El comienzo

Bpov

- quítate de mi camino imbécil - Mike se atravesaba, impidiéndome seguir, llevaba una pila de libros de la empresa, Carlisle mi jefe, los había solicitado, si no fueran para el, en ese mismo momento se los habría arrojado en la cabeza al estúpido de Mike.

-bueno días compañera, amaneciste de muy mal humor- era un maldito, disfrutaba fastidiarme, Mike, era mi colega en el periódico, y aunque compartíamos mucho tiempo juntos, nunca habíamos logrado entendernos como "colegas"- wao Bella, es impresionante como vas ascendiendo en la compañía, de periodista has pasado a ser la que sirve el café, Felicitaciones- soltó una fuerte carcajada y se dirigió a su cubículo.

Camine hacia la oficina del presidente, y entregue los pedidos, si, Mike tenía razón, esto no era un trabajo para mí, yo era una reportera, pero, igual me gustaba ayudar, Carlisle era una persona generosa y nuca podía negarle un favor.

-permiso- pedí tocando la puerta con el zapato, ya que llevaba las manos ocupadas.

-Adelante, isabella- entre con mucho cuidado, pero haciendo gala de mi torpeza tropecé con la alfombra, apreté mis ojos esperando el golpe, pero nunca llego unos fuertes brazos me sostenían de la cintura, abrí los ojos sorprendida y lo que vi a continuación me dejo sin aliento. El más hermoso de los ángeles me miraba, mostrándome la más perfecta sonrisa que había visto en mi vida.

-tienes que tener mas cuidado, hermosa- advirtió cariñosamente, mi cara tenia que estar roja, sentía como ardía.

-lo siento, fue una torpeza de mi parte-se aparto suavemente de mi, asegurándose de dejarme estable.

-Isabella, te presento a mi hijo.- me ofreció su mano y la tome nerviosa.

- mucho gusto, Edward Cullen- ahora sus ojos se clavaban directos a los míos, eran de un verde profundo, hipnotizarte.

-eh...eh...- ¡perfecto!, ahora actuaba como una retrasada mental.

-¿tienes nombre?- pidió con una gran sonrisa, y yo me sentí la mujer mas estúpida sobre la tierra.

-Swan...Swan isabella...Swan- respondí titubeante.

Soltó mi mano, y se sentó al frente del escritorio de su padre. Había escuchado mucho sobre el único hijo de Carlisle, pero nunca lo había conocido, tenia entendido que estaba en el extranjero haciendo una especialización en periodismo o algo así.

-Bella, toma asiento por favor, gracias por traer los libros- acate las ordenes de Carlisle, y me senté a un lado del perfecto ángel ojos verdes- Edward, empieza a trabajar desde hoy con nosotros, va a ocupar el lugar del antiguo editor- iba a ser mi jefe.

-que bien….me parece perfecto- afirme sonando ahora mas segura.

-querida Bella, la razón por la que te cite aquí, es para pedirte un favor enorme.

-¡claro!, dígame.

-como Edward, es nuevo en la compañía necesita algo de ayuda…Alguien que lo guie...y no pensé en alguien mejor que tu...tu serias perfecta para ponerlo al tanto de todo.

¡Dios santo!, tendría que pasar bastante tiempo con este hermoso ángel, el era una tentación andante…pero claro que lo haría, quien podía negarse a estar con el, ya quería verle la cara a Jessica cuando se enterara y viera a este hermoso Cullen.

-y también necesito una guía turística papá, hace muchos años que no venia a los Angeles…si a Bella no le molesta, podría ayudarme con eso también, ¿no hay ningún problema?- me pidió mirándome a los ojos.

-no, claro que no lo hay… no tengo ningún problema en ayudarlo señor Edward- Soltó una fuerte carcajada ¿Que había dicho?

-¿tan viejo me veo?- pregunto cómicamente- llámame Edward, por favor.

-esta bien…señ- arqueo una de sus perfectas cejas- Edward.

-ok bella, gracias por todo, puedes retirarte- pidió Carlisle, obedecí al instante y Salí del lugar no sin antes darle un ultimo vistazo a mi ángel, ¡mi ángel!...Dios, enserio tenia problemas, solo llevaba 5 minutos de conocerlo y ya lo consideraba mío ¡que ilusa!

Cuando llegue a mi cubículo, no podía borrar las estúpida sonrisa que se dibujaba en mi rostro, solo imaginarme pasando tiempo a solas, con un hombre como Edward me hacia sonreír.

-¿te comiste un payaso?- pregunto Mike tirándome una bola de papel, ¡inmaduro!

-¡cállate Newton!- grite devolviendo el misil de papel.

-¿por que tanta bulla?- pregunto Jessica, acercando su silla a la mía.

-¡amiga no lo vas a creer!- susurre emocionada intentando que Mike no pudiera escuchar.

-por la cara que traes… creo que algo muy bueno ¡cuéntame ya!- mí amiga era una chismosa irremediable.

Le conté con detalles todo lo que había ocurrido en la oficina de Carlisle, como mi caída había sido detenida por Edward y lo mejor de todo fue ver su cara cuando le dije que la asignada para indicarle todo sobre la empresa, ¡era yo!

-no lo puedo creer amiga ¡el hijo del Jefe!...vas por un pez gordo- afirmo Jessica.

- esas no son mis intenciones Jess, ¿Cómo crees?.

-si claro…mejor dime, ¿tienes tu notebook encendida?- pregunto importándole poco mi respuesta ya que sin previo aviso la tomo y tecleo algo en el buscador de google, vi como abrió los ojos sorprendida, puso mi laptop en el escritorio y pude ver de que se trataba.

Había una foto de Edward Cullen vestido de traje, con su biografía a un lado, iba a empezar a leer cuando una voz conocida se escucho por detrás asiéndonos brincar.

-creo que esa foto me hace ver un poco mayor ¿no creen?- ¡era el! ¡Que vergüenza!, yo estaba en shock, no podía moverme.

-eh..yo..yo..eh

-Bella, cuando termines lo que estas haciendo en tu laptop, te espero en mi oficina, necesito que empecemos ahora mismo- yo no fui capaz de girarme, ni siquiera había abierto mis ojos.

-si, claro, en un segundo.

Cuando abrí mis ojos pude ver a Jessica con la boca abierta.

-amiga, yo creo que es mucho trabajo para ti sola, yo podría ayudarte ¡dios! ¿Viste ese trasero?

-cállate Jessica, por favor cállate- cerré de un golpe mi laptop, tome mi agenda y me dirigí a su oficina, era la del antiguo editor.

Cuando llegue Edward estaba con su sonrisa y yo..Bueno yo no podía sentirme mas avergonzada.

-señor, yo solo buscaba algo de información. ..No quiero que piense que bueno yo.

Que habíamos dicho sobre lo de señor…y no te preocupes…yo no vi nada-me indico que me sentara, obedecí instantáneamente.

-gracias Edward, bueno creo que podemos empezar por darte las lista de los periodistas que se encargan de los artículos para los periódicos- el sonido de su celular nos interrumpió.

-discúlpame un segundo Bella- se puso de pie y hablo entre susurros, me fue imposible escucharlo- creo que tengo una visita- dijo con un tono como de pesar- creo que podemos dejar esto para mas tarde.

-tranquilo, tu me avisas- me puse de pie, y Salí de su oficina, pero, en la puerta me cruce con la mas despampanante mujer que había visto en mi vida, ahora entraba en su oficina ¿esa era su visita?

-Eddie, mi amor- fue lo ultimo que escuche antes que la mujer cerrara la puerta ¿mi amor?,, me había pegado un gran estrellón, parecía que mi ángel ya tenia dueña.

Bueno, este es mi primer fic, no estoy muy, muy segura de seguir por que no se que tal les parezca...me gustaría saber su opinión ¿me apoyan?, un beso gigante.