Alguna vez quise saber el significado de mi vida y veía pasar todo frente a mí
Maltratos
Humillaciones
Golpes que la vida se osa a darte
Hasta que lo conocí a él…
Jamás quise creer que fue una casualidad, pero no podía pensar otra cosa de ello, aun lo recuerdo, yo no busque conocerte, tampoco desee hablarte, sin embargo eso ocurrió.
¿Alguna vez te has preguntado por qué de nuestro encuentro?
No te conocía, no me conocías, no había nada que hiciera que yo me interesara en saber de ti, pero no logre detenerme, yo quería conocerte.
Querías a alguien con quien hablar, alguien a quien contarle tus problemas, entonces estaba yo, te escuche y sin imaginarlo te llegue a entender, te comencé a querer sin quererlo, tu siempre estabas para mí...
Confesión tras confesión, no pudimos detenerlo.
¿Cómo se detienen las cosas que no pueden detenerse?
¿Cómo se olvidan las cosas que en verdad se quiere?
Nuestras escasas conversaciones resonaban constantemente mi cabeza, quería siempre saber de ti
Te vi
Me viste
El cruce de dos miradas
Mis nervios, nunca supe cómo hacerte entender que en verdad te quería
Ahora vuelvo a recordarlo, cuando reía a tu lado, tu cara que me miraba fijamente, mi pregunta, la misma que aun ronda en mi cabeza
¿En verdad que era para ti?
Alguna vez jure que no moriría sin antes probar tus besos, sentir tus caricias, sentir mías las sensaciones de tu tacto...
Yo jamás podría olvidarte
Yo ahora más que nunca lo recuerdo
Su nombre era...
Kid
