Hola :)
Me presentaré a lo rápido! Me llamo (?) y me puedes decir Yuly xD ajajajaj en fin...
Yo solo eh escrito fics mimato pues porque soii una loca desquiciada que ama esa pareja xD pero decidi hacer este Taiora :) espero les guste... si es asi lo alargo hasta cuatro capítulos :) sin más aqui está:

Disclaimer: Digimon no es mio. Si fuera asi el feo Sorato no existiría

Aclaraciones: Algunos personajes pueden diferir de sus actitudes o roles normales. Este fic no tiene ni es seguimiento de la serie de digimon. Pero es probable que en muchas cosas hayan similitudes.

"Chocolate"

Capítulo 1:
Hoy presentamos:
"Tai..."


_Deme uno de doble chocolate con sirope de chocolate y chispas de chocolate...

La encargada de tomar la orden dejó de escribir y con ojos muy abiertos examinó de arriba a abajo a la joven que tenía parada justo frente a ella. Delgada, tez ligeramente morena, pelirroja y de ojos rubies. Porqué una chica tan hermosa, que se notaba que era deportista, pedía un helado tan cargado de grasa y calorías?

Sora, al sentir la mirada incrédula de la mujer, se sonrojó más de lo que ya estaba.

Que había llevado a Sora Takenouchi a esa heladería a pedir semejante postre repleto en chocolate?

Ese mismo día en la mañana...

Los días iniciaban como todos los demás en el campus de la universidad de Tokio. Los pájaros cantaban, los autos soltaban smoth hacía la capa de ozono, tus vecinos de habitación escuchaban metal a máximo volumen y...

_Dámelo Rika!

_No! Yo me lo encontré Mimi!

...Tus compañeras de habitación peleaban por un autógrafo de Yamato Ishida.

Sí. Todo estaba normal. Sora sonrió.

Con 20 años no podía quejarse de su vida. Se había graduado como una de las mejores de su preparatoria. Hasta le habían ofrecido una beca por jugar tenis. Y tenía excelentes amigos que la apoyaban siempre. Y allí estaban dos: Mimi Tachikawa, a quién conocía desde pequeña y a Rika Nonaka que conoció al ingresar a la Universidad de Tokio. Estaban con ella y la pasaban como cualquier chica con 20 la pasaría. Sí! Su vida era perfecta...

A quién queremos engañar! Por más perfecta que sea su vida siempre tiene que haber u defecto no? Si hasta el Titanic, que era el barco perfecto, se hundió por un pequeño defecto de un hombre, entonces tengamos la seguridad que siempre habrá un defecto. Pero no nos desviemos del tema y volvamos al meollo del asunto:

Cuál es el defecto en la vida de Sora Takenouchi?

_Sora...

La pelirroja salió de la hilera de pensamientos y volteó a mirar a su amiga la castaña.

Mimi estaba con el teléfono de la habitación apoyado en su hombro. Señal que había alguien esperando del otro lado de la bocina. Y para Sora, los ojos de Mimi le lograron expresar quién era. Un brinco dio su corazón al entender de quién se trataba. Y cómo un rayo corrió hasta quitarle el teléfono a Mimi.

Se arregló la ropa, como si su interlocutor fuera a verla y con toda la naturalidad que pudo fingir logró articular un perfecto y tranquilo:

_Hola Tai...


Del otro lado del teléfono. Unos minutos antes de que esta llamada se realizara.

Tenía que salir de allí!

Un moreno alto, de ojos achocolatados, con músculos en brazos y torso marcados, y obviamente guapo, daba vueltas por la habitación sosteniendo con fuerza su cabeza. Demonios! Quería exprimirla a ver si se quitaba el insoportable dolor de cabeza! Y maldecía su suerte. Tener a tres chicos ruidosos como compañeros de habitación, en esos casos, era un tremendo martirio.

Pasó su mirada fulminante por toda la habitación tratando de que los autores del escandaloso ruido fueran acallados.

En una esquina se podía apreciar una cama desordenada, poster de numerables estrellas de Rock, y hasta un poster del mismo chico sentado en la misma cama desordenada: Yamato Ishida. Quién lucía despeinado y con su pijama aun puesta, tocaba su bajo con todas las de la ley. Cosa que a Tai le estaba enfureciendo. Si hasta se veía a si mismo arrancándoles el bajo y rompiéndolo contra el piso.

Suspiró.

Tenía que contralar ese sentimiento irracional de romper el bajo de su mejor amigo, a quién por cierto le había puesto nombre, y a que no adivinan cómo le puso? No? No adivinan? Pues...

_Matt... Por favor puedes dejar de tocar a... Mimi -dijo entre dientes el moreno- un momento? Me duele la cabeza!

El rubio por su parte solo miró de soslayo a Tai y siguió tocando a... "Mimi" ignorando la vena palpitante en la cien de su amigo.

A quién demonios se le ocurría ponerle a su bajo, el nombre de la chica que le gustaba? Oh si claro! Porque tenía un plan B. Si Mimi, la verdadera, aclaramos, venía y preguntaba sobre el nombre de su bajo, todos dirían en un gran coro y una enorme sonrisa: "Se llama Minni..."

Si! Como si no fuera tan obvio que se relaciona con Mimi. Mimi, Minni, Mimi, Minn... Ash! A veces Matt se la pasaba de cabezón.

Sacudió su cabeza y vio a los otros dos causantes del otro aterrador ruido para sus pobres tímpanos que estaban hipersensibles:

_I can feel….. –gritaban los cantantes eçde aquella ensordecedora música.

Tai sostubo sus oídos de nuevo.

Porqué, de entre todos los géneros de música, Takato y Ryo, tenían que ser unos locos, adictos y fanáticos del Metal? Con todas sus fuerzas fue hasta el control del estéreo y luchó hasta que logró apagarlo. Sintió la gran calma invadir esas cuatro paredes que le rodeaban. Necesitaba esa paz desde hace muchas horas. Claro! Toda paz tiene su fin no? Es algo como recíproco, nada es perfecto así como la paz llega a su fin. O no?...

_Taichi! Quién demonios te dio permiso de apagar mi música?

_Y era mi favorita?

_Y... -blah blah blah

_Porque... -blah blah blah

Eso era lo que escuchaba Tai. Rayos! Pero Si que Ryo y Takato emitían más decibelios gritando que toda su música Metal junta. Suspiró hondamente y quitó sus gotas de sudor en su frente. Ignorando todo lo que le gritaban los dos morenos en su habitación.

Tenía que salir de allí pero... Cómo? No le gustaba salir solo. Nunca antes. Y no era que tenía un complejo de personalidad o algo así, si no que le gustaba estar acompañado y quién mejor que... Sí! Eso era! Como no se le había ocurrido antes? Qué tonto!

Tomó el teléfono residencial. Esos que le dejan a todos los estudiantes en sus habitaciones y marcó... esperó... hasta que una chillona y dulce voz le logró ensordecer otra vez más. Que nadie podía saludar de manera adecuada en la mañana?

_HOLA! -gritó la chica que seguro era Mimi- Habla Mimi, con quién desea hablar?

_Mimi, soy tai yo...

_Oh! Holaaa Taii -volvió a maullar la chica- Está Mattier por allí?

Tai agitó sus cabellos... Paciencia Dios!

_Eh... Mimi si está, pero quiero hablar con Sora... Está?

_Oh! Claro Tai!

Pero que complicado se volvía el día cuándo te ibas de fiestecita la noche anterior no? Solo unas copits y amanecía con ese dolor insoportable en la cabeza. Claro! Masaru, su compañero de equipo le dijo que por ser su primera emborrachada le pasaría eso. Pero... Ese idiota tenía que tener siempre razón? Hubiera seguido con su sarza de insultos mentales a Masaru su amigo sino fuera por esa voz angelical que lo llamó como abeja a la miel.

_Hola Tai...

La voz tarnquila de Sora lo calmó al instante.


De regreso a la habitación dónde se hallan las chicas...

Mimi y Rika examinaban cada gesto que Sora hacía al hablar por teléfono. Y es que desde que Mimi le dijo a Rika que era Tai, ambas empezaron a buscar la manera de escuchar la conversación entre esos dos. Y cómo era muy difícil eh? Pero quién las culpaba, ellas son solo dos chicas hermosas que estudian para ser nutricionista, en el caso de Mimi, y para ser veterinaria, en el caso de Rika. Así que ninguna tenía idea de cómo conectar teléfonos entre si! Esas cosas todas científicas les tocaba a Izzy. A ellas no!

Crack!

El teléfono fue colgado y Mimi junto a Rika voltearon de inmediato a ver el rostro de la peli roja... 3, 2, 1...

_AHHH! -chilló Sora dando pequeños saltitos por la habitación!

Estaba feliz! Pero de que estaba feliz estaba feliz. Porqué estaba feliz? Y pues Mimi tampoco se aguanto la curiosidad de preguntar.

_Sora... Oye porqué estas tan feliz?

Sora dejó de hacer su pequeño baile improvisado y dirigió su vista a sus dos amigas allí, que la miraban con un deje de curiosidad, picardía y asombro. Porqué les asombraba verla tan feliz? Ella siempre andaba feliz! O sería su pequeño bailecito... Oh! Tan feo había bailado? Bailaba tan feo así?

_Sora?

Esa fue Rika. Quién ahora mantenía una mirada de rareza sobre ella. Es que se había quedado pensando en si bailaba feo o no que olvidó la pregunta de sus amigas.

_Oh... bueno es que pues Tai... -hablaba con suma lentitud y a la vez con un rubor que rorría sus mejillas- me... invitó a salir...

Un gran Oh! de impresión por parte de Rika y un gran y enorme SI! por parte de Mimi inundó la pequeña habitación pintada de Rosa. Les había mencionado que era de rosa? No? Pues ahora lo saben...

Sora estaba sonrojada y eso era algo obvio ya que con su color de piel se hacía notar mucho más. Eso de verdad era una cita? Bueno Tai solo dijo que salieran a desayunar juntos... Y para ella una cita involucraba: Cena, película un pequeño capricho y un ligerito besito en la punta del labio a modo de despedida. Un beso en los labios? Con Taichi? Oh! pero la sola idea la hacía sentir mariposas en su... Que dice mariposas? La hacía sentir todo un cardumen de pirañas en su estómago... Pero todo eso para que fuera una cita probable debía realizarse de noche.

Bueno, eso es lo que siempre supuestamente, e inigualablemente es no? Pero no saldrían de noche, eran solo las 8: 10 de la mañana. Entonces... No sería una cita. Eso lo pensó con mucho pesar. Pero... Tai dijo: "Sora quieres salir a desayunar conmigo?" Dijo la palabra salir y desayunar juntos! Eso debe contar no?

Vale! Que hasta parecía quinceañera en su primera cita con todas las cosas que pensaba y hacía. Tantas vueltas para ponerse esos simples vaqueros y una ligera blusa. Pero es... Solo visualícense estar 13 años enamorada del chico de tus sueños y que por fin te pida una cita! Aunque ella y Tai siempre salían pero solo como amigos claro... mmm si! estaba actuando como toda una quinceañera...
...


Mimi miraba de manera divertida cada gesto que hacía su amiga la peli roja. Sora parecía una niña enamorada de su artista favorito. Sonrió más ampliamente. Ella la entendía totalmente... Y es que Mimi vivió cada etapa del enamoramiento de Sora hacia Tai...

Su primera negación, su aceptación, su superación, y por supuesto que tambien vivió aquellos momentos en que Sora se deprimía porque Tai fuera un ciego que no se diera cuenta de los sentimientos de su amiga Sora. Bueno, ella entendía perfectamente el sentimiento de Sora, vale si ella también estuvo y está enamorada de su amigo de la infancia...

Sí! Ese sensual y guapo rubio la traía, y trae, babeando desde que lo conoció. Y es que aun recuerda cuando tenía 6 años y un niño rubio de ojos azules fue hasta ella, viéndola llorar, y la ayudaba a bajar a su gatito de un árbol. Si. Ella llorando por el pequeño micifuz y Matt mirándola llorar. Sintió vergüenza pero más sintió ese sentimiento cálido y esas maripositas en su pequeño estómago. Y todo con solo verlo sonreir!

Pero basta! Nos desviamos del tema!

Mimi miró a su otra amiga y compañera. Rika estaba pegada a un libro de esas cosas científicas que tiene que leer por su carrera. Últimamente Rika se había vuelto muy aplicada. Quizá sea por eso del chico que conoció. Si! Un tal Kyo, Myo, Ryo, no recuerda. Pero el punto es que el chico es inteligente y aplicado, y al parecer Rika no quiere quedarse atrás. Wow! Qué gran influencia tienen los chicos, no?

Volvió a sonreír más abiertamente. Sería enserio una cita lo que Tai le pidió a Sora? O solo es para pedir un concejo? Después de tantos años Tai le pide una cita a Sora? Eso sería insinuar que quiere algo con ella no? y pues... Si Tai no la quería así como para una relación? Ay no! Sora estaba en peligro de ser lastimada!

Mimi se puso de pie al instante de una forma alarmada.

_Mimi que te pasa? -preguntó Rika al sentir la reacción brusca de Mimi al levantarse.

_Voy a espiar a Sora.

Dijo cortante empezando a buscar la ropa adecuada para espiar la supuesta cita de su mejor amiga

Qué sería mejor? Una chaqueta gris estilo Holmes? O una ropa un poco más negra para pasar desapercibida en la noche?... Noche? Por Dios! era de día. Que tal una ropa estilo militar para poder camuflajearse sin problemas o que tal una ropa normal pero discreta color crema para mezclarse mucho mejor? Qué dilema!

Por su lado, Rika miraba divertida a Mimi. Desde que pronunció la palabra mágica: espiar, sintió ganas de detenerla y hacerla entrar en razón. Bueno ella no conocía mucho a Mimi y Sora, asi que no sabía si para ellas era algo normal espiarse entre sí cuando tenían una cita, pero su conciencia entrenada por la vida le estaba señalando que eso no debía ser sano para Sora.

Pero el hecho de ver a Mimi tan entusiasmada en buscar la ropa para su misión de espía, le había hecho cambiar de parecer y prefirió mejor mirar en silencio y luego reir cuando Sora enfureciera con Mimi cuando supiera que ella los espió. Uy! Pero qué mala se había vuelto. Sonrió un poco más. Mejor seguía leyendo su libro de medicina.

...


Y Bang!

Una patada directa a la portería!

Tai celebró alzando su camisa, dejando ver su torso bien marcado producto de sus entrenamientos. Había citado a Sora en el campo de futbol del campus de la Universidad, exactamente a las 8: 30 de la mañana.

El sabía que Sora demoraría unos minutos más así que mientras podría practicar sus lanzamientos a la portería.

_Muy bien hecho Tai! -lo alabó el guardameta alli presente.

_Gracias Taiki!

Tai recibió el balón y se preparó para volver a disparar una gran bomba hacía la portería, pero justo escuchó su nombre ser pronunciado por ella. Por la chica que le hacía palpitar el corazón.

_Tai?

Tai bajó la pierna que tenía en posición para tirar y la volteó a ver. Allí estaba Sora. Su mejor amiga de la infancia y su actual mejor amiga que lucía divina como siempre. Tenía una falda de esas estilo los 80. La reconocía porque su madre las guardaba y las enseñaba cuando hablaba de su edad de oro. A Sora le lucía muy bien. Y ese color rosado también le acentuaba muy bien su piel.

Un leve rubor recorrió las mejillas de Tai, quién sacudió su cabeza un momento para quitarse las ideas que tenía al verla.

_Hola Sora, Es decir, Buenos días! Como amaneciste?

Sora sonrió de manera divertida.

_Me saludaste al teléfono Taichi! -le recordó haciendo que el rubor de Tai aumentara- Pero amanecí muy bien. Gracias. Y tu?

Tai sonrió mostrando su blanca dentadura que a Sora tanto le encantaba.

_Bueno... Digamos que no muy bien. -las cejas de la chica se movieron a modo de interrogante para Tai- Bueno... es que ayer... Tagiru cumplía años y pues... Bebimos y...

Para Sora eso basto. Negó con la cabeza.

_Tai... Te pasaste de tragos verdad?

Tai miró la reacción de Sora. Manos en jarra en su cintura. Una de sus cejas más arriba que la otra. Sus labios ligeramente crispados en una posición firme y con una mirada desafiante y a la vez atemorizante. Oh Dios! si que estaba preciosa así!

_Bueno... -razcó su nuca- Si...

Sora volvió a negar con su cabeza. Ese Taichi, siempre buscando dificultades.

Tai no lo resistiría mucho. Estaba tan preciosa que sentí en unos segundos se abalanzaría a ella y la besaría hasta quitarse todas esa ganas que le embargaban en ese momento. Así que no esperó a que su poca fuerza de voluntad se fuera y la tomó de la muñeca y la jaló mientras el caminaba a paso firme fuera de la cancha.

_Tai... A dónde me llevas?

Iba Sora desconectada del mundo. Al sentir la mano de Tai rodeando su muñeca sintió que el corazón se le detenía. Solo que no se le detuvo ya que Tai la jaló y su corazón reaccionó para bombear sangre a sus piernas para que estas se movieran y que Sora no se diera un golpe al caer en el suelo de cara.

_No recuerdas que te invité a desayunar?

_Oh! es cierto!

Sora se sonrojó mucho más. Su pregunta fue muy torpe. Tai tenía razón. El la había invitado a desayunar. Oh! Y hasta lo dijo en voz alta confirmándolo. Un fuerte sonrojo cubrió sus mejillas. Estaba muy sonrojada, tanto que no creía que nada más en su vida podría ponerla más roja de lo que ya estaba.

_Hay Yagami! Me cuidas bien a la cuñada eh?

Gritó Taiki desde la portería, quién sostenía el balón y miraba muy divertido a la pareja que salía de la cancha.

Sora sintió el calor subir nuevamente a sus mejillas. No podría estar más roja después de eso.

...


Pero que lindo era el amor!

Llevaba casi una hora pegada a esa ventana entre esos arbustos, espiando a su amiga peliroja y al moreno junto a ella. Qué bueno que eligió el traje estilo militar! Asi estaba bien camuflajeada y nada ni nadie la podría ver allí agazapada en la entrada de esa cafetería...

_Mimi... Que haces allí?

La castaña despegó sus ojos de la feliz pareja y los posó en la chica parada a escaza distancia de ella.

_Eh... Nada Yoshino! -y empezó a reír nerviosamente.

La chica de pelo vino la examinó por unos instantes para luego encogerse de hombros y darle una ligera despedida.

Mimi suspiró. Por poco y Yoshino la atrapaba. Por lo menos no la interrogó. Aunque la vio en una faceta de su vida que nadie, excepto Sora, conocía. La parte investigadora y espiadora de ella.

Pero, rayos! Mimi no te distraigas de tu objetivo! Se regaño mentalmente y volvió a sus dos presas que debía vigilar para asegurarse de que todo estaba bien...

Y allí veia a Tai y Sora bebiendo un poco de Café. Toda la hora que estuvo allí se la había pasado masticando el desayuno y hablando y riendo. En ningún momento vio indicios de que Tai quisiera declarársele a su amiga o viceversa. Al parecer todo estaba transcurriendo muy bien!

_Hola Yoshino, cómo estás?

_De maravilla Juri y tú?

_Muy bien, Oye haz viso a Taichi hoy?

_El del equipo de futbol? Yagami?

Mimi pudo jurar que su oreja cobró vida y que a todo el estilo de las caricaturas saltó al suelo y corrió hasta pararse en medio de esa conversación. Vamos! Juri! Di de que Taichi hablas!

_No Mira! Hablo de Taichi Makino... -habló con todo sarcástico- Obvio que Yagami! Pues con quién más estoy saliendo?

Saliendo... saliendo... saliendo... saliendo...

Esa palabra retumbó en los iodos de Mimi. Juri Katou saliendo con Taichi, el chico por quien su amiga Sora moría?

_Oh... pero no te esponjes! Mira, lo acabo de ver dentro de la cafetería.

Tierra! Trágate a Sora! Rogó Mimi internamente. Si Juri entraba a la cafetería donde estaba Tai y su amiga, algo pasaría. O Tai saldría rasguñado y con moretones por los golpes de Sora, o Sora sería la que saldría lastimada y no precisamente serían heridas visibles...

Con todo su pesar pudo ver de manera impotente como Juri caminaba y entraba a la cafetería y se dirigía a Taichi con una enorme sonrisa. Y en el instante en que vio que Juri abrazó a Tai, pudo ver con todo el dolor de su alma de amiga, el corazón de Sora partirse en miles de pedacitos... Tai era un idiota.

...


Y por eso ella estaba atragantándose de helado a esa hora del medio día.
Eso había pasado en la mañana.

Muy feliz estaba con Taichi en esa cafetería a punto de salir a dar un último paseo... cuando vio a la chica del equipo de porristas entrar a la cafetería. Corrió hacia Tai y

lo abrazó con una gran euforía que solo las porristas saben demostrar. Aun recordaba el saludo:

"_Hola amor. Como amaneciste? Te estuve buscando en tu habitación pero me dijeron que saliste..."

Apretó con fuerza la pala con la que comía el helado de triple chocolate...

"_Es que después de la noche que tuvimos ayer..."

Esa frase. Esa estúpida y sorna frase le retumbaba en sus oídos. Tai le había dicho que había ido a una fiesta con sus compañeros. No que se había ido a celebrar con su noviecita y a jugar a las luchas sin opa! Porque eso fue lo que ella entendió con esa insinuación.

Volvió a meterse la pala con otro enorme bocado de chocolate a su boca.

Tai se lo dejó claro:

"_Sora, ella es Juri -enseño a la chica que colgaba de su brazo derecho- es porrista, estudia para ser Psicóloga, y... estamos saliendo"

Saliendo... Saliendo... Saliendo...

la palabra le retumbaba en sus oídos de diseñadora. Ojala fuera cierto lo que decían de los Psicólogos... Que son gente que está loca. Pero a quién quiere engañar! Si la tal Juri está o no está loca, ella tiene algo que ella no tiene y nunca tendrá: A su amor eterno Taichi Yagami.

Volvió a atacar a su helado pero esta vez más frustrada! Ahora se sentía como una envidiosa de color verde, y una hurraca mal oliente. Ella no tenía que envidiar nada! Pero lo cierto era que deseaba ser es Juri solo para salir con Tai... Pero eso no era así.

Rika siempre le decía que el helado de vainilla era mucho mejor para aguar las penas. Sería cierto? Ni idea! Pero por tonta, cabezona, y masoquista ordenó el triple chocolate. Es que los ojos de Taichi son chocolates, así como su piel, su cabello y hasta sus labios... Era una masoquista.

Y debió hacerle caso a Rika. Al parecer el chocolate no lograba bajar sus penas ni un poquito.

Continuará…

Notas de La autora:

Bueno…. Como ven este fic no será muy largo pero espero que las amantes del Taiora les guste :)

Cualquier preguntita o comentario… Si quieren que siga o que elimine este fic solo denle clic al botoncito ese de abajo que dice:

Review! xDD

Jejejej bueno yo dejo hasta aquí las notas de la autora! No me gusta alargarme mucho aquí abajo. Solo destacaré que el fic se llama chocolate por varias cosas que ustedes verán aquí…. Y si alguna ya sabe porque el titulo chocolate digame :) xDDD

Ah! El titulo del capi es porque como ven este capitulo trato la mayoría desde el punto de vista de Sora… Por eso se llama… Tai.

Ya me voi xD pienso actualizar antes de dos semanas. Claro que si me llegan asi de muchos reviews pues lo hago antes! Adio! :D

"que el anime este con ustedes"

ATTE:

Yuly