Yo sé l arto con mis fics xD... pero bueno... quizá a alguien en este pkño planeta tierra le gusten jajajaja... bueno...

Ya saben, es mi tipico Milo x Camus, aunk luego aparecen ds o tres parejas más, espero que sea de su agrado n.n

-"Esto... solo es Amor"

Milo

- ¿De que modo podía yo comprender los enredos y jugarretas que me daba el corazón?... De todo el santuario era el único que jamás me había besado, de todas las personas que me conocían era el único que no estaba loco por mi y de todos a los que siempre les sonreía y mirada, era el único que jamás me correspondía de ninguna manera¿Estaba hecho de hielo?. Yo me sentía tan confundido, ni siquiera trate de entablar charla con él por miedo a que no me respondiera o me ignorara… ¿Miedo yo?... Pues si, es que él tenía un no sé que me dejaba frío… -

……………………

Cuando supo que Camus había muerto, Milo no derramó ni una sola lágrima, era un tipo con el que jamás había tenido contacto, ni siquiera habían entablado una conversación y ahora que lo pensaba, se arrepentía de no haberlo hecho; no supo la razón pero cambió, no le atraía lo mismo que antes, todo le daba igual e incluso pensaba mucho en el santo de Acuario, quizá era arrepentimiento por nunca haber hablado más de 3 frases con él cada vez que se cruzaban… pero no… eso no era…

Pasado un tiempo lo volvió a ver, pero ya no como caballero de Athena si no como un traidor; tubo tantos sentimientos encontrados como la ira, la alegría, la tristeza… y al fin y al cabo pudo combatir en su contra… dándose cuenta al final, que no estaba traicionando a Athena, si no todo lo contrario; sin embargo termino muerto a manos de uno de los espectros de Hades, sin si quiera poder ofrecerle una disculpa.

Cuando las luchas por fin se hubieron terminado, Saori, como la gran diosa, ama y señora de todos los caballeros del zodiaco, los revivió a todos, desde Aioros (el envidiado por tener apenas catorce años) hasta Saga y Kanon (aún los traidores, para muchos). De modo, que le alegró volver a la vida, encontrarse con sus compañeros y con él… Camus de Acuario, a quien recibió inmediatamente con un abrazó que lo dejó desconcertado; pero a Milo no le importó, se disculpó con él si es que le había hecho un daño en el pasado y le ofreció su amistad…

El santo de acuario, aceptó ser su amigo y así se fue ganando su confianza, pasó esas dos últimas semanas con él, hablando de cosas del santuario, planes para futuro, los nuevos elegidos para portar las armaduras doradas y alguna intención de Milo por seducir a Saga o a Afrodita… Por lo demás todo era amistad, aunque al de escorpión le gustaba jugar y hacer enojar a Camus o ponerse a pelear como dos niños; sabia que dentro de sí estaba creciendo un sentimientos mucho más profundo que el de una simple amistad… tal vez por eso de pronto le importaba todo lo que girara alrededor del santo de Acuario aunque este no lo notara.

Cuando por fin quedaron disipadas todas sus dudas fue una mañana del día en que harían los caballeros una cena muy especial en la casa del santo de Tauro; Milo tenia la intención de llevar a correr a su amigo a donde entrenaban las amazonas para ver si las mujeres le llamaban la atención o tal vez podría acercarse de la misma manera y con la táctica igual a la que había usado para seducir al santo de Aries.

El de escorpión hizo todo lo posible por despertar a Camus, más este no quería levantarse, no era su estilo ser flojo pero aquél día se levantaría tarde y ni 1000 caballeros dorados lo iban a levantar

"¡Ya déjame dormir!"- Reclamó por cuarta vez tapándose con las cobijas hasta la cabeza y volteándose hacia la pared

"No seas payaso y levántate"- Gruño el santo de Escorpión

"No"- Dijo, Milo lo miró y siguió moviendo su brazo para despertarlo

"Si no te levantas, te levantaré por las malas… te aplicaré mi aguja escarlata… "

"No"- Respondió aburrido

"¿No qué?"- Preguntó desconcertado y arqueando una ceja

"No"- Dijo en el mismo tono que había empleado antes

"Si, ya sé que no; ¿Pero no qué?"- Preguntó el santo casi gritando

"No"

"¿No qué?... ¡Dioses Camus!... ¡Me estas volviendo loco!"- Gritó Milo al borde de la desesperación aunque no podía ocultar sonreír, comenzó a mover su brazo con más fuerza y recargando su peso sobre él para ver si así despertaba- "Te juro que si no te levantas yo te voy a parar a la fuerza y no me importa usar uno de mis peores métodos… si no me crees pregúntale a Mascara de Muerte..."

"No"- Volvió a responder, aunque a Milo le daba la impresión de que se estaba riendo… ¿Él reír?... ¡Eso era imposible!... se arrodillo junto a su cama, ya se estaba cansando de esa situación y algunas venas saltaron de su cien

"¡No, qué!"- Gritó histérico

"NO"

"¡CAMUS!"- Gritó el de escorpión golpeando el colchón

"¡MILO!"- Gritó el de Acuario dándose la vuelta y sentándose en la cama para ver a su amigo a la cara, no le gustaba que le gritaran y también ya se había artado del juego tan infantil al que estaban jugando.

"¡Qué!"- Se gritaron al mismo tiempo, Milo permaneció de rodillas junto a la cama y manteniendo su distancia, entonces para sorpresa del otro estalló en carcajadas. Camus lo miró un instante, sonrió y luego comenzó a reír, primero despacio y luego como loco… como si jamás en su vida hubiera reído… aunque al parecer era así… Había comprendido lo tontos que debían ver a su edad, discutiendo como un par de niños de cinco o seis años, si MM los viera o Kanon, seguro ya se hubiera muerto de la risa…

Milo tenia los ojos cerrados y llenos de lágrimas, con un dolor horrible en la cara y en el estomago por todo lo que se estaba riendo, entonces escuchó otra carcajada… no era suya, se quedó callado y miró a su amigo con los ojos muy abiertos, estaba riendo… por primera vez en toda su vida lo veía feliz, justo como siempre había soñado verlo, lo contemplo unos segundos, de verdad la inspiraba muchos sentimientos…

- : - En mi vida eh conocido muchas cosas,

Y vivido muchas más,

Pero nunca había conocido el amor,

La pasión y la dulzura

Que me provocan tu ser. - : -

Camus dejo de reír mientras sonreía y se agarraba el estomago, jamás se había sentido tan bien; por su parte Milo tenia una lucha de emociones encontradas, su rostro tan bello regalándole una sonrisa¡UNA SONRISA!... no creía que nadie jamás sobre toda la faz de la tierra pudiera ser premiado con tan bello obsequio… Sintió un deseo tremendo de arrojarse sobre él y besarlo, se sentía hechizado y débil… algo tenia Camus que lo había conseguido volver loco… Sin embargo otro sentimiento llegó... dulzura ¿Cómo podía ser que un ser tan frío como él pudiera verse como un ángel cuando sonreía? Tan cálido… tan humano… ¡Cielos, que difícil le resultó no perderse en su rostro, sus ojos y sus labios!

Al final solo se sonrojó, soltó una risita nerviosa, se levantó, se dio la vuelta para salir de la habitación y murmuró

"Te espero donde siempre si quieres venir a correr conmigo… Y si no, te veré esta noche"

"¿Esta noche?"- Preguntó desconcertado Camus

"¿No recuerdas que hoy es la cena para celebrar que estamos vivos?"- Preguntó el escorpión sin mirarle

"Si; pero…"

"Nada Camus, te quiero ver en esa reunión ¿Me oyes?"- Se dio la vuelta para mirarle

"Pero…"

"Promete que irás, la fiesta no será la misma sin ti…"- Esta vez Milo volvió a arrodillarse cerca de la cama y puso ojos de borreguito tierno

"Es que…"- Una mirada severa de su amigo lo silenció, sonrió con desgana y poniendo los ojos en blanco, luego lo miró y juró –"De acuerdo, te prometo que pase lo que pase, caiga un torrente o me parta un rayo… estaré en la reunión"

"¡Ese es mi Camus!"- Se levantó, le dio un abrazo y corrió para salir de la habitación, luego volvió a repetirle –"Te espero donde siempre para que corramos"- Y se fue

Pero a la cita a correr, Camus jamás llegó, tal vez estaba todavía durmiendo o quizá se había enojado por despertarlo y hacerle reír; bueno, al menos si no le veía ahora, tenía hasta la cena de esa noche… tal vez el no verle ahora le haría pensar en que decirle al verlo: si declarar lo que estaba comenzó a sentir por él o callar y esperar hasta conquistarlo.

Le costó mucho trabajo convencerlo de asistir a dicha fiesta; pero Milo tenia la palabra empeñada de Camus, por lo que no perdería la oportunidad de llegar antes y puntual a la cita. Así que ya en la noche, se encontraba presente el santo de escorpión, entro en la estancia donde sería la cena y se encontró que sentados estaban Shaka, Mü, Dohko y Aioros, los más aburridos, cumplidos, serios y responsables hasta el cansancio… no eran la mejor compañía; pero le alegraba verlos y quizá acabaría por ayudarle sobre lo que tendría que hacer esa noche. Se dirigió a la mesa, fue saludado por todos y cada uno de los caballeros presentes, se sentó y esperó:

Pasada una hora, los doce caballeros estaban reunidos en la casa de Tauro, sentados en una gran mesa; a la cabeza estaba Aioros, a su lado Mu, frente a él Shaka, junto Afrodita, en frente Aldebarán, junto Shura, al frente Mascara de Muerte, junto Camus, frente Milo, al lado Saga, enfrente Kanon con Aioria y junto a él, en la cabecera Dohko, frente al caballero de sagitario. Todos comieron halagando al santo de Tauro por la comida, este se sonrojaba una y otra vez agradeciendo la asistencia de todos y la cooperación de Mu. Al terminar comenzó lo bueno: el relajo, la parte favorita en las reuniones para la mayoría y para acompañarse, se tomaron unos buenos tragos preparados por Aldebarán, Dohko y Kanon.

"¡No cabe duda que esto era lo que necesitábamos!"- Decía muy contento Kanon luego de seis copas de bebidas mezcladas

"Deja de hacer el ridículo"- Gruño Saga mirándolo con algo de enojo

"¡Ay hermanito!"- Le respondió con un hipido -"Deberías aprender a disfrutar lo que es la 'sana' diversión"- Luego se soltó a reír como loco; un poco más allá, Shura, Dohko, Aldebarán, Aioros y Aioria, tenían una competencia por ver quien bebía y tardaba más en perder el juicio… aunque para esa hora, los santos de capricornio y sagitario estaban bastante fuera de sí...

"Yo te quiero mucho, enserio discúlpame por matarte"- Dijo Shura abrazando a su amigo

"Sólo hacías tu deber viejo"- Respondió él correspondiendo al abrazo

"Creo que bebieron demasiado…"- Murmuró Dohko que conocía los sentimientos de ellos dos desde sus días pasados.

"Ya lo creo"- Dijeron Aldebarán y Aioria al mismo tiempo.

En la mesa, sentados y bien callados, estaban Camus, Shaka y Mü; el santo de virgo se la pasaba con los ojos cerrados, lo que a al de Aries le pareció estaba concentrándose para poder meditar, luego los abrió, su compañero le sonrió para luego dirigir su mirada hacia donde estaba Saga ahorcando de una manera muy graciosa a su hermano, el santo de Acuario se dedicaba a suspirar con resignación, de no haber caído en aquello, ahora estaría en su casa posiblemente acostado o haciendo alguna otra cosa que estar ahí aburrido sin saber que hacer, de vez en cuando miraba a Kanon con gesto de desaprobación, luego miraba a los que competían con cierto fastidio y celos, le gustaría ser serio como Dohko y a la vez divertirse de aquella manera o poder abrazar y besar a cierto caballero al cual le dirigió en ese momento la vista…

"Yo sé lo de ustedes"- Le dijo una voz a Milo por detrás

"¿De qué hablas?"- Preguntó desconcertado el santo de escorpión, se dio la vuelta para mirarlo ya que había estado viendo a Camus, más él, al encontrarse con la mirada de su amigo la cambio hacia otro lado.

"Lo que te traes con él"- Respondió su interlocutor mirando al santo del hielo con una sonrisa, Afrodita se unió a la conversación

"No sé de lo que estas hablando, Mascara de Muerte"- Dijo Milo dándole un sorbo a su trago y notando un ligero rubor en sus mejillas.

"Finje todo lo que quieras"- Contestó Afrodita cerrándole un ojo -"Pero nosotros ya sabemos su pequeño secreto, es increíble que ese bobo cayera en el juego de la "bella amistad" o peor aún, que nosotros nos lo tragáramos

"Yo creo que ya les hicieron daño los tragos"- Se dispuso a ir junto a Camus cuando Mascara de Muerte se le puso en enfrente con una diabólica sonrisa, el santo de Acuario se dio cuenta de la acción de ambos, alzó una ceja y su mirada se fue hacia donde estaban Shaka y Mü quienes llamaron su atención con una pregunta… Milo por su parte le dirigió una mirada severa a su compañero, Afrodita sonrió con placer y se unió a la ahora platica.

"No te hagas el inteligente, yo los oí y Afrodita también"

"Si que los oímos ¿Verdad?- Dijo él sonriendo aún más, luego los imitó con burla -"No"

"¿No, que?"- También imitó Mascara de Muerte como si se quejara de algo…

"No"

"Camus"

"Milo"- Los dos soltaron amplias carcajadas, el santo de acuario de nuevo dirigió su vista hacia ellos; pero de inmediato la cambio hacia donde estaban Saga y Kanon, el segundo se había caído de la silla dormido y bastante ebrio. Por su parte, el de escorpión, captó la burla… ellos pensaron que quizá Milo había conquistado al de acuario y logrado llevarse a la cama, justo como lo hacia con todo ser al que conocía

"Nosotros no estábamos…"

"No mientras, ambos te oímos; además, a mí me sorprendería que no terminaras acostándote con él, después de todo… a ti solo te importa el sexo…" –Dijo con malicia sabiendo que el comentario le dolería, más Milo se defendió

"Que solo lo buscara en ti, no significa que él no me interesa para otra cosa"

"¿Eso quiere decir que ustedes…?"- Inquirió Afrodita

"No sé de que hablas"

"Que ustedes son pareja, bobo"- Dijo Mascara de Muerte sonriendo

"No"- Contestó Milo, notando que en sus mejillas aparecía un calor, la palabra pareja no había sonado tan mal… claro que ya lo había pensando con alguien más; pero la idea de un Camus y Milo, no le resultó tan descabellada, incluso sonaba estupenda

"¿Seguro?"- Preguntó el santo de Cáncer sonriendo con malicia, se dio la vuelta dispuesto a entablar conversación con Camus, el de Escorpión al notarlo y sabiendo las verdaderas intenciones de MM, no tuvo más remedio que engañarlo

"De acuerdo, si somos pareja"- Mintió, Afrodita sonrió todavía más y Mascara de muerte se dio la vuelta mirándole sin creerlo…

"¿ah, si?... Pruébalo"- Le retó, Milo tenía que hacer lago más, debía alejarlo a toda costa de su Camus, así que avanzó así él con paso decidido, este lo miró con cierto desconcierto, a lo que este respondió sonriendo con nerviosismo y alzando sus cejas en modo de advertencia, el santo de acuario no comprendió nada, más observó a su amigo pidiendo silencio a todos (aunque la mayoría ya estaba bastante ebrios)

¿"Me dan su atención por favor?... oigan… gracias… bien, esta noche tan especial en que todos nos reunimos celebrando que estamos vivos… quiero comunicarles que…"- Tomó a Camus de la mano y lo jaló un poco para que se levantara, este lo hizo sin entender; pero esto no le estaba gustando nada, menos cuando Milo apretó con suavidad su mano y la puso a la altura de su corazón mientras le miraba a los ojos, lo que lo confundió todavía más. -"Lo que quiero decirles es que… Camus y yo somos pareja"- Toda la habitación se llenó de risas, gritos de felicitaciones y otras cosas, mientras los santos de Escorpión y Acuario no dejaban de verse con la cara roja… Camus entonces escuchó la risa de Mascara de Muerte y de Afrodita, se giró para mirarlos a la cara y luego comprendió que todo era una burla, si, Milo debía estar jugando solo para darle gusto a uno de los dos y luego llevárselo a la cama; con la cara todavía roja, se soltó de él, lo miró muy enojado y salió de la casa de Tauro. El santo de escorpión comprendió que esta vez si estaría muy molesto, quizá esa seria una barrera para que él pudiera declararle sus sentimientos o una más gruesa para que pudieran ser amigos otra vez… Volteó a ver a todos los caballeros que lo miraban confundidos preguntándose todos el por qué la reacción de su amor"… este se limito a sonreír diciendo: -"Lo que sucede es que no quería que nadie más supiera de lo nuestro"- Luego salió detrás de Camus rezando a Athena que no estuviera muy molesto para no querer hablarle en toda su vida.

Al menos se alegraba, todo aquello le sirvió para darse cuenta que si estaba muy enamorado de él, no desde hace dos semanas, si no desde hace mucho tiempo… quizá por eso jamás le hablaba, le daba miedo… miedo de que le rechazara, de que le respondiera mal o de que no sintiera lo mismo que él; pero ya no era momento de arrepentirse, Saori les había dado la oportunidad de vivir de nuevo, de tener una nueva vida sin arrepentimientos y sin dolores tales como los que estaría quizá por pasar en ese momento.

o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

Camus

- A pesar de mi mismo y de jamás haber creído en las cursilerías del amor, la amistad y esos sentimientos tal vulgares que hacían a un caballero débil e incluso inútil; no pude evitar caer en las garras de cupido. ¿Cómo sucedió?... Eso jamás lo supe, aún sigo preguntándome con frecuencia cómo es que yo, la persona más fría de todo el santuario, terminara loca y perdidamente enamorada de él… Al principio no supe lo que era, jamás había experimentando tales sentimientos dentro de mí, no era algo que estuviera acostumbrado a sentir o a disfrutar; pero me agrada… -

……………………

Esta vez si se había pasado de listo. El santo de Escorpión, a tan solo unos días de empezar a entablar una amistad con Camus, la cual jamás se había podido dar, ni siquiera cuando entrenaban para convertirse en caballeros doraos; bueno, a pocos días de empezar a hablarse, Milo ya había hecho exasperar al de Acuario con otra de sus burlas, hasta al grado de desear estar muerto de nuevo o matarle

La verdad es que estaba muy enojado porque a todos les había dicho en la reunión en casa de Aldebarán¡Que él era su pareja! Camus nunca se había prestado en el pasado, antes de luchar contra los caballeros de bronce, a algo con él, ni siquiera le había dado oportunidad porque siempre estaba entrenando y se encontraba de viaje en Sibería, Alaska, el polo sur e incluso su país natal, Francia; así que no se habían vuelto a ver desde hace muchos años, más que en la lucha de las doce casas, donde Milo se mostró cortés con él, negándose a pelear contra su pupilo Hyoga.

Pero bueno, eso ya era pasado, ambos habían muerto (junto con todos los caballeros dorados) hacia mucho tiempo, y la bondad de la gran diosa Athena los volvió a la vida, aunque no sabia si le gustaba la idea de vivir de nuevo, ultimadamente, se había dejado morir porque tenia un dolor en su pecho, algo que le estaba molestando desde hacia mucho tiempo… Y la razón a ese sufrir a ese pesar y tristeza que le agobiaba, era él, Milo de Escorpión, no supo como pero pasó, se había enamorado de él y ese sentimiento lo descubrió cuando estuvo muerto, incluso pensó que había desaparecido cuando peleó con él como caballero de Hades; pero se equivocó, el sentimiento seguía muy dentro de si y nació de nuevo cuando le volvió a ver. Claro que no esperaba ningún recibimiento afectivo de parte de los caballeros, más su sorpresa fue otra, cuando cada uno de ellos le recibió con una enorme sonrisa aunque el no pudiera corresponderla más que con un gesto de gratitud y/o respeto; lo que más le sorprendió fue cuando Milo le abrazó ¿Por qué lo hacia¿Le había extrañado mucho¿Por qué le ofrecía una disculpa y su amistad también?... Por supuesto que la hubiera negado, odiaba el amor tanto como la amistad; pero negar sus sentimientos era como negar que estuviera respirando y negarle la oportunidad de tratarlo aunque sea como amigos, era negar que en realidad su corazón no estuviera latiendo… Si, latiendo; pero latiendo de amor por él.

Los días que siguieron fueron los mejores en la vida de Camus, aunque de su mente no pasaba el triste sentimiento de morir de nuevo, no le interesaba hacerlo, no si él jamás se fijaba en que existía; sin embargo, comprendió que el ser su amigo le acercaba más a lo que era antes, o sea nada, y aunque le lastimara su comportamiento tan infantil a veces, y sus peleas tan normales… le llenaba de una dicha secreta (aunque actuara con indiferencia) el saber que Milo siempre contaba con él para todo, aunque solo fuese un simple amigo. Lo mejor de todo era que él, había conseguido romper el hielo en Camus, le había hecho reír como loco y sonreírle, una cosa imposible para él siendo el amo y señor de los hielos, maestro de maestros…

Sin embargo, esa noche de la reunión, le había dejado muy en claro que solo era una burla, un simple juguete con el que el escorpión quiso divertirse un rato, hacer lo imposible, lo que nunca jamás había logrado, que sonriera… querer llevarlo a la cama y luego votarlo como si nada; después de todo él conocía mejor que nadie sus secretos junto con sus aventuras; pero no sus sentimientos…

Así que furioso, llegó a su casa y se paseó como león encerrado; no era gran cosa para molestarse, tal vez él mismo había exagerado las cosas, e incluso se había puesto de la peor manera cuando en realidad todo era un juego…

"¡Claro, para ti todo es diversión!"- Se exasperó Camus dejando caer sus puños cerrados a sus costados y caminando alrededor de la casa, o más bien, en el mismo lugar donde fue la batalla contra Hyoga…-"¡Eres tan infantil!"- Gritó otra vez como si él estuviera ahí escuchando lo que decía… aunque en realidad así era…

"No deberías ser tan amargado"- Dijo una voz detrás del santo de Acuario, era él, la persona que le estaba quitando la paciencia y las pocas ganas de entablar a mistad con alguien; en su rostro apareció un leve sonrojo… así que se quedo dándole la espalda con los puños apretados en sus costados.-"Camus, enserio, no quise hacerte enfadar"

"¡No te vi muchas ganas!"- Le gritó dándole la cara, Milo caminó hacia él -"Ya me lo estoy imaginando, debió ser muy divertido para ti y para ellos burlarse de mi"

"¿De qué hablas?"- Preguntó el santo de escorpión parándose a una distancia más o menos de un metro alejado de él -"Nunca fue mi intención burlarme de ti"

"¿Piensas que voy a creerte?"- Dijo ofendido abriendo los ojos, luego se volvió frío- "No insultes mi inteligencia, te conozco desde hace mucho años y te eh conocido más a fondo todos estos días… a mi y para disgusto tuyo no puedes engañarme… Así que si piensas que puedes venir, convencerme de que todo fue una ilusión mía y luego llevarme a la cama… ¡Pues estas equivocado!"- Su respiración se agitó, era obvio que estaba muy enojado…

"¡Deja de pensar tonterías Camus, mi única intención fue alejar de ti a Mascara de Muerte; ahora que si te gusta, no te preocupes, puedo decirles que todo fue un engaño!"

"¿Quérías alejarlo de mi?"- Preguntó el santo de acuario extrañado

"Si, tú no sabes las intenciones tan macabras que él tiene para ti… además; nos escuchó pelear esta mañana y pensó que estábamos teniendo… eh… sexo…"- Al decirlo, ambos caballeros se sonrojaron, notando cada uno la reacción del otro -"Quizá ya sea hora… si voy a perder su amistad¿Qué más dará el que me odie un poco más?"

"Mira Milo… tus explicaciones tan ridículas me están fastidiando… ¿A ti que más te da el que MM me pretenda?"- Respondió fríamente -"Te recuerdo que estoy bastante grandecito como para saber cuidarme solo y para saber también con quien me involucro y con quien no

"¡Eres tan bestia!"- Comenzó a gritar el santo de Escorpión mientras se acercaba peligrosamente a su amigo -"¿Acaso no te has dado cuenta?... ¡YO ESTOY CELOSO!...

"¿Celoso?"- Preguntó Camus sonrojándose y abriendo los ojos aún más

"¡Si, Celoso¡No me gusta que te mire, no me gusta que te hable y que se acerque a ti con el pretexto de que como ahora eres mi amigo también lo eres de él!... ¡NO LO SOPORTO!... ¡Y me importa un bledo si crees que mis entupidas explicaciones son pretextos sin sentido para llevarte a la cama!..."- A estas alturas de la conversación, Milo tenia agarrado con brazo a Camus de la cintura y atrayéndolo hacia así, luego le dijo despacio, casi en susurro mientras miraba sus ojos, su boca y cada una de sus facciones; por su parte, el santo de Acuario tenia la vista perdida y estaba muy sorprendido al escuchar todas esas palabras, sentía el calor en su cara, su corazón latir y detenerse cada vez con mayor rapidez y conforme sentía más cerca de sí a Milo, al final, cuando estuvo tan cerca de él no pudo evitar sentirse fallecer al contacto de su cuerpo con el del otro caballero…-"Yo sé que te amo y que nada más me importa… ni siquiera lo que tú, Camus, puedas pensar, hacer o decir"- El santo de escorpión se acercó para rozar sus labios, más su compañero giró el rostro y lo evitó, luego lo miró a los ojos, los cuales estaban llenándose de lágrimas por el rechazo, Camus vio mucha tristeza en ellos, le sonrió mientras con una mano limpiaba a una lágrima que había resbalado

"¿Enserio no te importa lo que yo pueda decir o hacer?"- Le dijo quitando su sonrisa por el llanto de su amor y tratando de reprimir las ganas de llorar; Milo lo pensó, la verdad es que si le importaba, por eso mismo había preferido tener su distancia con él… pero había aprendido a amarlo más que nunca y lo mejor seria dejar las cosas así, por su bien y por el de él. Bajo la vista, apretó sus labios, abrazó con ambos brazos por la cintura a Camus y rozó sus labios… se quedo quieto, sin moverlos para nada…aunque el contacto entre él y el otro le provocaron cierta ansía; pero su compañero no parecía reaccionar, ni siquiera parecía querer ser besado, tal vez a él le gustaba más MM. Milo trató de retirar sus labios de los de Camus con todo el dolor de su corazón; más el segundo al notar que se desprendía y reaccionando por la respuesta de su amigo, se arrojó sobre él con los brazos alrededor del cuello y besando con pasión a su querido escorpión; sin poder creer lo que estaba sintiendo, Milo abrió los ojos por la reacción de Camus, más al sentir el beso apresurado y sus propios labios quedarse quietos, lo abrazó más contra si por la cintura, cerrando sus ojos suavemente y comenzando a besarlo… El caballero de Acuario estaba extasiado por las emociones y sentimientos que su compañero le transmitía con ese beso, por lo que se arrepiente de haber pensando mal sobre él…

- . - Es tan grande y maravilloso tu espíritu

Que me contagia y me llena de ti.

Le has dado un nuevo significado a mi vida,

Que ahora si me preocupo por vivir…

Y quiero vivir por ti y para ti. - . -

Milo le hacia sentir muchas emociones que antes no conocía, todo él lo llenaba con esa muestra de amor, de muchas sensaciones que jamás había experimentado y que tan confusas estaban en su mente; ahora si que estaba seguro y agradecido con su diosa Athena, por darle la oportunidad de vivir y amar a su santo dorado… por lo que lucharía por vivir junto a su amor, si es que lograba decirle sus sentimientos…

Continuará…

and?

espero impaciente sus rrs de kejas o gitomatazos -lo clasico xD-

SYL!