Saludos de nuevo queridos lectores de fanfiction nuevamente eh venido a mostrarles este nuevo proyecto. Algunos que siguen mis trabajosdirán: ¡Sato! Qué hay de los otros fics, que hay con aquellos proyectos que no tienen más de uno o dos capítulos. Bueno es que es difícil atender tantos fics pero también considero la oportunidad que tengo y lainspiración que a veces es evasiva, a veces no hay inspiración ni iniciativa, o simplemente el interés por el fic se ve reducido y cuando no hay gusto, no hay trabajo y tienes que tener gusto por escribirlo, sentirlo para que puedas hacer embonar las cosas y que estas salgan adelante o no habrá progreso no importa cuánto le quieras invertir.
Por otro lado están lo que llamamos oferta y demanda. A medida de la oferta viene la demanda de mi producto y creo que algunos autores manejan así sus entregas. Intento compensar las cosas aunque no sea tan fácil. De todos modos esto será de gran ánimo para quienes siguen mi fic "Fetiches" pues sabrán bien de lo que estoy hablando.
Muy Bien, vayamos al grano; este es un fic del tipo Harem. Sí. Así como lo han oído, este es un fanfiction donde AshKetchum, inesperadamente después de una gran aventura; consigue hacerse de un Harem. Normalmente estas historias tienden a seguir arquetipos muy mediocres respecto a complejidad de trama, por no olvidar las incoherencias que se vislumbran y el acomedido relleno que traen consigo; en un intento por emular las situaiones vistas en animes de este tipo principalmente. Sin embargo, quisiera ser un poco original y poder doblar las reglas, metiendo una trama lógica hasta un punto agradable, es decir; sin demasiada fantasía y tampoco tan aterrizada en la realidad, pues si bien no me falla la memoria la poligamia esta legalmente prohibida en varios países como Japón así que pongámonos algo liberales, de acuerdo.
El reto aquí, es mostrarles algo fuera de lo ordinario. Bueno, creo que es suficiente por el momento, pasen al fic y disfruten de la historia y si no es mucha molestia un review o una adición a favoritos o seguimiento seria bien recibido. Bien pasemos entonces al fic y disfrutemos de este trabajo.
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N.A: Lo de ley, los personajes y el universo de Pokemon son propiedad respectiva de Satoshi Tajiri y la marca Nintendo. Yo solo tomo prestados a los personajes del anime para este fic sin fines de lucro, meramente para entretenimiento de Fans hecho por un Fan. El siguiente material contiene descripción de situaciones ficticias de alto volumen cuyo material podría no ser de agrado para algunos lectores, invito a tomar las medidas necesarias y por favor, si el trabajo no te gusta, por favor solo sal de este fic y busca otro de tu dejemos las formalidades.
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-Las damas del campeón-
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By Sato Vampire.
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Tema sugerido para escuchar mientas lees este prologo: Arrival OST - Halo 4 Soundtrack
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La batalla se encontraba en su punto más acalorado y porque no decirlo másemocionante e impactante, o por lo menos eso diríamos nosotros, pero desde la perspectiva de Ash Ketchum, el posteriormente conocido como "Héroe o Defensor de Kalos"; esta era la situaciónmás peligrosa que haya enfrentado alguna vez en cualquiera de sus aventuras hasta el momento.
Como actual elegido por los legendarios y deidades del mundo Pokemon, su viaje se ha visto coincidido junto a eventos donde su participación ha sido destacada a lo largo de los últimos años. Y ahora en Kalos no había excepciones, salvo quizá…por la forma en que el deber le llamo de nuevo.
Sea por coincidencia o por destino. Ash se habíaenfrentado en el pasado a organizaciones criminales de renombre en el mundo del hampa, grupos delictivos que dominaban y oprimían desde las sombras. Personas peligrosas, frías e imbatibles, y cuyos planes siniestrosprometían daño a muchos inocentes sean humanos o pokemon por igual y cada una había ofrecido diferentes estrategias, modus operandi, ideologías y cientos de seguidores que en algunos casos les daba el poder de pequeños ejércitos.
Sin embargo, estos grupos secretos habían caído ante la intervención del elegido, acompañado de sus fieles pokemon y sus inseparables amigos. A pesar que en última instancias, estos enemigos se habían vuelto astutos, prevenidos capacitados y mucho más dispuestos a hacer lo necesario con tal de neutralizar a quien interviniese en su camino, algo que Ash tuvo mala suerte de comprobar en dichas ocasiones como lo estaban comprobando ahora.
Los enemigos del joven elegido en Kalos, eran los susodichos miembros del Equipo Flare, un grupo de matones de cuello blanco que se involucraban de una forma sigilosa y hasta cierto punto sutil y elegante en la armonía de la región con el propósito de llevar a cabo sus siniestros planes. Habían aprovechado las cualidades tecnológicas que la investigación en la región sobre las mega evoluciones, mismas que habían producido y tenían en mente planes aún más ambiciosos, en los cuales se involucraban a dos deidades del gran Partenón de Arceus: Xerneas y Yveltal.
El resultado de estos planes y el mal que conllevaría, se vieron mediamente reflejados en la Guerra de Kalos; la cual, más allá de un conflicto armado en la región,resulto ser una toma masiva de rehenes, específicamente una ciudad completa tomada de rehén. Así es; el Team Flare había capturado el corazón político de esta región. Ciudad Luminalia y el pilar de su maléfico plan; la Torre Prisma. Sede actual de su cuartel de operaciones y el mando que dirigía a las tropas, mismas que custodiaban la ciudad y mantenían a sus ciudadanos sometidos y como un seguro contra la intervención de los guardias pokemon y las demás fuerzas del orden, entre ellas la singular Guardia Real de Kalos.
La importancia de la torre Prisma no solo era por su dominio en torno a la ciudad y la posición estratégica que esta brindaba, sino la particularidad de su arquitectura y el verdadero propósito que esta tenía en sus maléficos planes: Un mecanismo instalado sobre la cima de la torre y parte de su complejo instalado por los Flare en toda la estructura que en funcionamiento conjunto, atraería a los mismísimos Xerneas y Yveltal a los cuales, ajenos de la trampa a la que se dirigirán serian apresados en el momento justo, sometidos bajo control de Flasre. Si esta operación resultaba exitosa entonces el poder combinado de aquellos dos pokemons antes enfrentados, maximizaría por diez el poder actual de dicha organización y les daría pase directo al secreto del estado Mega evolutivo permanente, mismo que utilizarían para asegurar su poderío y poner al mundo en un nuevo caos.
A pesar de lo atemorizante que sonaba todo aquello y de haber mencionado ya lo avanzado que estaba dicho objetivo, eso sin contar la ventaja que el equipo Flare tendría el control desde el principio sobre toda ciudad Luminalia, casi podría afirmar que sus planes habían sido consumados y que el caos pronto envolvería todo Kalos y posteriormente otras regiones. El Team Flare había logrado lo que ninguna otra sociedad criminal en el mundo pokemon había conseguido por más que se empeñase. El control del mundo.
Por fortuna sus planes se habíanvenido abajo casi tan pronto como estábamos narrando lo anterior. Y la torre central de Luminalia era ahora el campo de batalla de nuestra últimacontienda entre el equipo Flama y aquel quien, acompañado de sus leales amigos y de sus fieles pokemon había echado por tierra esfuerzos de esta organización criminal. Así es; este campeón de la justicia es aquel a quien los legendarios y el mismísimo Arceus hacían merecedor del título del "Elegido" el mismo a quien llaman:
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¡ASH! –una voz fémina claramente desesperada o aterrada había clamado por el elegido en este mismo momento.
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Una panorámica sobre los cielos de ciudad Luminalia nos ofrece el amanecer digno de un campo de batalla del Armagedón, quizá menos apocalíptico pero cierto es que ilustraba muy bien la situación vivida en las calles de dicha urbe. Un grupo de helicópteros realizaban un sobrevuelo en dirección hacia la torre Prisma de Luminalia, de un modo similar a como aconteció en un incidente hacía meses.
Una de las aeronaves, era perteneciente a los medios informativos, los cuales en compañía de las demás aeronaves, pertenecientes a la guarida pokemon y la guardia de Kalos, sobrevolaban en derredor de dicha superestructura en vuelo de reconocimiento a las inmediaciones del edificio. Este factor tenía una razonable causa y por ahora las cámaras de dicho equipo; corresponsal de campo, apuntaron hacia la cima del rascacielos ofreciendo una toma de primera fila a los televidentes acerca de lo acontecido, en tiempo real.
El incidente de ciudad Luminaria no solo era visto por toda Kalos, sino en otras regiones, debido a la magnitud y lo contundente que dicha noticia había generado en tan pocas horas, así que lo que ese grupo de noticias tenia a la mano, estaba siendo visto prácticamenteen varios lugares del mundo pokemon, lo que daría un considerable aporte a los eventos futuros.
De cualquier forma, las lentes de las cámaras habían apuntado hacia la cima del edificio justo en el momento para tomar en primer plano, lo que podía ser el clímax de esta nota y la posibilidad de observar el fin de esta contienda; o bien la solución de este conflicto, o una penosa nota negra.
Apenas la imagen tomo en foco a un grupo defiguras; una de ellas un pokemon en su mega-evolución…quien había aparentemente venido de improviso, otra de esas siluetas, un hombre de indumentarias extravagantes, un enmascarado que parecía cubrir su cuerpo con una suerte de capa.
Otra silueta vestía ropajes formales en un tono rojizo, gafas oscuras que impedían ver a detenidas sus ojos y un peinado rojizo como las llamas de un Pyror. El mismo hombre sujetaba con fuerza a una joven de falda roja y blusa oscura, que se veía claramente angustiada y en un situación que podrá ser una rehén. Con la misma mano sostenía un maletín metálico de pequeño tamaño y con su mano libre, que estaba extendida en su totalidad lanzaba ordenes contra otra de las siluetas la cual, era algo difícil de describir, la mejor definición sería una especie de "Mecha", visiblemente tripulado; de considerable tamaño, mucho más alto que un hombre promedio, y cuyas poderosas garras mecánicas utilizaba a razón de mazos, con los cuales intentaba aplastar a… ¡Un joven entrenador!
En efecto, se trataba de un chico de chaqueta azul y una gorra rojo carmín, mismo que luchaba por evadir los poderosos golpes del mecha que trataba de aplastarlo como si no fuera más que un vil insecto. Las últimas siluetas eran un pikachu que se encontraba zigzagueando por los alrededores en enfrentamiento con otro pokemon de gran tamaño y aspecto felino. En pocas palabras; una batalla se libraba en la cima de esa torre, y alguien en particular…había tomado la atención de un considerable número de televidentes quienes observaban dicha confrontación. Sin embargo…lo peor apenas venia.
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Momentos antes, en la cima de la torre Luminalia el líder de los Team Flare; Sir Lysson Flare, mismo quien portaba una gabardina negra sobre su traje de tono rojizo y su matón asistente; el profesor Xero. Enfundado en dicha coraza que más que un robot, era un tipo de exoesqueleto mecánico, se encontraban frente al dispositivo de avanzada manufactura que llevaría a cabo sus maléficos planes. Sus tropas habían expulsado, sometido o neutralizado a cualquier posible amenaza, por lo que; mostrando una confianza y en cierto sentido de triunfo, se dirigió hacia la maquina apocalíptica, en la cual solo necesitaban insertar la legendaria reliquia que llevaba en manos en el recinto específico de la maquinaria. Sin embargo ellos no contaban con un problema, o mejor dicho, dos problemas.
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-Finalmente…la consumación de la mayor obra de nuestras vidas; el poder de los dioses Pokemon: Xerneas e Yveltal…serán míos. Y nadie más volver a oponerse a nuestra causa. –Lysson había sostenido la reliquia que daría inicio a todo, misma que fue facilitada por su fiel asistente Xero. Desafortunadamente para ellos, su último paso se vio interrumpido por una descarga eléctrica la cual arranco dicho objeto sagrado de las manos de Lysson y arrojada de ellos.
-¡No tan rápido equipo Flare! –La voz del fácilmente reconocible "elegido" demando con firmeza.
-Jefe mire…-Xero apunto extendiendo su guante mecánico hacia donde vino tanto la amenaza como el ataque. Ambos observaron al ahora revelado Ash Ketchum y su inseparable Pikachu quienes se hallaban en la cima del acceso principal a la cima de la torre, ambos en posición de ataque y listos para la batalla.
-¡Tú de nuevo! –Lysson ya tenía el mal gusto de conocer al mocoso y cierto era que todavía no comprendía como es que siendo solo un chico tonto, había resultado ser un tremendo dolor de muelas los últimos días. De cualquier forma no iba a tolerar más numeritos del muchacho y sus mascotitas. Iba a culminar su plan, y aplastar literalmente a cualquiera que se interpusiera en su camino. – ¡Ve! ¡Pyroar! Aniquila a esa peste –Dijo refiriéndose a Pikachu. – ¡Xero! –Mando a su subordinado
-¡Señor Lysson! –El corpulento hombre acorazado espero su orden como si de un pokemon fuese.
-¡Mata a ese niño! –Ordeno fríamente.
-¡Señor! ¡Si señor! –Xero asintió mientras estrujaba los nudillos blindados de sus puños mecánicos.
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Ash no se inmuto, se había alarmado, considerablemente pero si algo aprendió aquí en Kalos, es que a diferencia de otros grupos criminales que enfrento en otras regiones, parecía que los Team Flare eran de aquellos que no se andan por las ramas a la hora de definirse como criminales. De hecho no sería la primea vez que lucharía por defender su vida, así como la de sus pokemons y amigos, al menos no en lo últimos días.
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Serena corría por los pasillos alternadamente iluminados de la Torre Prisma. Tras de ella su pequeña Fennekin le seguía con mismo temor que la joven, pero la lealtad inquebrantable que había forjado con su entrenadora, le habían dictado seguirla y protegerla de los peligros, estos últimos días el peligro era lo que había sobrado y la pequeña zorro pokemon había estado al pendiente de su ama. Por ahora ambas habían llevado su sendero sin más incidentes que una escaramuza con dos agentes de dicha organización, a los cuales habían logrado burlar más allá de abatir en una batalla pokemon.
A pesar de que había pasado tiempo durante su recorrido y participación en la liga pokemon de Kalos, Serena realmente carecía de la experiencia en batalla que Ash ya contaba, menos la experiencia enfrentándose a grupos criminales como el equipo Flare, aunque también había que considerar lo anterior, pues como había descubierto Ash, estos matones no dudaban en lastimar a inocentes e incluso en asesinarles.
Por ahora la prioridad de la ojiazul celeste, era de llevar el portafolios que ella junto con Clemont y el señor Meyer lograron robar de los Flare, y que de acuerdo a lo que el profesor Ciprés; podría suponer una gran ayuda a terminar esto. Y quien mejor que terminar esto que Ash. Para Serena el riesgo bien lo valía, pues era una forma de demostrarle a Ash que ella podía ser de ayuda en momentos estos momento y dejar de ser una carga, termino al cual ella se refirió a si misma desde que esta pesadilla comenzó.
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-¡Vamos Fennekin! Según Clemont; las escaleras a la azotea están por este lado. –Desplazándose apresuradamente por el pasillo la joven aferro el maletín a sí mismo como si la vida se le fuera si lo perdía. Pero por suerte, al menos por ahora su recorrido hacia las escaleras fue sin mayores eventos.
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Serena empujo la puerta y casi al instante en salir, una ráfaga de viento la empujo lejos de la puerta la cual se cerró de golpe dejando a Fennekin adentro. La pokemon zorrita, al verse apartada de su entrenadora en posible riesgo, rasguñando la puerta y ladro intentando poder salir, pero al ver lo inútil que esto resultaba, opto por buscar una ruta alterna.
Al verse sola en ese sitio, Serena sintió un profundo pánico, pero lejos de permitir que el miedo la dominase, reunió valor para sostener el portafolio y buscar a su amigo, Ash podría necesitarlo y ella estaba dispuesta a dar su apoyo. Lamentablemente alguien mástenía otros planes.
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Si alguna vez Ash Ketchum le había fallado al mundo, o al menos a la gente que confiaba en él, había sido en este momento. Pero tampoco podía tomar toda la culpa, simplemente la situación se había tornado demasiado sombría en un dos por tres. La victoria al parecer difícil había sido casi alcanzada tras derribar al Pyroar de Lysson con ayuda de Pikachu, Frogadier y su Lucario, el cual tras alcanzar el nivel mega, como lo había hecho el Lucario de Korrina, habían puesto en dificultades tanto a Pyroar como a Xero quien no solo enfrento a los pokemon del joven sino que el mismo Ash tuvo más de un encuentro en los que si bien la diferencia de fuerzas era abrumadora, fueron la astucia y estrategia del joven, lo que había podido compensa la desproporción de fuerza bruta a fin de sacar ventaja a su rival.
Lucario había aprovechado la situación para apoderarse de la reliquia y ahora era el quien la portaba y no daba distas de querer entregarla. Con unos cuantos golpes más a la fuerza enemiga, Ash podría dar por terminada la pelea pero en ese momento. Lysson, se había alejado del alcance del azabache,había jugado la carta definitiva. La extorsión.
Serena se sintió más inútil ahora que en cualquier otro momento. Ella no fue relativamente rival para el líder criminal quien en un sutil sometimiento, redujo a la chica y se apodero de lo que más había ella protegido; el maletín. Ahora Serena era la carta de cambio que le daría a Lysson la devolución su preciada "llave". Ash y sus pokemon no pudieron hacer más que mirar impotentes y sin nada de apoyo ni nadie que pudiera dar una ventaja, tuvo que bajar las manos y aceptar su derrota. No culpaba a Serena, ella solo quería ayudar. Se culpaba a si mismo por no haber predicho una jugada tan vil y cobarde.
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-Ordena a tu perro suelte la reliquia. –Demando el malvado de Lysson que sujetaba Serena. Ash no dijo nada asistió a su pokemon en estado mega y como si leyese su mirada, el pokemo coyote se paró frente a Xero y Ash, con Pyroar a su espalda.
-Ahora devuélvemela –demando una vez más Lysson, Xero levanto la mano en espera de la reliquia. Sin embargo en el momento menos esperado. Lucario lanzo esta misma hacia el vacío. Casi de inmediato Pikachu y Frogadier intentaron someter al pokemon león pero este más astuto cargo contra los pequeños lanzándolos contra el muro de la torre. Lucario fue envestido por Pyroar siendo arrojadas por el borde al borde la torre. Y antes que esto pasar, Ash había levantado su improvisada arma, un "simple tubo" mismo que uso para aporrear a Xero en su único punto desprotegido; su cabeza. Lamentablemente todo esto fallo.
-¡Mira lo que has hecho…! ¡XERO! ¡Mátalo…hazlo pedazos! –Ebrio de rabia, Lysson ordeno a su subordinado terminase con la vida del joven entrometido.
-¡No! ¡Ash…huye! –Serena advirtió al joven quien ahora se hallaba en el suelo recuperándose del contraataque del matón.
-Intenta algo más y le rajo el cuello. –El pelirrojo, líder de los Flare había dejado el portafolio en el piso y sacado un cuchillo de alguna funda en su ropaje, el arma blanca resaltaba cerca del cuello de Serena mientras el hombre sujetaba a la chica. Ash miro esto. ¿Tan cobarde era para lastimar a su amiga; una jovencita? Ash cargo contra Lysson, pero Xero lo sujeto de inmediato y el resto...comenzaría ahora mismo.
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Las aeronaves que surcaron el cielo en derredor de la torre Prisma y por consiguiente quienes veían lo que las cámaras transmitían, capturaron el momento exacto lo que aparentaba ser una ejecución con lujo de violencia. Y la brutalidad del evento seria tal, que se recordaría mucho después de ese día.
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Xero, siendo el verdugo y lógicamente su enviciada mente y poco respeto por la vida ajena, hacía uso de su armadura mecánica y le estaba propinando una verdadera paliza al pobre joven quien sin poder defenderse en términos más justos, solo recibía de lleno los golpes provenientes de ese gamberro, el cual aprovechando su fuerza extra, y sujetado a su contrincante del cuello de su chaqueta lo levantaba como si este no fuese más pesado que una mochila para acto seguido lo estrellase contra el suelo de concreto.
Las garras mecánicas apresaron la ropa y carne del joven mientras este intenta baluchar contra la inconsciencia que la había generado el primer golpe mecánico y con la mano libre Xero encrespo un puño como si fuese un ariete, que fue directo hacia del joven elegido.
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-¡ASH! –Serena apresada bajo Lysoon miraba impotente y aterrada como su amigo era molido a golpes por ese monstruo no solo eso. Lucario al rehusarse a devolver la reliquia habíasido lanzado fuera de la torre, mientras que ahora Pikachu y Frogadier estaban ahora sometidos bajo las zarpas del Pyroar que no vacilaría en destrozarlos a la menor acción.
-Eso te enseñara a no meterte donde no te incumbe mocoso. –Lysson mascullo mientras sujetaba a Serena y se deleitaba con el dolor producido a ambos jóvenes.
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En un principio, Ash intento luchar, se había prestado de su porra improvisada pero en los primero enfrentamientos solo fue un daño mínimo que Xero supo revertir sujetando a Ash y golpeándole en el vientre, después y como si fuese un acto de presunción arrebato el arma contundente y la doblo como si un alambre se tratase. Esto era más un abuso, pues la armadura le daba al de porsi corpulento hombre ventaja de más; su pelea era como un duelo entre David y Goliath, con la diferencia que Ash no tenían ninguna onda milagrosa.
En un renovado impulsor Ash se levantó, excepto sangre al escupir al suelo y después, cegado por la rabia cargo hacia su rival con intenciones de querer derribarlopor la borda. El enviste del muchacho fue con todas sus fuerzas sin embargo apenas y pudo mover uno centímetros al corpulento hombre acorazado. En respuesta Xero pateo al joven sujeto su torso con ambas manos, apresándole. Al verse sometido de brazos Ash pateo al sujeto en la cara sin mucho resultado. El gamberro tomo a Ash esta vez el joven había conseguido zafar su brazo izquierdo pero esto no sirvió de nada cuando Xero estrello a Ash de nuevo contra el suelo, seguramente a esta altura algún hueso se habría roto. Ash grito pero no dudo en responder a la agresión, lamentablemente en esta ocasión un dolor un más intenso le aporreo con saña.
Xero tenía fuerza para hacerlo pedazos literalmente, pero por alguna razón; quizá al mera tortura o la diversión que le producía ver al joven intentar luchar, impedían que acabase con esto de una vez y en su lugar se divertía martirizándolo como un niño que le arranca las alas a una mosca. Sujeto al chico de su bazo libre y como si fuese un trapo lo levanto, Ash estaba muy débil para ofrecer resistencia en esta ocasión. Serena tuvo que cerrar los ojos cuando el puño mecánico encontró el rostro del joven, dando un duro derechazo que arranco la gorra del muchacho, misma que salió volando al vacío para perderse de la vista. Ash cayó al piso cerca del borde mientras miraba ahora como la sangre brotaba en una de sus cejas y saliendo de su nariz y labios, su nariz se había fractura, por lo que la hemorragia se hizo aparecer.
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Las imágenes de este horror a pesar de lo brutal que podría ser, fueron vistas al menos en un lejano enfoque, pero aun así; el público no podía dar crédito a lo que sus ojos le mostraban. Los mismo hermanos Meyer quienes se encontraban escondidos en algún punto de la torre Prisma estaban viendo esto por una pantalla que aun funcionaba, su padre no estaba a la vista y aun cuando Clemont sentía ganas de hacer algo al respecto, moverse en direccióna la cima y ayudar a su amigo, tenía que ver la realidad; no podría llegar a tiempo y no podía llevar a Bonnie consigo sin exponerse al peligro, menos dejarla aquí insegura y sola, en medio de territorio hostil. Solo podía tragarse las ganas de llorar de impotencia mientras Bonnie opto por dejar de ver aquello tan horrible, buscando refugio en los brazos de su hermano.
Lejos de ahí. En algún lugar de Kalos, o mejor dicho en Vaneville town. Grace; la madre de Serena miraba impactada como su hija, así como su amigo o amor secreto que misma Serena confeso ante ella en una de sus charlas por teléfono, miraba con las manos en la boca sin poder hacer nada. No menos grato fue la imagen ante los ojos de Delia Ketchum, quien cientos de kilómetros, en Pueblo Paleta; Kanto, lloraba impactada al ver como su bebe era masacrado por ese monstruo, y ella sin poder hacer nada másque llorar, siendo apoyada solo por Mr. Mime; el pokemon mimo tampoco era ajeno al daño que sufría el hijo de su ama. Esto era impensable, nunca, nunca lo pensaron siquiera posible.
Por extravagante que esto suene, el martirio que Ash pasaba y el dolor experimentado por su madre, no fue exclusivo de ella. En otros puntos distantes...en diferentes regiones a donde esta noticiaera transmitida o lo seria; conocidos, amigos y compañeros de batalla del azabache miraban en primera fila, la batalla perdida que el joven había llevado a cabo y como el precio de su falla era pagado.
Aquellos que vieron esto en su momento así como posteriormente y que compartían la amistad o la rivalidad, y quizá; otros sentimientos por el joven entrenador, quedaron aterrorizados con el espectáculo tan bárbaro que se transmitía. Sin embargo; un grupo en particular de personas fueron quizá, las únicas quienes sintieron un dolor que podría ser comparado con el que sufrían Delia, Grace y Serena. Así es, y o eran otras; que las amigas del entrenador. Todas y cada una de ellas y que veían esto en serio llegaron al borde de las lágrimas, por más que intentaran contenerlo. Sin importar donde estaban, el grado de relación que habían forjado con el joven elegido, su edad o su personalidad; todas ellas llegaron al punto de llorar al ver a su querido amigo ser pisoteado, aun a sabiendas de lo noble y bienhechor que era.
Debido a lo que parecía un inminente fin, los medios decidieron suspender la imagen de lo que ya podría ser una confinación: Que ese joven iba a encontrar su final en ese sitio y momento, sin nadie que pudiese prestarle auxilio, ni siquiera la jovencita que se encontraba sometida a solo unos metros de él. Injusticia e impunidad. Solo quedaba orar a Arceus para que tuviera clemencia de su alma. Que irónico resultaba que un joven podría causar tanto dolor de forma indirecta a tantas chicas, eso sin ser un canalla sino todo lo contrario. Solo Ash Ketchum podría ser digno de algo así.
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De vuelta a la cima de la torre Prisma, los guardias pokemon iniciaron su ofensiva, sobre todo por la toma del edificio principal de Luminalia. Sin embargo ante sus acciones Pyroar había lanzado constantes ataques de lanzallamas a lo cual en una réplica a lo sucedido con Garchomp meses atrás, las aeronaves tuvieron que maniobrar para evitar los daños, el mismo helicóptero de la prensa tuvo que retirarsedebido a la dificultad de operar y obstruirlas maniobras de las otras aeronaves.
Con la caballería detenida por el Team Flarey su Pyroar, Xero continuo su fechoría tomando a Ash del cuello una vez más, el pobre Ketchum estaba tan golpeado que apenas y podía mantenerse en sí; un ojo morado con la ceja destrozada por el golpe directo de un nudillo la cuenca cortada, sangre derramada de la comisura de sus labios su pómulo izquierdo destrozado, eso sin sumar el resto de heridas que el joven mártir ahora mostraba, y sin embargo…su ojo sano le miraba con ira.
Xero se rio del aspecto del desdichado entrenador, aparentemente le divertía masacrar al muchacho, aun pese a lo nefasto que esto resultaba…su gracia fue compartida por Lysson quien decidió torturar un poco más al muchacho.
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-Eres de admirar jovencito, pero nosotros somos mejores. ¿Y sabes una cosa? Debido a que perdiste mi reliquia tendré que buscar un premio de consolación. Supongo que tu novia será suficiente para cubrir parte de la deuda. –Lysson se rio mientras sin ninguna vergüenza sujeto uno de los senos de la joven concierta morbosidad y lo oprimió mientras ofrecía una sonrisa lascivia. A Serena esto le resulto de total indignación, además de un punzante dolor que le hizo lanzar un lamento muy escandaloso…Cosa que aun en la agonía, enfureció a Ash, denotando un claro seño de cólera impotente
-De…jala…-Demando Ash. Su espíritu de lucha moriría junto con el sino es que después de él.
-Hehehe veo que aún no captas el mensaje. De acuerdo. ¡Xero! Lanza a ese estorbo junto con sus sarnosos pokemons. Nos replegaremos en cuanto desinstalemos la máquina. –Fue su orden, e inmediato el pelirrojo de gabardina tomo a Serena junto con el portafolio con claras intenciones de retirarse.
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Xero sostuvo a Ash un momento y entonces lo pensó mejor, ¿Por quéno aplastar al insecto de una vez y luego botarlo como basura? Sonrió mientras miraba a Ash renovar su forcejeo por liberarse –Te arrancare los brazos primero. –Dicho esto, tomo al elegido de los brazos, las zarpas mecánicas estaban moliendo los huesos de sus muñecas como si el joven estuviese clavado a una cruz, la debilidad le hicieron bajar la mirada en una revelación demasiado bizarra para ojos de aquellos ajenos a este mundo. Acto seguido comenzó a estirar ambos brazos hasta que el joven azabache lanzo un grito de dolor que desgarraba su garganta, Serena no pudo evitar mirarlo, aunque fuera horrible; sentía que debía de verlo. Esto era contradictorio pero no podía hacer más que mirar absorta.
¿Acaso este era el final? ¿Así es como terminaría todo? Sin embargo; antes de que el daño alcanzara más allá del irremediable fin. Una esfera de aura impacto de lleno contra la espalda del corpulentomatón y el complejo sistema motriz de la armadura, el cual al momento se vio forzado a liberar a su cautivo quien cayó de lleno al suelo rodando lejos de su verdugo. De mismo modo, un sonido metálico y un pequeño artilugio dio paso a una explosión de humo y sonido aturdidor tomo por sorpresa a los presentes y no fue pasada por alto por las aeronaves que al ver su oportunidad de volver hacia la posición enemiga emprendieron la carga. En compañía de los corresponsales de campo que de inmediato enlazaron la transmisión de la señal, esto aún podía tener buena pinta.
El ataque había tomado por sorpresa a ambos malhechores pues de inmediato Lysson miro en dirección de dónde provino dicha andanada. Ahí mismo Lucario se encontraba recargando otra ronda la cual antes de adivinarlo, disparo a Pyroar, el león pokemon uso un hiperayo para contrarrestarlo. Afortunadamente esto distrajo lo suficiente al pokemon felino para que dé improvisto un Megablaziken apareciera de la nada usando un rizo defensivo sumado a una envestida, y consiguiese derribar al pokemon león liberando con ello a Pikachu y Froakie.
Casi de inmediato. Fennekin quien había aparecido en el momento oportuno, lanzo un ataque de sorpresa hacia el líder Flare cuyas ropas al contacto con las chispas del ataque comenzaron a incendiarse. Ante la sorpresa, Lysson perdió su agarre de Serena quien al verse con una oportunidad y enojada ante el daño que les había causado más el insulto recibido, no vacilo en golpear con su codo el vientre de su opresor con todas sus fuerzas. Al ser tomado con la guardia baja no pudo reaccionar frente al contraataque de la ojiazul. Serena por su lado aprovecho la ventaja para tomar el maletín y arrebatarlo de las manos de Lysson. Él mismo, antes de emprender alguna respuesta, solo pudo ver como la jovencita descargaba un fuerte porrazo con el portafolio sobre sí mismo.
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Ash se incorporó débilmente…estaba furioso…pero también estaba hecho pedazos. Posiblemente tenía lesiones de gravedad; fracturas hemorragias internas, dislocaciones en fin algo grave que reducida drásticamente sus posibilidades. Un hilo de sangre escurría de sus labios pero eso no nublo su deseo de venganza. Encaro a su agresor, Xero aparentemente estaba teniendo problemas con los sistemas mecánicos de su traje, era débil ahora, ahí estaba una ventaja. Lamentablemente Ash también lo era, no podía hacer mucho, menos…ahora que sintió un dolor punzante y agudo recorriendo su vientre. ¿O sí?
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-¡Ash! –Serena alcanzo al azabache y de inmediato le insto a seguirlo, alejándose de aquellos dos oponentes y también del bode de la torre.
-Serena… –Con las fuerzas menguantes, el maltrecho azabache hizo poco por impedir que la chica de ojos celeste le tomase de la mano y se lo llevase casi a rastras lejos de ahi.
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Tras haber superado su leve noqueo y de apagar el fuego en su ropa, LF decidió tomar lo necesario de su máquina y salir corriendo de ahí. Lamentablemente aquello fue imposible de alcanzar, pues un impactrueno seguido de un hidro-bomba terminó por destruir ese endiablado aparato, el cual exploto frente a su creador. Pikachu y Froakie acabaron de una vez por todas, los planes del Team Flare.
En apoyo del entrenador y sus pokemon había llegado aquel mismo pokemon evolucionado quien en esta oportunidad se hallaba acompañado de un misterioso enmascarado, de cuya identidad cubría con aquellos ropajes que emulaban un aspecto vagamente acorde al de su pokemon. Lysson tuvo tiempo de maldecir antes de ver el proyecto de su vida morir ese fatídico día
Ash por su parte se encontraba abatido y con apenas fuerza suficiente. Estaba postrado contra la pared mientras Serena utilizaba un pañuelo para vendar su cabeza mientras que con un pedazo de su falda vendaba su mano derecha la cual se veía realmente mal. La pelea había sido atroz y aun no había terminado.
Xero se vio forzado a abandonar su armadura, ahora fuera de esta tuvo idea de liberar a su Megacharizard negro el cual utilizo para contrarrestar la pelea contra Mega Blaziken y Megalucario. El pokemon recién llegado de inmediato se sumó a Pyror quien a pesar de su poder había sido superado y sin apoyo de su entrenador no podía llegar al estado mega, aun así los tres pokemon que completaban el equipo tampoco tenían el apoyo de su entrenador para pelear. Sin embargo este Megacharizard tampoco tendría gran ayuda de pate de Xero.
Aprovechando una oportunidad para apartarse y buscar una solución o ruta de escape Xero se dirigía hacia donde su jefe se había quedado mientras la batalla pokemon se daba lugar, sin embargo cuando dio vuelta cerca de la esquina norte de la torre, un fuerte golpe aterrizo sobre su cara derribándolo hacia el suelo. El golpe fue tan intenso que había roto sus gafas y frcturado su nariz así como una marca en su frente. Al incorporarse, levanto la vista para encontrarse con Ash, el joven se veía casi irreconocible, por hacer alusión al estado tan decadente en el que Serena le rescato, aun estaba herido eso no había duda, pero la diferencia ahora era que el joven azabache había tomado la ofensiva, prueba de ello era la jugarreta de haber usado el tanque presurizado. El joven no tenia su chaqueta azul, menos la gorra misma que se perdió al caer por el borde y con un extintor en la mano, miso que utilizo para golpear al gamberro.
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-Tu…-Xero se levantó de frente al azabache con intención de cobrarle la nueva jugada. En respuesta Ash le roció el químico anti-incendios justo en la cara, lo que causo una ceguera temporal pero suficiente para ajustar cuentas.
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Lysson estaba derrotado era ya un hecho. Muerto o no. Ash Ketchum, el elegido lo había derrotado. Solo quedaba escapar, si es que los pokemon del mocoso y la zorra de su amiga junto con ese prospecto a superhéroe se lo impedían, y estaba demasiado herido del orgullo para permitirse tal vergüenza.
Lamentablemente al observar la batalla entre los pokemon oponentes y su Pyroar, noto también al Megacharizard de su asistente Xero, podía bien persuadir al Pokemon dragón de ayudarle a escapar. Sin embargo al dirigirse a un sitio donde realizar su movimiento, se topó con la pequeña Fennekin que hacía rato había intervenido para ventaja de Serena.
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-¡Pero si eres esa maldita zorra! ¡Ven aquí te voy a hacer pedazos! –Antes de poder darle una oportunidad Fennekin emprendió la huida siendo seguido por el pelirrojo, no sabía que más que intentar cobrar venganza, estaba siendodirigido a una trampa.
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Pyroar se encontraba abrumado, apenas y podía centrar la vista sobre un solo objetivo, los ataques rápidos de Pikachu, las trampas sucias de Froakie y la táctica de Lucario junto con el poder avasallante de Megablaziken habían sacado factura. El pokemon león finalmente fue derribado por un ataque conjunto de Lucario y Megablaziken. Derribado el león de fuego, era momento de centrarse en el Megacharizard, Pikachu y compañía prácticamente estaban huyendo del pokemon dragón.
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La mala pinta que había surgido de esta situación, se había vuelto en júbilo y ánimo puesto que al retransmitirse de nueva cuenta. La audiencia en su totalidad, en especial el grupo de chicas que habían sido asaltadas por tremenda nota negra…ahora miraban atónitas lo que muchos describirían…como una autentica lucha de gladiadores. Y muchas de ellas quedaron impactadas con el espectáculo en vivo y a todo color que tenían ante sí.
Los mismos hermanos Meyer estaban ahora tan entusiasmados que debían contenerse de expresar su ánimo positivo, pues a pesar de la buena fortuna que les había retornado, se encontraban todavía en terreno hostil, aunque que ello era lo de menos, la situación se había vuelto a favor de ellos y sus amigos en un santiamén. La pequeña Bonnie parecía incluso emocionarse a tal punto que alentaba a con aquella euforia típica de los niños de su edad.
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-¡Vamos Ash! ¡Pégale! ¡Pégale! ¡Dale duro! ¡Dale! –La pequeña se encontraba animando a nadie más ni menos que a su "hermano mayor adoptivo", pues esta alentaba al joven azabache que seguramente se encontraba en una situación distinta a la situación tan adversa en el que se encontraba anteriormente.
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En efecto la gente de Kalos y todos sus conocidos estaban ahora apoyando a Ash de una forma que ni siquiera lo había hecho durante la competencia pokemon. El azabache había tomado la ofensiva y vaya que la estaba desquitando.
Xero quedo cegado por el polvo químico del extintor y fue más que suficiente para que el azabache descargase una serie de golpes con el mismo objeto una y otra vez. Regordete hombre intento tomar ventaja tratando de arrebatarle el extintor, Ashsi guió y en ningún momento dejo de arremeter contra el gamberro que apenas estuvo de liquidarlo. Alejándose del azabache, aprovecho lo suficiente para hacerse de una palanca de acero e intento golpear a Ash, que en un acto de reflejos hábiles, interpuso el tanque presurizado el cual, al ser perforado con la pica de la palanca libero el resto de su contendió justo sobre el hombre musculoso. Nuevamente aturdido por el polvo químico Ash lanzo el tanque contra Xero, golpeándole de lleno y al verse sin ninguna arma más que sus manos, el azabache se lanzo él mismo contra su oponente.
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Serena se encontraba acorralada. Había terminado en la esquina sur, mismo sitio donde Lysson había llegado con el fin planear su escae. Para ello ordeno al MegaCharizard de Xero abandonar la batalla en el momento adecuado. El problema es que el pokemon dragón ahora se veía en una situación difícil con el resto de los contrincantes superándole. Sin recursos; él ahora frustrado líder de los Flare veía una oportunidad de escape, la toma de un rehén. Por suerte Serena tenía otros planes entre manos.
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Ash envistió a Xero intentando empujarlo hacia el borde del edificio, sin embargo; el mismo Xero supero la contusión del golpe y ofreció un forcejeo con el azabache, aun sin su armadura Xero seguía siendo un contrincante difícil de superar, y es que en realidad estaba algo pasado de peso, cosa que resulto ser ventajosa al utilizarlo para empujar y contrarrestar el enviste de Ash. Finalmente pudo tomar parte de la ventaja y apear de seguir con los ojos irritados por el polvo, pudo patear a Ash lejos de sí. Por fortuna; el joven había aterrizado aun sobre la superficie del edificio y no del lado contrario, había que darle gracias a Arceus por la ceguera producida en su enemigo.
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-¡Ya estoy harto de esto! –Xero se levantó casi tan rápido como Ash, librandose finalmente del polvo en sus ojos, entonces pudo ver vagamente al mocoso que debía eliminar. Vio que el joven parcialmente aturdido, posiblemente el no estaba del todo recuperado de sus lesiones. Mejor así, pues sería más fácil apuntarle. Xero sonrió perversamente mientras se llevo la mano a la funda del arma en su cinto. Lentamente su sonrisa se borro cuando no sintió esta. Un rápido vistazo confirmo que el arma en cuestión no se encontraba en su sitio.
-¿Buscabas esto? –Ash ostento dicha arma en su mano izquierda.
-¡Mocoso malparido…! –Impotente Xero lo maldijo a él y a su madre –¡Te voy a-
"-Disparo-" –Xero miro a Ash apuntarle y jalar del gatillo, luego su vista se nublo en carmín y antes que nada, sintió su vientre con sus dedos…sangre embadurnaba estos cuando los vio nuevamente.
-Mi madre…es Delia Ketchum…una verdadera dama…a diferencia de la tuya. –Tembloroso pero sin vacilar Ash disparo de nuevo. La bala impacto de lleno en la frente del hombre, matando al infeliz de una vez por todas. Ash Ketchum se había manchado de sangre las manos por primera vez en su vida. Sin embargo, debía reconocer la situación antes de cualquier prejuicio. Arceus lo entendería.
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La gente había visto esto en vivo y a todo color e incluso llego a atemorizar a algunos. Esto no solía verse muy a menudo, menos en una región supuestamente tan pacifica y utópica como Kalos.
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-Tira el arma o mato a tu novia… –Lysson hizo su aparición por uno de los pilares decorativos de la cima trayendo consigo a Serena. La chica estaba sometida por el brazo derecho del líder Flarea haciendo andado sobre su cuello y balanceando una afilada navaja sujeta por su mano libre el pelirrojo tenia clara ventaja sobre su víctima. Serena estaba asustada.
Ash los encaro mientras sujetaba aun el arma en su mano, esta vez menos temblorosa. Estudio la situación lo mejor que sus nervios y su temple podía hacer. Este maldito había hecho de todo lo malo y cruel posible de hacer: había dirigido a un grupo de maleantes, atacar a cientos de inocentes, seguramente lastimado a muchos y posiblemente quitándoles la vida a varios más, había intentado matarlo a él e incluso tenía intenciones de quedarse con Serena para su placer, lo que más le enfurecía. Y ahora como un cobarde, intentaba usarla de escudo. Esto no tenía perdón de Arceus y tampoco del mismo azabache, menos ahora que había descubierto lo que se siente jalar del gatillo de un arma.
-La soltare. Pero primero libera a Serena… –Sin perder la cautela pero menos bajar el arma intento negociar como si fuese un agente de la policía lidiando con un secuestrador.
-¿Crees que soy estúpido? ¡La degollare antes de que dispares! Sera fácil, igual que a un Fletching… –Lysson comparo lo fácil que sería arrebatarle la vida a la joven. Esto asusto a Ash, no quería que Serena encontrase su fin este día. No se lo perdonaría nunca.
-¡Espera! Por favor…permite. Permíteme cambiar lugar con ella. –Ash levanto las manos en señal de rendición a pesar de no haber soltado aun el arma. Miro a Serena mientras sus miradas se encontraban. Ella tenía un semblante neutral, algo quería decirle ¿Pero qué…? Lo mejor era esperar el momento justo.
-¡Alto ahí! Lysson! –Una voz ronca y firme demando. ¡Ríndete, estas derrotado! ¡Todo termino! –El enmascarado finalmente apareció justo en medio de ambos contrincantes. –Observa. –Señalo hacia los helicópteros en derredor y a los pokemon que le rodeaban, todos ellos en contra suya. –¡Ríndete ahora mientras puedas obtener una oportunidad!
-¡No! ¡Prefiero morir…! –Lysson marco su destino ante sus ahora verdugos. La desesperación y rabia conspiraron contra el líder de los Flare quien extendió su mano alejando el cuchillo del cuello de Serena con el fin de amenazar tanto al enmascarado como al azabache, ignorante del peligro que literalmente estaba pegado a él.
-¡Entonces muere…! –Serena revelo un pedazo de vidrio oculto en sus mallones negros, mismo que sujeto firme en su mano y como un improvisado cuchillo, lo clavo de un violento golpe en el hombro de Lysson, este al sentir el dolor penetrante y frio, perdió fuerza mientras la joven quebraba el vidrio en la herida. Antes de que pudiese hacer algo en su contra…Lysson fue golpeado nuevamente por la joven y ello permitió a Ash retomar la postura, apuntar y abrir fuego contra el pelirrojo apenas Serena consiguió apartarse de él.
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Lysson fue impactado por cinco tiros descargados a media distancia, mismos que terminaron por empujar al herido hombre fuera de balance lo que consiguió por derribarlo, al resbalar por el borde del edificio. Lamentablemente la brusquedad de la caída y la mala suerte sumadas, volvieron a conspirar, en esta ocasión contra Serena que fue apresada por el maleante y arrastrada por el borde del edificio.
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¡No! –En un impulso de adrenalina, ante la vista de su amiga y casi hermana perderse al borde de la torre, en una caída de tal altura hicieron que Ash se lanzase al rescate de Serena en una verdadera muestra de heroísmo que solo podía ser equiparable a una devoción mártir. Afortunadamente el azabache en una veloz barrida de vientre, alcanzo a tomar con ambas manos la mano derecha de la joven, quien apenas pudo pescar a su amigo o de lo contrario Ash tendría que buscar la manera de subirla con el doble de esfuerzo. Sin embargo, apenas el joven pudo afirmar su peso cuando noto que en efecto había un peso extra, el cual no le permitir subir a su amiga sin poner en riesgo la vida de ambos. Ambo jóvenes se percatarse la razón del peso extra que cargaba la joven encima.
-¡Ash no! –Aquel héroe anónimo advirtió. –A pesar de la presencia de los Pokemons la situación aún seguía en desventaja por la presencia del Charizar en estado mega que ahora amenazaba con atacar a los jóvenes, El héroe anónimo tomo el amando en la defensa de los chicos, esto impedía poner atención en ayudarle a Ash a poder subir a la chica, ambos estaban solos aun. Ash se balanceaba entre mantener a Serena y a él mismo sobre el borde del edificio percatándose ambos jóvenes que Lysson aún seguía vivo y que estaba sujetado con una sola de sus manos de la pierna izquierda de la joven.
-Moriremos… todos… –Fueron las palabras del líder Flare mientras hacía peso extra para jalar a los dos jóvenes consigo a la muerte. Ash intento alcanzar el arma pero esta había quedado lejos de ellos, no había solución fácil a este embrollo. No podía hacerlo solo…No sería necesario que lo hiciese así.
-Maldición…no puedo… –El azabache luchaba por sostener a su querida amiga pero cierto era que el peso extra limitaba sus esfuerzos. Por no olvidar sus lesiones aun presentes.
-Ash… –Serena le llamo. El joven Ketchum la encaro un poco confuso. –Déjamelo a mí. –Fue-su sencilla respuesta. Ambos se miraron fijamente por un segundo, entonces la chica le sonrió de una forma que podía ser mezcla de seguridad y confianza.
-¡Nos iremos a la tumba…los tres! –Exclamo Lysson. Sus heridas hacian todo por erradicar sus fuerzas pero él no caería sin haber arrastrado al causante de su fracaso. Su venganza…seria asesinar a Ash Ketchum y a su zorra amiga.
-Te irás tu primero. –El pelirrojo fue tomado por sospesa. Serena lo miro asistiéndose del agarre de Ash y luego de mostrarle un seño déspota al maleante, le propino una patada con todas sus fuerzas justo en la cara. Lysson se cayó al vacío y maldijo mil y un veces a la pareja hasta que se perdió de vista. Ash, que había visto esto suspiro sintiendo una menor tensión en sus hombros. Permitiéndose un respiro en esta postura tan complicada. A fin de cuentas…los dos lo habían conseguido.
-Serena… ¿Estás bien? –Ash le pregunto claramente preocupado. Aparentemente ella estaba en mejores condiciones a las del joven.
-Descuida Ash…estoy bien. Ahora o estoy…todo gracias a ti... –Serena presiono con afecto las manos del azabache mientras lo miraba cristalinamente. Una vez afianzado en el borde, Ash ayudo a Serena a subir por completo, asegurándose de ponerse ambos fuera de peligro. Una vez de vuelta sobre terreno firme los dos se abrazaron con fuerza y alivio.
-¿Acabo…? ¿Ya…se acabo…? –Pregunto el azabache, obviamente al borde de un colapso, estaba nervioso aterrado y con un estrés difícil de poder expulsar.
-Descuida…ya...ya término. Nos salvaste a todos…Ash…nos salvaste. –La chica había superado su sorpresa primaria para remplazarla por júbilo y alegría. Adoptando ahora, la postura aliviadora para brindarle al joven azabache la confianza de exhalar de alivio y tal vez…llorar de alegría.
-Serena…yo…yo… -El consuelo fue tal que el azabache comenzó a sollozar lentamente mientras volvía a mirar a la joven. El azabache estaba literalmente llorando per aun no podía no conseguir romper la voz.
-Ash…yo…tengo…tengo… -Serena estaba cautivada por dicha expresión en su queridos amigos y amor platónico…esto no hacía más que indicarle cuanto el joven estaba aterrado por la idea de perderla.
-¡Ash! ¡Serena! –Clemont y Bonnie aparecieron por una de las puertas aparentemente habían hecho su camino con el resto de los Pokemon cubriéndoles. A su vez los helicópteros hacían un sobrevuelo más cercano haciendo espacio para descender de uno a uno.
-Término Ash…todo termino. –La joven derramo lágrimas de felicidad mientras se aferraba más al muchacho y ambos jóvenes se demostraban ese consuelo tan cercano e intimo que por un momento Serena no podía creerlo. Al fin, después de varios días de terror y angustia, habían conseguido salir de ese horror y lo mejor de todo, estaban juntos. Solo faltaba decírselo. Ahora más que nunca.
-Ash…te quiero decir algo… –La joven se liberó de su abrazo para encontrarse con su mirada
-¿Qué…que pasa Serena? ¿Te duele algo…? –Ash le pregunto obviamente asustado…pero ella consiguió calmar sus nevios tras tomar su rostro entre sus manos. Una vez la tuvo al frente suyo, fue como Ash consiguió poco a poco apaciguar su temor, y vaya forma de lograrlo... Era cuestión suya, o Serena se veía aun mas radiante en el amanecer que se avecinaba. Como si de momento la hubiese redescubierto y notado por completo su belleza.
-Te…yo te…yo te ¡YO TE AMO! –La joven le dijo casi en un grito para luego besarlo. El atrevido acto de arrojo fue en poco tiempo recompensado por el azabache que sea por lo inverosímil o el simple hecho de celebrar o mejorar aun de corresponder a ese beso, le respondió acariciando su cabello mientras seguían postrados en el suelo.
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Había terminado, tan pronto como esto sucedió varios guardias pokemon habían arribado. Unos de ellos en un helicóptero, otros más salieron de las puertas circundantes con apoyo de sus fieles amigos Pokemon, finalmente tras cerciorarse de que la zona era segura uno de ellos lanzo una bengala verde la cual fue un cambio radical al amanecer de tono durazno y rojizo. El humo verde indicaba que la torre de Luminalia había sido asegurada y que los miembros del Team Flare habían sido vencidos o forzados a retirarse.
De igual modo y conforme la vista se apartaba lejos de esa torre, se podían ver más helicópteros arribar a la ciudad y casi enseguida, mas bengalas de humo verde se veían lanzadas desde edificios alternos. Como si fuese un espectáculo sincronizado en toda la ciudad. Finalmente ciudad Luminlia era liberada de las manos del Team Flare, pero la verdadera victoria había venido de aquella batalla librada a sangre fría en la cima de la torre Prisma, que pudo haber terminado en una trágica derrota, pero a fin de cuentas…había sido ganada por Ash y sus amigos…y los logros de esa hazaña habían sido vistas por mucha gente, no solo en Kalos sino en distintos lados de varias regiones.
Esta victoria marcaba el fin de una odisea, pero también; el inicio de una historia diferente, una que veríamos menos turbia y por el contrario más amena. Y pensar que todo seria originado por la victoria del ahora reconocido "Defensor de Kalos"
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Pronto veríamos a las que a su vez serian reconocidas como: "Las damas del campeón"
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Pero esa es otra historia…
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Bueno damas y caballeros, Aquí es donde un servidor quiere mostrar su agradecimiento con toda la audiencia de este fic en particular…La razón de la constante edición es que no siempre se consigue un gran trabajo de buenas a primeras. Un con la ayuda de mi querido amigo y lector Betta; Tha Knight of Hope, se hace todo lo posible por ofrecerles este grandioso fic…
Sé que muchos a estas alturas están deseosos de poder leer la próxima entrega de tan singular fic, así como averiguar que ha sido de nuestros héroes y como han superado sus obstáculos. Paciencia querida público, la paciencia es lo que pido, grandes obras como estas, requieren de su respectivo tiempo. Créanme que estoy tan paciente como ustedes de publicar la continuación, pero aun cuando dije que las continuaciones serian mas amenas y menos cargadas, aun requiere de ciertos detalles a abordar…humildemente me disculpo por las demoras, pero confió que valdrá la pena.
Por último se que esto es un fic del tipo Harem, pero como dije a principio y valga la redundancia con la que se manifiesta. Es necesario dejar en claro, que es una historia diferente, ofrecerá uizas la misma tendencia pero el producto final a fin de cuentas les ofrecerá un enfoque diferente y mucho más satisfactorio. Lo que me conocen de tiempo entenderán sobre ello.
Y bueno damas y caballeros…este es la última y más eficaz redición de este prologo, hecho a su gusto y por un servidor. Manténganse firmes, lo conseguiremos a final de cuentas. Sin más que ofrecer me despido.
Cambio y fuera…