La historia empieza poco después de la partida de los Kou. Las chicas se encuentran iniciando el segundo año en la preparatoria, Darién regresa a debido a que pudo recuperar la beca que tenía; Haruka y Michiru se encuentran en una gira, pero regresan pronto, Setsuna vuelve a cuidar de las puertas del tiempo y la pequeña Hotaru regresa con su padre a Alemania, donde se encuentra estudiando. A pesar de que todo está bien y solo esperan la llegada de la formación de Tokio de Cristal, no todo está en orden y la vida aún les mostrara más cosas.
En la casa de los Tsukino se puede observar a Serena en la ventana, se encuentra admirando la noche a un lado esta Luna.
-Dime Luna, crees que él también este viendo el hermoso cielo?- sus ojos brillaban mientras admiraba la noche.
-Claro Serena, Darién también debe de estar viéndolo- contesta la gatita mientras ve de reojo a la chica, de antemano sabe que no es de él de quien están hablando.
-Darién, claro… descansemos Luna- la chica se va a la cama mientras Luna se queda en la ventana, sabe que ella lo extraña pero lo mejor es que se olvide de las cosas, no pueden ir en contra de lo que el destino ya les había marcado. Se prepara para irse a acostar cuando en eso logra observar un gran resplandor cerca del lugar.
-¿Que puede ser eso?- la gatita sale hacia aquel lugar, en él se encuentra a Artemis.
-¿Crees que sea él?- dice el gato blanco
-No lo sé, pero creo que pronto lo averiguaremos-en eso se observa un gran destello que ilumina el lugar.
Mientras tanto en el universo, en una pequeña galaxia alejada de la nuestra se encuentra un pequeño plantea lleno de hermosas flores, un joven se encuentra sentado en la orilla de un lago admirando el cielo, de pronto una guerrera se le acerca, la peli plateado le habla.
-No puede ser, ¿otra vez admirando el cielo?- la chica se muestra enojada, aunque en realidad actúa así debido a que no le gusta verlo sufrir tanto.
-Dime Healer, crees que ella también este admirándolo- sus ojos se encuentran clavados en la inmensidad del universo- he tratado de ver la Luna desde aquí, pero parece que no se puede.
-Tal vez- observa al chico quien no se resiste a haberla perdido, desde que regresaron todos los días se transforma en Seiya y admira el cielo- pero con su novio, además, ¿qué crees que pensaría la Princesa si descubre que no estas a gusto aquí?
-¿Y quién dice eso?- su mirada es triste, pero vuelve a ver el cielo- lo estoy, es solo que aun la recuerdo y aunque sé que ella está con él lo acepto, pero eso no evita que aun la ame- en eso puede observarse una gran luz destellante que entra al castillo- ¿la viste?
-La Princesa- ambos corren hacia el lugar y al entrar no pueden creer lo que ven… o mejor dicho a quien ven…
CONTINUARA...
