Disclaimer: Naruto y sus personajes no me pertenecen.
Hola a todos, aquí empiezo al fin con un proyecto que llevo en mi mente por ya más de 1 año, posiblemente haga un remake al final, pero solo lo podre confirmar al "final".
Sin más empieza la historia y espero sus review's.
.
.
.
.
Prologó
-Aquí esta el demonio-decía un aldeano, al tiempo que una turba se acercaba a toda la velocidad, cualquiera podría pensar que dicha turba era únicamente contra las personas malvadas; pero no, esta turba era solo una de las muchas que había noche tras noche en Konoha; la misma que sobrevivió al ataque del más temido y poderoso de los Bijuu; las bestias con cola; ni mas ni menos que el Kyuubi, el zorro de 9 colas, apareció una noche en frente de la aldea y de no ser por el máximo héroe, el Cuarto Hokage, hubiera sido reducido a cenizas.
El mismo estaría realmente entristecido y furioso de saber, que su único hijo, su primogénito, era tratado de una forma tan cruel que ni el peor de los animales era tratado de forma tan miserable y esta noche, era una de esas palizas que sufria en especial ese dia.
-Rayos, sabia que no debia salir para nada este dia-se maldecía a la vez que corria, dando vuelta hasta encontrarse en un camino sin salida.
-Ya no tienes escapatoria-decia un aldeano expectante, esperando con gozo lo que se avecinaba.
-Yo.. yo no les he... he hecho.. nada, por favor, dejenme en paz- intentaba de forma desesperada evitar lo que bien sabia seria inevitable. Los aldeanos ignorandoló y con miradas malvadas se acercaron al pobre chico de no más de 5 años, con pelo rubio, ojos azules, y unas marcas en las mejillas que le daban un aspecto zorruno. El chico no se imaginaba que ese dia, sufriria el peor de todos los 'regalos' que le daban los aldeanos.
-Hokage-sama- decia un ANBU con mascara de dragón y pelo plateado, en un tono de voz que expresaba furia de forma leve, pero que el viejo hokage reconocío al instante.
-¿Qué sucede?- decia el viejo Hokage, el Tercero, que volvio a asumir el puesto tras la muerte del Yondaime.
-Unos aldeanos, casi matan a Naruto...- decia al tiempo que fue interrumpido- ¿Cómo se encuentra?- interrumpia el hokage esperando una respuesta de forma inmediata.
-Ya se encuentra estable, aunque debimos obligar a los doctores para que lo trataran.-resaltando lo ultimo – Ademas mis hombres ya se encargaron de encarcelar a los aldeanos, esperan su juicio-decia serio el anbu.
-Buen trabajo Ryu, puedes retirarte.- Decía el Hokage y al tiempo que el anbu se retiraba en una bola de humo- Minato, falle mi promesa, pero al menos tengo la esperansa que las siguientes generaciones acepten a Naruto, por lo que en verdad es.
Ya en el hospital, nuestro rubio favorito, estaba en el hospital aunque no sabria cuanto tiempo llevaba ahi, aunque ya habia amanecido, aun no podia evitar la tristeza al recordar lo que podia de la noche anterior, que sin duda no olvidaria facilmente.
FlashBack
-Yo.. yo no les he... he hecho.. nada, por favor, dejenme en paz- intentaba de forma desesperada evitar lo que bien sabia seria inevitable. Lentamente se acercaban los aldeanos, haciendo una media luna, dejando a Naruto contra la pared de ese callejon.
-Callate, por tu culpa, mi esposo murió.- Reclamaba toda furiosa una aldeana, luego otros aldeanos le reclamaron, el rubio les insistia que el no habia hecho nada.
Los aldeano lo ignoraban y uno en su enojo le lanzo una patada al pequeño, luego la mochedumbre entera empeso a lanzarle patadas, golpes, piedras, y todo lo que tenian a la mano, el intentaba taparse con sus brazos la cabeza, pero los aldeanos lo agarraron y lo aventaron contra la pared, estrellandose contra la pared, quedando semi-conciente, apenas y podia moverse, y pudo ver con claridad como un aldeano que lucia sumamente borracho, lo bañaba con su bebida y como incluso, el aldeano orino enfrente suyo, no podia salir de su conmocion de su miedo, y entro en pánico al ver como un aldeano se acercaba con un palo con fuego en la punta para su terror pudo ver como lo dejaba enfrente de el sobre el charco de orina y del alcohol del borracho, en cuanto sintio que el fuego empeso a acercarse intento quitarse, pero sus fracturados pies y brazos no lo permitan, y solo ocasionaban que gritara cosas que los aldeanos disfrutaban, y sin mas el fuego lo empeso a quemar, sabia que ese era su fin, y en un ultimo grito quedo inconciente, no sin anter alcansar a ver como aparecian unos ninjas enfrente de los aldeanos.
-Estoy... estoy ¿muerto?.-se preguntaba así mismo.- No, no lo estas.- dijo una voz un tanto tenebrosa, el chico entonces pudo observar mejor en donde estaba, estaba sobre un charco de agua, en un gigantesco cuarto lleno de tuberias en el techo, en frente de el habia una especie de celda, con un pergamino en medio.
-¿Quién eres tú y en donde estoy?-preguntaba intentando esconder su temor, aunque no pudo evitar sobresaltarse al ver como aparecian dos grandes ojos rojos tras las rejas.
-Yo, soy Kyuubi no Youko, el rey de los bijuu.-Concluyo monstrando sus dientes.- Y estas en tu propia mente.- dijo expectando el gigantesco zorro esperando la reaccion de su contenedor.
-¿Kyuubi?, pero el Cuarto te mató...- decia Naruto confundido – ¿Y como esto puede ser mi mente? - decia aun más confundido, simplemente era imposible, o al menos eso creia.
-Ningun humano puede matarme mocoso, el Cuarto solo pudo sellarme un un niño recien nacido...-hiso una pausa para ver la reaccion de su contenedor.
-Entonces..., ¿es por eso que los aldeanos me odian?, ¿realmente soy un demonio?- decía ya sin esperanzas.
-Te odian por mi culpa, más sin embargo tu no eres un demonio, eres un contenedor, un Jinchuriki, pero esos miserables humanos no pueden apreciar la diferencia, y no entienden que de no ser por tí, yo seria libre y volveria cenizas su patetica aldea.- Terminaba de decir el Kyubi con un tono enojado. - Ademas, ¿acaso creias que te curas solo, ó que ese manto rojo es tuyo?- con un tono algo divertido.
-Entonces, ¿gracias a ti me curó?- decía un poco más alegre el rubio.
-Bueno, en parte, ademas es por una promesa.- decía el Kyuubi recuperando de nuevo el tono serio. -¿Una promesa?-decía confuso Naruto
-Si, le prometí a tu padre, que te protegería.-concluyo seriamente el Kyuubi.
-¡¿Mi padre?-decía el rubio-¿Conociste a mi padre?¿Y cómo que te hiso prometer que me protegerias?-decia sumamanete anonado el rubio.
-Naruto, tu padre es el Cuarto Hokage, Namikaze Minato.-hiso una pequeña pausa el Kyuubi para continuar.- Y me hiso prometer que protegeria a su unico hijo.-Termino de decir el Kyuubi.
-Pero...pero...- decia el rubio en shock.-¿Porque, porque?-decia Naruto llorando.- ¡¿PORQUE?, porque condeno a su hijo a pasar por todo esto.-decia ahora enojado el rubio.
-Naruto, tu padre creia qe te iban a tratar como un heroe- decia el Kyuubi- pero te entendere si odias a tu padre y o a la aldea...-decia el Kyuubi.
-No- dijo Naruto muy levemente-no los odiare, ellos simplemente no pueden ver la diferencia, tampoco podre perdonarlos tan facilmente, pero me volvere Hokage, y sere respetado por lo que en verdad soy.-decia totalmente decidido.
-(Este mocoso realmente es molesto.)- pensaba el Kyuubi divertido- (Aunque es admirable, yo jamas perdonare algo asi, no entiendo como los humanos pueden tratar asi a los de su misma especie.)- pensaba un tanto enojado el Kyuubi.
-Chico, te propongo una cosa.- decia el Kyuubi volteando a ver al rubio que miraba pensativo el techo.
-Dime, Kyuubi-san.-decia Naruto con respeto.
-(¿Kyuubi-san?)-pensaba el zorro- Si quieres volverte Hokage debes volverte fuerte, asi que, ¿Que tal si te entrenó?.- le sugeria el rey de los bijuu.
-Claro, pero- hiso una pausa Naruto.- ¿Cómo?.-decia Naruto.
-Bueno te pondria entrenar sin necesidad de salir, solo necesitaria decirte algunos ejercicios y tu los harias, como si fuera tu sensei.- decia mofandose un poco el Kyuubi.
-Pero como volvere a hablar contigo, quiero decir, para poder hablar contigo necesite... bueno, necesite casi morir-decia muy triste el rubio al recordar por lo que paso esa noche.
-Eso se puede solucionar muy simple, ves ese sello de arriba.- decia el Kyuubi apuntando a la puerta de la celda, el rubio simplemente asintio. -Arrancalo.- concluyo el Kyuubi, mirando a los ojos al rubio.
Naruto sin dudarlo simplemente salto y agarando el papel lo arranco al caer, revelando tras este una especie de espiral.
-Bien, ese sello impedia que me pudiera comunicar contigo, ahora en adelante puedes hablar conmigo al pensar.- decia el Kyuubi.
-Gracias Kyuubi-sensei.-decia el rubio. -Hmp mocoso, es hora de que te despiertes.- decia el Kyuubi mientras se acomodaba en su celda para volverse a dormir.
Fin FlashBack
-¿Estas bien Naruto?.- decia el Tercero, sacando de sus pensamientos al rubio.
-Ehh, hola viejo, si ya estoy mejor.- decia el rubio intentando alegrarse.
-Naruto, lamento mucho lo de a noche, estube muy ocupado con la celebracion del ataque del Kyuubi, que no pude evitarlo.- decia el viejo en un tono entre triste y enojado, aun recordaba como tubo practicamente que obligar a las enfermeras para que atendieran al rubio.
-No pasa nada.- decia el rubio un poco triste.-Ademas ya estoy mejor...-decia un tanto sorprendido.
-Jejeje, chico se me olvido decirte que tambien al quitar ese pequeño sello, pase un poco de chakra a tu cuerpo.- decia el Kyuubi.
-(Asi que no fue un sueño.)- pensaba alegre el rubio, porque tenia un amigo, o al menos, alguien con quien hablar.
-Pero no creas que se me olvido tu cumpleaños Naruto- decia el viejo hokage llamando la atencion del rubio. Este le extendio una pequeña caja al rubio- Abrela- decia alegre el hokage.
Ni bien se lo dio el viejo Sarutobi, el rubio rapidamente deshiso todo el papel que envolvia la caja y al abrirla pudo ver unas llaves y una nota. "Espero te agrade tu nuevo apartamento" el rubio miro al viejo y lo abraso.
-Gracias viejo- decia Naruto mientras lo abrasaba – No hay de que Naruto, por cierto ya mande unos ninjas, y ya llevaron todas tus cosas del viejo apartamento al nuevo.- decia el hokage.
-Muchas gracias.- decia Naruto mientras se levantaba de la cama.- Ahora mismo ire hacia ahi.- decia con una sonrisa mientras dejaba al tercero en su habitacion.
-Espero que ya no tenga que volver a pasar por lo mismo Ryu.- decia seriamente el tercero, mientras aparecia el susodicho en una explosion de humo.
-No se preocupe Hokage-sama, mis hombres y yo nos encargaremos personalmente de que no le vuelva a pasar nada.- decia seriamente el mencionado. -(Eso espero)- Pensaba el hokage resignado.
Mientras tanto, el rubio habia llegado a su nuevo apartamento, estaba mas cerca de la torre Hokage, a un par de cuadras, aunque en parte le alegro ese hecho, no le gusto por otra parte estar un poco más lejos del Ichiraku's Ramen.
-Sabes, soñar con una piscina llena de ramen, mientras llueve ramen, es... extraño- decia el Kyuubi, al ver el enojo del rubio por estar mas lejos de su preciado ramen.
-(¿Y?, ademas esos son buenos sueños...)-mientras babeaba un poco, pero rapidamente dejo de hacerlo.
Su apartamento era un poco más grande que el anterior, tenia un cuarto con su baño, una cocina, y al alado un recibidor/sala, con un sofa verde comodo. Se dirijio a la cocina para prepararse uno de sus preciados ramen, pero al abrirlo no encontro nada de ramen, solo verduras, verduras y uno que otro pedazo de carne. Asustado cerro el refrigerador, para ver una pequeña nota pegada a la puerte "Naruto debes empesar a comer otras cosas que no sean ramen, Sarutobi". Sin duda el viejo hokage habia cometido un grave error pensaba comicamente el Kitsune, ya que la cara de Naruto pronto pasó a ser una de furia y odio extremo, para despues estar en una esquina con un aura depresiva, maldiciendo al viejo mientras pedia ramen.
-Jajaja, debes admitir que fue una buena idea- decia el anbu denominado "Ryu" al hokage en su oficina.
-Hmp, no entiendo porque tenias que culparme a mí, ahora el chico me odiara hasta que lo invite a comer ramen- decia en forma triste el hokage provocando que se riera un poco mas el anbu. - Si sigues riendote, te cobrare a ti todo lo que el chico coma cuando lo invite a comer Ramen- decia malvadamente el hokage. ( kukukuku, soy muy malo ) pensaba el hokage al ver como rapidamente el anbu guardo silencio, y diciendo que tenia un asunto que atender se retiro en una nube de humo.
-(Espero que ahora por lo menos puedas vivir más tranquilo, Naruto.)- pensaba el viejo hokage al tiempo que veia la foto del Cuarto Hokage en su escritorio. (Intentare que Naruto pueda olvidar esos malos momentos, es lo menos que puedo hacer por ti Minato, despues de haberte fallado por tantos años...)
En su apartamento, el rubio quien no tenia idea de lo 'acontecido', resignado se preparo alguna sopa con tanta verdura, intentando evitar recordar el sabor a ramen.
-(Bueno, esto no esta tan malo despues de todo...)- pensaba el rubio.
-Ademas de eso, si sigues comiendo ramen te quedaras enano mocoso.- decia el Kyuubi.
-(Supongo que tienes razon, pero el ramen es tan delicioso...)- pensaba Naruto con estrellas en los ojitos, haciendo que le saliera una gota estilo anime al Kyuubi.
Así transcurrio el dia, el Kyuubi le habia dicho que empesaria su entrenamiento al dia siguiente asi que decido acostarse más temprano, ademas que si bien ya se habia curado de lo anterior, aun estaba adolorido, tanto fisica, como mental principalmente.
El Kyuubi en su celda podia observar como el rubio dormía con una sonrisa, algo poco usual ya que generalmente era una sonrisa falsa la que mostraba, a excepcion de las personas que queria como el viejo del ramen, y el hokage. Tras pensar en eso el Kyuubi se puso un tanto serio voltenado a ver a un lado de su celda.
-¿Estan seguros?- decía el Kyuubi, a unas sombras en una pared de la celda.
-Plenamente, tu sigue el plan que trazamos, todo saldra bien, ya lo veras.- decia una de las sombras mientras se recostaba en la piel del zorro junto con la otra sombra.
-Eso espero- decía el Kyuubi, mientras se acomodaba y se disponia a dormir, ya que no tenia nada que hacer en esa celda.
.
.
.
.
Eso es todo por hoy, y probablemente por esta semana.
Saludos.