I

Seguramente esta era la décima vez que se quedaba dormido dando vueltas en la cama. Ya había molestado a Kakashi toda la mañana, y no es que eso le aburriera, pero el actual Hokage se había tenido que ir a trabajar y mientras tanto él se había quedado sin entretención. Tampoco podía entrenar porque había recibido demasiados daños en la última misión que habían tenido, no le quedaba otra más que descansar... ¿Pero pasar todo el día tirado en cama? No señor, eso era algo que Obito Uchiha no podía hacer más que por unas horas. Dio dos vueltas más sobre la cama y decidió levantarse y caminar por aldea... «¿Será buena idea eso?», se preguntó mentalmente, después de todo le había costado demasiado volver adaptarse y que lo acepten, aún muchos habitantes le temían. Él trataba de ser el Obito de antaño, en realidad siempre lo fue, sólo que la tristeza había empañado su vida, pero ahora estaba con sus amigos de nuevo así que tomó la decisión de superarlo y volver a ser feliz con ellos. Obviamente la culpa era algo que no lo dejaba en paz, suponía que Sasuke lo entendería en gran medida, le hubiera gustado acompañar al otro Uchiha en esa especie de viaje de redención pero extrañamente Kakashi no lo había dejado ir. "Tienes que recuperarte como se debe" lo había regañado, ahora que lo pensaba estaba en una situación parecida aquella, se sintió un poco torpe y débil por tener que estar recuperándose mientras que Sasuke y Naruto habían peleado con Kaguya y entre ellos, al punto de perder un brazo, y sin embargo en unos cuantos días ya estaban frescos como una lechuga.

—La juventud...— Suspiró y rió frente al espejo pensando en Guy.

Ya cambiado salió de la residencia y se encaminó a la torre del Hokage, si Kakashi no venía a él entonces él lo haría.

II

Estaba por entrar a la oficina como si nada y sin permiso hasta que escuchó unas voces muy conocidas detrás de la puerta, sonrió pícaro y se quedó allí intentando escuchar.

— Aquí esta el reporte de la misión Hokage-sama.

— Vamos Sasuke, sólo dime sensei como siempre— Le sonrió notandose sólo en sus ojos.

— ¡Eso mismo! Siempre será Kakashi-sensei— Habló el siempre escandaloso Uzumaki— ¿Cuándo yo sea Hokage también me hablarás con el sama teme? Bueno eso no suena tan mal— Dijo ya fantaseando con la escena.

— Hn, tú siempre serás un Usuratonkachi.

— ¿Qué..? ¡Teme!

Sasuke sólo dio una pequeña risita, a pesar de que sólo fueron unos momentos Naruto pudo apreciarla muy bien y sonrió contagiado de ella. El pensar que Sasuke era feliz lo llenaba de emoción, no quería verlo mal nunca más.

Kakashi también no podía dejar de sonreír al ver a sus dos ex alumnos juntos y felices. Muchas veces creía que el Uchiha era un caso perdido, y no es que no sufriera con ello él también, pero alguien tenía que ser el responsable se había dicho a si mismo. Al final Naruto tenía razón, el pelinegro no los había olvidado, sólo estaba cegado por su dolor pero el rubio había podido hacerlo entrar en razón y traerlo de vuelta. Eso le recordó a cierta persona y se preguntó si él hubiera actuado como Naruto al saber desde un principio quien se ocultaba debajo de la máscara, y hablando de ese alguien...

— Obito, ya entra de una vez.

El mencionado dio un respingo y se adentró en la oficina del Hokage rascándose la nuca apenado.

— Ah venía a visitarte un rato y no quería interrumpir.

— A molestarme dirás, vivimos juntos sabes.

— ¿Y eso qué? Vamos Hokage-sama, yo se que te gusta que este encima de ti.

Kakashi hizo todo el esfuerzo del mundo por permanecer impasible y no golpearlo.

— Bueno, creo que ya debemos irnos, adiós Kakashi, Obito.

— Espera teme, voy contigo— Lo siguió y volteó para despedirse— Adiós Kakashi-sensei, Obito-san.

Obito sonrió con orgullo al escuchar el "san" pero luego miró al Uchiha menor con algo de pena en su rostro.

— Sasuke... Yo...

— Esta bien, no tienes que decir nada, yo tampoco soy quien para juzgarte.

— Pero aún así...

— De verdad esta bien— Le dijo y salió del lugar seguido por un incómodo Naruto.

Kakashi suspiró cansado y se acercó al Uchiha mayor poniendo una mano sobre su hombro. Sabía que Obito se sentía culpable por haber participado de la masacre de su clan, por haber participado del trauma de Sasuke. Pero en realidad el pelinegro más joven no estaba enojado ni lo odiaba, después de saber bien su historia, sumado a la maldición de su clan, sabía que las acciones de Obito eran por su dolor, por el sufrimiento que había pasado, se había comportado igual que él... Por lo cual sentía que no tenía derecho de reclamarle nada, él también había causado mucho dolor a otras personas y sabía lo que era cargar con ese peso.

— Sé que te sientes mal pero yo no creo que él te tenga rencor, sólo es un poco tímido, dale tiempo.

—Mmh, yo también pase mucho tiempo con él Kakashi, no tienes que presumir, conozco su personalidad.

— Cada vez que recuerdo eso se me hace algo irreal— Habló pensativo— Sabes... ellos dos siempre me recordaban a ti, es como si la combinación de ambos fueras tú.

— Oh Hokage-sama... ¿Ha pensado tanto tiempo en mi?— Le contestó en tono meloso acercándose a él sólo para molestarlo.

— La verdad es que sí — Sacudió los cabellos de un sorprendido Obito, no se esperaba esa sinceridad.

— Ya sabía yo que me amabas.

— Callate.

El Uchiha simplemente sonrió y ahora que lo pensaba esos dos se llevaban demasiado bien a pesar de las peleas, Naruto y Sasuke también le recordaba a Kakashi y a él cuando estaban en el mismo equipo. Cuando estuvo con Sasuke notó, más allá de esa frialdad que solía mostrar, que se parecía demasiado a Kakashi y eso lo había molestado demasiado, no quería pensar en ese supuesto traidor que había matado a Rin. Pero al ver la personalidad altanera y de genio ninja que tenía Sasuke no podía evitar sonreír al recordar a su antiguo compañero, regañandose por ello obviamente después.

— ¿Ellos también...?

— ¿También qué?

— Nada, nada. No importa— Sonrió guardándoselo, al menos por ahora— Creo que tengo una idea para divertirme.

— ¿Qué vas hacer?— Kakashi sospechaba que eso significaba problemas.

El otro sólo sonrió mirándolo cómplice.

III

Obito había vivido una etapa bastante seria de su vida, pero ya era hora de divertirse un poco como antes.

— Ellos van a enojarse por esto Obito— Le advirtió.

— No seas aburrido Kakashi, no cambiaste nada— Se quejó haciendo un berrinche— Seguro terminan divirtiéndose mucho.

— Eso espero o van ambos van a matarte— Le dijo mientras los dos seguían a Naruto y Sasuke que ya parecían más descansados caminando por la aldea.

Cuando vieron que entraron a una tienda para comprar verduras los esperaron afuera.

— No puedo creer que te este acompañando a esto...

— Es que en el fondo no eres tan aburrido, yo lo sé— Le sonrió pero justo vio a ambos chicos salir— Allí están, creo que ya debería hacerlo.

— No estoy de acuerdo con esto pero lo haré yo, tú aún debes recuperarte, no puedes usar tus poderes— Le contestó activando su sharingan— Y deberías estar descansando, no planeando bromas a mis ex alumnos.

— Me alaga que te preocupes tanto por mi— Le dio un beso en la mejilla sorprendiendo a Hatake— Pero no me subestimes, eso sigue molestándome.

— No estoy subestimandote, tampoco puedo hacerlo desde nuestra última pelea— Al ver el semblante de Obito sacudió su cabello nuevamente— Eso ya es pasado, no lo pienses más.

— Kakashi...— Estaba por decirle algo hasta que vio que los chicos se alejaban— ¡Ya hazlo, se están escapando!

El Hokage volvió a suspirar, había suspirado muchas veces en ese día. Si los consejeros se enteraran de que el Hokage, en vez de cumplir con sus obligaciones, estaba cumpliendo los caprichos de su amigo, lo matarían. Decidió dejar de pensarlo tanto, no es como si no fuera responsable en su trabajo, tampoco estaba mal divertirse de vez en cuando.

— Bien aquí va— Se acercó lo más que pudo a ellos ocultando su presencia y lo hizo— ¡Kamui!

Obito sólo pudo ver como ambos jóvenes desaparecían en ese espiral ya tan conocido para él y sonrió satisfecho acercándose al peliblanco.

—Ya quiero ver cuando los hagamos regresar.

— Seguramente van a estar muy molestos— Le dijo pero sonrió en complicidad— Ahora que lo pienso, vamos a necesitar a Sakura para hacerlos volver.

— Oh...— Él sabía lo que eso significaba.

— No puedo creer en el problema que me metiste.

— ¿No hay nadie más en la aldea con tanto chakra como tus alumnos?

— Por supuesto que no, ellos son los mejores— Dijo con orgullo.

— Diablos, nos van a regañar.

— Ya lo creo.

IV

Abrió los ojos confundido sin entender lo que había pasado «¿Alguna especie de trampa o ataque?», se preguntó mentalmente y se quejó del dolor en su cabeza además de un peso extra en su cuerpo.

— Ya muevete Usuratonkachi, pesas demasiado— Lo empujó tirándolo al suelo lejos de él.

— ¡Auch! Teme sin corazón — Se tocó la nuca intentando aminorar el dolor hasta que cayó en cuenta de la situación — ¿Qué pasó?

— ¿Cómo voy a saberlo? De repente aparecimos aquí.

— Oh al gran Uchiha Sasuke lo han atacado por sorpresa ¿Será que estaba muy distraído por el gran futuro Hokage?— Le sonrió prepotente y divertido.

— Cierra la boca dobe— Esa oración lo había inquietado un poco pero no lo demostró en absoluto— A ti también te tomaron por sorpresa o no estarías aquí.

Naruto miró aún lado molesto admitiendo que tenía razón en eso. Observó el lugar notando en donde se encontraban.

— Oye Naruto, pero esta es la aldea, no nos hemos ido a ningún lado.

— Sí... así parece...— Habló con algo de sospecha y sintiéndose en una especie de déjà vu.

Estaba por decir algo más pero escuchó que unas personas se acercaban a ellos y por instinto tomó a Sasuke de la mano y se escondió con él en unos arbustos.

— ¿Qué se supone que haces?— Le preguntó el Uchiha y estaba a punto de salir hasta que él también escuchó unas voces.

— ¡Menma ven aquí!— Gritó siguiendo al chico una muy destapada Hinata— ¿Qué diablos significa eso de que ya estas saliendo con alguien? ¡Voy a matar a esa perra!

— Significa lo que significa, ya basta, dejame en paz.

Sasuke abrió los ojos realmente sorprendido, tanto que estaba dejando su seria expresión de siempre. No entendía nada de lo que pasaba ¿Ese era Naruto? Parecía mucho más maduro que su dobe y con una expresión demasiado seria para ser él ¿Y esa era Hinata? No es como si conociera mucho a esa chica pero bien sabía lo tímida y callada que era, y lo mucho que le gustaba Naruto... Se molestó ante ese pensamiento pero lo descartó concentrándose en la situación que vivía, seguramente era un sueño.

— Debo estar soñando, es imposible que yo caiga en un Genjutsu.

— No es ni uno ni otro teme, ya he estado aquí.

— ¿Qué?

— Esto es otra dimensión, y creo que ya se quienes son los culpables de que estemos en este lugar.

— ¿Dimensión...?— Preguntó y recordó inmediatamente— Obito.

— Y estoy seguro que Kakashi-sensei también.

— ¿Qué les pasa a esos idiotas? ¿No se supone que son adultos? Deberían dejar de perder el tiempo.

— Bueno ya, no es tan grave, salgamos a saludar— Le sonrió saliendo de los arbustos.

— ¡Naruto! ¿No crees que les resultará extraño esto?

— No hay problema, te dije que ya estuve aquí, me conocen.

Sasuke salió de su escondite siguiendo al Uzumaki con miles de dudas en la cabeza ¿En qué momento había estado ahí y por qué? Se rindió cansado, simplemente seguiría al dobe y aguantaría hasta que esos torpes los devolvieran a su lugar. Recordó esa Hinata y ese Naruto extraños que había visto, supuso que también había otro Sasuke y por un lado le dio curiosidad, pero por el otro su instinto le decía que no le gustaría nada conocer a su otro yo.

Continuará...