"Pensamientos"

–"Recuerdos"–

–Diálogos–

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–"Gusto en conocerte"–

–"I…"–

–"Yo soy…"–

–"I can't"–

–"Yo soy María"–

–"¿Alfred?" –

–"Sorry"–

–"Stop it"–

–"¿Te duele?" –

–"NO!" –

–"Yo…"–

–"Mary…?"–

…..

–"¿Por qué..?" –

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Todo parecía darle vueltas en esos momentos, su cabeza estaba adolorida y no podía recordar mucho antes de quedar inconsciente.

Su ultimo recuerdo claro fue estar en la escuela con su hermano…. Su hermano, en esos momentos se preguntaba donde estaría, pero lo más importante ahora era… ¿Dónde estaba él?

Sus ojos se abrieron lentamente, se sentía mareado y sentía como si fuera a vomitar, parecía como si un tráiler lo hubiese atropellado y lo peor es que al no tener sus recuerdos esa podía ser una posibilidad.

De manera tranquila trato de sentarse en la cama donde estaba acostado; sus ropas estaban sucias y un poco rasgadas, tenía la chaqueta que le había reglado su padre el día de su cumpleaños número dieciocho y unos pantalones de mezclilla.

Sus ojos vagaron lentamente por la habitación dándose cuenta de que se encontraba en su casa, más precisamente en su recamara. Era como si un tornado hubiese pasado por ahí, su librero estaba desordenado e incluso unos libros se encontraban en el piso, los cajones donde se encontraba su ropa estaban tirados y su ropa se encontraba en mochilas empacada junto a otras cosas.

"what the hell happened?" sus pensamientos eran confusos y no entendía mucho de lo que había pasado.

Trato de calmarse un poco tomando una botella de agua que estaba en su mesita de noche, había papeles tirados por todos lados y una foto yacía aun lado de dicha botella.

Una joven morena de ojos cafés al igual que su cabello se encontraba en un parque junto a su hermano.

–"Jajaja vamos Alfred solo una foto"–

Sintió una punzada de dolor en el costado de su cabeza, aquel recuerdo que paso tan fugazmente no sirvió de mucho y menos con el dolor que trajo consigo.

Abrió el cajón de su mesita de noche donde normalmente guardaba aspirinas por los constantes dolores de cabeza que tenía, más no pudo encontrar nada. Tal vez alguna de las criadas las movió o tal vez su padre, después de una de sus "platicas" tan agradables que tenía con su madre cada vez que hablaban por teléfono.

"Tal vez papá las dejo en la cocina" intento pararse sin caer, recargándose en la pared.

En cuanto salió de la habitación sintió como la atmosfera se hacía más pesada, casí como si alguien hubiera muerto dándole una mala sensación en el pecho. Bajó lentamente las escaleras casi arrepintiéndose de salir de su cuarto.

Todo parecía estar absolutamente a oscuras, solo parecía haber una pequeña vela en una mesa.

-"Tengo miedo Alfred"-

Nuevamente un recuerdo llego a su cabeza, era la misma joven de ojos cafés que aparecía en aquella foto solo que esta vez sus ojos estaban llenos de lagrimas y su cara parecía completamente de horror.

Y pronto él también se sintió aterrado, era como si aquellos recuerdos le pasaran los sentimientos de aquella joven.

–¿Alfred? – aquella voz fue tan débil que casi parecía un susurro haciendo que Alfred se sobresaltara un poco.

– ¿M-Matt? ¿Qué paso? ¿Por qué todo está a oscuras? – tal parecía que su hermano no estaba tan desaparecido como creía.

–Shhh, baja la voz, no queremos que nos escuchen– cada vez tenia más y más preguntas y su hermano solo hacía que aparecieran más.

–¿Qué está pasando Matt?– volvió a preguntar.

–Debieron golpearte más fuerte de lo que pensé– dijo acercándose a la cabeza de su hermano un poco. –Maldición, no veo nada.

–Esto va de mal en peor– volvió a hablar Mathew –Tenemos que irnos y encontrar un lugar más seguro– dijo empezando a meter comida enlatada en unas mochilas.

–Mathew– su hermano menor se asombro un poco al escuchar como Alfred lo llamaba por su nombre completo, nunca lo hacía a menos que estuviera enojado o estuviera siendo completamente serio (lo cual casi nunca pasaba). –¿Qué está pasando? – pregunto en un tono firme.

–Zombis.