Capitulo 1

Era una hermosa mañana en la montaña Paoz una hermosa pelinegra acababa de despertar estaba muy feliz porque Goku había vuelto con ella

Se levantó muy contenta y sin más bajo las escaleras rápido y empezó a hacer el desayuno poniéndole mucho esmero, la ver como quedo sonrió y llamo a sus amados hijos y esposo

- chicos a desayunar -grito con suficientes fuerzas como para que todos la escucharan

Gohan, Goten y Goku bajaron como rayo al percibir el delicioso hedor de la comida

-Mama se ve delicioso- dijeron Goten y Gohan al mismo tiempo que daban las gracias y empezaban a comer velozmente

-Si Milk se ve muy rico ya extrañaba tu comida-exclamo felizmente el azabache mientras devoraba la comida

-Hay chicos que lindos son, pero no se tarden por favor que se les va a ser tarde para la escuela

- ¡Hay! -dijeron animadamente ellos

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Milk empezó a lavar los platos mientras tarareaba una canción pacíficamente olvidándose cambiar de ropa, pues solo llevaba su camisón hasta las rodillas y el pelo suelto

Milk sonreía feliz al fin podría pasar tiempo con su amado Goku y al terminar sus deberes se acercó a Goku

-Goku ... Etto quieres hacer algo el día de hoy... ya sabes algo junto como pasear por el bosque o.…- La oji-onix estaba muy sonrojada al hablarle de su idea y empezó s jugar con su camisón sin darse cuenta

Goku con su típica sonrisa empieza a hablar nerviosamente al ver como su esposa quería pasear con el

-Milk este me voy a entrenar con vegeta se lo prometí y no quiero que este molestándome de que no cumplo nuestro acuerdo-excuso este mientras se rascaba la nuca nerviosamente para no enfadar a esposa

-pero Goku pensé que te quedarías conmigo hoy, yo quería pasar tiempo contigo Goku te extrañé mucho - dijo triste mientras miraba para abajo intentando guardar sus lágrimas en sus bonitos ojos.

-Milk no te pongas así... te prometo que te lo voy a recompensar hare lo que tú quieras, pero no llores -susurro el mientras colocaba sus manos en sus mejillas y limpiaba las lágrimas rebeldes que se escapaban de sus cuencas

Milk lo miro y sonrió y sin más lo abrazo

-Bueno puedes ir, pero por favor cuídate mucho por favor no quiero que te lastimes-susurro ella mirándolo a los ojos

-Si Milk- Sonrió y salió volando despidiéndose de su Esposa