NT: ¡Hola a todos! Este un grandioso trabajo concebido y escrito por whitchry9 (fanfiction/net/u/1664924/whitchry9, sustituyan los dos primeros slash por puntos), yo solo he recibido permiso para traducirlo. Es la primera vez que publico una traducción, y sé que algunas partes pueden sonar extrañas. Ya he traducido todo el fic, que son cinco capítulos no demasiado extensos, e iré subiendo uno por día. Si quieres dejarle algún mensaje a la autora personalmente, pueden mandarme un MP y con gusto lo traduciré para ella. Sin más, espero que les guste. ¡No olviden darle todo su apoyo a la autora! (:

Capitulo uno

Cada decisión lleva a un nuevo camino. Cada vez que giras a la derecha en lugar de a la izquierda, cada vez que tomas café en lugar de té, creas un universo enteramente nuevo. Todos brotando de ti como las raíces de una planta, siempre alargándose y buscando por más.

Y en cada universo, hay una versión de ti.

O al menos comenzó de esa manera. Porque todas esas pequeñas decisiones, esas diminutas opciones que difieren de las demás, podrían significar la diferencia entre la vida y la muerte.

En este universo, Sherlock Holmes no se convirtió en un detective consultor. En cambio, es un criminal.

Y tanto como es posible para un criminal, es realmente bueno en ello. Disfruta del juego tanto como disfruta del crimen, dejando rastros de migajas de pan que pasan desapercibidos ante Scotland Yard más a menudo que ellos encontrándolos y siguiéndolos. Sherlock no mata a nadie en su tiempo como criminal, prefiere montar brillantes atracos y chantajes en lugar de ensuciarse las manos con algo tan bajo como el asesinato. Podría hacerlo, si quisiera, obviamente, pero decide retirarse temprano y vivir en Sussex criando abejas.

En ese universo John Watson es disparado en Afganistán y lo envían de vuelta a Londres, encontrándose con Mike Stamford ese día, pero después de comentar que no puede permitirse la vida en Londres con una pensión militar, Mike no tiene nada que ofrecerle, y John se ve obligado a mudarse con Harry. Escucha de los movimientos de Sherlock, algo sobre una pintura, y otro día sobre un gran escandalo involucrando a alguien importante del gobierno británico, pero nunca conoce al hombre detrás de los rumores, el hombre que es su mejor amigo en otro universo, el hombre que lo salvo. John sigue su camino hasta que muere en ese mundo.

En un universo distinto, Sherlock se ahoga en lugar de Carls Powers. Moriarty no encuentra placer en su primer asesinato y no se convierte en la mayor mente criminal con sus servicios a sueldo. Trabaja en el área de TI en un hospital, y allí conoce a una chica que es dulce y tímida. Se muda con ella y su gato; ella lo introduce a Glee. John no estudia medicina en ese mundo, sino que se vuelve maestro. Tiene una paciencia infinita con sus estudiantes y es querido por ellos. Se casa con una de sus colegas, y se vuelven viejos juntos. John muere a los ochenta, nunca consciente de lo que se perdió. Pero si alguna vez se lo hubiesen comentado, el habría estado horrorizado de ese tipo de vida.

En un universo, Sherlock nunca nace. John nunca sabe sobre la parte faltante en su vida, pero continua andando con esa sensación de vacío en el interior, no importa cuantas vidas salve, no importa cuantas heridas de balas suture o cuantos corazones desea que continúen latiendo.

John no puede forzar el suyo a seguir bombeando, y muere a los cincuenta y seis.