Hola, aquí les traigo un nuevo fic, es la primera vez que hago uno que está basado en un universo alternativo, así que las personalidades de sus protagonistas pueden que no encajen del todo con el canon. Espero que lo disfruten. Y el título del fic es provisional hasta que se me ocurra alguno mejor (También se aceptan ideas).
Destrucción, muerte, fuego… era lo único que se veía en una pequeña aldea mientras esta era consumida por las llamas, edificios derrumbándose personas muertas por intoxicación, algunas quemadas vivas atrapadas en sus casas y otras muchas muertas a manos de aquellos que habían provocado esta espiral de destrucción y muerte, y es que hasta esa noche ese lugar era una aldea apacible y tranquila alejada de la sociedad, nadie podía esperar que fuera atacada y arrasada sin motivo alguno y no por simples bandidos o asesinos sino por magos.
Por las calles ardientes corría una niña de unos diez años era rubia tenía la melena larga y sucia provocado por las cenizas y el hollín levantado por el gran incendio, tenía rastro de quemaduras superficiales por la piel y varias heridas producidas por caídas. Corría desesperada por escapar del lugar y encontrar a sus padres— ¡Mamá, papa! ¿Dónde estáis?— Grito la pequeña llamando a sus padres, intento aguantar las ganas de tirarse al suelo a llorar, el ambiente a su alrededor era desolador, ninguna casa parecía haberse salvado lo que la hacía presentir que sus padres habían corrido la misma suerte. Desecho enseguida esa idea de la cabeza, sus padres estrían bien, eran fuertes y listos, seguro que se había refugiado en algún sitio. Finalmente llego a la que era su casa hace un par de horas, ahora se consumía en las llamas aunque para alivio de la chica aún se mantenía perfectamente en pie, por lo que sus padres podrían seguir vivos dentro.
La chica entro en la casa tapándose los orificios nasales con la manga de su camisa para evitar intoxicarse por el humo de fuego— ¡Mama, Papa!— Grito con todas sus fuerzas mas no hubo respuesta alguna— ¿Dónde estáis?— Un grito femenino llamo su atención, provenía del salón, aun las llamas no habían alcanzado ese lugar por lo que había una posibilidad de que sus padres estuvieran allí— Ese grito era de mama— Dijo aterrada la chica, rápidamente fue corriendo al salón encontrándose con una escena que le heló la sangre, en medio de la habitación yacían sin vida el cuerpo de su padre y su madre, no tenían rastro de quemaduras ni puñaladas ni siquiera parecían haberse intoxicado por el humo, parecía como si les hubieran extraído su vida con magia, en frente de los dos cuerpos había un hombre de túnica negra mirando los cuerpos. Lucy cayo de rodillas llorando— No… papa, mama…— La chica miro al asesino de sus padres con furia y odio— ¡Tu maldito asesino! ¿Por qué nos atacáis?— El hombre se dio la vuelta para mirarla, llevaba el rostro oculto, pero incluso ella se dio cuenta que la miraba con una mirada asesina, el mago se acercó a ella para cogerla, ella se alejó por instinto aterrada— ¡Aléjate de mí!
La chica retrocedió hasta dar con un cristal roto y bastante afilado en un acto impulsivo lo cogió y arremetió contra el mago, sorprendido el mago intento defenderse con magia pero no le dio tiempo por lo que el cristal acabo perforando y amputando su dedo meñique izquierdo. Un grito de dolor inundo la habitación a la vez que la sangre fluía por donde antes estaba su dedo meñique, rápidamente aplico magia sobre su herida reteniendo la hemorragia— Maldita niñata— El mago volvió la vista hacia el suelo descubriendo que la chica había desaparecido— ¿Dónde está?— El sonido de la casa derrumbándose le recordó que estaba en una casa en llamas, maldiciendo por lo bajo a la niña salió de la casa.
Fuera de la casa en un lugar seguro de las llamas se concentró y se conectó mentalmente con sus compañeros enviándoles un mensaje mental— "Hay una chica que ha sobrevivido, hay que encontrarla"— Unos instantes después recibió otro mensaje mental proveniente de sus compañeros— "También hay otro chico que se ha escapado, buscadle"— El mago suspiro molesto y empezó a buscar a los dos chicos— Reducimos su patética aldea a cenizas y aun así han conseguido escapar dos.
No muy lejos del mago, escondida en unos matorrales se encontraba la chica llorando por la pérdida de sus padres— Malditos magos, los odio ¿Por qué han hecho esto? ¿Qué ganan con ello?— La chica se limpió las pocas lágrimas que le quedaban e intento calmarse, no podía arriesgarse a que la encontraran y corriera la misma suerte que su aldea, aunque de que servía escapar, ahora era una niña huérfana de diez años en un mundo desconocido para ella— Estoy sola— La tristeza y la melancolía la volvió a invadir, lo había perdido todo por culpa de unos magos.
En ese momento alguien la agarro por detrás inmovilizándola, ella intento gritar pero le taparon la boca— Tranquila Lucy no te asustes, soy yo, Loki— Dijo el chico que la agarraba, era un niño de las misma edad de Lucy, tenía el pelo naranja y una pequeñas gafas, al igual que Lucy tenía el pelo y la ropa manchada por la ceniza levantada por el fuego.
Loki soltó su agarre liberándola, Lucy se volvió para contemplarlo— Loki estás vivo— Lucy sonrió con lágrimas en los ojos y salto a abrazarlo— Pensaba que tú también…— Lucy se sentía aliviada de que al menos su mejor amigo pudiera escapar de los magos ¿Habían sobrevivido más personas? ¿O eran los un únicos que quedaban? Su corazón de dio un vuelco al pensarlo, ya sabía la respuesta pero en su interior se negaba a aceptarla. Un poco más calmada miro a los alrededores en busca de los magos, después volvió su mirada a Loki— ¿Y ahora que hacemos Loki?
El chico la miro con preocupación— Deberíamos irnos de aquí— Se levantó y tendió la mano a Lucy para ayudarla a levantarse— Nos están buscando todavía, así que vayamos con sigilo— Lucy asintió y se agarró a la camisa de Loki para seguir sus pasos. Con sigilo y evitando a los magos cercanos los dos chicos consiguieron abandonar la aldea y adentrase en el bosque, siguieron caminando hasta llegar a un pequeño claro, la aldea quedaba lejos y la oscuridad lo inundaba todo la único luz que había era la de la Luna, Loki se detuvo y con él Lucy— Aquí deberíamos estar a salvo de momento, no hagamos hoguera ni ruido, podrían estar cerca.
Lucy asintió y suspiro aliviada, por lo menos de momento estaban a salvo, se sentó en el frio suelo junto a Loki— ¿A dónde podemos ir ahora Loki? Lo hemos perdido todo, solo somos dos niños de diez años ¿Qué podemos hacer?
Loki suspiro cansado— No lo sé, ojala pudiera decir que tengo un plan, pero no tengo ni idea de que hacer ahora yo…— La voz de Loki empezó a temblar— Los vi Lucy…— Lágrimas empezaban a salir de sus ojos— Vi como mis padres se quemaban vivos atrapados en casa y yo no pude hacer nada para ayudarlos soy un inútil— Una lágrimas comenzaron a caer por el rostro de Loki
Lucy abrazo con a Loki brindándole apoyo— No eres un inútil nos has sacado de esta, al menos ya no estamos en peligro de que nos encuentren los magos— Lucy le dirigió una cálida sonrisa a Loki aunque en la oscuridad de la noche era difícil de ver— Mientras nos tengamos el uno al otro no habrá nada que temer ¿Vale?— Loki le devolvió la sonrisa ahora más calmado— Ahora que ya te has tranquilizado ¿Se te ocurre algún plan?
El chico se levantó y miro la Luna y las estrellas, soltó un suspiro y volvió a mirar a Lucy— De momento nada, pero deberíamos ponernos en marcha e intentar llegar a alguna ciudad para conseguir algo de comer y algún sitio donde dormir— Los dos chicos se pusieron en marcha caminando por el bosque— Hay que tener cuidado, los magos podrían seguir buscándonos— Los dos chicos siguieron caminando por el oscuro bosque— Tranquila Lucy saldremos adelante…
Ocho años después:
Hoy es un día de celebración en la ciudad de Crocus, capital del Reino de Fiore, las calles están adornadas y limpias y una gran multitud de personas se han congregado en las calles, nobles, comerciantes, magos y campesinos están juntos para celebrar la subida al trono de la nueva Reina de Fiore, Hisui. Un desfile de carrozas se ha preparado para celebrar la ascensión al trono de la joven Reina. Casi todo el mundo libra en este día festivo, casi todo el mundo menos los comerciantes que aprovechan para aumentar sus beneficios, y los ladrones que ven en este desfile una oportunidad de oro para también hacer más rentable el negocio.
Lejos de la muchedumbre en las alturas de los tejados se puede observar una silueta femenina observando a la gente pasear por la calle como si de un ave espiando a su presa se tratara. Era una chica rubia de 18 años, de ojos achocolatados, esbelta figura, llevaba puesto una túnica raída de color grisáceo con una capucha para poder ocultar su identidad. Tenía una expresión de impaciencia y enfado— ¿Dónde se habrá metido Loki?— La chica soltó un suspiro de resignación— Seguro que ya está intentando ligarse a alguna noble— La chica negó con la cabeza, su amigo no tenía remedio. Unos pasos detrás de ella la sobresaltaron volviéndose se encontró con Loki elegantemente vestido en un traje negro y corbata roja— Por fin llegas ¿Ya te has camelado a las nobles de la corte?— Dijo con molestia
Loki rió y mientras caminaba hacia ella— No que va, son demasiado estiradas para mi gusto— La chica se le quedo mirando intimidante— ¿Ocurre algo Lucy?
Lucy lo fulmino con la mirada— Tu ropa, donde está tu capa, así no puedes trabajar— Al ver que el chico no traía nada, suspiro y saco otra capa de un saco al igual que la suya— Ten, póntelo— Lucy le tiro la capa a Loki que cogió y con cuidado se cubrió con ella— y por cierto, te agradecería que cuando tengamos trabajo no intentes ligar, eso puede hacer que perdamos beneficios.
Loki se acercó a ella con una mirada picara, ella lo miro seria sin inmutarse— ¿Por qué, acaso estás celosa?— La expresión de la chica no cambio en absoluto, cosa que decepcionó a Loki— Tranquila Lucy sabes bien que solo tengo ojos para ti.
Esta vez sí que consiguió sonrojar levemente a la chica que aparto la mirada con un semblante molesto— Ahora no es tiempo para tu jueguecitos, tenemos trabajo que hacer, hay abajo hay un montón de oro pidiéndonos que les llevemos con nosotros.
Loki hizo una pose militar y llevo su mano derecha a la frente en forma de saludo— Si, mi señora.
Lucy suspiro cansada, Loki no cambiaría nunca, todo se lo tomaba a broma, parecía como si ella fuera la única que hubiera madurado, Lucy se tapó el rostro con la capucha y se dispuso a bajar del tejado— Allá vamos, hora de trabajar…
Continuara…
Bueno hasta aquí el capítulo ¿Qué les parece?
