Es un hermoso atardecer, Blaine y Kurt están disfrutando de su tiempo libre, y decidieron tomar un café en Lima Bean, todo iba bien, hasta que Blaine menciono algo que a Kurt no le gusto para nada.

"Hey, los Warblers me invitaron a una fiesta el sábado por la noche" Blaine comento con mucho entusiasmo,

Pero Kurt no sentía lo mismo, la simple idea de que Sebastián este ahí, lo perturbaba, no quiera ser controlador ni nada,

Pero ese chico no le inspiraba confianza y con esa discusión que tuvieron mucho menos.

Kurt contesto "Mmmm no lo sé, pero algo me dice que no es buena idea que vayas, los Warblers son geniales y me encantaría que los vieras de nuevo, pero, es que no se"

Kurt quería demostrar sus celos hacia Sebastian, pero como si Blaine haya leído sus pensamientos rápidamente contesto "Es por Sebastian, cierto?" Me dijo algo serio.

"No, bueno, si un poquito, es que ese chico no es de mi agrado, y temo que tu puedas hacer locuras si llegas a estar ebrio" le conteste algo preocupado.

"¿Es que acaso no confías en mi Kurt?" Me dijo algo confundido

"No, no quise decir que no confiaba en ti, claro que si confió, pero al parecer tu y unas cuantas cervezas no son una buena combinación"

" sé que cuando estoy algo ebrio hago muchas estupideces" luego tomo la mano de Kurt y la acaricio "pero te prometo que esta vez no pasara nada" le dijo con esa sonrisa cautivadora que le hacía estremecer su corazón, "está bien" le contesto.

El sábado en la noche, Blaine estaba en la fiesta con todos los Warblers y Mercedes, Rachel y Kurt habían organizado una pijamada, hace mucho tiempo que no hablaban, así que este es el momento perfecto para ponerse al día.

Habían hablado de lo hermoso que era el nuevo profesor de Geometría, de los planes para NYADA y de las tácticas que iban a utilizar para ganar rotundamente las Nacionales este año. La conversación estaba muy amena, cuando de pronto suena el teléfono de Kurt, parecía ser un mensaje, era de Sebastián.

"Para qué diablos me manda un mensaje este" dijo Kurt. Al leerlo, queda atónito, sin palabras y como si se le hubiese caído el mundo y rápidamente empiezan a rodar las lagrimas de sus ojos, Rachel y Mercedes no paraban de preguntarle que de quien era el mensaje y que decía, después de unos momentos el contesto

"Es Sebastian, me acaba de mandar una foto de él y Blaine besándose"