureza en mi vida" – cerré los ojos, este dolor estaba acabando conmigo, me había perforado medio pecho y dolía el tiempo, la distancia entre él y yo, el futuro, el no volver a verlo, a no tenerle cerca, si el moría se llevaría una parte de mi que no creía tener.

"Quédate conmigo Sev" – era una súplica, una que en esta ocasión no iba a poder concederme.

"Te quiero pequeña" – su mano calló inerte en el piso sucio, y con ella la mitad de mi vida.

- "¿Sev?... Sev no me dejes" – un llanto descontrolado salió de mi, lloré en tu pecho cómo nunca en la vida lo había hecho – "Sev, por favor no me dejes, por favor, llévame contigo" – mi cara estaba empapada, podía oler tu esencia, una que no volvería a tener cerca de mí, nunca volverías a cubrirme con tu capa ni a protegerme en tus brazos, ni hacerme reír cuando tenía miedo, ya no estarías conmigo: ese hecho me produjo un llanto aun más fuerte, ¿cómo era posible que pudiera sentir tanto dolor?, era cómo si ese dolor me consumiera, cómo si se alimentara con el transcurrir del tiempo, y se hiciera más grande, más lento al pasar por cada fibra de mi cuerpo, me iba desgarrando por dentro, quitándome capa por capa, ardía, dolía, quemaba… quizás ahí me di cuenta… o quizás no. Me levante y contemple su rostro, uno que no volvería a ver nunca, sus ojos cerrados unos que me analizaban, me sonreían o me reñían, lo supe ahí, creo que sí, me acerque y le di un beso en sus labios, el primero, el único y me quedé ahí por unos segundos, me separe con aún más dolor del que podía soportar. – "Te amo Sev ¿por qué no me di cuenta antes?"

Como es natural el dolor es seguido por el miedo, la ira, la furia y muchas veces por el odio, todos los sentimientos se volcaban sobre mí como una ola enorme a una playa débil, me levante con todo el coraje que había en mi, cerré mis puños con fuerza y los arroje contra un cristal que había ahí, podía sentir en mis manos correr la sangre y aún así persistía el dolor en mi alma, voltee a verlo por última vez – "Limpiare tu nombre, todos besaran tu lapida, cada brujo, cada hechicera, lo hará, te lo juro" – y salí de ahí corriendo.

El viento era fuerte, demasiado, pero no lo sentía del todo, me quite la sudadera y corrí… sabía que podía correr aún más rápido, con algo de suerte el viento podía llevarse lentamente mi dolor, no quiero recordar, no ahora… por favor no…

Flash Back

- "Vamos Granger despierte que empezamos el entrenamiento"

- "Profesor son las 6:30 de la mañana, porque tenemos que entrenar a esta hora" – iba con ropa muggle por orden de él, pelo recogido y una parte de mi se había quedado en la cama.

- "Porque correremos y haremos ejercicio hasta las 9 de la mañana"

- "¿Correr?, y ¿para qué?"

- "En la guerra tendrá que hacerlo, huir, correr, subir y bajar, así que la quiero ver en excelente condición física, vamos Granger no puede ser tan malo, o ¿acaso no puede hacer una práctica como esta?, la siente demasiado muggle tal vez" – sabía cómo lograr que lo hiciera.

- "Lo veré allá profesor" – y empecé a correr, mi tonta cabecita creía que podía dejarlo atrás y en segundos me había arrebasado, debí de poner cara de sorpresa.

- "Dudaba que pudiera hacerlo ¿cierto señorita Granger?" – él ya no era el mismo, me trataba con más confianza, seguía llamándome Granger pero el trato dejo de ser osco, inclusive ya no era tan frío como al principio, claro, todo tuvo que ver el hecho de que estuvo de acuerdo con Dumbledore de enseñarme todo para ayudar a Harry en su misión, nadie le obligo, Snape quería que yo fuera una pieza clave cómo el mismo, sin que nadie lo supiera claro.

- "Yo… un poco" – seguimos corriendo cerca de una hora.

Nos dirigíamos casi siempre al bosque prohibido, en ocasiones el camino era empinado, él no me dejaba descansar en algo así, alegaba que los mortifagos no me iban a permitir recuperar el aliento, bajábamos al igual corriendo, en una ocasión pise una corteza de árbol que me hizo perder el equilibrio sin llegar a caerme pero me fui deslizando cada vez más rápido, al principio se espantó de que hubiera caído pero en cuanto me vio llena de lodo la ropa blanca que llegaba se comenzó a reír, una de las primeras y pocas veces que lo hacía, ahí ya no veía a Snape el torturador de mentes juveniles sino a uno que solamente yo conocía.

Fin del Flash Back

He llegado corriendo al bosque prohibido, ¿qué quiero hacer?, no lo sé, quiero dejar de sentir dolor, me está comiendo por dentro y no puedo pararlo, es como un veneno que se extiende, te petrifica, te consume, y va en aumento, no se detiene, disminuye para doler más, quiero matarle, matar al hombre que acabo con él, se que está en el bosque prohibido, si tan solo pudiera encontrarle corro aún más rápido pero encuentro el árbol, quizá sea mi alivio, mi paz, aunque en este momento no la merezca, yo le deje morir.

Flash Back

Estaba en quinto año, hacía un calor de muerte, y era fin de semana y estábamos adentrados en el bosque prohibido y sólo caminábamos, pensábamos irnos ya al castillo.

- "¿No nos estamos adentrando demasiado al bosque Severus?" – después de haberlo cuidado por casi un mes inconsciente al despertar y verme ahí me dijo que lo llamara por su nombre, creo que fue ese momento donde nos volvimos uno parte del otro.

- "Estas conmigo, nada te pasara, ¿sabes hay lugares del bosque que son… diferentes?… nada tenebrosos, ¿quieres conocer uno?"

- "Claro" – ya no había ningún sendero, subimos una loma y ahí estaba un árbol viejo, grande, lo comenzó a tocar y susurró en la corteza: "Quiet temporis simul" y el tronco se abrió permitiéndonos entrar y se cerró al instante.

Era un bosque anexo, había arboles muy altos, en distintas tonalidades de verde, la frescura se notaba al entrar en aquel lugar, camine con mucha curiosidad y vi una cascada no grande pero tampoco pequeña, terminando todo en un río que seguía y seguía sin final. Había lugares de sol y sombra, se escuchaban distintas aves cantar, como un murmullo y como un canto coordinado.

- "¿Qué es?"

- "El bosque tiene algunos lugares anexos, este es el bosque de la tranquilidad, no obtienes nada mágico aquí, es la naturaleza pura en su máxima expresión, si un día te sientes con necesidad de paz, este es el lugar adecuado, ya sabes la contraseña, hay un bosque más allá se llama el bosque de la ilusión y tiene un efecto parecido al espejo Oesed"

- "¿Dónde está?"

- "No te lo diría, ni la contraseña, es una droga, te consume hasta que te vuelves parte de él, nunca te dejes guiar por el dolor Hermione" – estuvimos ahí por una hora, a veces solo observando, otras conversando de todo menos de la guerra que se avecinaba – "Vámonos sino no alcanzaras a tus amigos para irse a Hogsmeade"

- "¿Tú qué harás Severus cuando lleguemos?"

- "Descansar nada más"

- "Y ¿si descansamos aquí?"

- "¿Vas a sacrificar tu fin de semana por estar aquí?"

- "Contigo" – su mirada se posaba en la mía, tratando de descifrar mi comentario.

- "Todo tiene un precio, lo sabes" – sonreía, ya lo hacía más a menudo, sólo yo lo conocía en verdad.

- "¿Cuál?" – se paro rápidamente, me tomo de las pantorrillas y poniéndome sobre su espalda y corrió hasta el río. – "Severus estará helada, ¡no!" – demasiado tarde, nos habíamos aventado a la clara agua del río.

- "No lo está" – el agua estaba cálida…

- "Puedo sentir la tranquilidad" – le dije.

- "Si, es una paz inmensa"

- "El bosque te la da sin miramientos, sin peros ni tapujos ¿verdad?" – sonrío y espero para responderme.

- "Me la das tu Hermione" – ese era mi Severus abierto y franco, serio e inteligente, valiente y entregado.

Fin del Flash Back

Me quede frente al árbol, lo toque, era el mismo, no tenía opción Sevrus se había negado a darme la información del bosque de la ilusión, si tan solo pudiera entrar en él, lo habría visto una vez más, pero el bosque de la tranquilidad era mi única opción.

- "Quiet temporis simul"– entre y todo era tranquilidad, la frescura de la noche me invadía mis sentidos, pero sentía los latigazos dentro de mi ser, nada cambiaba ahí estaba el dolor, no se iba, nunca se iría, formaría parte de mi, como las cicatrices de él en su pecho…

Te pedí que no fueras Severus, te suplique que te quedarás, que vivieras, no lo hiciste, esta guerra no era tuya, la maldita culpa no te dejo en paz estos veinte años, y mírate, ¿por qué me dejaste?, prometiste volver una vez más y ya no lo harás… nunca

Flash Back

Me había separado de Ron, le dije que tenía que hacer algo importante, habíamos terminado con el horrocrux en la cámara de los secretos, baje corriendo a las mazmorras pero no estabas, tuve miedo pero me arriesgue una vez más, tome la piedra del Slytherin con el corazón de Gryffindor lo puse cerca de mi boca y suspire en él y pensé: Vuelve a mí, en un minuto estabas a mi lado, corrí y te abrace, duramos un rato así.

- "Es riesgoso Hermione, si te ven conmigo todo se puede perder, si él me ve contigo te matara"

- "Tenía que verte una vez más, tuve miedo, no eres un cobarde Sev, eres el hombre más valiente y maravilloso, el mejor"

- "No te preocupes, así tenía que ser, debían creer que soy un asesino, lo único que importa es que tu sepas quien soy, solo eso"

- "Esto se acabó Sev, todos sabrán quien eres, lucha conmigo, con nosotros"

- "Aún hay una misión que cumplir Hermione, no puede dudar de mi lealtad, al menos no ahora"

- "Pero…" – te tomas el brazo, te está llamando. – "No vayas"

- "Es solo una vez más, cuídate, cuídate mucho, si no logro darle los recuerdos a Harry tú tienes que decírselo"

- "¡NO! Lo harás tú, pero Sev no vayas por favor" – te abrazo y correspondes aferrándote a mí, me das un beso en la frente.

- "Te quiero" – te separas y te alejas.

- "¡NO!, no vayas por favor" – te suplicaba llorando, te gritaba que te quedaras y sólo me veías – "Quédate Sev conmigo por favor"

- "No puedo"

- "Prométemelo, júrame que volverás conmigo una vez más, que no morirás, ¡PROMETEMELO SEV!"

- "Te lo prometo… volveré"

Fin del Flash Back

Nuevos sentimientos se apoderaron de mi, odio, ira, odiaba tanto pero tanto, que creía que mi corazón se saldría al percibir tanta repugnancia dentro de mí, el río donde veníamos a nadar los fines de semana, a alejarnos de la guerra, de las heridas, de las enseñanzas…

Flash Back

Estábamos acostados para que el sol nos secara…

- "Te quiero Severus" – frunció el ceño y no volvería a hacerlo nunca…

- "No lo diré"

- "Oh… vamos… una vez más" – le sonreí para convencerlo, tanto pero tanto hasta que empezó a mover la boca en señal que se avecinaba una sonrisa.

- "Que no, no lo diré"

- "Severus"

- "Está bien… te quiero Hermione" – lo había logrado, otra vez me había dicho que me quiere, casi nunca lo decía pero cuando lo hacía en verdad me hacia feliz.

Fin del Flash Back

Me levanto furiosa de la tierra húmeda, mis ojos están igual, tomo piedras y comienzo a arrojarlas con toda la rabia que tenía…

- "¡ME DEJASTE! ¡PROMETISTE QUEDARTE!" – me hinco en el piso y comienzo a golpearlo con los puños cerrados – "No volverás… a decirme que me quieres, no volveremos a la cabaña, te has ido, me has dejado, ya no volverás a mi" – trato de limpiar mis ojos pero no puedo. ¿Por qué no me di cuenta antes? ¿Por qué acepto esto ahora que es tarde? Era complicado tratar de entender mis sentimientos sentía dolor ante su partida, era cuando me dejaba caer pero luego venía la rabia ante la vida ante la injusticia, venía la ira y el odio hacia Voldemort hacia los mortifagos hacia todos. Me levantó y comienzo a caminar desesperada, una salida,

¿Qué no se supone que esta mierda de bosque da paz?

No, la paz te la daba él, su presencia, sus ojos negros, sus te quiero que salían unas veces por accidente y otras por necesidad.

¿Quién me la dará ahora?

Nadie él se ha ido.

No, cállate, el no se ha ido.

Se fue, no volverá, debes dejarle ir.

No, cállate.

No puedo soy tu misma.

Me arrojo al árbol y lo golpeo con mis brazos, con mis puños, me detengo de golpe mis brazos sangran y siento como si se hubieran encajado en ellos púas filosas; el aire ondea todo el bosque, nunca lo había hecho, el viento me saca del bosque y me siento tirada en el piso frente al árbol que nunca me abrirá las puertas a su tranquilidad… ¿Qué hago?

"Nunca te detengas" – fueron sus últimas palabras.

- "No lo haré Sev…" – me levanta el odio – "Nagini" – tengo que matarla yo, solo yo…

Salgo del bosque y me encuentro con el silencio, Harry debe de haber ido con Voldemort, si todo sale como se planeó desde el inicio sólo quedara Nagini, tengo que matarla cuanto antes, veo a todos reunidos, puedo descifrar algunos pensamientos: buscan a Harry, veo a Ron y me acercó a él.

- "¡Por Merlín Mione! ¿Dónde estabas?" – me abraza tan fuerte que llega a sacarme el poco aire que guarda mi cuerpo.

- "¿Dónde está Harry?" – le pregunto inexpresivamente.

- "Se entregó, Mione… el dijo que… era uno de ellos, un horrocrux, ¿cómo?"

- "¿Hace cuánto se fue?"

- "Una hora, Mione ¿qué te pasa?, no reaccionas, si me escuchaste, Harry es un horrocrux, debe morir"

- "Si, lo sé" – hace tiempo que Severus y yo nos preparamos para aceptar eso.

- "¿Qué tienes?" – se acercó a mí y me abrazo, ese cariño no calmaba mi dolor, mi sufrimiento estaba latente, el fuego de la ira se había apagado, pero sólo era cuestión de una chispa para encenderse de nuevo y que en esta ocasión mi furia consumiera al castillo entero.

- "Nada Ron"

- "¿Cómo que nada? Mirate, tienes los ojos rojos, la cara roja e hinchada, has estado llorando Mione, ¿por qué?" – porque él se ha ido, porque no pude salvarlo, porque no volveré a verlo – "¿Qué demonios te paso en los brazos?, están sangrando, ven te los curare".

- "No, déjalos así, yo… resbale y caí de bajada"

Aparecieron… todos… cada uno de los mortifagos estaban ahí, la chispa se estaba encendiendo dentro de mi… "Harry Potter a muerto, lo mataron cuando trataba de huir", estaba hecho sólo faltaba Nagini, estaba a su lado como perro faldero, no tenía ningún plan, y el príncipe mestizo no estaba ahí para darme uno, Ginny lloraba, gritaba, pero no como yo, ¿acaso amaba a Severus de una forma más intima, más profunda y extraña?, Neville gritaba que la guerra no había acabado, no sé en qué punto Hagrid soltó a Harry pero mi amigo corrió como nunca, efectivamente la guerra no había acabado, faltaba Voldemort que era de Harry y la serpiente era mía.

La chispa se convirtió en fuego pero el fuego consumió mi cuerpo, llamas salían de mis manos transformadas en magia, llamas salían de mis ojos pero no en forma de lágrimas sino de ira pura, sino en deseos de matar. Corrí tal como Severus me lo indicó, no perdía de vista a la serpiente, se había separado de su señor y ahí estaba, en los patios llenos de escombro.

- "¿Hermione, qué haces?, vuelve" – Ron corría hacia mí pero yo era más rápida, él me alcanzaría, pero yo era más inteligente, más astuta.

- "Vete Ron"

- "La mataremos Mione, espérame, lo haremos juntos" – estaba tan cerca de mí.

- "¡NO! Verberare, ella es mía" – el efecto del hechizo era crear una barrera de fuego que no se le permitirá acercarse a mí, creador: Severus Snape.

Ella estaba al frente mío, se acercaba sigilosamente, buscaba matarme, no tenía miedo, intentaría matarla, sacaría mi furia, mi odio, en ella.

- "Magicae Inmobilizer" – le arroje el hechizo, no podría aparecerse, ni siquiera si Voldemort la tocara, no podía hacerlo, ni ser convocada, quería atacarme lo sabía, me mostraba sus filosos colmillos - "Anulus Limiter" – un aro grisáceo la rodeo, tenía que pensar que haría con ella, el anillo no la detendría por mucho tiempo.

Flash Back

Estábamos en la casa de los gritos, escuchando la conversación que tenía Severus con Voldemort, lo iba a matar, yo tenía que detenerlo aunque muriera en el intento.

"Quedate donde estas"

"Te matara Severus"

"¡OBEDECE!"

"No"

"No olvides el objetivo principal Hermione, veas caer a quien veas caer" – nuestra conversación era oclumantica – "Protege a Harry, no te muevas, no puede morir aún"

"Severus"

- "Nagini ataca" – dijo él.

"No" – escucho su cuerpo chocar tres veces al ataque de la serpiente, y le veo de nuevo tirado en el piso de madera sucia, sus ojos negros, unos que ahora están cerrados.

Fin del Flash Back

Era todo lo que necesitaba, que los deseos de matar se apoderaran de mi, de cada sentimiento de mi alma, dejarme guiar por la magia y acabar con todo sin importarme nada, ni el presente ni el futuro.

- "Inmortalis Ignis" – grité y de mi varita sale una chispa roja y se posa en el cuerpo de la enorme serpiente, entra en su cuerpo y ésta se retuerce y sisea de una forma constante como si se lamentara, se el efecto del hechizo, tortura como si se estuviera quemando, pero no es así, su cuerpo se vuelve rojo pero jamás se quema, solo es el dolor, un dolor que no acaba porque se vuelve inmortal, no para hasta que el atacante finaliza la maldición. Respiro agitadamente, ella se merece lo mejor, la miro con odio y asco, disfruto de ello. Me siento frente a ella, observándola…

Veo a Ron se encuentra sin palabras detrás de la línea de fuego, él sabe que lo que estoy haciendo es magia obscura, no me importa si todo el mundo se entera que yo sé hacer igual magia negra que cualquier mortifago presente; Harry está peleando a muerte con Voldemort, el mago ve a su serpiente y quiere matarme pero sabe que si rompe la conexión Harry no dudará en matarle, sonrió con ironía como lo haría el mismísimo Severus.

Flash Back

- "¿Qué pasara cuando acabemos con los horrocrux Severus?"

- "No lo sé"

- "Lo primero que quiero hacer es ir a la cabaña"

- "¿Para qué?" – su mirada esta fija en la nada, ni siquiera ha volteado a verme.

- "Pues creí que quizás unas vacaciones estarían bien, ¿dejaremos de ser amigos y frecuentarnos y estar así?" – consigo que me mire fijamente.

- "Nunca Hermione, estaré cerca de ti tanto como tú me lo permitas, iremos a la cabaña" – le sonrío satisfecha.

- "Siempre te querré a mi lado Severus"

- "Entonces estaré siempre a tu lado pequeña"

Fin del Flash Back

Ya no estarás Severus, ya no iremos a la cabaña, ni a nadar al río, ni a cocinar juntos, ni a escuchar tus quejas de los aparatos muggles que insistí en comprar, ni que maldecías a la televisión pero te encantaba ver películas conmigo, no volverás a reírte cada vez que la carne no me quedaba en el punto que a ti te gustaba y decías que no importaba… no volverás a mi… nunca más…

Me levantó y comienzo a sacar los colmillos de basilisco y los coloco alrededor del aro, alrededor de la serpiente, dispuestos a atacar: - "Oppugno" - los colmillos salen disparados y se entierran en la fría y masacrada piel del animal, la destroza y caigo satisfecha. El canal entre la varita de Harry y Voldemort se ha roto, sólo queda él, en un segundo retoman el duelo y por fin el hombre que acabó con la vida de Severus cae inerte hacía atrás, acabando con todo.

Me deje caer derrotada, deshecha. Terminó Sev, esta mierda se terminó, y no estás aquí para verlo, ni para irnos de vacaciones, ¿recuerdas que lo habíamos prometido?, no estás Sev, tú que luchaste como nunca no estás. Estoy dispuesta a entregarme de nuevo al dolor, avanza lentamente por mi cuerpo, se extiende por mi alma, mi corazón, mi pecho, mi cara, mis ojos, las lagrimas comienzan a caer una vez más, tantas, inmensas pero silenciosas.

Alzo la vista y veo a tantos mortifagos, mis deseos de odio no han sido saciados, les odio a todos a cada uno de ellos…

Flash Back

Llevaba una semana esperándolo y no llegaba, Dumbledore me decía que el estaba bien que sólo debí estar en una misión y por eso se había demorado, de pronto salió su cuerpo disparado por la chimenea, pero no se levantó estaba ahí acostado todo mojado y casi inconsciente.

- "Oh Dios, Sev, ¿qué te han hecho?" – lo acosté en la cama – "¿Qué hago?"

- "Limpia las heridas para que no se infecten y aplica antídoto para escarabajo egipcio"

- "¿Quién te hizo esto?, nunca habías regresado así"

- "Aún no confían mucho en mí, el señor tenebroso les dejo a todos… divertirse conmigo un poco…" – le costaba trabajo respirar y más hablar, le fui quitando la capa y su camisa blanca que estaba sucia y roja por la sangre, su pecho estaba rojo e hinchado, fui limpiándolo y aplicando pociones, al final le puse el antídoto y le di a tomar un poco, deje que el se limpiase y se vistiera por magia y regrese, no había podido hacer los hechizos bien, tome un tazón hondo con agua tibia y sumergí una toalla pequeña y empecé a limpiar su cuello y su cara, él me veía fijamente mis expresiones, mis ojos, mis manos pero no me intimidaba, volví a mirarlo y le sonreí, el sólo me miraba fijamente…

Fin del Flash Back

Quiero quedarme con esa mirada, con su calidez, con esos ojos me decía todo, que agradecía que estuviera ahí como siempre, que confiara en él como nadie lo hacía. Ellos lo torturaron más de una vez, llegaba sangrando, con huesos rotos, casi moribundo, unas veces delirando sus más oscuros temores, sólo ellos…

- "Inmortalis Ignis" – uno de ellos no esperaba el ataque y se retorcía de dolor, lo miraba con tanto odio, y sus gritos no calmaban mi dolor, tenía necesidad de más.

Quiero que cuando acabe la guerra seas libre, que no vivas con el temor de nada, te lo mereces – me dijo un día.

Al igual que tu Severus, ellos me creen una presa fácil, saben que pueden matarme con una rapidez, quizá eso le cause dolor a Harry es lo que piensan, me acerco lentamente, quiero leer cada pensamiento, cada sensación

- "Niger Anulus Ignis" – alcanzo a rodear a muy pocos mortifagos, son quizá quince, el aro negro de fuego los detiene, saben que si se acercan el liquido espero entrara por sus sistema respiratorio y les matara lentamente, pero no es la muerte que quiero para ellos.

Flash Back

- "Me gusto mucho la cabaña, ¿qué haremos ahí? ¿Magia oscura?"

- "No, solo descansaremos y quizá lecciones que requieren más concentración"

- "¿Era de tu madre?"

- "No, la acabo de comprar."

- "Es hermosa"

- "Es tuya"

- "¿Mía?"

- "Sí, quiero que tengas un lugar seguro al cual llegar si algo sale mal."

- "No puedo aceptarlo es…"

- "Claro que puedes"

- "Pero…"

- "Pero nada, eres la única persona a la que puedo darle algo, por favor no lo rechaces."

- "Está bien, pero compraremos un televisor" – hizo su cara de desagrado y de haber perdido la batalla. Un televisor que le encantó aunque no negó mil veces.

Fin del Flash Back

- "Acidqua totalum" – un ácido entraba de la nada y les quemaba vivos, cada órgano iba siendo deshecho por la maldición hasta que no quedaba nada de ellos, ni siquiera polvo.

- "Hermione ¿qué estás haciendo?" – Harry trataba de acercarse, ya todo había terminado y yo luchaba como si Voldemort siguiera vivo.

- "Aléjate Harry"

Flash Back

- "Ahora las maldiciones imperdonables" – abrí los ojos como platos, lo que me faltaba, el espíritu de Ojoloco y Barty Jr. en el cuerpo y mente de Severus, no era una combinación realmente muy buena que digamos, era juntar a una quimera y una banshee.

- "No las voy a practicar"

- "Claro que no Hermione, solo te enseñare la teoría"

- "Severus nunca las haría, ni siquiera contra los mortifagos"

- "Ellos no dudaran en atacarte con una de ellas, lo sabes"

- "No lo haría"

- "Cállate y escucha, la maldición imperius no confíes mucho en ellas, muchos ya estamos acostumbrados a ella y no hay efecto, puedes realizarla pero no más de tres veces en la persona, si hay un plan en puerta no olvides disfrazarte o la poción multijugos, y las otras dos: crucio y la asesina te las resumiré en una sola teoría: no salen bien sino la deseas, el mismo Harry te lo dijo, no es fácil de hacer y no resulta del todo hecho"

- "¿Cuándo resulta bien?"

- "Cuando hay algo de por medio, en el caso de los mortifagos la satisfacción al dolor y a la muerte, en otros la ira, la furia, el coraje y el odio"

- "¿El dolor puede hacer que salga bien la maldición?"

- "Sin lugar a dudas... Pero nunca te dejes guiar por el dolor o la ira, porque te consumirá"

- "Muy bien, lección aprendida."

- "No las hagas sino es necesario, no quiero ver tu alma trozada por algo así, si Harry está en riesgo hazlo, si tu vida está en peligro, hazlo, pero si es alguna otra razón ni siquiera las menciones, y es una orden."

- "Sabes que el porte de malo no te queda conmigo."

- "Bueno pues habrá que infundirte temor, quiero para el fin de semana todos los antídotos" – se rompió mi sonrisa en dos partes.

Fin del Flash Back

- "Hermione la guerra terminó, ellos serán juzgados" – me gritaba mientras se acercaba caminando.

"NO VOLVERÁS A LA CASA DE BILL TE VAS CONMIGO, LO DE LA CASA DE LOS MALFOY TE PUDO MATAR, NO TE PERDERÉ A TI TAMBIÉN" – me gritaba cuando se enteró de la tortura de Bellatrix… y en cambio te perdí yo a ti.

Sentí una energía que nacía en mi pecho y fluía por todo mi cuerpo, más mortifagos se acercaban…

- "Sectusempra" – nunca había hecho el hechizo, el mortifago cayó herido del pecho como si una daga lo hubiera atravesado, voltee a ver al otro, estaba lista – "Crucio" – callo el hombre alto de barba y se agarraba la cabeza como si estallara.

- "Mione… basta" – era Ron, ambos venían hacia mí.

- "Váyanse" – no saben lo que siento, lo he perdido, se ha ido, y no se lo dije, ¿Por qué no me di cuenta antes? Arroje otros cinco crucios.

"Te quiero pequeña" – fueron sus últimas palabras, me tapaba los oídos a llanto abierto como si con eso los recuerdos fueran a parar, yo te amaba Sev…

- "Avada Kedavra" – el hombre cayó ante la luz verde salida de mi varita.

"Eres lo único que tengo para serte sincero" – me decía un día cuando estábamos en el bosque de la tranquilidad.

Suelto un grito desgarrador que ha querido salir de mi desde que su mano calló en la casa de los gritos – "Avada Kedavra" – otro más, y el dolor no se va, pesa en mi cuerpo, desgarra mi alma, se acaba mi vida con ello. – "Severuuuuuuuuuuuus" – no me importa lo que los supervivientes piensen, grito su nombre con dolor, con mucho dolor, les matare a todos lo sé… no me importa lo que pase después. Harry corre hacia mí y me abraza de la espalda agarrando mis brazos por detrás para impedir que lance maldiciones, mi esfuerzo por zafarme hace que caiga de rodillas pero él no me suelta.

- "Hermione debes parar, detente"

- "Déjame"

- "Detente, a él no le gustaría verte así"

- "Duele Harry, duele mucho" – suelto la varita y me recargo en su hombro a llorar desconsoladamente, sin tapujos, sin que nada me importe.

¿Por qué no me di cuenta de lo mucho que te amaba Sev?

Debo admitir que llore como nunca con este capítulo… pero surgió en una noche y aquí está la primera parte.