Inicio de peleas.


-¡Mamá Alice esta molestándome de nuevo!- escuché la voy de mi pequeño desde la cocina.

-Alice... deja a tu hermano-dije con cansancio, pero con suficiente voz para que me escucharan.

-¡Sigue molestándome! Mamá la voy a golpear si sigue haciendo eso… ¡auch! Alice! –gritó seguido de un golpe y después el llanto de mi pequeña.

-Mamá-se escuchó un chillido/lloriqueo.

-¡Edward Anthony Cullen!-grité y subí de inmediato a ver a mis "adorables" hijos.

-Te dije que si seguía molestándome la golpearía- Edward se encontraba cruzado de brazos y haciendo un puchero. A decir verdad se veía adorable, pero había hecho mal.

-¡No me debes pegar Edward!-dijo Alice con voz chillona mientras lagrimas caían de sus ojos.

-Los dos, están castigados -dije con voz firme.

-Ella fue quien me molestaba...

-Él fue quien me golpeo...

-No me interesa quien haya hecho que cosa Alice, vuelve a tu habitación, iré a recoger todos tus juguetes –Edward sonrió maliciosamente- después de que haga lo mismo con tu hermano –su sonrisa se borro.

Y allí estaba Edward, mi pequeño de 7 años me llegaba hasta la cintura con ese pelo suyo color bronce nada común, esos grandes ojos color verde, tristes por la situación.

Y saliendo de la habitación se encontraba mi pequeña Alice, su cabello color negro con destellos rojizos estaba amarrado con una coleta y sus ojos azules como el mar, grandes y expresivos, ella era menor por dos años que su hermano. Era tan pequeñita que a su hermano le llegaba al hombro. Mi pequeña no seria de estatura normal.

-¿Mamá por que eres injusta conmigo? Sabes que te amo, y que nunca haría algo para que te enojes, pero es que Alice… Alice es un monstruo, es un horrible, horrible monstruo, ella es la culpable de que tu y papá se hayan separado.

Me quedé petrificada al escuchar eso.

-¡Edward!-lo regañé- Alice no es la razón por la cual nos separamos tu padre y yo, y eso no te interesa, así que deja de decir tonterías.

Después de eso, tomé sus pertenencias y las saqué de su habitación. Hice lo mismo con Alice.

Edward me había tomado por sorpresa con el tema del divorcio. ¿Cómo se atrevía a pensar que Alice había sido el motivo? Entiendo que no la esperábamos, pero no fue por eso. El teléfono sonó sacándome de mis pensamientos.

-¿Diga?

Esme, amiga mía, eh comprado un bolso estupendamente genial, deberíamos ir al centro comercial, hay muchas cosas en estos días, es de temporada!-se escucho un voz un tanto chillona. Lilian Hale, reí por su entusiasmo.

-Hola Lily a mi también me da gusto hablar contigo, yo estoy bien ¿y tu?-dije con ironía.

-Lo siento amiga, ¿Qué tal? ¿Cómo están los demonios?

-Nada esta bien –suspiré- Alice molesta demasiado a su hermano, Edward la golpea. Recién paso algo así, los eh castigado, y Edward me ha salido con el divorcio. Me dijo que Alice había sido el motivo por el que había pasado –me senté en el sofá.

-Lo siento tanto amiga ¿Ya has hablado con él sobre eso? Es el mayor, y ya es un poco grande, deberías hacerlo.

-Si, lose, pero tengo miedo y no se como explicarlo.

-Bueno, ya encontrarás como hacerlo. Y sobre los problemas entre ellos… en verano habrá un campamento para niños de su edad, ellos podrían ir y resolver sus problemas. Jasper y Rosalie fueron el año pasado, y funciono, no digo que no se peleen, pero ya no lo hacen constantemente y Jasper sabe soportar a su hermana.

-¡Es una gran idea! Muchas gracias, ¿Te parece si vienen mañana al almuerzo?- Me encontraba de mejor humor ahora, creo.

-Gracias amiga, ten por seguro que allí estaremos los niños y yo. Cuídate, un beso y un beso a los demonios. Hasta mañana.

-Gracias, igual a ustedes, hasta mañana- Y sin más, colgué.

Me alegraba saber que tenía el apoyo de mi amiga. No había sido fácil criar a Alice y Edward sola. Su padre nos había dejado hacia cuatro años y yo me encontraba sin empleo en ese entonces, nada había sido fácil con unos demonios como hijos. Pero a quien engañaba, una madre daría todo por ellos y yo daría todo por mi hijos así me odiaran.

Dos horas mas tarde. La cena estaba lista.

-Alice, Edward bajen la cena esta lista-grité al pie de las escaleras. Espere un "voy" o un "ahora bajo" pero lo único que obtuve fue silencio. –¡Niños! Bajen a cenar -…nada

Mis hijos eran demasiado orgullosos, y no debería quejarme, pues el orgullo lo habían heredado de mí, pero cuando estaban enojados, nunca respondían.

Mi apetito se fue. Guardaría la cena, tal ves después los niños se levanten y quieran comer, allí habrá. Subí las escaleras. La puerta de Edward estaba abierta, y de vez en cuando se veían los destellos por parte de la televisión, que estaba a un alto volumen. La de Alice estaba cerrada.

Me dirigí a la habitación de Edward. Mi pequeño estaba dormido en el suelo con su ceño fruncido. Arreglé su cama, quitando todos los juguetes de encima, la sacudí y lo levanté, Él se acomodó en mi pecho. Podía ser tan inocente cuando estaba dormido… no quería soltarlo, no podría hacerlo ahora, había sufrido mucho la partida de su padre. Y en este momento estaba pasando por una rebeldía. Se movió entre mis brazos y lo dejé en su cama, lo cobijé y bese su frente. Baje el volumen de la televisión y la apagué.

Salí de la habitación y me dirigí a la de mi pequeña.

Claro, Alice no podía dejar pasar su enojo. La pared que estaba frente a la puerta estaba dibujada con crayones. Estaba un niño sin cabeza, su cabeza estaba a lado, y tenia el cabello color naranja, suponía que era "Edward", frente a él estaba una pequeña niña sonriendo, esa era "Alice" y detrás de ellos dos había una mujer mas grande, enojada. Esa era yo.

Suspiré y me acerqué a la pequeña cama. Alice dormía plácidamente con una pequeña sonrisa en su cara. Besé su frente y salí de la habitación. Ella limpiaría mañana.

.

.

Desperté por mi cuenta, los niños no habían venido en la noche. Suspiré y me levanté, caminé por las habitaciones de ellos y ninguno de los dos estaban, baje las escalera y unos gritos se escuchaban en el jardín.

-¡Así no se hace Alice! Dame eso.

-¡No! Yo puedo hacerlo, quítate

-Yo lo haré, es MI perro, dámelo

-Que no, no es solo tuyo, también es mio, yo le voy a dar de comer.

Me acerqué donde estaban. Alice estaba detrás de la casa de "Lucky" el perro. Y Edward estaba al frente, cada ves que Edward se movía a un lado, Alice lo hacia del lado contrario.

-Alice, es mio, tienes tres segundos para que me los des, uno… dos…

Alice salió corriendo. Edward iba tras ella y Lucky tras ellos. Alice miró hacia atrás y cayó, Edward aprovecho, le quitó el alimento y se alejó de ella, Alice lo miraba de mala manera, se levantó y saltó sobre su espalda.

-Dame ese alimento Edward, te morderé si no me lo das, uno… dos

Edward en un movimiento la tiro haciendo que Alice cayera sobre su trasero.

-¡EDWARD Y ALICE!- se quedaron estáticos- ¡Ya basta de peleas, por Dios! Estoy harta de que se peleen. Son hermanos, no deben pelear, deben llevarse bien ¿entienden? Desde ahora, una pelea mas y serán privados de todas sus actividades durante el verano, no habrá vacaciones e irán a una escuela.

Me miraron con terror y a la vez odio.

-¡Bien! Haz lo que quieras, yo me largo de aquí –Edward salió corriendo.

-¿También saldrás corriendo Alice?

No dijo nada, solo se fue.

Me dispuse hacer el almuerzo, en pocos minutos llegarían los Hale. Terminé y puse la mesa del jardín. Se escucho el timbre.

-¡Yo voy!-gritó Edward- Hola Lily, ¿vienen Jasper y Rosalie?-preguntó entusiasmado mientras yo entraba a la casa.

-Hola Lilian- me acerqué y besé su mejilla- ¿donde están…?

-Hola tía Esme! –corrieron dentro de la casa y me dieron un rápido abrazo cada uno y después fueron donde estaba Edward- Hola Edward-dijeron al mismo tiempo mientras Edward rodaba los ojos. Lily y yo reímos.

Así pasamos la mañana entera. No se hacían esperar las peleas de Edward y Alice. Cuando miraba a Jasper y Rosalie me quedaba pensando si en verdad el campamento funcionaria.

-Lily, ¿en verdad fue el campamento quien ayudo a tus hijos?

-Por supuesto, de hecho el próximo iniciara este fin de semana. ¿Te interesa llevarlos?

-Me libraría de ellos durante un tiempo… y los ayudaría

-Muy bien, nos pondremos de acuerdo después, no creo que Jasper y Rosalie no quieran asistir de nuevo.

Edward se molestaría. Alice… bueno, Alice era Alice, estaba conforme con cualquier cosa que no implicara a Edward. Pero estaba decidido.

Mis demonios no pasarían el verano con diversión y matándose el uno al otro.


No sean malas conmigo xD es mi primer capitulo, ya tengo la idea de como sera esto, pero acepto sugerencias, criticas y todo lo que quieran :D

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Gracias por leerme n.n*