Disclamer: Hetalia: Axis Powers, Hetalia: World Series, Hetalia: The Beautiful World así como todas sus variantes y personajes no me pertenecen, ni al otro autor de este fic (Remus), pertenecen a su pertinente autor (al cual adoraré toda mi vida por haber creado esa maravillosa serie). Este fanfic ha sido creado sin ánimo de lucro, sólo es mero entretenimiento de unos fans para las fans. Aclaro de nuevo que este fanfic es un Inglaterra x Nueva Atlántida, Spuk (y UKsp), Minoico x Chipre Griego, Escocia x Antiguo Egipto, Spamano de momento nada explícito, se da a entender, menciones a GerIta y como se está escribiendo sobre la marcha no se sabe cuántas parejas más, una serie de historias que Remus (un amigo mío que es otro autor del fic y al cual tampoco pertenece hetalia ni nada relacionado con lo que pongamos aquí) y yo estamos escribiendo por simple diversión y entretenimiento.
Hetalia: Atlántida y Chipre
Capítulo 1. Reencarnación
Chibitalia
Había una vez unos países que vivían más o menos en armonía, uno de ellos era el pequeño Chipre, que jugaba con su padre… cuando estaba despierto. Un día, Chibichipre y su padre Grecia fueron a visitar a los tíos de Chibichipre, Chibihispania y Chibilusitania. Cuando llegaron a la Península Ibérica se encontraron con una joven senil. Era muy atractiva de cabello blanco y ojos azul claro. La joven sonreía junto a los países ibéricos que trepaban por su pelo tan felices, a pesar de tener Chibihispania 10 años y Chibilusitania 12. Era todo muy feliz… y Grecia se quedó dormido. Entonces, la mujer dejó a los dos pequeños en el suelo y se acercó con una pacífica sonrisa hacia Chibichipre. Chibichipre se aproximó confiado… hasta que la mujer le dio suavemente con un palo en la cabeza sin causa aparente.
— ¡Ay! –se quejó chipriota.
— No voy a poder volver a verte en una buena temporada –exclamó la mujer, aun que el pequeño no recordaba haberla visto en ninguna otra ocasión –porque voy a morir –dijo ella sonriendo como si nada ante el escandalizado país –dile a tu padre cuando despierte que por favor cuide de mis pequeños Hispania y Lusitania… aun que sea un adolescente… tampoco tendrá que cuidarles mucho tiempo… ¡porque volveré! ¡Resucitaré de entre los muertos! –informó la loca riéndose malvadamente como una mientras caminaba hacia el mar donde, lógicamente, comenzó a hundirse hasta desaparecer al igual que una isla cercana.
— Adiós señora extraña –susurró Chibichipre mientras se iba a dormir con su padre al que se le habían subido sus dos pequeños hermanos Chibilusitania y Chibihispania para saltar encima suyo sin preocuparse de que su madre acababa de hundirse en el mar.
AHORA ESTAMOS EN EL SIGLO XXI
En una reunión secreta en un rincón perdido de Seychelles, Francia, Alemania, Inglaterra, Escocia, Rumanía, China, Rusia, Turquía, Marruecos, Seychelles, Prusia, Holanda y Chipre conspiraban con mucha maldad.
— España no ha cumplido sus obligaciones de déficit –gritó Alemania rompiendo los cumplimientos de déficit de España el cuál intentaba cumplirlos con sudor y lágrimas.
— Es el momento que estábamos esperando, vamos a invadir España jiji por fin será mío –dijo Inglaterra con cara de pervertido mientras Escocia le vertía la taza de té a la cabeza sin decir nada.
— Estúpido bárbaro, tú ya tienes sus partes bajas, deja algo de España para los demás –inquirió Francia muy refinado. Inmediatamente ambos se pusieron a pelearse por el insulto del francés.
— Ya estáis otra vez peleándoos aru. Su cuerpo me da igual pero yo quiero quedarme con su casa y llenarla de tiendas –empezó a fantasear China.
— A mí con tal de tocarle las narices a ese idiota España me da igual, no le consiento lo del mundial de fútbol –expresó Holanda con sequedad y los brazos cruzados.
— Yo sólo quiero invadir a España con kebabs, quedará todo precioso y tú me ayudarás Chipre Turco –se rió Turquía desde detrás de su máscara.
— Te he dicho que soy Chipre, déjame libre papá –rogó el joven chipriota con las manos atadas.
— Cuando acabe con España volverá a ser Al Andalus –se carcajeó Marruecos.
— Sus habitaciones serán idóneas para mis habitantes ¡y con vistas al mar! –fantaseó Rumanía.
— Yo quiero vivir en sus campos de girasoles, además España es muy agradable conmigo, quiero que sea uno con Rusia kolkolkol -…
— Kesesese West, haz lo que quieras con su economía, pero déjamele atado a mí –dijo el prusiano pensando cosas pervertidas de uno de sus supuestos mejores amigos.
— No sé de qué estáis hablando, ¿pero queréis iros ya de mi casa? –pidió Seychelles. Al ver que no la escuchaban, cogió una rama y empezó a golpearles a todos con ella hasta echarles al mar. Fueron recogidos por el servicial Sealand (el cuál no está reconocido ni por el Word) y por su país quién les llevó hasta España en un periquete, habían mejorado mucho su sistema de propulsión.
España miraba aterrado como los países atacaban su casa y rompían su puerta. Se encerró rápidamente en su habitación.
— Creo que no saldré de casa en una temporada, viviré a base de latas de tomate fusososo –lloró el pobre español viendo como tras la ventana de su cuarto se agolpaban los países con rostros pervertidos… y otros interesados. Holanda echó la puerta abajo tirando a su padre España contra una pared y estampándole contra esta mientras Escocia rompía innecesariamente la ventana con su propia cabeza ante la desaprobación de su hermano pequeño.
— Ahora España, ríndete ante el Imperio Inglés, cásate de nuevo conmigo y no vuelvas a separarte de mí –exclamó Inglaterra con su traje de pirata lleno de polvo por la antigüedad.
— ¡Nunca insensible! ¡Iros de mi casa! –exclamó España haciendo que todo español, al escuchar sus gritos atacasen a los invasores. Pero Alemania les cerró la desencajada puerta en las narices.
— ¡España! ¡Vas a ser nuestro hasta que pagues tu deuda! –exclamó el alemán levantándole del suelo a lo bruto, aun que desde luego no pensaba liberarle nunca.
— ¡Soltad ahora mismo a Antonio! –gritó una voz bajo el suelo que interrumpió a los países que trataban de hacer cosas impropias a España el cual se estaba quedando medio desnudo. Del susodicho suelo emergió rompiendo las baldosas una chica de unos 20 años de cabello castaño claro y ojos marrones… inexplicablemente… esta mujer que hacía esta clase de acciones superhumanas… era una humana normal.
— ¿Qué coño? –exclamó el holandés sorprendido como los otros tantos países que ahí se encontraban, hasta el propio España estaba sorprendido.
— ¡No sé quiénes sois pero no le haréis nada a mi amigo Antonio! –exclamó la joven que de una patada tiró a Holanda por la ventana.
Alemania, sorprendido, fue junto a Prusia para rescatarle. China se la acercó furioso al ver interrumpido su sueño con su sartén dispuesto a golpearla pero la chica tomó de un extremo también el artefacto de cocina y le mandó a freír espárragos destrozando ya de por si el marco de la ventana. Rumanía y Francia huyeron ante tal despliegue de fuerza humana, o más bien porque no les apetecía pelear.
Turquía intentó secuestrar a la joven cuya fuerza le pareció muy sexy, pero la joven le dio un rodillazo en la cara zafándose de él con rapidez. El turco acabó desmayado en el suelo. Su hijo Chipre procedió disimuladamente a tirarlo por la ventana para librarse de él. Tras eso se escondió debajo de la cama donde casualmente estaba su otro padre Grecia durmiendo por motivos económicos. El ruso al ver que nadie le apoyaba decidió marcharse tranquilamente por el agujero del suelo susurrando un "kolkolkol" mientras se marchaba.
Marruecos trató de ponerla un burca por su bestialidad pero la chica cogió dicha prenda y empezó a estrangular al musulmán lanzándole varios improperios y obligándole a huir desesperadamente.
Inglaterra y Escocia eran los únicos que seguían ahí plantados. El primero con sorpresa y el segundo fumando un puro tan tranquilo ignorando todo.
— ¿Quién demonios eres tú? –preguntó el inglés señalándola.
— Sólo soy una chica española –Escocia silbó con admiración ante tal capacidad de bruterío.
— ¡Pues pienso dejarte por los suelos española! ¡Pienso casarme con España pase lo que pase!
— ¿Eh? ¿España? –preguntó la chica confusa, no tenía ni idea de la existencia de los países físicamente. El inglés se abalanzó sobre ella espada en mano dispuesto a embestirla sorprendiéndola momentáneamente. La chica tomó rápidamente una espada oxidada que encontró en el paragüero a su derecha (España no era muy ordenado por lo visto) y se defendió a duras penas de las embestidas inglesas. La chica retrocedía ante la experiencia en combate del rubio cejudo.
— ¡Cristina! ¡Aléjate! ¡Te harán daño! –rogó España intentando cubrirse con el kilt de Escocia que le pateaba por eso.
Pero era demasiado tarde. La chica tropezó con Chipre que se asomaba por debajo de la cama y perdió la espada cayendo al suelo. El inglés sonrió victorioso apuntándola a su cuello con la espada.
— Ahora fíjate en cómo hago que tu país se una a mí –dijo Inglaterra poniendo una mano en la frente de España como si tratara de quitarle el bending (¿?)
— ¡Suelta ahora mismo a Antonio! –gritó la mujer soltando un extraño aura asesina de color azul que de pronto empezó a cambiar a dorada de golpe cambiando también el físico de la chica. Su cabello castaño se tornó rubio y sus ojos castaños rojo sangre. También se escuchó un estruendo en un lugar hacia el oeste, una isla acababa de emerger en el atlántico. La chica acababa de transformarse… en un país.
— ¿Qué sangrientos demonios…? –preguntó el inglés anonadado.
— ¡Suelta ahora mismo a mi hijo! –gritó la chica con una voz que no era la suya invocando un tridente dorado de Dios sabe dónde y golpeando al inglés con él haciendo que soltase la espada. Inglaterra retrocedió sorprendido.
— ¿M-mamá? –preguntó España cayéndose de culo al suelo y arrastrando a Escocia en su caída.
— Esa voz… me resulta familiar –dijo Chipre desde debajo de ella.
— ¡Modo Berserker… activado! –gritó el recién transformado país arremetiendo contra Inglaterra y tirándole hacia el techo rompiendo este y mandándole de vuelta a su casa – ¡hala pa' tu casa! –Escocia tras eso se retiró sin interés de la escena llevándose el minibar de España.
— Antonio… ¿estás bien? –preguntó la chica volviendo a la normalidad e inclinándose sobre el español tras clavar el tridente en la cama y casi ensartar a los dos helenos.
— Cristina… ¿qué te ha pasado? –inquirió a la vez el Español medio desnudo.
— Pues… no lo sé… de pronto escuché una voz… que me dijo… que los churros con coca-cola no están buenos.
Los dos países que estaban despiertos la miraron extrañados.
— Mamá… siempre dices cosas muy extrañas –susurró una voz al fondo de la estancia. Era de un chico castaño de cabellos revueltos y ojos verdes con mirada de resignación mientras sonreía.
— ¿Quién eres? –preguntaron los dos españoles al chico que vivía escondido tras un armario.
— Soy Portugal –lloró el pobre país –soy tu hijo, España soy tu hermano mayor.
— ¡Uy, Portugal, perdona, me olvidé de ti! –exclamó España avergonzado.
— Siempre te pasa igual, y eso que yo aprendo español para poder hablar contigo.
— Si… ¿pero quién eres? –preguntaron esta vez todos, hasta Grecia que se acababa de despertar.
— Os lo acabo de decir –gritó Portugal saliendo de la casa llorando.
HETALIA
N/A: Pobre Portugal, en serio. Bueno, este es el primer capítulo de una laaaaaarga saga que aún seguimos escribiendo Remus y yo y que aún continuamos hasta el día de hoy. De hecho pronto acabaremos la primera parte de la saga que duraría hasta el fin de la guerra (que ya veréis que menuda guerra) y luego habría una interrupción en la que vendrían algunos fanfic que estoy escribiendo por mi cuenta, otros que hemos escrito juntos y... bueno, eso. Muchos fanfic y capítulos. Después de subir aquí la friolera de 9 capítulos que llevamos subiré los demás. Además tengo pensado subir algún que otro interludio como el "¿qué pasó esa noche?" que veréis a qué me refiero en los próximos capítulos y luego los que ya tengo pensados y están por subir en cuanto subamos el último capítulo de la temporada que es el 11 y como aún estamos escribiendo el 10 pues nos queda tiempo. De hecho después seguiremos con una segunda temporada que ya estamos empezando a maquinar en nuestras cabecitas malvadas. Espero que os haya gustado el capítulo, muchas gracias por leer y por favor, un review por caridaaaaad para esta pobre y loca autora (¿?).
