Mirando al pasado
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Principios de 2007
Una mano que llama a una puerta cochambrosa, sin respuesta alguna. La misma puerta que cae por efecto de una patada. Un hombre que tiembla aterrorizado.
- Por favor - suplica el hombre – no tengo dinero… pero prometo conseguirlo. Dígale a Big Eddie que mañana podré pagarle
- Ya es tarde amigo… Big Eddie ha sido muy paciente, es una de sus virtudes y se ha cansado de esperar – dice el otro hombre - ¿Verdad Peter que al jefe no le gustan los retrasos?
- Por supuesto – responde el aludido entrando en la habitación
- A Big Eddie no le gusta que le tomen el pelo – continúa diciendo el hombre – Dile Peter ¿qué es lo que nos dice el jefe que tenemos que hacer cuando ocurren estas cosas?
- Dejar un recordatorio, Mike – Afirma él con el ceño fruncido mientras mantiene sus manos en los bolsillos
- Pues venga – ordena Mike – ya sabes lo que tienes que hacer Peter. El joven se adelanta y sin cambiar el gesto se acerca al hombre tembloroso y saca una pequeña navaja
- Por favor – suplica llorando el hombre – no lo haga
- Lo siento – susurra Peter sujetando la mano del hombre y le corta un dedo mientras intenta ignorar sus gritos – ponte hielo –le aconseja el joven soltándole la mano, siente como si fuera a caer redondo al suelo de un momento a otro, pero tiene que aguantar el tipo delante de Mike, le da el dedo a su compañero que lo guarda en un pañuelo
- Vámonos, este tipo me da asco – dice Mike saliendo del apartamento
- Si… voy – Peter se queda un momento mirando al hombre que ha caído al suelo debido al dolor que está sufriendo. Comprueba que Mike ya no está cerca y agachándose junto a su víctima le da unos billetes
- toma, 100 dólares, los necesitaras para pagar a Big Eddie
- ¿Por qué… por qué haces esto? – Pregunta el hombre desconfiado
- No importa, tengo que irme y paga a Big Eddie si no quieres que volvamos – dice desde la puerta. Se marcha de allí para reunirse con Mike que le está esperando en el coche.
- ¿Por qué diablos has tardado tanto? – Pregunta furioso
- Me estaba lavando las manos – miente Peter
- Ahora eres escrupuloso… vámonos de aquí, quiero ir a ver a Tess
- ¿Tess? ¿Está aquí? ¿Ha vuelto?
- sí, ha vuelto… se ve que no puede vivir sin mí, jajajaja – responde con una risotada mientras arranca el coche. Peter se queda callado. Hace unas semanas, Tess le dijo que necesitaba unos días para pensar, era la novia de Mike, pero sentía por ella algo más que amistad, habían iniciado una relación a espaldas del hombre. Si éste se llegara a enterar, los dos estarían muertos, y Tess no soportaba tanta tensión. Decidió entonces marcharse, con la excusa de visitar a su madre.
- "Y ahora ha vuelto" – piensa Peter, y no podrá abrazarla ni besarla como hubiera querido.
En el aparcamiento del restaurante donde trabaja Tess, Peter espera apoyado en el coche mientras Mike la visita.
- ¡Peter! ¡Qué tal hombre! – Saluda un hombre mexicano acercándose y extendiendo su mano a modo de saludo
- ¡Tony! ¡Qué sorpresa! – Exclama Peter estrechando su mano
- Toma… 50 dólares, lo siento amigo, no he podido reunir más
- No importa Tony, no hace falta
- Tú me ayudaste con Big Eddie, por lo menos deja que te lo devuelva
- ¿has llamado a ese tipo?
- Sí.
- ¿Y cuándo lo harás?
- Aún no lo sé… pronto. ¿Qué tal tu hermana?
- Oh, ya tiene trabajo, en la gasolinera. Te echa de menos, le gustaría volver a verte
- Quizás me pase un día de estos… - dice Peter interrumpiéndose, una gran coche negro ha aparecido en el aparcamiento, tiene la impresión de que van buscando algo.
...
