DISCLAIMER: Los personajes son propiedad de la maravillosa Rowling.
Este relato participa del Reto de Año Nuevo para el foro The Ruins.
Siempre Año Nuevo.
Año nuevo, un año se despide y otro comienza.
Rodolphus Lestrange espera sentado en la mesa a su amada esposa a Bellatrix. Alberga ciertas ilusiones de verla entrar por la puerta, pero sabe que ella no entrara.
-Siempre lo mismo, Bella- le dijo a la nada mientras se llevaba a la boca una copa de vino.
La puerta se abrió lentamente...Pero no era ella. Un elfo domestico entro con una carta en mano, el elfo temeroso se acerco y le tendió la carta al hombre que la agarro con sus manos arrugadas. Y se retiro.
Rodolphus abrió la carta lentamente. Sabiendo lo que se venia.
- Querido Rodolphus: Siento no estar en esta fecha tan importante, por lo menos para ti. Estoy haciendo cosas más importantes y espero que lo entiendas, mi señor me necesita.
Con cariño Bella- leyó en voz alta. Una sonrisa amarga se escapo de sus labios.
Y Bella no se equivoca. Ese treinta y uno de diciembre de mil novecientos noventa y siete, no tendría nada de especial sin ella.
Quiere a Bellatrix. Pero no a la Bella que se desvive por su señor. Quiere a la Bella de la que se enamoro, la que reía con alguna tontería, a la que le gustaba volar y sentirse libre, la que gastaba bromas muy a lo Sirius Black sin que nadie se de cuenta, la que atormentaba a los chiquillos de primer año. Pero esta Bella no le llega ni a los talones a la Bella de la que se enamoro.
Porque él, Rodophus Lestrange, se enamoro de la Bella que desprendía brillo y luz propia. Porque el se había enamorado de la chica cabellos rebeldes, con ese brillo en la mirada cada vez que reía y hacia de las suyas. Si algo admiro de su Bella, la joven, fue el brillo que la caracterizaba.
Necesita a la Bella antigua para sentirse vivo, y no la tiene. Necesita de la vieja Bella para sonreír. Necesita a la Bellaque hoy esta ausente. Solo necesita a Bella y no la tiene.
El elfo domestico volvió a entrar y sirvió la comida, comida para uno. Porque esta noche solo cenaría uno. Solo Rodolphus, solo sin Bella.
-Ya nada es especial sin ti- susurro al mirar una foto donde aparecían ambos abrazados por el frío.
Recuerda cuando pasaban las fiestas en Hogwarts. Sin la familia de ella, solos donde se amaban o eso quería ver. Amor, amor donde no lo hay, por lo menos de parte de ella.
Tic-Tac.
Tic-Tac.
Tic-Tac.
Suena el reloj que marcan las doce. Año nuevo.
-Feliz año nuevo, Bella- murmura admirando la foto de Bella, hace años en Hogwarts, tirando besos.
Año nuevo, un año de despide y otro comienza...pero no para él. Porque para Rodolphus Lestrange desde ahora seria treinta y uno de diciembre de mil novecientos noventa y siete para siempre. Porque sin Bella no hay año nuevo, sin Bella y su brillo.
Porque desde ahora en mas siempre seria Año Nuevo. Siempre Año Nuevo.
Este relato es Para el reto Año Nuevo Foro The Ruins.
Mi palabra fue "Brillo" y para Rodolphus el brillo lo tiene Bella.