Entre espadas.
Summary -El destino pone a dos reinos en guerra. Él solo desea lo mejor para ella, pero ella ha perdido una parte importante de sí misma. ¿Logrará salvarla de la oscuridad? Oneshot. NejiTen, ItaHina, SasuNaru.
I. Episodio previo a la guerra.
Caminaba lentamente por los pasillos del palacio, atendiendo a cada detalle que capturaba con cada paso que daba.
-Su majestad -Lo saludó uno de sus consejeros- ¿Arregló ya los tratados de paz con el Reino Uzumaki?
-Aún estamos en eso, pero aunque haya tregua declarada, no podemos fiarnos en caso de que decidan romper la alianza temporal, así que informa a los guardias y centinelas de la ciudadela y los pueblos que redoblen la seguridad.
-¿Algún otro mandato?
-Prepara los caballos. Iré a dar una vuelta a los alrededores en un momento más.
-Enseguida, señor.
Una luz, proveniente del cuarto de una de sus primas, se filtraba entre la oscuridad, y, acercándose, escuchó que Hinata, la mayor, contaba un cuento de hadas a su hermana Hanabi, hábito que no había perdido con el paso de los años.
"Hace mucho tiempo existieron dos niños que, sin saberlo, jugaban juntos, día tras día, ajenos al cruel destino que debían llevar sobre sus hombros.
Un día, sucedió aquello que debía pasar. La guerra se declaró entre sus reinos y ellos fueron separados.
Pasaron los años... Él venció, pero no por el hambre de poder, sino por que estaba dispuesto a recuperarla, pero el corazón de ella no daba las señales de vida propias de las personas. Se volvió una muñeca de la voluntad de los demás sin un destino propio el cual alcanzar.
Por eso, él decidió tomar su vida, e inmolarse en el acto, ya que si no volvería a tenerla en vida, la acompañaría en el camino de la muerte, para renacer con ella en un nuevo amanecer, por un nuevo futuro.
FIN"
-Yo me hubiera ido con él -confesó la menor, provocando que Hinata se sonrojara completamente.
-¡No digas esas cosas! -Hinata terminó de arropar a su hermana, le dio un beso en su frente y salió de ahí- Descansa Hanabi, mañana será un día difícil.
Caminaba de prisa, completamente absorta en sus pensamientos, que no notó la silueta que un momento atrás la observaba.
-Serás una buena madre en un futuro -Fue el cumplido con el que Neji saludó a Hinata para atraer su atención- Yo no tendría la paciencia para contarle cuentos a los niños.
Hinata se sobresaltó, pero al instante le dedicó una respetuosa reverencia a su primo, cosa que le molestó a él, pero ella no le prestó atención al detalle.
-Joven Neji. ¿Aún está ocupado en sus deberes? -La joven se encaminó al pasillo opuesto- Debería dormir aunque solo fuera un poco. En un momento le prepararé un té y prepararé su cama.
-No quiero té. Aún hay algo que necesito hablar contigo, en privado.
Ella sabía a qué se refería, por esa razón, le acompañó al cuarto que él usaba de estudio, y esperó de pie.
-¿Por qué me acompañaste al campo de batalla?
FlashBack
Neji cruzaba su espada encarnizadamente en contra de sus enemigos. Como soberano, sabía que su deber estaba con los suyos, y si perdía la vida en el trancurso de la guerra, nada le honraría más que muriendo como un guerrero, con honor y con el orgullo de saber que la llama de su vida se apagó por el bien de los suyos.
-¡Su majestad, cuidado!
Un segundo soldado enemigo se acercó por la espalda dispuesto a eliminar a traición a Neji, cuando, como una sombra, uno de los sirvientes del reino de los Hyuuga detuvo la mortal estocada con su escudo y enterró el frío acero en el pecho del atacante.
Al ver sus ojos, idénticos a los suyos, Neji descubrió que, tan pronto terminara la batalla, debía hablar muchas cosas con su prima.
FlashBack End.
-En cada batalla, aunque nuestro reino termina victorioso, ocurren bajas con mayor frecuencia, y a falta de ejército, todos debemos poner nuestra parte por el bie...
-Deja esas estupideces. Hinata, si algo llega a pasarme, tú guiarás y protegerás nuestro legado, el Byakugan. ¿Qué será de nuestra familia y nuestro reino si perecemos en el campo de batalla?
La joven bajó su mirada al suelo, apretando sus manos con fuerza, producto de la rabia y la frustración.
-Por mi condición de mujer, no sirvo para regir nuestro reino in para pelear por él, por eso nuestro padre te eligió sobre sus hijas. Acepto ese destino que se me otorgó, incluso estoy dispuesta a velar por tu prosperidad, pero no me niegues la oportunidad de hacer algo, no solo por tí, sino por nuestro reino. ¡Estoy cansada de solo ser una carga!
-Hinata...
La chica limpió rápidamente sus lágrimas y se encaminó a la salida.
-No volveré a acompañarlo al campo de batalla, pero, por favor, tenga más cuidado. -Hinata abrió la puerta y se dispuso a salir- Mañana vendrá el embajador del Reino regido por los Uchiha's para negociar un tratado de paz. Por favor, duerma un poco.
-Descuida, tendré en mente.
Tuvo en mente descansar, planear los puntos a tratar para evitar un conflicto innecesario y obtener un aliado más, pero un emisario trajo malas nuevas del campo de batalla.
-El reino Tai ha iniciado un nuevo ataque, y los escuadrones primero y tercero han sido neutralizados. Los escuadrones segundo y octavo están respondiendo el ataque, pero su resistencia no durará mucho.
-Informale a Hinata que ella será responsable de recibir y atender al embajador -Neji tomó sus armas, armadura y casco- Llama al quinto escuadrón, los quiero vigilando los alrededores del palacio.
-¡En seguida, su Majestad!
Neji se acercó a su caballo y montándolo, dio las últimas indicaciones.
-Que los escuadrones cuarto y séptimo me acompañen, cierren las puertas principales tras nuestra salida y no las abran a nadie excepto al embajador o a nosotros.
Todos los guerreros llamados montaron sus corceles, y a la orden de Neji, le acompañaron al campo de batalla, donde una sangrieta lid se llevaba a cabo.
Continuará (Ejeje, ya saben, puro yo) Esto es "Entre espadas", espero les guste y si los personajes parencen OoC, recuerden que es un UA y cada uno tiene un papel en específico. Gracias por leer hasta aquí y nos leemos pronto.
