Pov normal:

Hoy era el dia en el que el azabache había prometido declararse a la niña que lo tenía hipnotizado desde hace ya bastante tiempo, aquélla con el nombre de Mikan Sakura, desde hace ya bastante tiempo que tenía sus ojos puestos en ella y nada más que en ella. Su sonrisa, su amablidad, sus magníficos gestos, todo en ella lo había enamorado completamente.

-¡allí está!-pronunció de repente cuándo logró divisar con su mirada a la castaña.

Lentamente se acercó hasta ella con una sonrisa plasmada en sus labios.

¡Hoy sería el gran día!

-¿qué es lo qué pasa, Natsume?-preguntó amablemente la castaña.

-Tenemos que hablar- dijo simplemente.

Después de eso los dos partieron hacía aquél árbol sakura que había en la academia alice. Era un lugar tranquilo y pacífico al que ellos solían venir a jugar antes.

-¿qué querías decirme?-preguntó rompiendo aquél silencio que se había formado entre los dos.

Natsume se tenso un poco,pero luego dio un gran suspiro.

¡Está vez si lo haría!

¡No se acobardaria y esconderia sus sentimientos como antes!

-Siempre me gustaste Mikan-la miró a los ojos y se preparó para decir lo siguiente- ...yo te amo- declaró él con las mejillas de un color carmesí notorio.

-Natsume... a mí me gusta Ruka- soltó de repente la de ojos color avellana.

-¿q-qué?- Nunca se había podido haber imaginado tal cosa, siempre había considerado que sí se declaraba a Mikan; ella definitivamente corresponderia a sus sentimientos.

Pero esta vez el gran Natsume Hyūga no había acertado y por primera vez había sido rechazado.

-L-lo s-siento- susurró en voz baja con su mirada gacha.

El de ojos rojos puso una expresión triste que luego fue sustituida por una gran mirada desafiante.

-Entonces...¡te enamoraras de mí!

"porque tú eres y siempre fuiste mía"