11 años antes, una mujer demacrada, se había acercado al antiguo orfanato, no muy lejos del callejón Diagón. Allí, había dado a luz, sin embargo el esfuerzo de dar a luz dos siameses la hizo morir al poco tiempo. Antes de morir, dejo constancia de su mayor deseo. Que sus hijos se parecieran a su padre. Al hermano le llamo Tom Sorvolo Riddle. Y a su hermana, Mérope Anne Riddle. Ambos crecieron en el orfanato. Aquellas dificultades, dado el pedazo de carne que les unía, pronto fueron solventadas.
En el verano de sus 11 años, un extraño profesor llego a sus vidas. Con una noticia: Eran mago y bruja, y a partir de ahora no volverían a la escuela parroquial, si no a la escuela de magia y hechicería. Hogwarts.
Al llegar al colegio, descubrieron, que si bien los más jóvenes dirigían sus miradas hacia ellos, los más mayores no reparaban en su presencia. Bien por la costumbre de ignorar a los menores, bien porque realmente de todas las criaturas del mundo mágico, ellos no eran las más extravagantes.
-Mira Tomie!! ¡¡Fantasmas!! ¡¡Y nos van a hacer una prueba!! ¡¡Vamos a estudiar magia!!
-Mérope, te lo he repetido mil y una veces. Llámame Lord Voldemort. Ese es mi nombre.
-¡Ese no es tu nombre! Nosotros somos Tom y Mérope Riddle, ¿que seria yo sin ti?
-Sabes que odio mi nombre, ¿porque me lo recuerdas?
-Si, si, ya se, cuéntame ahora eso, de que te lamentas de que nuestra madre muriera, y nos dejara abandonados por ahí, y nos pusiera esos nombres. ¿No te has parado a pensar que a lo mejor ella era la bruja?
-¡Silencio alumnos! Que prosiga la ceremonia de selección. ¡Riddle!
En ese momento el salón se quedo en silencio.
-¡Ja! ¡¡Que llamen a la boina de Durmstrang, que aquí tenemos doble trabajo!!
Tras este comentario del sombrero seleccionador todo el mundo soltó una carcajada. Ideal para relajar el ambiente.
-Vamos a ver, tu muchacho. Que pareces más decidido, acerca la cabeza. Que yo no tengo piernas y no puedo acercarme.
Tom se acerco al sombrero, se lo puso sobre la cabeza, y al instante el sombrero grito ¡Slytherin!
Después, Mérope, hizo lo mismo, pero antes de que el sombrero pudiera decir nada…
-Seños sombrero, pst, aquí abajo.
-Ya se que estas ahí niña, ¿Qué te pasa?
-A mi a Slytherin no me mandes, que el señor jefe de casa me da miedo.
-¿Sluhgorn te da miedo? Pero si es un buenazo…
-Ya, pero a mí me gusta más la señora del sombrero con flores.
-Pomona Sprout??
-Sisi, porfas, a mi con ella, andaaa, y cuando mi hermano se haga rico y famoso prometo llevarte a la sombrerería…
-¡No se hable mas! ¡Eres una Huppie querida! Con la cantidad de gorritas macizorras que ahí por ahí adelante buscando cariño…
Y en el momento que el sombrero grito el nombre de la casa, una palmada en la frente sonó por todo el comedor. A quien se le ocurre poner a dos hermanos siameses unidos, separados, solo porque uno de ellos prometa llevarte de ligoteo por ahí, con Gorras…
