Disclaimer: el universo y los personajes de Harry Potter pertenecen a JK Rowling, yo los utilizo sin ánimo de lucro y con afán de diversión.
Nota de la autora: este prompt tan estúpido se lo quiero dedicar de nuevo a LadyChocolateLover, que continúa sacándome sonrisas enormes cuando me escribe un review. Disfrutad!
Tarde de Viento
La tarde que Hermione Granger y Draco Malfoy se casaron corría una brisa fresca en la campiña inglesa.
Reinaba una paz acogedora en el claro del bosque de Dean que escogieron para celebrar la ceremonia, y el sonido del viento agitando la hierba envolvía el ambiente como una caricia. Ella llevaba una corona de flores en el pelo y un vestido sencillo con algunos detalles de encaje. Luna, que ahora la observaba arrebujada en una manta ligera de cuadros, le había peinado la melena en suaves ondas y le había pintado los labios de un bonito tono carmín. No quiso llevar más joya que su anillo de compromiso. Él se había enrollado las mangas de la camisa y se había puesto chaleco y pantalones de traje. Harry, que permanecía junto a Luna a unos pasos de los novios, le había regalado una corbata elegante y se lo había llevado a tomar unas cervezas la noche anterior para intentar convencerlo en vano de que al menos se afeitase la barba para ese día.
Draco y Hermione habían decidido organizar algo pequeño y muy íntimo. No había muchas opciones disponibles. Los padres de Hermione permanecían aún en San Mungo y el orgullo de Narcisa y Lucius Malfoy no les habría permitido asistir; no había demasiada gente que comprendiera lo que iban a hacer, pero Harry y Luna habían mantenido una actitud más abierta. Una ceremonia simple en un lugar que significaba tanto para la novia había parecido apropiada, y Draco estuvo de acuerdo en que un pequeño hotel rural muggle resultaba ideal para ofrecer una cena a sus padrinos y pasar un rato agradable y una tranquila noche de bodas lejos de comentarios hirientes.
El mago del Ministerio pronunció un breve discurso sobre el amor. Después, los novios intercambiaron votos, se dijeron algunas palabras cargadas de significado y rieron en un par de ocasiones. Draco regaló a Hermione una sortija de plata antigua con un circonio de un brillante verde azulado; había pertenecido a su bisabuela y Narcisa Malfoy había tenido un gesto entregándosela a su hijo para su prometida. Hermione le puso en el dedo un aro de platino con una banda de oro amarillo que ella misma había mandado grabar con runas. Ella miró brevemente a Harry antes de responder a la pregunta que le habían hecho y no dijo nada hasta que él asintió dedicándole la mirada que se le dedicaría a una hermana. En él afloraron los nervios y se atropelló con las palabras interrumpiendo al mago del Ministerio para decir que sí. Unos minutos después, una lluvia de estrellas plateadas surgió de la varita del oficiante y envolvió el beso que se dieron. Harry y Luna se acercaron a felicitar a la pareja; las mujeres se abrazaron mientras Harry y Draco compartían un apretón de manos y una sonrisa educada. Juntos pasearon hasta el hotel, los recién casados iban de la mano.
La tarde que Hermione Granger y Draco Malfoy se casaron, corría una brisa fresca en la campiña inglesa. Sólo se oía el viento contra la hierba. El viento y las risas de un tiempo nuevo.
